Capítulo 20

Fletcher se despertó de un sobresalto y con un dolor fuerte en la cabeza. Se tocó despacio en donde se localizaba el dolor y luego pudo darse cuenta que estaba en la habitación de él, lo que fue muy extraño.

¿Cómo podía estar en su habitación después de lo que paso?

Imágenes desagradables de la noche anterior le corrían por la mente, pero todo eso fue interrumpido cuando vio a Dennison que estaba a su lado todavía dormido.

— ¿Qué demonios? —Se preguntó confundido.

Empezó a mirar alrededor de la habitación y se dio cuenta que ya era la mañana. Rápidamente miro el reloj que tenía en su mesita de luz y eran las 06:40 am.

No sabía qué hacer, así que empezó a despertar bruscamente a su compañero que había dormido al lado de él.

Abrió los ojos y se sentó rápidamente en la cama.

— ¿No me he muerto, no? —Dennison dijo asombrado.

— ¿Lo recuerdas? — Pregunto.

—De a poco... ¿Tu?

—Lo recuerdo lo suficiente...

—El chico —Se tocó la frente y cerró los ojos.

No era nada bueno lo que le había pasado al joven que habían encontrado y Fletcher lo sabía. Toda la habitación quedo en silencio hasta que un joven decidió romper el silencio.

—Creo que está muerto— Contesto Fletcher.

—No puede ser —Negó con la cabeza y se acordó de lo que habían visto en la sala donde se jugaba al básquet.

—Lo que paso es real.

—Lo que paso no es real.

Se miraron los dos porque no coincidían en sus respuestas. No era hora de pelear pero la verdad es que estaban demasiados nerviosos y preocupados para contener sus caracteres.

— ¿Lo viste y no lo crees? —Fletcher levanto una ceja.

—Puede haber sido una imaginación o una pesadilla... —Dijo sin pensar.

— ¡Como puedes decir semejante estupidez! —Grito.

— ¿No crees que es demasiado fantasioso? — Pregunto levantando la voz.

—No creo nada por lo que lo vi con mis propios ojos —Clavo la mirada en su compañero y lo hizo poner nervioso.

—Tranquilo...— Susurro.

—Es que no puedo creer tu opinión y todo lo que paso— Miro hacia abajo tratando de no hablarle tan violentamente como lo hacían con su madre.

Se quedaron en silencio y Dennison pensó que lo que le había dicho era verdad. No podía confundir lo que habían pasado con una simple pesadilla, fue el hecho de despertarse al lado de su amigo que lo hizo pensar en que fue una pesadilla.

— ¿Por qué despertamos en tu cama? —Dennison pregunto.

—No lo sé.

—No lo puedo creer.

Se quedaron pensando un poco, el chico que habían encontrado ayer estaba lastimado y asustado. Quizás lo que lo quería matar era una persona psicópata y demente que andaba escondida en el internado, para que no la vieran.

Solamente que la "cosa" que habían visto... No parecía una persona.

—Vamos... —Fletcher toco el hombro de su amigo —Hay que prepararnos para ir a clase...— Le entrego una mirada consoladora.

—No estoy de ánimo para ir —Contesto Dennison desilusionado.

—Tenemos que ir, de paso averiguamos algo...Quizás el chico de ayer no esté muerto y lo encontramos en clase...

Dennison asintió.

Fletcher definitivamente sabia que estaría muerto... Porque la última imagen espantosa que recordaba de la noche anterior era la aterradora muerte del joven.

Recordó que estaba cerca de ella y que además le estaba mirando los labios. Un silencio había inundado esos segundos que estuvieron a punto de hacer algo. Solo faltaba acercar sus dos rostros y la unión de sus labios iba a ser perfecta...

Ellison lo había arruinado todo. Se lamentaba mientras estaba entre dormido dando vueltas en la cama.

Sunny nunca me besaría, pensó.

Ademas yo no sé besar, pensó.

¿Sera como en las películas de amor? , Se pregunto.

Ellison abrió lentamente los ojos y sintió el despertador sonar, que retumbaba sus oídos como si fuera un sonido insoportable.

07:30 hs marcaba el reloj.

Dirigió la mirada a su nueva amiga que estaba durmiendo profundamente. Ni siquiera se había despertado por el sonido del despertador como él, se sentó en la cama y empezó a sentirse cansado como siempre.

No tenía ganas de hoy ir a clase... Sabía que las clases, eran todo el día las y que no tenía nada que hacer en el internado, pero prefería un día libre, no tenía ganas de soportar los rostros de los profesores que no eran nada agradables.

Dio un suspiro y junto su ropa para sacarse el pijama y poder ponerse alguna ropa para ir a clase. Cuando vio a Sunny le dio pena interrumpirla porque podía ver que estaba durmiendo muy bien, pero quizás le importaba perder la clase así que muy suavemente logro que se despertara.

—Gracias por despertarme...— Sunny logro contestarle con los ojos cerrados —Hay que ir a clase... —Dijo todavía con la voz dormida.

—Claro...

Se dirigió al baño para continuar con lo que tenía que hacer. Mientras se cambiaba pudo pensar que había podido dormir bien, lo cual eso no podía notarlo desde hace mucho tiempo. Entonces fue ahí cuando se puso a pensar que todo tenia que ver con Sunny, se había puesto demasiado feliz cuando le hablo y se pudieron perdonar sin rencores entonces su ánimo cambio del que tenía antes y ahora podía decir que estaba más alegre que antes.

Pero igualmente se sentía cansado, pero sabía que había dormido.

Al fin una noche tranquila, sin pesadillas, lo que lo hacía pensar que era muy hermoso dormir bien como lo hacían muchas personas.

Tenían muchas horas de clase, pero pensaba en encontrarse con sus cuatro amigos, ya los extrañaba... Desde que estaba en la enfermería no podía verlos y estaba emocionado por lo que vaya a hacer Sunny con Ramona y sus amigos.

Cuando ya estaba listo encontró a Sunny parada, despeinada y con la ropa que iba ponerse hoy. Le entrego una leve sonrisa con cara de dormida y entro al baño.

— ¿Vas a clase, sola? — Pregunto desde la puerta.

— ¿Me esperas? — Pregunto —Así vamos juntos —Añadió después y Ellison sonrió cuando escucho que iba a ir a clase con él.

Al fin algo positivo pasaba en su vida, su corazón latía a un ritmo estresante cuando escuchaba la voz de Sunny.

Le gustaba escuchar su voz y verla despeinada. Sin maquillaje, como acostumbraba a ver a todas las chicas que no se daban cuenta que eran hermosas sin tener que usar mucho maquillaje como lo hacían.

—Te espero —Se sentó en la cama tranquilo y comenzó a pensar en muchas cosas.

¿Cómo estaría su hermano? ¿Su padre estaría ebrio? ¿Su madrastra estaría enojada como siempre estaba?

Tenía tanto miedo por su hermano, tenía ganas de echarse en sus brazos a llorar y tenía ganas de abrazarlo. No podía hacer nada de eso, lo que le quedaba era esperar... y esperar, hasta que un día llegara la hora de que alguien le diga cómo estaba todo en su anterior casa. Lo único que le importaba era que su hermano este bien.

Sunny salió del baño y miro con cariño a Ellison que estaba sentado mirando hacia la nada, muy tranquilo como siempre.

—Pensando...

—Si.

—Esta bien— Asintió —Que horror es levantarse temprano para ir a una estúpida escuela de una cárcel que es el internado.

—Es verdad.

— ¿Vamos? —Pregunto.

Ellison asintió.

Salieron tranquilamente de la habitación, con las mochilas listas para tener un día de clase bastante largo y agotador.

"La Paz" se veía tranquilo, pero algo extraño, no como todas las mañanas. Si no que se sentía un poco triste.

—Desde ayer que esto esta raro —La joven miro para todas partes.

—Igualmente no se siente como ayer —Mordió su labio inferior y un escalofrió sintió al recordar cómo se sentía la noche anterior.

—Paso algo ahora —Dijo tranquilamente.

— ¿Qué podría haber pasado? — Pregunto.

Sunny dirigió su vista a él y lo quedo mirando unos segundos.

— ¿Pasa algo? —Ellison levanto una ceja. Otra vez empezaba a sentir los nervios de siempre, las sensaciones que lo hacía sentir cuando ella lo miraba.

—Que ojos —Dijo asombrada.

— ¿Qué? ¿Qué pasa con mis ojos? — Pregunto preocupado porque no había entendido bien lo que le había dicho. Pensó que tenía algo dentro de ellos o que se veían mal, porque nunca se había fijado en sus bellos ojos.

—No, no es eso —Largo una risita —Seguro que ya muchas personas te lo dijeron y quizás yo también, pero cualquiera morirá por tus ojos son preciosos... —Sonrió y noto que Ellison se había sonrojado por lo que le había dicho — No te pongas nervioso... puedo ver tus mejillas.

—Gracias —Trago saliva.

—De nada.

En ese momento tenía ganas de decirle que ella tenia un pelo muy lindo, aunque no se lo peinara, y que su estatura tan baja le gustaba, que sus ojos eran raros pero a la vez eran intimidantes para el...

Pero no, no podía decírselo. Nunca se animaría, con el miedo que tenia y con lo vergonzoso que era, no podría ni terminar las palabras.

Quedaron en silencio hasta que llegaron al aula y la encontraron totalmente vacía. Acostumbraban siempre haber dos o tres alumnos y la profesora o el profesor presente. Ahora estaba totalmente desierta.

— ¿Qué es lo que paso aquí? —Sunny miro hacia atrás por si venia alguien pero no había nada.

—Se quedaron todos dormidos— Ellison largo una risita y luego entro al aula para apoyar su mochila en un banco.

—Desde ayer que desaparecieron todos— Se fue afuera del aula para haber si encontraba a alguien.

Mientras que Ellison por estar mirando adentro del salón encontró un cartel pegado en la pared, donde decía que el día de hoy no se dictarían clases en ningún horario.

Se acerco mejor al cartel para haber si era la fecha correcta y lo era... Con un marcador negro decía lo siguiente: Hoy, no se dictaran clases en ningún horario. A las nueve de la mañana abra una charla en la sala principal con todos los estudiantes del internado. Ir, es obligatorio.

— ¡Sunny! —Grito para que lo escuchara —Genial, no hay clases —Sonrió y un alivio se le vino encima.

— ¿Qué paso? —Se dirigió a donde estaba.

—Mira el cartel —Lo señalo.

Sunny lo miro y comenzó a leerlo. Después de eso empezó a festejar porque hoy no tenían clases en todo el día y Ellison se sentía mejor por eso, pero pensó en que sucedió algo por eso no había clases en el internado.

— ¿Qué habrá sucedido? —Pregunto Ellison.

—No lo sé ¡A quien le importa! Podemos hacer lo que queramos —Lo tomo del brazo y lo saco del aula.

—Pero para las nueve hay que ir a una charla...

—Si claro, no quiero estar castigada —Suspiro.

Ellison asintió conforme.

— ¿A dónde quieres ir? —La joven lo miro y le entrego una sonrisa amistosa.

— ¿A dónde qué? — Le pregunto confundido porque no sabía a qué se refería.

—Vamos a caminar o piensas que nos vamos a quedar toda la mañana en la habitación mirando el techo —Rio.

—No... quizás pueda hacer algunos deberes...

Lo interrumpe.

—No, y no.

Ellison la miro y levanto una ceja confundido ante su reacción divertida.

—Vamos... —Tomo con más fuerza su brazo y Ellison mordió su labio inferior para contener sus nervios.

Enseguida lo llevo al cuarto y agarro una mochila donde no era la que llevaba a clases, era otra que parecía estar cargada con muchas cosas.

— ¿Qué traes ahí? — Dijo mientras miraba la mochila.

—Ya lo veras...— Le guiño el ojo y Ellison se sonrojo demasiado cuando vio lo que le había hecho su nueva amiga.

Salieron del cuarto y comenzaron a caminar rápido. Pudieron encontrar a algunos jóvenes por ahí, pasaron por la biblioteca y vieron a algunos leyendo, y Ellison pensó que estaban aprovechando al máximo el único día que tenían libre.

Igualmente en el internado no se podía hacer muchas cosas emocionantes ya que los tenían aislados.

—Seria un día fantástico para ponerse a escuchar música con tu celular mientras juegas un poco a Resident Evil en tu pc —La joven suspiro— Pero como aquí no se puede hacer nada de eso preferí desayunar al aire libre contigo.

Ellison rio por lo que dijo.

Cuando salieron del internado para ir al patio, Ellison pudo sentir otra vez el aire frio que le invadía su rostro.

En lugar de ponerse a desayunar debajo de los arboles, Sunny se dirigió... ¿Al cementerio? Sí, que es tétrico lugar pensó Ellison.

—Pensaras que va a ser un poco deprimente pero yo soy así...

— ¿En el cementerio vamos a desayunar? —Hizo una mueca.

—En la entrada y si, va a ser genial —Sonrió —Justo al lado de esa tumba —Señalo una que se encontraba con un diseño diferente a todas.

— ¿Por qué en esa? — Dijo mirándola atentamente.

—Porque es diferente a todas —Le devolvió la mirada y a Ellison le dio un leve escalofrió cuando lo hizo.

Pararon donde se encontraba esa tumba y Sunny se saco la mochila que había tomado en la habitación antes de ir al cementerio.

Tranquilamente, abrió el cierre y saco un mantel de cuadrados rojos y blancos.

—La manta básica para hacer un gran picnic —Dijo en un tono gracioso lo que hizo reír a Ellison.

La acomodo en el pasto y luego saco en un envase de plástico cuadrado que traía dos sándwiches que tenían un aspecto excelente.

A Ellison se le vinieron ganas de comer, pero a la vez no quería hacerlo. No tenia que comer, el se tenía prohibido hacer semejante cosa...

—No tengo hambre —Dijo Ellison firmemente.

Sunny lo miro unos segundos y luego continúo haciendo lo suyo. Saco unos dos frascos de plástico con un rico jugo de naranja, y luego saco unos dos pastelitos con crema, cereza, chocolate.

—No tengo...— Y luego pensó que no iba a arruinar de esa manera este desayuno que había deseado con toda su alma durante los últimos días —Pero...

La chica lo interrumpe con una seña.

— ¿Podrías hacer una excepción? —Pregunto Sunny mientras le dijo con la mirada que ya podía sentarse.

—Quizás, solo un poco —Dijo avergonzado.

Se sentó al lado de su amiga y se quedo mirando la comida que estaba sobre la manta y el cielo que estaba nublado como casi todos los días.

—Es una mañana fría como todas—Sunny se acomodo su cabello con sus dos manos y luego saco un sándwich para empezar a comer —Mejor, el frio te da más hambre y el calor te da más sed.

—Exacto —Trago saliva.

Justamente estaba haciendo un picnic con la chica que le producía un montón de sensaciones tan solo decirle "hola" y encima una mañana que hacia frio.

—Vamos Elli, solo un mordisco —Tomo el sándwich que quedaba y se lo mostraba para darle hambre.

Ellison moría de hambre pero también entendía que una persona como él, no debía comer nada por su bien.

—Este bien —Lo tomo con cuidado.

—Estas muy delgado —Lo miro de arriba y abajo—No entiendo como no puedes comer...

Ellison empezó a sentir que su corazón latía muy fuerte.

— ¿No eres de comer mucho? — Pregunto mientras daba un mordisco en su sándwich.

Ellison negó con la cabeza.

—Yo si— Sonrió mostrando los dientes, cosa que era raro ver que sonría de esa manera, porque nunca lo hacía.

—Eso es bueno —Empezó a mirar como su compañera comía y le causaba gracia.

Nunca se había sentido tan feliz con una persona.

— ¡Riquísimo esta esto! —Sunny miro la comida, y agarro el jugo para empezar a tomar.

—Todavía no lo probé —Sonrió levemente y corto un pedazo para poder probar.

—Hazlo.

Comió lo que había cortado y Sunny lo estaba mirando atentamente haber que decía de lo que había traído para que desayunen.

—Es muy rico, pero ¿dónde lo conseguiste?

—Fui a la cocina y lo robe...

Se miraron por unos segundos y luego comenzaron a reírse. Lo que había hecho era una tontería, pero lo hizo.

— ¿De verdad? —Ellison se tapo la boca a causa de que todavía seguía comiendo.

—Si lo hice, no me importa nada de este lugar además no hice nada malo solamente saque un poco de comida de la cocina...— Tomo un sorbo del jugo.

—Eso es verdad.

Todo ese momento seria inolvidable para los dos... Sunny lo había pensando ayer anoche antes de dormirse, que sería bueno tener un picnic, con Ellison, ya que se habían perdonado y bueno también estaba un poco confundida porque no se sentía normal con el... no se sentía como pensaba que se iba a sentir, si formaba al fin una amistad con el.

Los dos, lo estaban disfrutando demasiado.

— ¿No crees que deberíamos conversar de nosotros? —Pregunto y eso hizo confundir a Ellison totalmente.

¿De nosotros? Se pregunto en su mente.

— ¿A qué te refieres? —Ellison mordió su labio inferior y el miedo empezó a recorrerle todo su cuerpo. Tenía miedo de que descubra que sentía cosas por ella.

—De lo de ayer...

Todo el susto se le había pasado de repente.

—Ya te dije que todavía no quiero contar porque estoy aquí.

—No es eso, cuéntame... —Hizo una pausa— ¿Tuviste novia alguna vez? —Le guiño el ojo.

El miedo se le había ido por completo, pero ahora apareció la vergüenza... le daba miedo hablar de esas cosas que para todos los jóvenes era normal, solamente porque él no había tenido nunca una experiencia con nadie.

Ni siquiera había dado un beso, ni siquiera había abrazado a una chica, ni le había tocado la mano, ni nada de esas cosas que hacían los adolescentes antes de venir al internado.

Ahora venia el mal momento... cuando le diga que nunca a sus dieciseis años había tenido una novia y además nunca le había atraído nadie de semejante manera como le había hecho Sunny.

—No— Bajo la mirada.

— ¿Nunca?

—No...

—Me estás haciendo un chiste ¿no?

—No —Dijo avergonzado.

Quedaron unos segundos en silencio.

— ¿Por qué? —Pregunto asombrada.

—Nunca se me dio la posibilidad de estar con ninguna chica —Mordió su labio inferior y se dio cuenta que Sunny había terminado su sándwich y ahora había agarrado el pastelito con crema, él ni siquiera había terminado el sándwich a pesar del hambre que tenia.

—No lo puedo creer.

— ¿Por qué?

—Cualquier chico como tú a esa edad hubiera tenido más o menos dos novias y se hubiera acostado con todo el curso de clase, hasta con una profesora— Largo una carcajada.

— ¡No, qué horror! —Dijo riéndose.

—Era un chiste— Lamio la crema del pastel —Pero al menos una chica...

—Ninguna chica se fijaba en mí, porque no hay nada especial en mi —Miraba hacia la tumba diferente que estaba cerca de ellos dos, para no mirar a Sunny porque se ponía muy nervioso cuando lo hacía.

—Eres especial —Sunny clavo la mirada en el.

— ¿Qué? —Dirigió la vista hacia la joven pequeña que tenía a su lado.

—Eres hermoso —Trago saliva por los nervios —No pienses que soy una perra, pero mentir no es lo mío —Sonrió —Eres un chico muy atractivo, con unos ojos especiales— Lo miro atentamente —Quizás es porque eres muy tímido, por eso las chicas no lograron mirarte.

Ellison se quedo callado por unos varios segundos largos, con la mente en blanco y sin saber que responderle.

—No quiero ofenderte pero... —Hizo una pausa breve —Es la verdad...

—No sé qué decir —Ellison miro hacia abajo y pudo ver sus manos pálidas.

—Oye —Toco su mano— Las chicas seguro que te miraban, pero no te hablaban porque eran unas imbéciles, nunca creas que no eres especial porque si lo eres —Dirigió su mirada a los ojos y se quedaron mirando unos segundos.

Ellison quería besar sus labios pero no tenía ni la menor idea de cómo empezar... pero tenía la enorme curiosidad de sentir como seria besar y como seria besar a Sunny. Cada vez que estaban cerca se le venía en mente toda esa clase de cosas.

—Termínate la comida...— Saco su mano y con un mordisco termino su pastelito.

Todos los pensamientos de Ellison quedaron interrumpidos cuando le dijo que se terminara la bendita comida.

—De verdad —Trago saliva —No tengo hambre.

—Al menos el pastel —agarro un pequeño trapo y se limpio la boca que estaba llena de comida.

—Esta bien.

Lo agarro y hizo un esfuerzo para darle un mordiscón... Y luego otro, y luego otro, hasta que se lo termino sin darse cuenta.

Tenía mucha hambre... Nada más que quería ocultarlo para que nadie se dé cuenta de que no comía porque él quería. Pensaba que no comer, lo mataría de a poco.

— ¿Rico? —Sunny le entrego una sonrisa.

—Si— Le contesto con crema en la boca, lo que hizo que Sunny mirara enseguida donde tenía crema — ¿Qué pasa?

Sunny sonrió y agarro el trapo que ella se había limpiado la comida. Se acerco a Ellison lo que hizo que se ponga demasiado tenso y empezó a limpiarle suavemente la boca.

Sunny quería besarlo y Ellison notaba algo raro en su mirada, pero le encantaba. Sentía que su corazón iba a estallar por completo y sentía que su respiración se aceleraba más.

Le limpiaba tan suave y tan lindo, que Ellison cerró los ojos y a Sunny se le ocurrió algo... ¿Por qué no besar sus bellos labios? Esta bien que siempre pensaba que Ellison era el chico e iba a tomar la iniciativa en todo este asunto, pero sabia que no era un chico normal como todos.

— ¡¿Qué están haciendo ahí?!

Se sintió un grito demasiado fuerte y Sunny se alejo de un sobresalto. Los dos asustados miraron hacia donde se dirigía ese semejante grito y vieron al profesor Adam cruzado de brazos, mirándolos con enojo.

—Profesor... —Ellison susurro.

—Son casi la nueve... ¡Entran al internado y se dirigen a donde tienen que ir para escuchar la charla! — Grito.

La chica miro al profesor muy asustada.

—Disculpe... Lo que pasa es que...

La interrumpe.

—No me importa nada, señorira... —Clavo los dientes —Solamente hacen los que yo les digo si no serán castigados —Adam se dio vueltas y se fue.

—Que odioso...—Ella susurro.

Ellison largo una pequeña risa.

Juntaron las cosas rápido, ordenaron todo en la mochila y se fueron corriendo hacia el internado.

Ellison mientras se dirigían a la sala principal, pensó en lo que había pasado hace unos minutos atrás ¿Otra vez se estuvieron por besar o era toda una imaginación de el?

Se reunieron todos en la sala principal como habían anunciado mediante papeles colgados en todas las aulas.

Todos obedecían porque si no, serian castigados.

La sala principal, era donde se realizaban los actos, había un pequeño escenario y era demasiado enorme diseñado para que entren todos los estudiantes del internado. Solo se utilizaba para actos y para anunciar cosas importantes.

Esto era algo importante.

Ellison y Sunny entraron rápidamente antes de llegar tarde a la charla. Todos recién se estaban acomodando y los profesores estaban en el escenario charlando de cosas que ellos nada más sabían, además de esperar a que todos los jóvenes llegaran.

Ellison pudo ver que Ramona y compañía llamaban a Sunny para que fuera con ellos, ya que no sabían nada de lo que les diría.

—Ramona te llama —Toco el hombro de su compañera que estaba mirando hacia todas partes de la sala.

—No voy a ir...— Dijo de mala manera.

—Ve porque si no se va armar una pelea y ahora no es tiempo de pelear... —Toco otra vez su hombro para que lo escuchara.

Estuvo unos segundos sin respuestas.

—No quiero hablar más con ellos —Se cruzo de brazos, mientras encontraba un lugar para quedarse allí para cuando hablaran los profesores.

—Vamos, haz un esfuerzo, después de esta reunión les dices que no vas a juntarte con ellos mas —Trago saliva —No quiero problemas.

Sunny lo miro y se quedo unos segundos pensando. Luego, asintió, le dijo "Adiós" con la mano y se fue.

En ese momento Ellison empezó a desanimarse. No le gustaba estar lejos de ella, pero era lo que debían hacer para no que se armara un desorden fatal.

Mordió su labio inferior y entre tanta gente, comenzó a sentirse con miedo y con mareos. Sin Sunny no era lo mismo y sabía.

Por suerte a lo lejos vio que lo estaban llamando sus cuatro amigos. Chloe, Novalee, Kenly y Sam que se habían hecho muy amigos entre ellos también.

Entre empujones, pisadas, y más cosas pudo llegar a ellos, que estaban charlando de lo que podía haber pasado.

Lo saludaron muy bien a Ellison y le preguntaron cómo estaba de su desmayo. Las chicas lo abrazaron rápidamente para que ningún profesor les gritara por hacer eso en el internado, y comenzaron a charlar.

—Es un alivio verte de nuevo bien Elli —Chloe le sonrió.

—Ella estuvo todo el tiempo preocupada por ti —Novalee miro a su hermana y le dio un pequeño abrazo para consolarla— Y yo igual.

—Gracias —Les sonrió y no pudo creerlo que habían personas en el mundo que se preocupan por él.

Mientras que Kenly y Sam, también charlaban con ellos y estaban de un muy buen ánimo. Ellison quería contarles que tenía una nueva amiga, y que ella era Sunny. La chica rebelde a la cual compartia habitación porque no hubo mas lugar en el internado, la que habia armado ese problema en la cafetería, la que se había burlado de él en gimnasia... Pero que ahora eran muy buenos amigos. Habia un problema: no sabía cómo explicárselos a sus amigos.

Cuando estaban todos charlando, Margaret tomo un micrófono e hizo callar a todos los jóvenes que estaban conversando para que la escucharan.

Todos hicieron silencio y la mayoría la miraron atentamente, otros estaban susurrando tonterías en el oído de sus amigos.

—Buenos días jóvenes... —Margaret dijo seriamente.

¡Buenos días! Todos respondieron el saludo de la profesora.

—Verán que es un anuncio muy importante por eso los traemos a todos aquí para que escuchen con atención lo que le vamos a informar.

Chloe miro a Ellison con preocupación y él le devolvió la mirada también, mientras pensaba que estaría haciendo Sunny con esa junta tan irritante que tenia.

—Acabamos de encontrar a un alumno muerto en el internado—Margaret puso el rostro totalmente triste tras el anuncio que acababa de hacer.

Todos los jóvenes empezaron a hablar, todos a la vez. Ellison empezó a mirar por todas partes que algunos, estaban quejándose, otros estaban hablando asombrados, otros haciéndose preguntas, sin que nadie les diera la autorización para hacerlo.