La relación entre Margaret y Alexander continuo siendo amena, a veces cuando el se preparaba un té le llevaba una taza, ya no la trataba mal pero esta situacion cambio el día que Nick comenzó a pasar a buscarla por la oficina entonces Alexander empezó a comportarse distante y a alterarse por mas mínimo que fuera el error que ella cometiera,  y esto provocó que Margaret volviera a sentirse insegura de su trabajo y de si misma y que cometiera más errores.

-MARGARET- escucho que la llamó, temerosa se dirigió a su oficina

-otra vez lo mismo - dijo remarcando con rojo la carta que habia escrito - tome leala en voz alta- dijo apoyandola en frente de ella. En ese momento se ubicó detrás de ella y tomandola de la nuca, la obligó que agachara su cabeza al raz de la carta, Margaret esta mas nerviosa que nunca pero seguia sus ordenes
- lea - dijo
- Sr. Ramirez...- y de pronto sintio una nalgada, se volteo a mirarlo incrédula de lo que estaba sucediendo, el la miro y le dio otra nalgada, Margaret trago saliva y continuo leyendo y por cada palabra mal redactada el le pegaba. Cuando termino el regreso a su asiento y sin cruzar mirardas dijo : - ya te podes retirar

Todavía perpleja por lo que habia sucedido se dirigió al baño, se levanto la falda y se econtro con un gran moretón en su nalga derecha pero en vez de sentir  desagrado y horror, esa situación le había agradado la habia hecho sentirse viva.
Esa noche no había podido dormir por pensar en el y cuando lo hizo lo soñó, soño con su mano firme y varonil y eso la exito. Buscando que volviera a suceder cometió varios errores en la redacción de un informe, y esto le funciono, otra vez se hallaba inclinada frente al escritorio recibiendo nalgadas

Al terminar nuevamente salió corriendo al baño donde extasiada comenzó a tocarse pensando en el, imaginando que era el quién la tocaba: -  Alexander - gimió
Desde ese día Margaret dejo de lastimarse, ya no necesitaba hacer eso ahora estaba en una nueva etapa de su vida.
Este juego se volvió rutina, no sólo implicó nalgadas sino que lo llevaron a otro nivel, cuando se encontraban solos Margaret actuaba como su perro, gateaba desde su escritorio hasta su oficina, llevando los papeles en su boca.Pero esto no sólo de daba entre las cuatros paredes de la oficina también se trasladó a su casa, Alexander la llamaba por teléfono le preguntaba que habia cocinado y  le ordenaba lo que podía cenar y en que cantidad,por ejemplo una vez le indicó que comiera sólo una cucharada de puré y tres arvejas y todo el helado que quisiera, su madre miraba sin entender nada.
Margaret mantenía una doble vida, seguía saliendo con Nick pero cada vez más pensaba en Alexander y se telestransportada a otro mundo, y una idea se le fijo en la mente, quería hacer el amor con el, que su boca recorriera todo su cuerpo, que su mano acaricia sus pechos.
Pero la realidad era otra, cuando abría los ojos a su lado se encontraba Nick quien no era un mal chico pero a la hora del sexo prefería lo tradicional, varias veces intento que le diera nalgadas pero el se negó aludiendo que no la quería lastimar.
Un día Nick paso por la oficina a la hora del almuerzo para verla un rato, esto no le cayó bien a Alexander quien se quedo caminando de un lado al otro en su oficina,  mirando la hora calculando cuanto tardaría en regresar.
Apenas puso un pie en la oficina, la llamo a lo gritos, Margaret se inclino en frente del escritorio como era costumbre pero esta vez no la nalgeo,  en cambio se bajo el cierre y comenzó a masturbarse, ella se quedo sorprendida y no sabia que hacer, cuando termino se quedaron en silencio, un silencio incomodo hasta que el le ordeno que  se retirara , el se quedo pensando en lo que había hecho, habia cruzado un limite.
Y esa noche todo empeoro, Margaret recibió una llamada del hospital, su padre había tenido un accidente automovilístico y habia muerto, después de tanto tiempo volvía a su vida cuando ya lo había superado o eso creía,  sin saber que hacer, angustiada lo fue a buscar, apareció en su casa.
-Margaret - la miro sorprendido- ¿ que haces aca?
- no se- dijo con los ojos llorosos- necesitaba hablar con alguien
- no te puedo ayudar, estoy ocupado en este momento, mañana hablamos.
Margaret se retiró de alli con el corazon roto y fue a buscar a Nick.
Fue en ese momento que Alexander se dio cuenta que no podía seguir así, Margaret era joven y con toda una vida por delante y el no podia arruinarsela, ya lo había hecho con Taylor y con Arielle. El sabía que tarde o temprano todo terminaría mal y solo seria culpa suya por eso cuando margaret volvió a trabajar se encontró con el telegrama de de despido sobre su escritorio.

-¿que es esto? - le pregunto en un estado de nervios
-ya no precisó de tus servicios - dijo sin mirarla
- ¿que? ¿Por que? ¿ que hice  mal? - se pare en frente de el
- nada, pero ya no puedo mantenerte aqui- la miro por un instante y luego corrió la mirada, era un cobarde siempre lo había sido.
La observó mientras se marchaba cargando una caja con sus cosas, si duda sería lo mejor para los dos pensó.