Capítulo 21

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Cristian POV

Casi dos años de que perdimos a nuestras esposas; me costó aceptar que Ana y mis bebes ya no estaban; cuando la perra de Elena me mostro la impresión del ultrasonido de Ana y ver a mis tres bebes ahí, escuchar los gritos de Ana cuando la torturaban fue lo más doloroso, me encerré por tres meses en mi Pent-House, hasta que mi hermano llego y me hizo recapacitar y tomar conciencia de lo ocurrido nuestras esposas estaban muertas y los asesinos vivos, como las autoridades no hicieron nada al respecto, juramos tomar la justicia por nuestra propia mano; aunque Grace y Carrick no están de acuerdo con la violencia entendieron nuestra posición y nos dejaron tranquilos, la pobre Mía a llorado la muerte de sus amigas y sobrinos, ella nos dio desde el principio el apoyo incondicional.

Ahora estamos a las afueras de Londres en un área desolada, frente a un edificio abandonado, donde Robert y Elena secuestraron a Franklin, para quitarle el dinero de mi esposa, si supieran que ya fue donado según el testamento del senador al morir Ana le pedí que lo hiciéramos.

-Señor, es hora- Me informa mi jefe de seguridad, indicándome que el momento para rescatar al general.

-Que empiecen- Doy la orden. De pronto se escucha sonidos de balas y gritos, en cuestión de segundos todo queda en silencio.

-Logramos atrapar a Robert, Elena y los demás escaparon- De pronto miro como Eliot avanza hacia el edificio con un arma en mano.

-¡Eliot!- Lo llamo, pero no responde por lo que lo seguimos, al llegar me sorprende verlo golpear a Robert con mucha rabia, el hombre no volvió a su vida de antes, él a igual que yo encontró la luz de su vida, pero ahora ya no está.

-¿¡Donde esta Elena!?, ¿¡Dónde!?-

-No lo sé- Responde el muy perro.

-¡No te creo!- Y otro golpe.

-Robert, es mejor que le digas a mi hermano donde se esconde Elena- Se lo digo mientras llevamos a Franklin para que lo atienda el médico.

De pronto escuchamos un disparo, me volteo y veo como en cámara lenta cae al suelo el cuerpo seguro sin vida de Robert ya que el disparo fue en la cabeza.

-Eliot, deme el arma- Le habla Taylor y mi hermano le entrega el arma.

-Sawyer, desaparece el arma por favor- Él la toma y se dispone a hacer lo que le pedí, es de admirar como mis dos guardaespaldas me han seguido donde sea sin quejarse, Sawyer todavía se culpa de la muerte de Ana, entendí en este tiempo que ellos no tuvieron la culpa de nada, ellos por cuidarnos casi pierden la suya y han hecho cosas que ninguna persona cuerda haría.

-Hay que llevar a Frank a un hospital-

-Cristian, háblale a Mark él sabrá donde llevarme- Mark y uno de su seguridad que extrañamente por lo que sé pasa todo el tiempo aquí en Londres, tendré que averiguar por qué.

Marco el dichoso número y contesta casi de inmediato.

-Mark, lo tenemos. Dijo que sabes donde lo podemos llevar-

-Le envío la dirección por WhatsApp- Y cuelga, en segundos recibo la dirección.

Varios días han pasado desde el rescate de Frank, estaba descansando en el sillón de la habitación cuando una descarga eléctrica recorrió todo mi cuerpo y mi miembro que ha estado dormido desde la última vez que le hice el amor a Ana se pone duro hasta el punto de doler, me asusta ya que eso solo ocurría cuando mi esposa estaba cerca, esa era la unión que había entres nosotros, miro a fuera y veo una sombra, corro al abrir la puerta y nada, no hay nadie. Pero vi moverse a alguien.

La situación me hace sospechar más de Frank, voy a seguirlo cuando salga de aquí; después del funeral, ha pasado más aquí en Londres que en Estados Unidos, eso es extraño puesto que él ya no tiene familia, en el funeral lo vi muy tranquilo a diferencia de Ray y Carla que estaban destrozados.

-Señor, tengo el informe que me pidió- Hace unos días les comenté a Eliot, Taylor y a Sawyer de mis sospechas hacia Franklin

-Bueno, léelo-

-Dice que ha estado visitando un apartamento donde hay dos chicas, que se queda por ratos y en el lugar hay mucha seguridad, demasiada para ser específicos- Seguido de leer lo que decía el informe, nos muestra fotos de él entrando y saliendo del apartamento, y algunas fotos de las chicas, delgadas, cabello negro, muy blancas, una de ellas salió con una bebe por el color de la ropa, la otra sale sola a correr con su seguridad, no se les ha podido ver bien los rostros de ellas porque siempre van encapuchadas.

Han pasado varios meses después de la salida de Franklin del hospital, a pesar de que fue elegido ministro de defensa continua aquí y es extraño, me han informado que el departamento donde esta Franklin ha habido mucho movimiento,

-Cristian- La vos de Sawyer me saca de mis pensamientos.

-Dime Sawyer-

-El hombre que vigilaba al general Lambert, nos ha informado que están desocupando el apartamento y van rumbo al aeropuerto de esta ciudad-

-¿Cómo?, Arregla todo para volver a Estados Unidos infórmale a Eliot y a los demás que nos vamos- Con muchas ideas en mi cabeza llamo a Andrea,

-Andrea, necesito por favor me agendes una reunión con el ministro de defensa, para dentro de dos días, por favor-

-Si, claro señor. ¿Volverá a Grey House, señor?-

-Todo depende de la reunión, Andrea- con esa respuesta cuelgo sin despedirme...

Dos días más tarde nada de Franklin, tampoco de la serpiente rastrera de Elena, maldita mujer que no aparece le prometí a Carla que la encontraría y no he podido cumplir mi promesa, eso me tiene hecho una mierda.

-Cristian, hijo- La vos de Grace, me devuelve a la realidad.

-Madre- Me levanto le doy un fuerte abrazo y un beso en cada mejilla, han sido meses sin verla, ahora su presencia me reconforta.

-Cristian, ¿Por qué te encierras?-

-Mamá, no me encierro madre, solamente estoy leyendo los informes de la búsqueda infructuosa de Elena, pareciera que salió del planeta, ya que no la encuentran por ningún lado, además que he tratado de hablar por días con Franklin y nada- Con ella me sincero sin temor a que me juzgue.

-Cristian, has vida social, encuentra a alguien, Ana no volverá hijo, mereces continuar con tu vida, cariño; igual le dije a Eliot, pero insiste con esta cacería- Se que se preocupa por mí y por Eliot

-Madre, sabes que no descansaré hasta ver a Elena morir, no podré rehacer mi vida estando ella viva, el día que Ana murió, juró que mataría a cualquier mujer que trate de hacer vida conmigo, no puedo condenar a ninguna mujer a vivir lo que Ana pasó ese fatídico día.-

-Entiendo hijo, Eliot me dijo lo mismo-

-Madre, no sé qué decirte, pero creo que Ana y Kate viven y Franklin me lo está ocultando, no lo he seguido, porque si mi teoría es cierta los pondrá en peligro, estando viva Elena estarían en riesgo-

-¿Lo crees Cristian?, yo vi los cadáveres-

-Lo se madre, pero es curioso, he tratado de exhumar los cuerpos, pero nos lo han negado, a pesar de que somos sus esposos; queremos hacerles pruebas de ADN, y reconfirmar los primeros resultados-

-¿Cómo?, ¿Por qué?- Le cuento a mi madre lo sucedido en Londres y me sorprende dándome la razón.-

-Hijo, veré que puedo hacer con las pruebas de ADN- Me da un beso las mejillas y se marcha. Esperando que pueda lograr que me permitan hacer la pruebas, me dirijo a mi nueva habitación, mande a sellar mi antigua habitación para dejar intacto su recuerdo, para estas fechas casi un año mis hijos deberían tener tres meses, Elena me ha negado esa posibilidad tres jodidas veces, pero me las voy a cobrar una tras otra, lo juro; con esa afirmación me entrego al sueño.

Un mes después, recibo en mi despacho a mis padres, Eliot y yo hemos vuelto a nuestras respectivas empresas, pero sin dejar de lado la meta de buscar a Elena y hacerla pagar por todo.

-Cristian, los señores Grey están aquí- Me informa Taylor.

-Hazlos pasar- Mis padres entran en mi despacho y me saludan.

-Cristian, hace unos días atrás tu madre me comento tus sospechas y que no habías podido exhumar los cuerpos de Ana y Kate, sin obtener una respuesta clara por parte los tribunales- Asiento con disgusto por ese hecho.

-Pues tu padre logro conseguir la exhumación, por lo que se pudo hacer las pruebas y aquí están los resultados, no los hemos visto hasta que tú y Eliot estén presentes; he hecho llamar a Eliot- Esto me sorprende ni yo que ofrecí quinientos mil dólares para que me lo permitieran y no lo logré. De pronto entra un ofuscado Eliot.

-Llegué, no han leído el informe-

-No, pero lo haré ya en estos momentos.

"El departamento de ciencias forenses de Seattle, ha dispuesto efectuar dos pruebas de ADN a los presuntos cadáveres de las señoras:

Anastasia Grey Steel

Katherine Grey Kavanagh

Las muestras de comparación fueron brindadas por el Sr. Carrick Grey, las cuales fueron comparadas con las muestras tomadas de los cadáveres exhumados.

Dando como resultado; que no hay ningún tipo de concordancia entre las muestras; las muestras obtenida de los cadáveres exhumados que según los registros concuerdan con las señoritas:

Susana Martino

Leila Williams

Quienes han sido reportadas como desaparecidas hace dieciocho meses"

-Esto es una mierda, Ana y mis hijos aún viven y Lambert me ha estado viendo la cara de idiota, igualmente que Ana- La ira inunda mi mente al saber la verdad, pero esto no se va a quedar sin represalias.

-Cristian, cariño, ¿Qué harás?- La pregunta de Grace me toma por sorpresa, ella más que nadie sabe lo que he sufrido al creer que Ana había muerto.

-Primero, encararé a Lambert, es el abuelo de mi esposa, pero el ocultarnos la existencia de Ana y Kate es imperdonable, me he perdido el nacimiento de mis hijos y probablemente de su crianza mientras Elena viva-

-¿Por qué lo dices Cristian?-

-Padre, porque, aunque lo torture no me dirá dónde encontrarlos-

-Entonces tendremos que seguir viviendo esta angustia, sin conocer a mis nietos-

-Sí, madre, es más no quiero que esto salga de estas cuatro paredes, no confío en nadie que no sean ustedes, Taylor y Sawyer, fuimos traicionados por algunos miembros cercanos de mi seguridad, por lo que la información puede llegar a manos de Elena-

-¿Qué harás si Franklin no te da la información?-

-Buscarlos, soy empresario madre, viajo mucho por negocios eso será lo que todo el mundo pensará, me dejaré ver con mujeres, como carnada para Elena, puede que así se muestre y la podamos atrapar, solamente que si Ana los ve pensará que ya no la amo o que la he olvidado-

Ha pasado un puto mes de tratar de reunirme con Lambert y el muy desgraciado se niega a recibirme, lo más extraño es que he llamado miles de veces a Marck y el hijo de puta tampoco lo hace, lo voy a intentar por última vez.

De: Cristian Grey

Para: Marck

Asunto: Secreto de estado.

No sé qué putas se traen tú y Lambert, que se niegan a recibirme, cuando le salve el culo en Londres no sabían qué hacer conmigo, pero ahora pareciese que tengo la peste, han osado de sacarme del edificio de su despacho, pero entiéndelo, los encontrare, aunque quede en quiebra.

Y pulso enviar.

La respuesta no se deja esperar,

De: Marck

Para: Cristian Grey

Asunto: Secreto de estado.

¿Estás dispuesto a condenarlos a muerte, Grey?

El muy hijo de puta tiene razón si corro tras ellos, Elena puede ser que esté detrás de mí y dar con ellos. Seguiré con mi plan, aunque no me agrade.

De: Cristian Grey

Para: Marck

Asunto: Secreto de estado.

Por ahora lo acepto, pero si sufren algún daño iré tras de tu cabeza.

Y pulso enviar.

Esta vez no obtengo ninguna respuesta...

...................................................

Han pasada más de cuatro años que sigo todos los movimientos de Lambert y nada de mi familia, me he dejado crecer la barba y el bigote para confundirme entre la gente, Franklin está brindando una conferencia en este país uno sin ejercito es gracioso porque es el ministro de defensa de los Estados Unidos, decidí a seguirlo aquí porque mis contactos me informaron que viene a este pequeño país tres veces al año, pero no han logrado ubicar donde se queda puesto que no lo hace en ningún hotel del país. Termina la conferencia, quedándose a hablar con algunos medios de comunicación; una hora después se aparta dirigiéndose a los sanitarios sin sus escoltas este es el momento que estado esperando; me mezclo entre la gente y logro llegar a los sanitarios, cierro la puerta principal con seguro para que nadie nos interrumpa, la ventaja es que no hay cámaras de seguridad aquí, espero y minutos después sale del sanitario.

-Por fin nos encontramos, Franklin-

-¿Qué haces aquí Grey?-

-Y lo preguntas, no crees que es obvio; estoy aquí por una solo cosa. Y es la causa por la que me has evitado estos casi cinco años- Me rio en su cara.

-¿Encontraste a Elena?- Me pregunta con cinismo; sabiendo que no he podido dar con esa serpiente.

-Sabes que no-

-Entonces no hay discusión Grey, son mi única familia, entiéndelo- Este que se cree.

-Tu que te crees Ana es mi esposa, la razón por la que sigo respirando y ellos mis hijos, los cuales ni conozco-

-¿Quieres verlos?- Pregunta sacando un móvil de su saco, teclea algo y me pasa su teléfono, cientos de fotos de cuatro niños, dos niñas y dos niños. Pero me cree idiota Ana tuvo trillizos, no cuatro.

-¡¿Me tomas el pelo?!, estos niños son bebes, mis hijos han de tener mas de cuatro años; aquí hay 4 niños y Ana tuvo tres- Lo miro a los ojos y el idiota se ríe.

-Hay un detalle que tu y tu hermano ignoran-

-Así, ¿Qué tiene que ver mi hermano en esto?-

-La niña rubia, no es tu hija, es de Eliot- La noticia me deja en shock, no quiero imaginar cuando mi hermano se entere, tanto que Kate está viva, como que es padre, pero aún no lo sabrá hasta que los ubique.

-¿Cómo esta Ana? ¿Está bien? ¿Se alimenta bien?- Y Lo más importante de todo y que me da miedo preguntar. -¿Aún me ama Franklin?-

-Grey, como el primer día, no es fácil para mí, encontrarla llorando en su biblioteca, mientras los niños duermen, mirando los medios de comunicación y hay algún reportaje que hable del gran Cristian Grey-

-¿Les ha hablado a los niños de mí? ¿Saben ellos quien es su padre? ¿Me aman?-

-Sí, les ha mostrado fotos tuyas, principalmente de la boda, saben cómo te llamas y con respecto a tu última pregunta, eso tendrás que averiguarlo cuando los conozcas-

-¿Cuándo? ¿Cuándo sean adultos?- Esto me da rabia el saber que la posibilidad de verlos crecer es casi que imposible si no encuentro a Elena.

-Solo te digo que debes buscar con más ahínco a la zorra de Lincoln; de lo contrario nunca los veras crecer; ahora déjame salir antes que mis escoltas pongan este país de cabeza por buscarme-

Cayendo en cuenta que tiene la puta razón lo dejo salir; sin embargo, lo seguiré, sé que ellos están aquí, de lo contrario no vendría tan seguido; salgo del salón de reuniones y ubico a Taylor; le explico mi plan; me he enterado por mis fuentes que Franklin me espía, pero si logro hacer que piense que me fui del país me guiará a ellos, tengo que protegerlos, así como yo me entere que viven Elena podría descubrirlo por lo que no me voy a arriesgar.

.........

-Taylor, ¿Arreglaste mi supuesto viaje?- Hemos hecho creer a Frank que me he ido, seguiremos su auto, con uno diferente a los que acostumbro a usar a una distancia considerable para que no sospeche; según mis contactos mi familia vive en esta ciudad, cerca de la playa, pero como este país tiene dos costas ha sido difícil dar con el lugar.

Mientras miro mi teléfono con las actualizaciones que a diario me pasa Welch en la tarea de ubicar a Elena, el último informe comprueba que la perra ha regresado a Seattle, con un hombre del cual desconocen su identidad, la carnada de salir con otras mujeres ha funcionado, he informado a mi padre para que cuide de mis hermanos y madre, ellos son mi punto débil mientras no sepa de la existencia de mis hijos y Ana.

El drone que maneja Sawyer es de alta tecnología, está a quinientos metros de altura, es pequeño, con una cámara de video de alta tecnología creada por el departamento de investigación de Grey House, nos permite ver como si estuviera a un metro de altura, podemos ver entrar a Frank, en la puerta es recibido por Mark, el muy hijo de perra vive ahí, esto me lo voy a cobrar apenas pueda y entran nada de mis hijos, de pronto escucho el ruido de una moto, la cual pasa a nuestro lado, no le damos importancia hasta cuando se detiene en la casa de las chicas, el portón automático se abre y la moto ingresa, dejamos que el drone nos muestre quien visita a mi familia; para mi sorpresa es una mujer de cabello negro y corto,

-Enfoca más Sawyer, quiero ver quien visita mi familia- Sawyer obedece mi orden y me sorprendo al ver que es Ana con el cabello de color negro y muy corto para mi gusto; a pesar de eso mi corazón salta de alegría al saberla viva, pero con el dolor en mí alma de no poder abrazar ese cuerpo que solo yo conozco, bezar esos labios y sentir su suavidad.

-Es la señora Grey- dice Taylor.

-Sí, Taylor, lo sé, regresemos al hotel- Con el alma por el suelo y un dolor en el pecho, por no poder abrazarlos y besar a mi amada esposa, nos retiramos al hotel; ya ahí y a solas me permito llorar como si fuese un niño, las sensaciones que me brindo mi corazón al verla tan bella como el día que la conocí me sobrepaso y el no poder estar con ella en la evolución de su embarazo y en el nacimiento de mis bebes, pero la ira y el odio me embarga de una manera inigualable por lo que tomo el teléfono y llamo a Welch.

-Welch-

-¿Señor Grey, en que le puedo servir?-

-Recibí tu informe, quiero que ubique donde se queda Elena con sus secuaces, que la sigan y me informen de todos sus movimientos quiero atraparlos lo más pronto posible y si se acercan a mi familia me avisas inmediatamente- Cuelgo sin esperar respuesta, el sentirme como una mierda no me permite socializar con nadie en este momento.

Me dormí y unos golpes en mi puerta me despertaron, me dirijo a la puerta y abro; pero es Taylor ya vestido con su habitual traje.

-¿Pasa algo Taylor?-

-Señor, el gerente del hotel quiere reunirse con usted- Recuerdo que Ross me había pasado un correo donde venía el nombre de este Hotel.

-¿Dónde está?-

-Está en su oficina-

-Dile por favor que en una hora- Y se retira, haré u poco de trabajo para desviar mis pensamientos.

Una hora después ya estoy listo para la reunión, con mi traje de tres piezas, voy de camino a la reunión cuando algo impacta en mis piernas, bajo la mirada y me encuentro con unos pequeños ojos que me miran con curiosidad.

-¿Papi?- Escucho salir de sus labios, es una niña como de unos pocos años, pelo castaño, ojos grises y piel muy blanca.

-Phoebe- Escucho la voz de un niño de su misma edad, el cual también me mira con curiosidad, el niño es de tez blanca, cabello cobrizo y ojos azules.

-Ted, mira es papi- Le dice la niña.

-No, Phoebe, papá está muy lejos- Se acerca a ella la toma por su brazo y la atrae hacia él en modo de protección.

-Cristian y Ava nos esperan paca merendar con mamá- Y se van, la alegría me invade al pensar que pueden ser mis hijos; por lo que mando a la mierda la reunión con el gerente del hotel y los sigo para constatar que son ellos.

Al llegar me los encuentro en una mesa en el restaurante principal del hotel, me sorprende ver a Ana y a Kate con ropa deportiva y la identificación del hotel; ¿Trabajarán aquí?, miro como se acerca el gerente general saluda a mi es posa con un beso en la mejilla, ¡Que mierda!, ¿Qué es esa confianza?, observo y observo minutos después, mi teléfono suena.

-Grey-

-Señor, la secretaria del gerente me informo que no ha llegado a la reunión- Me informa Sawyer.

-Mira, dile a la chica que no me joda, sé que su jefe no está en su oficina, ya que está coqueteándole a mi esposa, pero no le digas eso último. Ah, Sawyer estoy cerca del restaurante principal ven ahora mismo-

-Sí, señor- Minutos después Sawyer ya ha regresado y el gerente se marchó.

-Quiero que los vigiles y que cualquier irregularidad me lo hagas saber, me iré a reunir con el gerente- Me giro para devolverme por donde llegue sin que Ana se dé cuenta que les he encontrado.

Llego a la oficina del gerente y soy recibido por su secretaria y me doy cuenta que Taylor ya está aquí.

-Señor Grey, el señor Hendrix los recibirá- Con asentamiento de cabeza me despido e ingreso a la oficina, me encuentro con el tipo que le coqueteaba a mi esposa, con una sonrisa de oreja a oreja, se levanta y me extiende la mano a modo de saludo; igualmente se la tiendo también.

-Señor, Grey, es un gusto que haya aceptado que nos reuniéramos, tome asiento por favor-

-Gracias, Hendrix ¿A que debo esta reunión?- Me dirijo a el directo al grano ya que no pienso pasar mucho tiempo con él haciendo negocios, mi estadía aquí no es con ese fin.

-Bueno, los dueños y socios de la empresa están interesados en hacer negocios con Grey House, por lo que me solicitaron que me reuniera con usted y le planteara la propuesta que tienen que ofrecer- Lo miro, le respondo con seriedad.

-Hendrix, no estoy en plan de negocios, si quieren presenten la propuesta a mi segunda al mando Ross Bealy, la cual será evaluada y discutida-

-Entiendo- Tienen que entender cuál es la manera de operar de mi empresa, me entran una irreverente oleada de celos por lo que hago la pregunta.

-Hendrix, hace un rato te mire saludando a una joven, ¿Ella trabaja aquí?-

-¿Te refieres a Rose?, si ella labora aquí de hace dos años, junto a su hermana Samantha. ¿Las conoces?-

-No, creí que la conocía, se parece a la hija de un empresario con el que hice negocios- Miento, es evidente que la conoce y que sabe realmente quien es.

De pronto la puerta se abre y aparece mi hija de nuevo, se sube a mis piernas y comienza a llorar.

-Papi, no te vayas- La abrazo por reflejo, es mi hija y no le puedo negar un abrazo y bezo su cabeza como lo hice infinidades de veces con su madre; de repente oigo ruidos afuera, dos niños entran bruscamente, el niño que vi temprano se devuelve y sale corriendo de vuelta, el que se queda me mira de arriba a abajo; es una copia mía de niño, solo que sus ojos es una mezcla de azul y gris.

Recuerdo que tengo a mi hija en mi regazo, para mi sorpresa se ha quedado dormida; igual a su madre. Miro a Hendrix que queda sorprendido ante la acción de mi hija y hace a quitármela, molestándome de inmediato.

-Déjala. Voy a llevarla a dormir, dile a su madre que están en mi habitación; ¿Cristian vienes conmigo y tu hermana?- Mi hijo asiente con un leve sí señor.

Al entrar en mi habitación me encuentro a Taylor el cual se sorprende al verme con los niños.

-Señor, ¿Son sus hijos?-

-Si, Taylor, voy a acostar a Phoebe, no dejes que nadie entre salvo su madre o su tía- Me acuerdo que no he hecho las presentaciones del caso y me giro para quedar frente a Taylor.

-Cristian, hijo el es Taylor, tu guardaespaldas y cuidador de ahora en adelante. Taylor, Ellos son Cristian y Phoebe mis hijos; Ted de seguro vendrá con su madre en algunos minutos- Mi hijo mira a Taylor con desconfianza, pero aun así le tiende su mano a manera de saludo, sorprendiéndonos a ambos.

Mi teléfono vibra en mi bolsillo, como puedo lo tomo y contesto sabiendo que es Sawyer.

-Dime, Sawyer-

-Señor, los niños salieron detrás de la niña y solo uno de ellos volvió y hablan con la señora Grey, se ve muy preocupada-

-No te preocupes, irá a la oficina de Hendrix, él le dirá que están conmigo, así que síguela hasta aquí-

-De acuerdo- Y cuelga, se que él los protegerá con su vida lo demostró aquel día fatídico que di por muerta a mi esposa y cuñada el cual casi muere por tratar de salvarnos; a pasado todos estos años culpándose de ellos sin ser su culpa.

-Estaré en mi habitación con mis hijos Taylor- Asiente con la cabeza y una sonrisa de felicidad.

-Vamos, Cristian- Tomo su mano y me dirijo a la habitación.

Entró a mi habitación y me siento en mi cama abrazando a mi hija y aspirando el aroma a bebe de mi pequeña princesa, la alegría me sobrepasa y lloro de felicidad al poder tener a mis bebes, de pronto una vos infantil me interrumpe.

-¿Porque lloras?-

-Ven, siéntate junto a mí y te explico- Dudoso se sienta junto a mí, viéndome fijamente a la cara.

-¿Primero quiero hacerte una pregunta? ¿Puedo?- El asiente en silencio.

-¿Sabes quién soy?-

-Mi mamá me mostro unas fotografías de mí papá y son iguales a usted, pero sin eso- Señala mi barba.

-Me la puedo quitar si quieres. ¿Puedo abrazarte?- Pongo a mi princesa en la cama para abrazar a mi hijo. Asiente en silencio; me incomoda que no hable, quiero que me hable quiero conocerlo, pero reconozco que todo tiene que ir un paso a la vez, como dice Flynn; pero aun así se sienta en mi regazo lo que aprovecho para abrazarlo y aspirar su aroma.

Estoy abrazando a mi hijo cuando la puerta de mí habitación se hable de golpe, subo la vista encontrándome con los con cuatro pares de ojos azul mirándome.

-Cristian-

-Ana-...

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