TaeHyung miró su exámen con cejas alzadas, luego el de Jin y al final el de Chanyeol. La rubia había tenido el puntaje más alto que todo el salón, ¿cómo era posible? Ni idea, lo sorprendente era que había pasado de ser la peor a la mejor en una semana.

"Las tutorías te han ayudado bastante" Chanyeol comentó acomodando sus anteojos sobre el puente de su nariz. "Felicidades Kim"

"Gracias, Yeol" respondió la muchacha cuando el chico se colocó de pie y se alejó a su asiento. "Si supiera la verdad estaría con una jodida soga en el cuello"

Taehyung rodó los ojos. "Tú a punto de ser casada y el señor Kim en la cárcel"

"¿Qué tiene de malo que me dé buena nota por una cuantas mamadas y algo de sexo en su escritorio?"

"¿Lo hicieron ahí?" cuestionó la más baja con una mueca al señalar el escritorio del profesor Namjoon.

Seok asintió con entusiasmo y las mejillas rojas. "Ahí, aquí y en su oficina"

"Ahg" jadeó la peliazul al levantar las manos de su escritorio. "Jin... no sólo es tu maldito lugar"

Como siempre Jin soltó una risa, lo bastante alta como para atraer una que otra mirada curiosa de los demás. Ambas Kim no hablaban con nadie más que con el jefe del salón y ese era Park, así que no era extraño verlas a ellas dos demasiado solas en el aula. Los demás habían aprendido a no luchar por tener una amistad con ellas, podrías recibir una respuesta educada y amable por su parte, pero jamás algo más para convivir.

"Señorita Kim" la gruesa voz del señor Namjoon hizo a ambas guardar silencio y mirar al frente. "Agradecería algo de silencio mientras entrego las boletas de calificaciones"

La mayor le sonrió, mordiendo su labio inferior y asintiendo. "No volverá a pasar, señor Kim"

Taehyung miró con sus cejas alzadas a la rubia, luchando por no soltar una maldita carcajada por la escenita de esos dos. ¿Cómo podían actuar como si no follaran por las tardes? Alaba al señor Kim por ser tan buen actor, el adulto bajó la mirada, había visto algo destellar en sus ojos antes de hacerlo, Taehyung agradeció que nadie más que ellas estaban atentas a el profesor, al parecer las notas eran buenas en esos días.

Ambas miraron a Soo-hye quien tenía en sus manos las boletas de ambas, la sonrisa que curvaba en sus labios les advirtió que no tendrían las calificaciones perfectas que creían. TaeHyung odio que la jefa de porristas las descubriera, más si era una maldita perra odiosa.

"Kim..." saludó la muchacha extendiendo las boletas de ambas. "Has sido la más alta en el examen, pero veo que eres lo bastante perezosa para entregar los trabajos, ¿de qué otra forma sacarías la calificación más baja del salón?"

Seok Jin no esperó a responder las venenosas palabras de la rubia mal teñida, arrebatando de sus manos las dos hojas, le entregó la suya a Taehyung antes de ver la propia. La peliazul soltó un suspiro al ver que lograba un nueve  sin embargo, al mirar a la boleta de su mejor amiga, pudo ver algo terriblemente malo; sus padre iban a matarla.

"Un seis" susurró incrédula, luchando por no llorar porque era la nota más baja. "Mis padres..." TaeHyung le apretó la pierna a su mejor amiga, suplicando que esperara para quejarse cuando la bruja se hubiese alejado.

"Suerte, Kim" escupió de forma venenosa. "La vas a necesitar"

Taehyung deseó darle un golpe en ese cabello mal teñido y golpear su nariz operada, mas estar al lado de Seok Jin era lo principal en esos momentos. La rubia tenía un largo historial donde las calificaciones eran lo principal, sí, muchas veces había sacado ocho en francés, pero pasar a un seis era digno de ser castigada.

"Me van a matar" por fin dijo mirando a Taehyung con las lágrimas amenazando con salir. "Realmente no hice todo por una nota, pero sí me esforcé para no tener más problemas en casa por mi culpa, entregué todo. No puede ser,  yo no... no hice eso por una atención particular, Tae tú has visto"

"Sí, lo sé" asintió la peliazul. "He visto tus trabajos y proyectos, venimos a dejarlos juntas"

Seok tenía su labio levemente abultado, Taehyung ya había notado que los demás estaban hablando de ello, por los murmullos se había enterado de que su amiga había sido la única casi reprobada. No tenía sentido, si ella había entregado todo y trabajado de forma  continúa para mejorar su nota el señor Kim no tenía derecho a ponerle esa mala nota, la peor de su historial. Su padre podría castigarla de una forma injusta por una sola nota mala. La familia de su amiga era problemática, egoísta hasta cierto punto y muy estricta, el padre de la rubia la presionaba por la mejor nota, no podría salir nada bueno de ello. No saldría nada bueno.

"Vamos a casa, Jinnie... dame la papeleta y mañana arreglas el asunto con el señor Kim, hoy no podrás" Seok Jin estuvo de acuerdo, su amiga tenía razón, no tenía cabeza para nada más que temer el enojo de su padre, ni siquiera estaba molesta con el señor Namjoon. Sin embargo, se preguntaba qué estaba mal.

Cuando la campana sonó indicando la salida, Taehyung guardó en su propia muchila la papeleta de Jin, mientras estuviera lo suficiente lejos del hogar de su amiga tendría menos posibilidad de ser atrapada. Ambas se colocaron de pie, demasiado atentas a si mismas, la rubia estaba encogida de hombros, pasando frente al escritorio del señor Namjoon, Jin desvío su mirada, no deseaba verle, ya fuera por vergüenza por la mala nota por enojo. No tenía idea de qué estaba llendo mal, sólo podía evitar ser vista por él y tratar de no sentirse lamentable por su culpa.

Ambas llegaron unos minutos después a la entrada del colegio, todas las demás las esperaban a un costado bajo el gran árbol que tenía como escudo el Instituto. Jihyo entre cerró sus ojos, notando la manera decaida en que Jin caminaba hacía ellas. La rubia por fin estaba dejando caer lágrimas por sus mejillas rojas por el llanto, Tzuyu fue la primera en correr hacía ella y abrazarla.

"¿Qué demonios pasó?" Cuestionó Jihyo llegando junto a Jimin y Yeri.

Taehyung se cruzó de brazos. "Al parecer el señor Kim es un hijo de puta" murmuró señalando detrás de ellas hacia la zona donde se encontraba el salón de francés. "El muy bastardo por poco y la reprueba, le puso un maldito seis"

Los ojos de las cuatro chicas se abrieron con asombro, Tzuyu miró a Seok Jin, lamentando en silencio las consecuencias que podría atraer ess nota.

Park bufó. "Maldito perro" masculló apretando los brazos sobre su pecho. "¿Y qué va a hacer?" Quiso saber la pelirrosa mirando detrás de las espaldas de Jin y Tzuyu.

"Mañana hablará con él"

"Eso no va a servir de nada" Taehyung fue la primera en darse vuelta y encarar a la maldita voz que se aparecía en sus pesadillas.

"Soo-hye, cariño. ¿No te han educado bien? Meterse en conversaciones privadas es de mala educación" La capitana de porristas fulminó a Taehyung antes de abrir dde nuevo su boca. "Además de que estamos en un grupo social mucho más elevado que el tuyo, no nos importa lo que vayas a decir"

Las risas no tardaron en acompañar a Taehyung, sus amigas se mantenían expectantes de qué rumbo podría llevar todo. Soo era una maldita arpía, amaba humillar a la gran mayoría de alumnos, empeñandose en hacerlo con ellas, sobre todo con Seok Jin. Para su mala suerte la chica jamás había logrado ser superior a la rubia, pero ese día no parecía mejorar.

"Sólo quiero saber si es verdad lo que dicen los demás de ti, Taehyung"

La castaña elevó una ceja, no tenía idea de lo que la gente podría decir de ella, suerte que estaba en boca de los demás a que Jin o Jimin, que eran las que tenían más probabilidades de meterse en problemas. "¿Qué dicen?"

"Que tu hermano está en la ciudad"

"Joder, sí que todos son unos chismosos de mierda" negando Jimin le fulminó.

"Pero si son estúpidos, Taehyung y Jungkook eran hermanastros" se burló la azabache, negando con la cabeza.

Soo hye ladeó su cabeza, confundida con la declaración del grupo intocable. "¿Me estás diciendo que son hermanastros?"

"Mierda, no" declaró la peliazul. "Mi padre y su madre sólo se casaron por un año y luego se divorciaron, así que ni a eso llegamos actualmente"

"Son compañeros de techo" añadió Jihyo.

"De casa" agregó Yeri.

Jin elevó su cabeza con una sonrisa ladeada. "Hasta podrían ser de cama"

Jihyo que había estado buscando su botella de agua en su mochila, casi se desnuca cuando giró a ver a Seok Jin, la sonrisa maliciosa en sus labios le dijo a todas que estaba hablando de más por alguna razón, Yeri miró a Tzuyu quien ñe regresó la mirada con ojos abiertos y confundidos, Jimin mordia su labio inferior al ser la única conocedora  de las palabras venenosas de su mejor amiga, mas Taehyung era la única que parecía fuera de lugar analizando con sus ojos a la rubia. ¿Qué estaba planeando? Seok Jin jamás sería capaz de decir algo como eso, aún más sabían la mala relación que tenían ella y Jungkook.

"¿Q-qué?" Titubeó Soo con sus ojos abiertos por el asombro.

"Eso" repitió Jimin al frente de las dos rubias. "Ya sabes, al estar bajo el mismo techo, el atractivo de ambos... no es extraño que lleguen a algo más, sobre todo si no tienen sangre que los una"

Taehyung estaba estupefacta, ¿qué coño tenían sus amigas ese día? Inventar algo que estaba muy lejos de la verdad, Jungkook y ella no estaban enrollados en una relación, sí, le atraía físicamente su no hermano, pero era algo completamente individual y para nada recíproco, lo había comprobado al molestarle en casa. Jeon se ponía extrañamente incómodo con la situaciones que le había estado haciendo pasar, pero estaba bien con ello. Marcar una línea estaba bien para su corazón y estabilidad emocional.

"Que no tiene nada de malo que Taehyung y Jungkook sean pareja" enfatizó la rubia, acariciando la mano de Taehyung como una súplica, no se sentía bien usar a su amiga, pero era la única manera de pagarse las miradas burlonas de Soo hye. "Así que no, para tu mala suerte no podrás tener una oportunidad con Jungkook"

Kim tragó la saliva que se le había atorado en la garganta, todo parecía tener sentido. Sus amigas estaban jodiendo los sentimientos de Soo, regresando con mayor fuerza el golpe que la tipa había dado desde la clase de francés y tal vez desde antes.

La ira en los ojos de la rubia le había dicho que el cometido de Jin y Jimin estaba llendo a lo planeado, joder a la maldita perra que había estado detrás de sus culos. TaeHyung no estaba segura si la victoria que sentía era poner en su lugar a la capitana o porque estaba dejando en claro que Jungkook era suyo, aunque en realidad Jeon no lo era, pero con hablarlo podía  sentirse poderosa. Ni en mil años dejaría a esa jodida estúpida acercarse a su no hermano, incluso imaginarse a alguna de sus amigas con él era asqueroso, tal vez era lo extraño de la situación o el no desear soltar a su primer flechazo.

El sonido de un motor rugir ante la llegada de un challenger ganó la atención del grupo y de los demás alumnos que transcurrían a la salida del lugar, Taehyung iba a bufar y decir alguna estupideces ofensiva al ver a Jungkook llegar como un narcisista con su coche, podría burlarse a voces de él o incluso derramar algo en el asiento con tal de joderlo, para su mala suerte Seok Jin le dio un golpe con su mano suplicando con la mirada  cuando la elevó, quería terminar de humillar a la mal teñida.

No... movió sus labios evitando a su voz escaparse y delatar a todas. Seok Jin le dio unos pequeños ojos brillosos, un leve puchero hacía arriba y casi estaba por doblar sus rodillas si no fuera por Tzuyu quien negó con la cabeza. Soo hye estaba atenta a sus actos de cada una, con suerte las mejores actrices eran Jihyo y Jimin que parecían tan naturales que colocaba de nervios a Taehyung.

¡¿Qué carajos debía de hacer?!

"¡Taehyung!" El grito que dio Jungkook bajando del carro  le obligó a reaccionar. Jin le dio un empujón, suplicando de nuevo con sus ojos.

Juro pagar con dulces. Los labios acorozanados de Jin le dijeron, diablos, no podía abandonar a su mejor amiga.

"Tengo que irme, las veo mañana" se despidió con rapidez, era mejor correr antes de que Soo decidiera seguirla.

"¡Kim!" El chillido agudo de la rubia falsa le hizo dar un brinco, venía detrás de ella, con nerviosismo la peliazul aceleró su paso. Jungkook estaba recargado frente al toldo de su carro, tenía los brazos cruzados dejando ver sus bíceps marcados por las mangas cortas de su camisa a cuadros negra.

Taehyung sientía que podría orinarse ahí, parecían kilómetros lo lejos que tenía el jodido carro de Jungkook y al parecer la zafada de Soo no estaba tratando de alcanzarla, la estaba corretando como la loca que era. Creía que debía de verse como estúpida al casi correr lejos, se había puesto en los zapatos de una comadreja que sería devorada por una zorra como Lee.

¡Corre que te atrapa!

Chillaba en su mente conforme trataba de no correr, estaba luchando porque su maldita mochila no se cayera, o ella misma no tropezar y atinar al pasto. Caer sería más vergonzoso que su forma de salir corriendo como una loca que ignoraba a Soo.

"Tu padre dijo que pasara por ti ya que el padre de Jimin avisó que su camioneta está fallando y..." TaeHyung no lo pensó, se lanzó contra Jungkook, alzando sus brazos para enredarlos en el cuello del azabache. Kim ladeó su cabeza antes de estampar sus labios contra los de Jeon. Bien, estaba pasando la pequeña línea que los había separado por años.

La muchacha movió sus labios sobre los inertes de Jungkook, parecía que aún no estaba reaccionando a la realidad. Lo estaba besando, Kim Taehyung, su no hermana lo estaba besando, su lengua golpeando la lengua ajena. Una explosión, la castaña siempre le había hecho sentir una explosión dentro de sí, la furia era el sentimento que predominaba, pero la calma en esos momentos estaba bajo de su piel, Taehyung lograba estar bajo de ella.

Como la muchacha lo pedía, Jeon abrió sus labios levemente hasta que la lengua de la chica ingresó. ¿Cómo diablos sabía esa mocosa esos movimientos? Jungkook se había topado con algunas de primero en la Universidad que le dejaban todo a él, como unas muñecas de trapo, ahora se encontraba con esa mocosa con la cual había compartido techo y ahora se topaba con que ella podía tomar el papel de una jodida buena besadora.

¿Qué tan buena era con su boca? Jeon negó con la cabeza, regañandose por llevar un camino mucho más lejos del que debía de usar ante algo tan simple como un beso. Kim se separó, mirándole con ojos grandes, al darse cuenta de la realidad.

"Lo siento" susurró sobre los labios del azabache, cuando estuvo lo suficiente lejos para mirarle a los ojos. Jungkook analizaba su rostro al igual que ella lo estaba haciendo, ninguno sabía qué pasaba por la mente del contrario.

"Es tarde para ello" gruñó Jeon, su mano enredándose en la nuca de la peliazul jalando de su nuca y estampar sus labios contra su boca. Jungkook no tardó  en introducir su lengua en la cavidad bucal de la muchacha, explorando y jugueteando hasta que sus lenguas se saludaron, Kim sintió sus piernas temblar y Jungkook algunas cosquillas en su vientre bajo descendiendo... Ella había roto la pequeña línea íntima, estaba hecho y él no iba a dar un paso detrás.

"¡Maldita zorra!" El grito detrás de ella hizo a los dos jóvenes separarse. Hecha una gran furia, Soo se alejó a grandes pasos, diversos de sus compañeros estaban expectantes al show. TaeHyung pudo ver como Seok Jin secaba la cara de Yeri que se estaba quejando con Jihyo por haberle escupido, la azabache alegaba que su amiga peliazul había sido la culpable, pues mientras ella estaba bebiendo de su botella de agua Tae se había lanzado a la boca de Jeon. Un impacto para todos, mucho más para ellas que sabían la mala relación que llevaban.

"Debemos hablar" Jungkook dijo separándose de la menor, dando la vuelta al carro hasta que se subió antes que ella, la chica se despidió de sus amigas con su mano, las muchachas no dudaron en soltar chillidos a la vez que agitaban sus manos en despedida.

Cinco minutos después Jungkook ya estaba manejando rumbo a la casa, con la mente revuelta y la radio molestando como fondo en en silencio incómodo entre ellos dos. TaeHyung tenía las piernas juntas, podría decir que hasta sudaban bajo la tela de su falda. El azabache estaba demasiado serio, con suerte el volante no estaba siendo estrujado entre sus manos, pero su mandíbula estaba tensa. Ninguno de los dos había dicho  nada desde que se habían subido al auto y emprendido el viaje de regreso a casa, empezaba a ser más incómodo conforme llegaban a la casa, de alguna manera todo tendría que explotar y parecía muy cerca.

Jungkook detuvo el carro en la entrada de la mansión Kim, apagando el motor y dando un leve golpe en el volante a la vez que se giraba para ver a la menor. "¿Qué fue eso en tu escuela?"

TaeHyung cerró los ojos deseando desaparecer. "Yo... tengo que explicarlo"

"Por supuesto, porque no entiendo nada" admitió, Taehyung sabía que no estaba molesto sin embargo, había algo que no iba bien.

"Tú me has besado por segunda vez" le atacó, sintiendo un remolino en su estómago.

"No voy a negarlo" admitió el azabache. "Me gustas, tal vez no de una manera sana, pero dado que has dado el primer paso no voy a desperdiciar la oportunidad por algo tan estúpido como la vergüenza o el miedo"

Kim sostuvo la respiración, no estando muy segura de cómo  responder a su confesión de Jungkook. ¿Su flechazo estaba interesado en ella?  Lo creía imposible dado que el azabache era el imposible de muchas, no podía imaginarse a semejante tipo interesado en alguien tan sencilla como ella; era imposible.

"Jungkook, yo inicialmente no te bese porque lo deseara" Taehyung hizo una mueca, preocupada por la reacción dw Jungkook al saber la verdad. Tal vez era estúpido empezare por contar el plan de sus amigas, pero prefería dejar todo en claro y no pasar por una jodida escena de drama donde la verdad sale a la luz y lástima a los demás personajes. Ah no, ella no quería su vida tan complicada.

"¿Qué?" Jeon le miró confundido, por supuesto que no estaba entendiendo nada y mucho manos estaba reaccionando bien.

"La verdad lo hice para joderle la cabeza a Soo Hye, la capitana de las porristas... ha estado molestando desde hace algunos días y mis amigas me han dicho hoy que le gustas, así que creímos que hacerle creer que estamos en una relación y que ella no tiene ni una mínima posibilidad sería la mejor manera para regresarle lo que le ha hecho a Seok Jin"

Taehyung se relamió sus labios, mirando fijamente como el rostro de Jungkook se descomponía en muchas emociones negativas a la vez, sólo para al final verle con sus cejas juntas al final del puente de su nariz.

Jungkook estaba en blanco, no podía creerlo. Había abierto la boca de una manera tan estúpida para ser humillado. Bien, Kim había ganado en uno más de los juegos, Jungkook estaba derrotado.

"Entiendo" Dijo, un tono tan apagado que hizo temblar a la peliazul.

"Jungkook..." le llamó la menor cuando el azabache abrió la puerta para salir del carro, Jeon no se detuvo, ignorando a la menor y azotando la puerta de su carro.

"Está bien, Taehyung" le calmó siguiendo con su caminó, tenía el orgullo por los suelos como para poder ver a los ojos de la chica. "Entiendo todo, no tienes que decir nada más"

Taehyung le siguió, con sus piernas cortas la muchacha casi corría detrás de él. Jungkook estaba tenso, seguramente molesto por saber la verdad, pero no sabía toda la verdad. Ella había querido hacerlo, ella sentía cosquillas por culpa del estúpido  y sus labios aún tenían ese toque caliente y suave de los labios de Jeon, la fiesta de emociones explotaba en su estómago hasta subir a sus labios.

"Espera, Jungkook... déjame explicarte" suplicó la muchacha, había tenido que lanzar su mochila en cuanto entró por la puerta de la mansión y correr detrás del azabache el cual estaba dirigiéndose a la habitación donde siempre llegaba para pasar las vacaciones, podría considerarse que era la propia del mayor.

Jungkook se paró en el marco de la puerta, Taehyung se estampó contra él casi callendo al suelo, pero estabilizando su cuerpo antes de caer. El alto cuerpo se dio vuelta, encarando una ceja y con una sonrisa amarga en sus labios.

"No quiero saber nada más, Taehyung" le reprendió. "Sólo te pido que no me llames para la cena"

Kim arrugó su rostro. "Mi padre va a preguntar por ti..." susurró como una forma para ganar algo de tiempo, Jungkook no quería verla ahora, podría hablar con él después de la cena cuando la tensión entre ambos fuera menos.

"Tu padre se fue a Seattle por un partido" respondió, Jungkook no esperó respuesta, sólo se adentró a su habitación, cerrando la puerta casi de golpe en la cara de la muchacha.

Bien, Taehyung admitía tener mucha culpa en como las cosas se estaban desarrollando. Sin embargo, tenía la oportunidad de arreglar las cosas, no iba dar su brazo a torcer. Ella podía ser un grano en el culo cada vez que se proponía molestar a Jungkook, ahora no le dejaría en paz hasta que el azabache le escuchara y las cosas dejaran de ser una bola de mierda.

"Jungkook, escuchame una última vez" pidió dejando caer su nuca contra la madera de la puerta, cerrando sus ojos y escuchando los pasos dentro de la habitación de Jeon. Cuando las pisadas sonaron más cerca se preparó para recibir el rostro de Jungkook frente de ella, se alejó de la puerta para no caer de cara, para su mala suerte no fue abierta y el sonido del reproductor del mayor sonando con fuerza le dejó claro que no iba a abrirle y mucho menos a escucharle, TaeHyung tomó la perilla de la puerta decidida a entrar sin permiso y mandar a la mierda los actos infantiles de Jeon, muy a se pesar no lo pudo hacer por culpa del seguro en ella; Jeon se estaba encerrando.

Tendría que pensar en algo, tenía algunas horas para arreglar la situación antes de que Jungkook decidiera irse o su padre llegara y los gritos no fueran permitidos.

•••
"

¡Descansen!" La castaña se despidió de las señoras del aseo, después de cerrar la puerta de su hogar corrió directo a la cocina, Taehyung cadiwsi cae de cara, mas no le tomó importancia cuando pudo ver colgadas las llaves de la casa cerca de la puerta del almacén de despensa. La castaña luchó por encontrar el juego de llaves que abriera las puertas de las habitaciones de arriba.

Con suerte después de tres horas dio con el paquete indicado, cuando pudo escuchar el click de la puerta de Jungkook se le iluminaron los ojos, estaba bastante oscuro y silencioso cuando dejó todos los juegos de llaves junto a la puerta de Jeon en el pasillo, si llegaba a entrar con ellas seguramente el azabache le atacaría al creer que era un ladrón. Kim retiró sus pantuflas de sus pies, el frío golpeó contra su piel desnuda dando un largo temblor hasta su espalda cuando abrió la puerta por completo e ingresó.

Taehyung arrugó su rostro, las maletas de Jungkook estaban a medio armar, algunas prendas esparcidas en el sofá en medio de su cama y ka consola con la televisión. Jungkook estaba planeando irse, no estaba tan equivocada como había creído. Dio un largo suspiro que luchó por silenciar, cerró la puerta detrás de si con los ojos cerrados y preocupada porque Jungkook la escuchase, con mucha suerte el mayor estaba dándole la espalda. Lograba verle gracias a las cortinas abiertas, Jungkook estaba desnudo, al menos de su parte superior, esperaba que de la parte baja no, se sintió pequeña al acercarse a la cama del azabache. Kim subió a la cama, con el menor movimiento tosco posible, hundiendo la cama debajo de ella. Mordió su labio dudosa de despertarlo o no, ¿si le llamaba y se enojaba? Podría sólo quedarse toda la noche ahí como una acosadora, vigilando que no escapase, pero lo más seguro era que espantara al mayor.

"¿Vas a verme dormir toda la noche?" Taehyung dio un leve brinco al escuchar a Jungkook hablar, ¿cómo  había atinado a lo que había pensado? El azabache daba miedo. "Puedo oler tu shampoo desde la puerta, deberías de dejar de usar productos con olor a fresas" Dándose la vuelta en la cama el azabache le observó bajo la oscuridad de la noche.

"Me gusta esa fragancia" admitió.

"Pero eres fácil de detectar y eso es malo" Jungkook elevó su vista de las piernas juntas de la castaña hasta su conjunto de pijama que le cubría. Parecía un conjunto medieval, lo único que le libraba de padecer anticuado era el tono  rosa pastel y el encaje.

"No estamos en una película de acción o terror donde deba esconderme de algún loco"

"El mundo está demasiado podrido" Jungkook apenas murmuró, cerrando sus ojos, tenía sueño y tener a Taehyung ahí luego de lo sucedido le había ponerse incómodo. "¿Cómo entraste? Dejé  el seguro puesto"

Kim se encogió de hombros, jalando del borde de las sábanas de Jungkook para ingresar dentro de ellas. "Busqué las llaves de las puertas de arriba"

"¿Cómo lo hiciste? Tienen como cien llaves" abriendo los ojos, Jungkook se dio cuenta de que la peliazul estaba ya entre las sábanas de su cama.  Se alejó, listo para levantarse y alejarse, no estaba de humor para ser humillado y burlado por segunda vez.

"No estaba jugando cuando te besé" soltó deteniendo a Jungkook de colocarse de pie, Taehyung conocía bastante bien al mayor como para saber que la tensión en su cuerpo era por culpa de la molestia e incómodad que sentía al estar cerca de ella.

"No quiero oír nada más" Murmuró.

Taehyung estaba demasiado molesta como para seguir con ese estúpido juego de jalar y aflojar, la peliazul jaló del brazo que había tomado de Jungkook, haciendo que cayera de vuelta a la cama, estaba furiosa de que Jeon siendo un adulto actuará de una forma más inmadura que ella. Si iba arreglar las cosas iban a ser de su manera, sin importarle que fueran de forma tan explosiva como ella. TaeHyung le obligó a caers sobre el colchón.

"Deja de actuar como un estúpido, Jungkook" le atacó, ganándose una mirada fulminante que apenas podía reconocer por la poca luz natural. "Ya sé que estás enojado porque te use..." Kim sintió a Jungkook moverse, le vio abrir sus labios listo para tal vez atacar, pero antes de que qué lo hiciera la peliazul ya estaba luchando por subirse encima de él y poner sus manos sobre su boca para callarle.

"Mghh" se quejó el mayor cuando con todo el movimiento había terminado por destapar la parte baja de él y casi aplastarlo con su peso.

No era lo que ninguno de los dos había pensado ni planeado, para su suerte estaba teniendo a Jungkook callado y quieto. Era un gran avance.

"La cosa es que si bien te use para vengarme de Soo, no significa que no haya querido besarte" Taehyung sintió las manos de Jungkook colocarse en sus caderas, listo para atacar y liberarse de ella para no escucharle más. "¡Deja de ser imbécil, Jungkook!" Le chilló al golpearlo con sus manos en el pecho.

Jeon abrió sus labios cuando se sintió libre, sin embargo la nueva presión en sus labios le hicieron guardar silencio.  Taehyung había unido sus labios, atrapando el inferior y dando un mordisco en él, Kim estaba apostando todo por nada o por la reacción de Jungkook, moviendo sus labios por segunda vez inexpertamente, deseosa de arreglar todo. Sintió a Jungkook seguir tenso, no podía creer que era porque le desagradaba dado que conocía los pensamientos más íntimos del azabache, así que la culpable debía de ser esa jodida vergüenza o el ego herido de Jeon.

TaeHyung se separó al darse cuenta de que no tendría mucha repuesta por parte de Jeon si no aclaraba las cosas. Mordiendo su labio inferior la castaña pegó su frente a la del mayor, sus ojos de ambos buscando en el interior del contrario.

"Me gustas también... mucho en realidad, podría decirse que fuiste la primera persona que me atrajo cuando llegaste a casa" Jungkook no apartó sus ojos de la chica, Taehyung deslizó su mano por los hombros anchos del mayor, delineando con sua dedos los musculos regresando hasta extender sus manos sobre el pecho de Jungkook.

"Si es una broma..." gruñó Jeon, apretando el agarre en las caderas de Kim, la menor negó con su cabeza, repitiendo su exploración por el cuerpo de Jungkook, esta vez recorriendo su brazos hasta llegar a las venudas manos del mayor, Taehyung entrelazo unos segundos sus dedos con los impropios, acariciando sus llemas.

La peliazul abandonó la mano derecha de Jungkook hasta bajar a su muñeca, subiendo de la gran mano masculina hasta colocarla en su muslo izquierdo en el borde de su camisón. "No estoy jugando" le respondió de la misma forma tosca, Taehyung no se detuvo al llevar la mano de Jeon bajo la delgada tela rosada, mucho menos cuando el chico se había mantenido tenso ante los actos de la menor.

"Taehyung..." La menor negó.

"Sólo cállate, has hecho suficiente hoy" le atacó, Taehyung luchó con la resistencia del mayor, cuando su mano por fin se deslizó por su muslo acariciando su piel desnuda de su abdomen rozando con sus llemas la piel del borde de su seno.

"La culpable has sido tú" gruñó y Taehyung pudo sentir algo ponerse duro la única tela que separaba sus sexos, los boxer de Jeon podrían estar muy mojados por culpa del palpitar en su entre pierna.

"Y lo estoy arreglando" le reprochó, Taehyung le regaló una cálida sonrisa cuando vio dudar a Jungkook de sujetar o no su pecho. "Deja de actuar como un niño, Jungkook"

Kim sabía que estaba retando al mayor.

No se quejó cuando el azabache se inclinó levemente hacía adelante para sentarse en la cama con una almohada en su espalda para evitar la fría madera de la cabecera de la cama. Jungkook gruñó ante el leve roce de su polla contra el hueco de la peliazul, Taehyung mordió su labio cuando el dedo pulgar rozó contra su pezón hinchado, ya fuera culpable el frío o la excitación de ser tocada por primera vez, se sentía tan irreal que podría soltar un jadeo.

"¿Hay alguien en la casa?" Cuestionó Jeon, deslizando su otra mano bajo la tela delgada que caía por el muslo derecho de Kim, la menor negó, llevando sus manos al borde de la tela de su camisón subiendo de ella hasta lanzarlo por sobre su cabeza y al final dejarlo caer al costado  de ellos, los ojos de Jeon brillaron con algo que la menor no podía descifrar.

Sus pechos desnudos caían con la punta de sus pezones lo suficiente erectos como para llamar más la atención de Jeon, Taehyung movió sua caderas, jugando con el placer de su parte baja acompañada de la dureza de Jungkook. Mordió su labio, insegura de llevar un par de carcias a algo más íntimo, parecía que cada vez rompía con los grandes muros de separación entre ellos, ya nada parecía ser más íntimo que eso, así que no habría nada más que perder o pasar. La peliazul llevó su mano al borde del boxer que parecía oscuro, los detalles no podían ser bien vistos por la poca luz en la habitación, los dedos delgados de la muchacha bajaron la tela a la vez que su cuerpo se elevaba para retirar la tela hasta los muslos del mayor.

"No hay nadie" dijo por fin, mirando la manera en que la polla de Jungkook se había alzado libre hasta chocar contra su abdomen, la gran polla de Jeon saluda.  Kim no iba a decir (como toda una mujigata) que jamás había visto una polla, lo había tenido que aprender a la mala y Seok Jin no era la más inocente, llevando detrás de ellas como ganado al matadero a todas. Sin embargo, tener un falo en la pantalla a tener uno cara a cara eran cosas muy lejanas una de la otra. Por ello mordió su labio, sintiendo un cosquilleo imparable en su húmeda vagina, era los instintos exigiendo atención y acción.

Jungkook apretó entre sus manos los dos pechos de la peliazul, comprobando lo que Seung Won había dicho días antes, Taehyung había crecido, sobre todo en las partes correctas, no era más una niña y eso le estaba matando porque estaba eliminando lo inocente de quien había considerado inocente. Kim ke sacó de su ensoñación, tomando entre su palma su miembro palpitante, acariciando su tronco hasta pasar su pulgar por el grande rosado.

Jeon abrió sus labios, siendo silenciado cuando la menor bajo su pecho hasta chocar contra el suyo, sua labios atrapando los impropios en beso demandante, Kim suspiró cuando sus caderas ascendieron y rozaron con los testículos de Jungkook, mojando y rodeando la piel. Kim jugueteó, moviendo su mano izquierda hasta el hombro de Jungkook sujetando antes de elevar sus caderas con un vaivén vertical. Los gemidos de la menor ante el leve roce de sus pliegues mojados contra su falo de Jungkook hizo a Taehyung jadear por el juego promiscuo y primerizo.

"T-tae" le llamó, la menor emitía jadeos, gemidos y lloriqueos ante el simple roce, Jungkook no podía imaginarse cómo sería poseer por completo a la menor.

Jungkook vio a Taehyung cerrar sus ojos con fuerza, apretando sus piernas a sus costados y temblando ante el simple roce final de sua cuerpos, una leve capa de sudor tapando de ella cuando al final se corrió sobre del azabache, Jeon no iba a juzgar, no iba a decir nada más cuando todo lo que podía pensar era que sólo había sido el comienzo de una aventura, una que podría estar embriagada de placer y cariño.

"¿Qué puede significar esto?" Cuestionó el azabache en medio de los leves temblores de la muchacha, sin duda era inexperta, virgen e inocente. Jungkook podría disfrutar de romper con cada una de esas facetas de la peliazul, entrando en ella hasta hacerle suya.

"¿Qué puede significar para ti?" Ambos intercambiaron miradas, confusas, desorientadas y dudasas, un par de idiotas que habían actuado según el instinto antes que la cordura de su mente, Taehyung tal vez había dado el primer paso, mas Jungkook podría ser el que arruinara o arreglase todo. "Creo que he dejado en claro que no es un juego para mí, la verdad de mis palabras las gw demostrado"

Jeon asintió, apretando el agarre en la espalda baja de la menor. "Podría decir que tú misma has arreglado la problemática de tu padre y tú" Kim le miró sim entender, ¿qué carajo tenía que ver su padre en eso? "A final de cuentas ahora formaré parte de tu familia" respondió, ganándose un golpe en el pecho antes de que la joven bajase hasta unir sus labios.

Al menos no tendrían que seguir con el estúpido título de no hermanos.