Estuve un buen rato corriendo enojada, tenía que liberar la tensión de mi cuerpo, si no me pondría a gritar como loca y aún había luz del día... la noche sería mi compañera, de algo estaba segura, no quería regresar. Ellas me habían engañado, sabían quién era yo, su hermana, esa víbora, joder, por qué me pasa esto a mí.

Detengo mi carrera, estoy agotada y mucho, mi cabeza debe enfriarse, debo buscar un lugar donde pasar la noche.

Mi paso es lento, y me percato de como la luz del día empieza a opacarse, debo apresurarme a encontrar un lugar donde quedarme, la noche no es nada confiable, buena compañera, pero trae consigo peligros, personas peligrosas más específicamente.

Metida en mis pensamientos cuando siento que me colocan una mano en el hombro, un chillido y un brinco de mi parte hacia adelante no puedo evitarlo e incluso mis manos se colocan en forma de puños a la altura de mi pecho.

— Ahhh, unnie, tu grito me asustó ¿estás segura que no eres pariente de algún delfín? — pregunta la chica responsable de mi susto moviendo su mano en la oreja buscando alivio.

— ¡Yoohyeon!

— Sí, esa soy yo, Yoohyeon, no digas mucho mi nombre que lo gastas eh— dijo dándome una gran sonrisa — hola unnie—. Me dice y podía ver que ella también había corrido — yo...pues yo, te seguí, no creo que hayas entendido lo que paso— dijo rascándose la cabeza nerviosa, cierto, estoy enojada con ella.

— ¿Qué haces acá Yoohyeon? — pregunto parándome recta.

— Venga unnie, gastarás mi nombre, no lo digas más— dijo en forma de broma y yo alce mi ceja, estaba hablando en serio y ella debía entenderlo — ok, pero por favor, déjame hablar contigo, debo explicarte...

— Explicar ¿Qué? Yoohyeon, por favor vete, no quiero maltratarte, ni decirte alguna grosería, en el fondo ustedes me agradaron y mucho, por favor vete.

— Unnie, tengo mi celular para llamar a protección de animales, te lo advierto no me quieras aventar frente a un auto, de igual manera no me iré y abre bien tus oídos para que escuches lo que diré. — ¿por qué siento que si lo haría?

— Si luego de eso no quieres volver a vernos ni en tus sueños, eso será tu decisión— dijo lo último seria por un momento sorprendiéndome — Además no corrí detrás de ti como perro tras su dueño por gusto, ¿acaso crees que me gusta correr? Muy a huevo me levanto para ir al baño a usar mi neurona de cagar, así que aprecia mi esfuerzo físico y déjame hablar si— dijo y volvió a mostrar su gran sonrisa, en serio es medio bipolar esta chica.

— De acuerdo, sentémonos en algún lugar, estamos en el medio de la acera— dije intentando relajarme un poco, Yoohyeon es joven, no debo hacerla pagar por lo que su hermana hizo, aunque ganas de desquitármela me sobran.

— Vayamos a aquel parque, allí me lanzaban la pelota para que la persiga de vez en cuando— ¿en serio?

— Lástima que no haya traído mi pelota favorita, hubiera sido genial que me la lanzaras por un rato, desde que Bora unnie esta tan metida en su trabajo me tienen castigada sin traerme a divertirme y corretear por el parque, mis hermanas son crueles— decía feliz al comienzo y poco a poco iba poniendo expresión de cachorro triste, espera, que la persiguiera, ¿acaso es un perro?, además, no dijo que no le gustaba correr.

Fuimos hasta donde Yoohyeon decía, las luces del lugar ya estaban encendidas, la luz del día era ya escasa, la luna comenzaba a verse por detrás de un edificio.

— Ya estamos acá, habla— le dije y por un momento me pareció que había regañado a un cachorro, tenía hecho un puchero y la cabeza semi baja — Yoohyeon, por favor, dime lo que querías decirme— dije midiendo un poco más mi temperamento.

— Escucha Siyeon, sé que lo que viste en la casa no fueron las cosas más normales del mundo, y que eso nos hace parecer como si fuéramos alguna clase de familia fenómeno o máximo malas personas como le gustes llamar, tal vez creas que somos mentirosas, porque de hecho si lo somos no te negaré que te guardamos la verdad por un rato, la verdad, ante todo, espera eso no tiene sentido— se quedó pensando de momento — pero de igual manera estas confundida.

— Ah si, entonces ábreme los ojos para ver si entiendo.

— Te los puedo abrir con los dedos para que veas mejor a tus alrededores, pero sería incomodo, sé que no me crees y estás en tu derecho, pero debes creerme ósea, estoy siendo sincera contigo— rasca su cabeza nerviosa.

— Sé que estas a la defensiva, pero recuerda que con una llamada a protección animal estarás en un lio, ya me estoy desviando del tema— dijo con cara confusa — en fin, Sua unnie, no es una mala persona ella... ella solo hacia su trabajo.

Escuchar que ella decía que Bora no era mala persona cuando había causado la muerte de mi padre me hizo hervir la sangre, y cuando iba a comenzar a reclamarle a Yoohyeon ella continúo hablando.

— De hecho, no sé si debería de decirte esto, pero necesito que confíes en mí y escuches cuidadosamente lo que te voy a decir, ¿podrías hacer eso por mi Siyeon? — me pidió y una vez más parecía un cachorro.

— De acuerdo, qué me confesaras.

— Siyeon, Bora, Sua unnie, trabaja como agente encubierto, si suena cool ¿verdad? — ¿QUÉ? — Ella fue contratada por tu padre para cuidar de su poder y de ti— dijo con tanta seriedad que, por dios, acaso esta es la misma Yoohyeon de hace un minuto.

— Yoohyeon, si me estás haciendo una broma yo...

— No bromeo, ¿por qué lo haría? Sua unnie es mi hermana, mi ejemplo a seguir, no tengo por qué mentir sobre ella— dijo manteniendo la expresión seria.

— Ahora estoy confundida muy confundida— dije mirando mis manos, esto es una locura, ¿agente?

— Si es una agente en cubierto cómo sabes esas cosas, ¿cómo saben ustedes de mí? — pregunte algo no me convencía, y me sorprendí al ver a Yoohyeon ponerse nerviosa de pronto, una pequeña sonrisa se asomó en sus labios — ella se enam....— fue a decir algo y negó con la cabeza.

— Ella es una enana, lo siento unnie, nosotras sabemos lo que sucedía con tu padre y vos, no es como que queramos estar en el chisme ni nada de eso cof cof— dijo fingiendo tos.

— Nosotras sabíamos porque unnie entró en un estado determinado que no podía manejar sola, y decidió desahogarse con nosotras, sus hermanas, pero es algo que ella misma deberá decirte— dijo y sonrió para tomarme una mano.

— Por favor, confía en mí, vuelve a casa, unnie nos matará si sabe que estas desprotegida en la calle, y contra ella el programa de protección no me ayuda, además, mis hermanas y Minji están preocupadas por ti, pero como yo lo estoy más seré tu maknae favorita a partir de ahora— dijo y podía ver la sinceridad de sus palabras, alguien como ella no se ve capaz de mentir para dañar.

— Yo...

— Por fa unnie, y prometo que te daré mi flan— dijo y joder, ¿era una niña acaso?

— De acuerdo, regresaré contigo, pero si cuando hable con Bora ella, y escúchame bien Yoohyeon, ella muestra señal de ser la culpable, iré a la policía y la demandaré sin pensarlo dos veces— advertí, pero en vez de verse intimidada Yoo se veía feliz, estaba feliz, su gran sonrisa la delataba

— Ok, no esperemos más, vayamos juntas a casa— dijo levantándose del banco para extenderme su mano.

— No planeas que vayamos tomadas de las manos hasta la casa ¿verdad? — pregunte mirando de su mano a ella, y ella negó con la cabeza — no más soy caballerosa, por favor dama, deme su mano para ayudarla a ponerse de pie— dijo fingiendo caballerosidad haciéndome reír, esta chica definitivamente es especial.

— Gracias— dije fingiendo elegancia poniéndome de pie tomándole la mano.

— Venga, vayamos a comer flan— dijo dándome un guiño y yo le di una pequeña sonrisa.

[...]