Aquí les traigo el siguiente capítulo, como adelanto de lo que se viene en ellos próximos capitulos.

Espero que les guste, y por favor dejen sus comentarios.

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12:44pm

Al salir de la habitación de Apolo, me dirijo a la sala de seguridad. Dónde me topo con Brennan.

-Cambiaron de puesto- pregunto y el asiente- Necesito entrar a la sala de seguridad. Tengo que ver algo.

-Y porque debería dejarte entrar.

-Mi padre es socio del hospital- digo y el abre exageradamente los ojos- No creías, que papá dejaría que internaran a mi hermano, en uno público.

-Señorita Katherine, debo saber para que quieres entrar.

-Te explico. Acabo de tener una conversación con mi hermano en su habitación, y es una conversación que nadie puede escuchar. Así que quiero entrar para borrar dos minutos del vídeo, porque si esa conversación se llega a filtrar a la prensa, podemos crear un rumor que acabaría con la empresa de mi la padre- digo para luego suspirar- Entiendes la gravedad del asunto.

-Entre- dice cansado, después de informar a alguien por su radio.

Entro en la habitación, encontrándome con el ingeniero de sistemas.

-Buenas tardes, me presento, Katherine Barckley. Necesito borrar cerca de 1 hora y media de vídeo de la habitación 105.

-Bien.

-Antes me podría mostrar que está sucediendo ahora en la habitación.

-Ok- el pulsa algunos botones hasta que se muestra la habitacion. Luego me pasa unos cascos para que solo yo escuché.

En la pantalla, se ve a Ali sentada en la silla, mientras Apolo es ya en su cama.

-Apolo, aún no entiendo porque le quieres decir- dice Ali un poco molesta- Es un secreto. Nuestro secreto.

-Alison. Es mi hermana. Debemos decirle.

-No se debe enterar nunca- dice Ali eufórica inclinándose hacia delante- Si se entera, te la cortará, y luego me dejara calva.

-No exageres.

-Ella es muy conservadora cuando se trata de su habitación. Si se entera, que follamos ahí, ay de nosotros.

-Yo le diré- me quito los cascos, y se los entregó.

-Necesito que el vídeo sea borrado, hasta justo ahora. Desde que entré en esa habitación.

-Bien- el señala un CD, con el número de la habitación de una máquina que esta a su lado- Los registros de las cámaras se guardan por día. Lo mejor será que esper al final del día, para retirar el vídeo completo, y no quede nada que pueda perjudicar a su familia.

-Bien- digo sonriente- Entonces volveré en unas horas.

-La esperare- salgo de ahí.

Me dirijo a la habitación de mi hermano, y lo encuentro recostado, mientras Alison lo besa.

-Alguno de los dos, me puede decir cuando fue- digo molesta y ellos fruncen el ceño, mientras Ali se separa de sus labios.

-De que hablas- dice Apolo un poco nervioso.

-Lo escuché por las cámaras. Cuando fue.

-Yo te lo puedo explicar- dice Ali tartamudeando.

-Apolo, cuentame. ¿Porque no en tu habitación?- digo con la poca paciencia que me queda

-Desde el principio. Fue el día que me enfermé.

-Recuerdas que ese día no fui a clases, fui a ver qué tal estaba Apolo- lo apoya Ali.

-Bien ese día, mamá estaba en casa, y estaba limpiando mi habitación, así que hablamos en la tuya. Una cosa llevo a la otra y bueno, no te daré detalles- dice Apolo.

-Por favor, Diganme que no fue en mi cama, o vomitare.

-Tranquila, fue en el suelo- dice Ali.

-Bien. No me enojare, no me enojare- digo caminando por toda la habitación, mientras doy largos suspiros- Ustedes dos, limpiarán mi habitación, con cloro de ser necesario. Y si se niegan, arrartraré sus cabezas por el piso, hasta que brille. Más de lo que ya lo hace.

-Prefiero la primera opción- dice Apolo temeroso.

-Yo igual- lo apoya la otra, sabiendo que en serio lo haré.

-Perfecto. Y no vuelvan a hacer cochinadas en mi habitación- digo posandome en la parte de atrás de el sofá donde está Ali.

-Mira quien lo dice- murmura Ali y yo le doy un golpe en la cabeza.

-Mi vida personal no es asunto tuyo- digo y Apolo sonríe- Ni de ninguno de los dos. Son cosas que se quedan entre mi pareja y yo- digo y Ali sonríe picarona.

-Tengo una duda- interfiere Apolo- ¿Quien es tu pareja?.

Ali me mira y yo a ella, diciéndole con la mirada, que no se le ocurra decir una palabra. Y ella me dice que espera con ansias mi respuesta.

-Como dije antes, mi vida personal no es asunto suyo. Así que me reservaré el nombre.

-Yo también tengo una duda- dice Ali.

-Y ahora que quieres.

-Porque llevas una camiseta de hombre que no es de, "ya sabes quien- dice Ali- Bueno, no de "ya sabes quién" porque suena a qué estás con muchos, porque llevas una camisa que no es de el.

-Uno, era de Alex. Dos fue lo primero que encontré. Cuando me llamaron del hospital, casi vine descalza. Y, ya se que dirás. En lo que vuelva a casa, botaré todas sus camisas.

-Asi me gusta. Esa es mi nena- dice dándome un abrazo, luego de levantarse.

-Porque ella sabe quién es tu novio y yo no- interviene Apolo en nuestra conversación.

-Porque. Le rogué casi por un año que me dijera quien era el chico que le gustaba. Y están juntos desde hace poco, porque resultó que el vato tenía los mismos sentimientos- responde Ali antes de que yo lo pueda hacer

-Exacto- digo.

-Ok. No pienses que haré eso, solo por un nombre- dice Apolo.

-Tampoco creí que lo hicieras- digo sentandome, y Ali se sienta que el otro sofa.

Luego de un rato en silencio, Alison habla.

-Sabes. Llevamos todo el día juntas, y aún no te he felicitado- dice levantándose para abrazarme- Felicidades cariño.

-Y porque me felicitas.

-Por lo de anoche- dice.

-Que paso anoche- pregunto aún sin entender nada.

-Ya se te olvidó la noche más importante de tu vida.

-Ahhhhhh- digo recordando- Anooche, ya entendí. Pero porque me felicitas.

-Porque es una fecha de celebración.

-Entonces ¿Gracias?- digo con una ceja alzada.

-De nada mi amor. En lo que Apolo salga de aquí, te compraré una botella de champagne, y brindaremos por ti.

-Tengo tiempo sin tomar champagne- interfiere Apolo.

-Cariño. No sé si ella no se explico bien, pero tú no tomarás. Por dos razones. Número uno, estás castigado por casi morir borracho. Número dos, eres un niño- le explicó.

-No soy un niño- se defiende.

-Si lo eres- le replicó.

-Que no.

-Que si.

-Ya basta. Eres un niño, muy maduro para tu edad, demasiado de hecho- interfiere Ali, susurrando lo último queriendo que solo el la escuche- Pero eres mi niño. Así que ya dejen la pelea, o los castigare a los dos.

-Y como pretendes castigarnos Alison- dice Apolo

-Fácilmente, sin sexo por un mes- dice apuntando a Apolo.

-NO, ya yo no peleo- dice Apolo levantando las manos en modo de rendición.

-Y a mi- la reto.

-No te pasaré más la tarea por un mes- dice.

-Me siento, ya- me siento con las manos en alto, igual que Apolo.

-Aunque pensándolo bien, contigo es más fácil. Con decir un nombre basta- dice y me levanto encarandola.

-No te atreverias.

-Tienes razón no lo haré. Pero solo, porque valoro mi cara.

-Chicas, cuántos secretos tienen ustedes- dice Apolo.

-No puedo contar. Son demasiados. Además, quien lleva la cuenta.

-Odio que sepan cosas que yo no- dice Apolo.

-Ya lo se- dice Ali.

-Cariño, cuando salgas de aquí, te diré tantos secretos de Ali que literalmente, pensarás que es una puta ofrecida, y querras terminarle.

-Nunca haré eso- dice Apolo

-Y tu no le contarás nada- dice Ali.

-Cariño, solo le contaré lo necesario.

-Espero que lo necesario, excluya muchas cosas.

-Tranquila, si lo hace.

-Perfecto.

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11:57pm.

Llevamos horas hablando, sobre cosas sin sentido, de ves en cuando salgo de la habitación, para pasar un rato con Jake, y justo ahora veo la hora.

-Chicas, se acabaron la charlas, ya no podemos hablar sobre nada personal, voy a buscar el vídeo de la cámara de seguridad.

-Ok.

Salgo de la habitación, y en cuanto doy un paso afuera, me topo con Jake. A chocar, casi me caigo pero el me sostiene antes de hacerlo.

-Jake, oh no te vi- digo un poco apenada.

-Ya nos vamos, mama llegó a hacerle compañía, y me obligó a llevarlas a las dos a casa.

-Bien, dame un minuto, ya vengo.

Me libro de el. Y voy a retirar el vídeo.

-Muchisimas gracias- le digo a el señor.

-A la orden señorita Barckley- me responde con mucha amabilidad.

Salgo de ahí, y me dirijo a la salida, dónde me encuentro con Ali y Jake.

-Listo- me pregunta Ali, a lo que yo le muestro el CD, antes de guardarlo en mi bolso.

-Ya nos podemos ir- pregunta Jake.

-Si- salimos del estacionamiento, y caminamos hasta cera de la salida, dónde está el auto de Ali Ali se acomoda en su asiento, y Jake se sienta en la parte de atras- Adiós- le digo a Ali, despidiéndose con un beso.

-No vienes- pregunta Jake extrañado.

-No, traje mi moto, y no quiero dejarla aquí.

-Ok- responde Jake desde la ventana de la camioneta.

Cuando voy a caminar, su voz me detiene.

-Y mi beso- me dice asomando su cabeza, por la ventana.

Me acerco a el, y le doy un corto beso de lengua.

-Sabes a chicle de fresa, cuando comiste.

-Yo no como chicle, Alison fue la que comió- le digo y el arruga el entrecejo sin entender. Luego parece entender lo que pasó, y yo me alejo- Te explico en casa.

-Kate, te voy a atrapar- dice saliendo del auto, a lo que yo corro.

El se vuelve a subir y yo me dirijo a mi moto, me pongo el casco, y me subo en ella. La enciendo y ahí veo la camioneta de Ali, ir en rumbo a la salida.

Saco la lengua, y hago como si lamiera algo cuando Jake me mira. Me pongo los guantes de cuero, y salgo detrás de ellos.

Manejo por la autopista por detrás del auto, dónde se encuentra mi pareja, y la chica que bese hace unas horas.

Aceleró lo suficiente, para que dar a un lado de la camioneta. Y veo por la ventana, la mirada furiosa de Jake.

Doy ligeros vistazos hacia ellos, y Jake se percata de esto.

Abre la boca y me dice algo insonoro, y yo logro leer sus labios.

"Me debes un explicación".

Aceleró, y me adelantó a ellos, montando caballito en el camino solo, para que el me vea.

Me adelantó mucho más, hasta que ya no los veo.

Cuando voy llagando a casa, se que ellos tardarán en llegar.

El portero me abre, y yo entro hasta el estacionamiento, dónde dejo la moto.

Entro a casa, subo directamente las escaleras y entro a mi habitación, para darme un corto y refrescante baño.

Cuando salgo, me intento poner un body negro, uno donde la única manera de cerrarlo o abrirlo, es con una cinta, que conecta toda la parte de atrás.

Obviamente, no puedo ponérmelo sola. Así que llamo a Marie.

Marie es una chica francesa, que trabaja en la casa, ella es la que limpia la casa. Llegó aqui hace 4 años, cuando ella tenía 18 y no estudiaba. Pero ahora, ella trabaja en el día, y con su sueldo, y un poco de mi ayuda, paga la universidad nocturna.

Había estado sin trabajar, porque su mamá estaba enferma, pero ya mejoro, y por eso volvió a casa ayer.

Cuando ella abre la puerta, se sorprende al verme casi desnuda.

-Marie, necesito ayuda.

-En que Kate- dice solíamos ser muy cercanas antes de que pasara lo de Alex, y yo me aislará de todos mis amigos.

-Me puedes ayudar con esto- digo volteándome para que viera las tiras del body.

-Si, tranquila, solía usar mucho de esos, no es nada fácil ponérselos sola- ella se acerca a mi, y me ayuda a cerrarlo.

Lo aprieta tanto, que siento que me falta un poco la respiración.

Un minuto después, ella termina, y ambas terminamos cansadas.

-Uff, te juro que nunca me lo volveré a poner- le digo.

-Aunque debes admitir, que te queda hermoso- me dice tomandome por los hombros, para llevarme hasta el espejo.

-Si lo hace- digo- Ahora, porque no vamos por un vaso de limonada.

-Me parece una buena idea.

Antes de salir me pongo una bata de baño. Es súper cómoda. Luego de amarrar un lazo, en la cuerda de tela que envuelve mi cintura, salgo con ella de la habitación, luego de ponerme las pantuflas.

Bajo la escalera junto a Marie, hasta que llegamos a la cocina. Yo paso hacia adentro y abro la nevera, mientras ella se sienta en uno de los asientos de la barra americana.

Saco de la nevera, una jarra de limonada, y luego busco dos vasos en uno de los cajones, sirvo la limonada, para después entregarle uno de los vasos a ella.

Mientras tomamos la limonada, la puerta es abierta, y las voces que se escuchan desde la sala, las reconozco al instante.

Ambos se dirigen a la cocina, y Marie se endereza en su asiento.

Cuando cruzó mi mirada con la de Jake, reconozco la molestia en la profundidad de sus orbes.

-Quieres limonada- pregunto extendiendo mi vaso hacia ellos, para luego tomar.

-No gracias- dice Jake que se posiciona a un lado de nuestra empleada- Porque tú estás aqui- le dice fríamente.

-Porque, Marie es mi amiga, y la vi tan cansada, que la invité a tomar un vaso de limonada.

-Bien- dice de mala gana ante la mirada retadora que le doy.

-Ali tu no quieres- le ofrezco, cuando se sienta a un lado de Jake.

-Si por favor- le sirvo un vaso, y se lo ofrezco, con la mirada de Jake, fija en mi

-Podemos hablar- dice y yo le doy una mirada, dándole a entender de que puede hacerlo- En privado- aclara.

-Vale, déjame terminarme mi limonada.

El se levanta, y me hala hacia las escaleras, haciéndome dejar mi vaso.

Entro a mi habitación, mientras el aún jala de mi.

Cierra la puerta con seguro, dejándonos encerrados aquí.

Me siento en la cama esperando a que hable.

-Porque.

-Porque intentábamos poner celoso a Apolo.

-Porque Apolo se pondría celoso, de que beses a tu mejor amiga.

-Oh, lo siento, pensé que Ali te lo había contado.

-Contarme que.

-Alison y Apolo, son novios- digo y el abre la boca en sorpresa- Y Alison, le quito la virginidad a nuestro hermano menor.

-Eso no me lo esperaba, pero eso no responde lo del beso.

-Bueno, te explico, estábamos hablando sobre su relación, y Ali y yo nos dimos un gasto beso, Apolo dijo que era un acto lésbico, y nosotras le dimos un verdadero acto lésbico que ver- digo y todo su cuerpo se tensa- Apenas y rozamos nuestros labios, fue solo un pequeño beso de lengua.

-No quiero más besos con Ali, entiendes- dice y yo asiento- Buena chica.

Yo me levanto y lo beso poniéndome de puntillas.

-Porque llevas solo una bata de baño, hay hombres en casa.

-Me acabo de bañar- le digo con fingida inocencia, como si no hubiera planeado decir eso- Estás celoso mi amor- le digo.

-No- dice y luego una sonrisa pícara llega a sus labios- Así que estás desnudita.

-No del todo- le digo y me alejo un poco de el- Quieres ver qué llevo puesto- le pregunto.

El asiente y traga grueso.

»-Mejor no, de seguro no te gustará- digo tentandolo mientras me volteo.

-Kate, ya quítate esa bata- dice con desesperación en su vos.

-Pero. Y si no te gusta- digo girando mi cabeza para verlo.

-Si no me gusta, te lo quitaré de todos modos.

-Bien, pero no te burles- digo dejando caer la bata por mis hombros, haciendo que está caiga a mis pies, y que Jake solo pueda ver el retazo de la braga que desaparece por en medio de mis nalgas, conectado con el liguero a la espalda del body, y dejando ver la cinta.

Me volteo, dejándolo ver el conjunto completo, y mis bragas se mojan, al ver su mirada en cada parte de mi cuerpo cargada de deseo.

»-Que tiene, no te gusta- digo con fingida inocencia.

-Es perfecto. Aunque... Creo que cubre demasiado.