Capítulo 21Aceptación

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Obviamente después de escuchar como acabó Costia, sí que tenía un poco de miedo el cómo podía reaccionar Lexa. Los noticieros no dejaban de meter cizaña y porque estaban en horario infantil, seguro que los muy morbosos pondrían algo más que fotos en las que salía ligerita de ropa, a primera hora de la mañana, toma en una foto en la que salía de marinera sexy. Tanto Lexa como la ojiazul se quedaron mirando a Raven, fue cuando esta se dio cuenta de que ahí sobraba:

_ Lo he pillado _ se quedaría con las ganas de saber que haría la bestia y la bella_ voy a ver cómo van los niños

Clarke intentaba pensar las palabras adecuadas para no encender la mecha que haría explotar a múltiple. Que la miraba con recelo y su pecho se agitaba rápidamente por la respiración acelerada, solo le faltaba el humo saliendo de sus narices:

_ No te mentí cuando te dije que estoy en peligro si sabían que estaba viva_ señaló a la televisión_ acaban de poner una diana tanto a Raven como para mí. Sí, era actriz porno y el productor que ha llevado siempre mis películas se cree que tiene derecho sobre nuestras vidas_ Lexa no decía nada, eso daba mucho más miedo_ él se hacía de oro a nuestra costa, mientras nosotras teníamos que hacer cuentas para llegar a fin de mes, pueden llamarnos actrices porno, pero con el manager, el director y el productor equivocado, nosotras pasamos a ser prostituidas.

La ojiverde, de mirada oscurecida y rostro enfurecido, se acercó lentamente a la ojiazul. En su día Costia no tenía a nadie, solo a la bruja de Alicia y esa no la defendió, Clarke tenía la certeza de que Raven le sacaría los ojos para proteger a Clarke, aunque una pequeña parte de la ojiazul, tenía la esperanza de que Lexa hubiera cambiado. Le agarró de los brazos para atraerla y encararla, que no gritase resultaba mucho más aterrador:

_ Si me lo hubieras dicho desde un principio_ señaló a la televisión con un dedo_ podría haber hecho todo lo posible, para que eso no hubiera pasado_ decía entre dientes_ te vas a vestir, tú y Raven os iréis a la mansión Woods, donde os puedan proteger los guardaespaldas de mi madre_ eso le dio un poco de alivio a la rubia, al menos no le había echado como un perro_ intentaré detener ese desastre y otras cosas que no pueden esperar, cuando haya terminado_ rechinó los dientes_ tú y yo terminaremos esta conversación, vístete ¡YA!

Terminó elevando la voz. Clarke se sobresaltó y asintió con la cabeza, acelerando el paso para subir al piso de arriba. Maldiciendo, lo peor de todo, es que sufría más por Lexa, le había abierto su corazón, le había suplicado que no le traicionara y se había enterado de su pasado de la peor forma. El apellido Woods estaba implicado en un escándalo de esa magnitud. ¿Qué diría Indra? Y ¿el ogro de Gustus Woods? Cuando estaba entrando en la habitación Raven apareció y entró detrás de ella, con la preocupación pintada en el semblante:

_ ¿Se ha atrevido hacerte algo?

Clarke negó con la cabeza y comenzó a sacar lo primero que tenía a mano en el armario:

_ No, ni me ha levantado la mano, no me ha insultado ni me ha echado como un perro_ en su voz se podía notar la preocupación_ eso no quiere decir que lo tenga fácil

Raven le llamó la atención obligándole a que le mirara:

_ Clarke, estamos vendidas, ya sabes cómo acabó Niylah, ya no se trata de mí y de ti_ le decía casi en susurros_ él vendrá, una de dos, se venga matándonos o exigirá dinero y con lo famosa que es tu mujercita por su dinero, me da que querrá lo segundo, como te niegues ya no solo puede que tenga la mira puesta en nosotras, la tendrá en todo el mundo cuanto nos rodea y eso incluyen a esos dos niños inocentes_ Clarke retiró la mirada, no quería seguir escuchando_ sabes que tengo razón

Clarke, miró a Raven con gesto afligido:

_ Raven, la quiero_ negó con la cabeza_ no puedo abandonarla, no puedo ser otra más

_ Clarke_ le agarró de los brazos, para intensificar su mirada castaña_ si te quedas, la pondrás en peligro y le harás más daño del debido

_ Él vendrá igualmente y la buscará pensando que estoy con ella

_ En cuanto vea que no estás la dejará en paz_ sonó suplicante_ por favor, Clarke

En el piso de abajo Lexa se había liado hacer llamadas, intentando buscar vías legales para que la prensa dejara de publicar más cosas sobre "Miss Cocos", dios le ardía el estómago del enfado. Gran parte porque Clarke no le había contado ese detalle, es la cantidad de fotos que no dejaban de emitir por la televisión, le costaba imaginarse a Clarke así, le repateaba que la gente solo la viera como la actriz porno. Para colmó recibió otra llamada:

_ Ahora no es un buen momento_ dijo nada más descolgar_ ¿qué? ¿Dondé?_ buscó una libretita de post-its_ ¿Jóvita Acosta? Prepara los papeles del divorcio exprés, iré en cuanto deje a mi mujer con mi madre_ negó con la cabeza_ tú ya me entiendes joder.

El timbre sonó, esa debía ser Octavia, ya que su hijo iba al mismo colegio que Aden, le iba hacer el favor de llevarse a los niños, mientras que acercaba a Clarke y Raven a la mansión Woods, al resguardo de los guardaespaldas que tenía contratados su madre.

Las chicas bajaron acompañando a los niños:

_ Hola O.

Saludó la castaña a la vecina de Lexa, que hizo un saludo con la cabeza y salió con los niños. Esta no era la típica vecina cotilla que rápido preguntaba, "oye ¿Todos esos paparazzi que hay en la puerta?" Su marido era también cara conocida al público, cuanto menos se expusiera mejor. La ojiverde se quedó mirando en la mochila abultada que llevaba la amiga de Clarke sobre la espalda:

_ Solo son unas cositas por si las necesitamos en casa de tu madre

Explicó la castaña, dirigiéndose a la puerta principal:

_ No, por ahí no_ las detuvo Lexa con sequedad_ al garaje, iremos con un vehículo de cristales tintados.

¿Vehículo de cristales tintados? Cuando Raven entró en ese macro garaje, por primera vez, ya que los coches que usaban a diario lo aparcaban fuera, se quedó boquiabierta. Un Ford Mustang Gt 2015, color negro con cristales tintados les estaba esperando:

_ Acabo de mojar las bragas

Lexa no dijo una sola palabra. Se limitó a abrir el coche y esperar a que ambas montaran. Estaba estresada, se le había acumulado todo y sentía que las ulceras comenzaban a supurar su estómago.

Costó salir de entre el barullo que estaba formado en su puerta, esos chupa sangres morbosos de los medios televisivos, les daba igual que les pitara y tuviera el coche en marcha, apretó con fuerza el volante de su potente coche y sintió unas ganas horribles de derribarlos como si bolos se tratasen. Pero ya bastante escandalo había:

_ Lexa...

Comenzó titubeante la ojiazul:

_ Ahora no, Clarke_ Cortó con sequedad_ estoy estresada, cabreada e inestable, así que mantén la boquita cerrada.

Obvio que Indra Woods ya se había enterado, sus amigos los estirados, rápido llamaron para chismorrear, en plan escandalizados por la "mujerzuela" con la que se había casado su hija. Indra, con el disgusto que tenía encima sentía que se moriría de la ansiedad, claro que era molesto, había acogido a Clarke como si fuera su propia hija, pero seguía siendo la mujer de Lexa. En cuanto llegó su hija y conociéndola, la cara que traía no auguraba nada bueno:

_ Me llamó Marian, contando lo sucedido ¿Cómo te encuentras?

Lexa puso una mano sobre el brazo de su madre y miró a las chicas:

_ Escucha, ahora tengo que irme a Buenos Aires_ las tres mujeres se quedaron sorprendidas ante esa noticia_ diles a tus guardaespaldas que tengan cuidado, cuando regrese ya veremos qué puedo hacer para que estén protegidas

_ ¿Protegidas de quién?

Preguntó Indra algo desconcertada:

_ ¿A Buenos Aires para qué?

_ Entrar en casa_ sonó más a una orden_ cualquier cosa rara llamáis a la policía, me tengo que ir

Indra no indagaría más y Clarke miró a Raven, una vez más captó el mensaje, entrando con la madre de Lexa en la casa. La ojiverde pasó por su lado para regresar al vehículo, cuando Clarke le agarró de la muñeca, notando enseguida la rigidez de esta. Clarke, sabía que se arriesgaba mucho, pero tenía que hacerlo, aunque la gritase, le insultase o le mirara como le estaba haciendo en esos momentos:

_ Sé que la última persona con quien quieres hablar ahora mismo soy yo, que probablemente me estés odiando y que te mueres por alejarte de mí_ dio un pasó hasta mirarla a los ojos, todo sus ser era puro dolor, hasta ese mismo instante no se había dado cuenta, cuan intenso podía llegar a ser su loco amor, enamorada de una mujer, llena de demonios hasta el punto de tener sus momentos salvajes_ pedirte que me beses ahora mismo sería demasiado, pero al menos, aunque luego decidas no creerme, déjame decirte que te quiero, que nunca quise esto y que los días más felices de mi vida los he vivido contigo.

Lexa agachó la cabeza y resopló. Clarke había cometido el pecado de ir con medias verdades. Podría pensar que era porque desconfiaba de ella, pero lo cierto es que Lexa lo asociaba más a que le tenía miedo y era comprensible, desde que la conoció había visto todas sus caras, las bonitas y a la bestia que llevaba dentro, aun después de haber visto su lado más oscuro, ahí se hallaba, diciéndola que la quería. ¿Cómo odiarla? ¿Cómo hacerlo cuando la miraba con esos ojos azules cristalinos? En ellos dejaría que su reflejo se bañase eternamente. Alzó su mano hasta su rostro, su mirada verdosa estaba fija en el precioso lunar que tenía encima de su labio superior y lo acarició con su dedo gordo:

_ Más equivocada no puedes estar, Clarke

Fue complaciente y dulce, a pesar que se moría por gritar a los cuatro vientos cuan puta podía llegar a ser la vida, aun así, le concedió ese beso que le pedía. Existen tantos besos, el primer beso con Lexa, fue tan mágico y lleno de esperanza, un beso que abría las puertas a un nuevo comienzo, sin embargo, ese que había sido tierno, dulce e igual de intenso, para Clarke fue un beso que le colmaba de dolor. Lo que para la ojiverde era un "esto no queda aquí, hablaremos y trataremos de luchar" para Clarke fue una sola palabra, la más puta y no es ese puñetero "pero..." no, era "Fin" cuando Lexa se apartó unos centímetros:

_ No te odio, aun plagada de demonios sombríos, no puedo alejarme de ti, ¿Cómo se puede apartar alguien de su vida? Pero_ puñetero pero, siempre dando por culo como las facturas de la luz_ si estoy muy disgustada y eres la segunda persona en el mundo con la que quiero hablar ahora.

Ahora entendía porque estaba majareta por esa mujer tan inestable, aun después de todo, tenía una capacidad de amar infinita y aunque muchos opinen que no, pero también el de perdonar, Costia la despreció en innumerables ocasiones y la amó hasta el último momento, aun después de haber manifestado su enfado, con su beso le demostró que aún se moría de amor, casi le hubiera sido más fácil que le odiara. Clarke asintió con la cabeza y vio cómo se alejaba, conteniendo esas lágrimas ardientes que contenían sus ojos. Escocían, todo su interior era dagas, a cada paso más alejadas más cuchilladas que cortaban su alma. ¿Cómo se puede alejar alguien de su vida? Cuando solo es capaz de sacrificarse por quienes se ama.

No entró ni en el despacho de su abogado, directamente, este ya le esperaba en la calle con todo el papeleo. El avión privado ya estaba listo para despegar. Todo a punto, todo listo, todo en sus manos nada más salir de su boca en forma de orden tenaz. Entonces en su cabeza escuchó lo que muchas veces le decía su hermana.

"Sé que el dinero no da la felicidad, pero facilita mucho la vida, la gente habla de anhelos, de amor y mariconadas, pero al fin y al cabo, el poder es el poder. Mientras que van por la vida diciendo, salud y amor, en el fondo tienen un lado codicioso y por esa codicia los tendremos a nuestros pies, por la grata recompensa que tendrán después"

Buenos Aires, se puede decir que Lexa estaba fuera de su confort. El aeropuerto quedaba a tomar por culo del barrio Caballito, justo uno de los edificios que había en la Av. Rivadavia. El portal del viejo edificio se encontraba abierto, así pues aprovechó y se tomó la libertad de entrar directamente, justo hasta la tercera planta y sin ascensor. Era un edificio ruidoso, por lo menos algunos vecinos. Se plantó en una de las puertas del tercero y aporreó la puerta. No abría ni dios, volvió aporrear más fuerte y en esta ocasión si abrieron, pero no la puerta que esperaba, si no, una de las vecinas, una ancianita bajita, delgadita y canosa. Le preguntó algo en español. La ojiverde maldijo haber estudiado chino y no el hispano. Sacó el papel y pregunto:

_ ¿Jóvita Acosta?

La ancianita señaló a otra puerta. Lexa asintió con la cabeza en forma de agradecimiento y se acercó a la otra puerta que había al final del pasillo. Carraspeo, tomó aire, como si aquello le facilitara una mierda, más bien le podía el pánico, antes que la ira, el odio o la indiferencia. Como hizo anterior mente aporreó la puerta. No abrió alguien que esperaba ver, más bien fue un niño, moreno, de ojos castaños, tendría como seis años o siete, un año menos que Anya, el caso es que solo con esos detalles, ya puso ojos como platos e hizo cuentas mentales:

_ No me jodas, otra vez no, ni que fuera la latín lover máquina de bebés

_ Marcos, ¿Qué te tengo dicho de abrir la puerta sin preguntar?

Se escuchó la voz de una mujer hablando en español, aunque se distinguía a la perfección su acento extranjero. Cuando la chica apareció por el pasillo, palideció por completo. La ojiverde le miró de pies a la cabeza. Estaba más delgada, se había cortado el pelo hasta la mitad, iba vestida de forma muy sencilla, casi siete jodidos años, en los que Lexa se había culpado y odiado... bueno, en ese instante sí que notó como la ira fluía de forma intensa, sobre todo cuando la escuchó decir:

_ Alicia_ dio tres zancadas hasta el niño, le agarró de los hombros y le dijo_ ve a tu cuarto

El chico asintió y fue hasta su cuarto:

_ ¿Qué esperaría un fantasma? Ver a otro_ dijo con cierta acidez_ que muerta más viva tengo ante mí, cariño ¿Echabas de menos a tu mujer?

Costia cerró los ojos, cayendo en la cuenta:

_ Lexa

_ La misma_ se apoyó en el marco de la cuenta_ verás, estaba feliz con mi segundo matrimonio cuando llegó unos documentos declarando que estaba anulado, que sorpresa la mía cuando leo que "mi difunta esposa"_ hizo énfasis en eso ultimo_ no estaba tan muerta como creía y que en realidad se cambió de nombre, para desaparecer_ asintió mientras torcía el gesto y le ofreció los papeles del divorcio_ quería que fuera rápido, pero viendo el panorama ¿Cómo le llamaste? Marcos_ se volvió a poner erguida y se cruzó de brazos_ ¿Es... mío?

Costia aún estaba atónita todo había que decirlo y cuando procesó la información, reaccionó rápidamente y negó efusiva con la cabeza:

_ No, es el hijo de la vecina se lo cuido_ miró suplicante a Lexa_ ¿Alicia lo sabe? ¿Sabe dónde vivo?

_ Alicia está muerta_ dijo con amargor_ un accidente de avión, al lado de su mujer, fíjate_ dijo con frialdad_ ¿no pensarías que estaría eternamente enamorada de ti? Ahora que me has aclarado que no es mío, firma.

_ ¿Antes podemos hablar?

_ No

Costia frunció el ceño. Durante un momento se giró dando la espalda a Lexa y se pasó la mano por la cara. Alicia Woods había muerto, el monstruo del que se escondía, había desaparecido, aunque mirando a Lexa Woods, parecía que en esta se había formado otro. Era raro reencontrarse, era raro no ver el amor en su mirada, pero la conocía a la perfección, seguía existiendo esa pequeña aflicción en su mirada, por mucho que quisiera mostrar indiferencia u odio, ira puede, pero odio no:

_ No podía aguantar más la situación_ la encaró igualmente_ Alicia por un lado, con sus manipulaciones y sus chantajes, por otro lado tú, no era fácil y comenzaba a enloquecer. ¿Piensas que no lo he estado pagando? Cada día que estaba lejos de mis hijos

_ Firma los papeles Costia, no te lo volveré a repetir

_ No

_ Estoy siendo indulgente al traerte los jodidos papeles del divorcio, no me hagas llevarte a juicio por abandono de familia

Costia achico los ojos:

_ Eso, las gemelas Woods siempre con amenazas y coacciones

Lexa al final acabó reventando, entró en el piso, cerró la puerta tras de sí y agarrándola de los brazos la empotró contra la pared:

_ Todos y cada uno de los días_ decía, mientras que traicioneramente caía una lagrima por su mejilla_ me levantaba creyendo que habías muerto por mi culpa, cada instante me culpaba de que mis hijos, "tus hijos"_ volvió hacer énfasis en eso ultimo_ habían perdido a su madre. Resulta que estabas viva, cobardemente huyendo de mi hermana_ tensó los músculos de su rostro_ te dije que te ayudaría si necesitabas ayuda, en vez de eso decidiste huir ¿qué pretendes queriendo hablar conmigo? ¿Qué entienda como una madre podría abandonar a sus hijos?_ Costia cerró los ojos, de nuevo la presión Woods, solo que en esta ocasión, Lexa era quien tenía la razón, la ojiverde siseó con la lengua, le giró mirando contra la pared y la volvió a empotrar contra la pared para comenzar a susurrarle entre dientes_ 1º fue la negación, incluso cuando las autoridades tiraron la toalla para buscar tu cuerpo, yo me negaba a abandonar, quería recuperarte, quería tenerte de cuerpo presente para suplicarte que me perdonaras, aunque no pudieras responderme. 2º fue la ira, ¿sabes cómo desahogué mi ira? En un principio busca mujeres parecidas a ti, me las follaba duro pensando que eras tú, en mi fantasía enfermiza las decía de todo menos bonita, luego se convirtió tan común que me las sudaba que me llorasen, me abofeteasen incluso esperaba que me pegaran más fuerte_ comenzó aflojar su agarre, pero seguía manteniendo aprisionada contra la pared_ tuve que esperar años, una eternidad en la segunda fase hasta que llegó quien me hizo entrar en la 3º Dolor y no te imaginas cuanto

Costia temblorosa se separó unos centímetros de la pared, sentía intenso el cuerpo caliente de su aún esposa. A la que echó de menos durante mucho tiempo:

_ Te queda la cuarta

Lexa rompió a llorar y apoyó su frente en su hombro:

_ ¿Qué cuarta? ¿Cómo aceptar la perdida? Estás viva, ¿Cómo aceptar que fuiste capaz de abandonar a nuestros hijos? Porque ya no se trata de mí, si no, de ellos

_ No del todo

Respondió Costia con un susurro, a lo mejor la cagaba si le decía aquello. Solo por evitar que Alicia la descubriera no se acercaba a Lexa, pero cada año viajaba en el cumpleaños de Aden, de Anya y desde lejos los observaba:

_ ¿Sabes de lo que me di cuenta en muchos de sus cumpleaños?_ preguntó girándose_ Que no solo estaba ausente la madre fallecida, la importantísima Lexa Woods estaba de viaje por trabajo ¿Eso tampoco es abandonar a un hijo?

Lexa se separó y se apoyó al otro lado del pasillo, dejándose caer, sentándose sobre el polvoriento suelo. Costia se sentó enfrente y esperó que fuera Lexa quien respondiera a la última pregunta que había formulado:

_ ¿mamá? ¿Mami? Aden no dejaba de preguntar por ti y no sabía que responderle, cuando dejé llevarme por la ira, llegó el día que le grité, mamá no va a volver porque está muerta_ se abrazó a las piernas_ a un niño, le grité porque te echaba de menos_ Costia se quitó la humedad de sus mejillas con el reverso de su mano_ Estaba llena de odio, como Gustus, como Alicia_ negó con la cabeza_ creí que lo más prudente era apartarme, no quiere decir que he dejado de quererlos, los amo, son mis raíces, las dos únicas razones por las que no acabe tirándome por ese puente, cada año que iba para autocastigarme, reviviendo como habías acabado ahí_ miró suplicante a la chica morena_ por favor, Costia, solo quiero seguir con mi vida, quiero olvidar el pasado, quiero empezar de nuevo, quiero por una vez en mi vida una pizca de felicidad, firma los papeles y tendrás tu libertad

Costia se dio por vencida y comenzó a revisar los papeles, si de algo aprendió de Alicia Woods, era mirar antes de firmar, hizo bien, puesto que estaba en desacuerdo con uno de los términos y comenzó a negar con la cabeza:

_ No

_ Costia, no discutamos, firma

_ Ahora que sé que Alicia no volverá a mi vida, pienso regresar, no voy a renunciar a mis hijos

_ Renunciaste el día que decidiste hacernos creer que estabas muerta, firma

_ No, hasta que vea que tenemos custodia compartida

Lexa volvió a endurecer su rostro:

_ Sabes que tienes las de perder

_ Demuéstrame que no eres Alicia, demuéstrame que no usaras juego sucio para quitarme el derecho de verlos, no hagas conmigo lo que no fuiste capaz de hacer con Angelien, tú me comprendes, sabes que es lo que se siente cuando hay algo tuyo lejos

Lexa se mantuvo en silencio durante unos minutos, esos momentos en el que veía la impasibilidad en su gesto, pero en el fondo sabía que estaba reflexionando lo que le había dicho, por fin reaccionó levantándose y sacudirse el trasero para quitarse la suciedad de los pantalones:

_ Espero noticias de tu abogado

Dijo antes de dirigirse a la puerta. Una vez más se notó la diferencia entre Lexa y Alicia, la segunda nunca le hubiera dado la oportunidad de negociar. Hubiera sido tenaz, hasta el punto de hundirla en la miseria, antes de salir volvió a girarse:

_ Pero que sea rápido, me gustaría casarme de nuevo con Miss..._ negó con la cabeza antes de corregirse_ con mi otra mujer

Mientras una apuraba a su primera esposa, ahora llamada Jóvita Acosta, para que le devolviera la libertad y casarse de nuevo con Clarke. Raven y la ojiazul, habían conseguido llamar a un taxi y marcharse por la sordis, alojándose en un hotel barato, pagado a mano, el uso de tarjetas estaban restringidas. La rubia sabía que Lexa la buscaría.

Raven fue a por algo de comida a un restaurante de comida rápida, cuando regresó a la habitación se encontró a Clarke acurrucada en la coma y en pleno sollozos. La castaña dejó las bolsas de comida encima la mesa y se tumbó junto a Clarke:

_ Toda la vida lleva sufriendo el menosprecio, la traición, el abandono, le prometí que no le traicionaría_ decía entre sofocos_ mírame, en un hotel mugroso, huyendo de mi pasado, soy una más de las tantas personas que le han hecho daño

_ los protegemos de Pike

Clarke la miró con enfado:

_ Pike, él es quien nos ha hecho esto ¿es qué tenemos que estar huyendo eternamente?

_ No, mientras que no acabemos liadas con alguien famoso, ya has visto el momento a lo Notting Hill todos los fotógrafos y cámaras grabando en la puerta de su casa

La rubia se abrazó a su amiga:

_ Y ahora ¿Cómo sigo con mi vida? Cuando mi vida está lejos de mí

_ Venías a Carolina del sur por una razón_ le dijo acariciando su pelo rubio_ venias en busca de tu padre. Busca a Jake

Clarke se miró el anillo que llevaba en el dedo, ese en el que decía que aún seguía casada con Lexa Woods:

_ ¿Qué hago con esto?

_ Pues si lo dices por el anillo, oye si no quieres esa pijeria ya me la quedo yo_ dijo bromeando_ cuando se calmen los medios, quizás podrías volver a recuperarla.

_ El caso es que temo lo que me pueda encontrar después, mi esposa la que empezaba a sanar o al monstruo que habré terminado de crear

7tm

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