Lía

Dan dice que necesita ocultarse y Gregor como "buen samaritano" lo ayuda. Segundos después veo como un toro, alías Tyrone, viene a paso rápido con la fuerza de un tren asesino.

—¡Cabeza de tornillo! —grita mientras lo busca.

No puedo dejar que los encuentre o mi novio estará en problemas, así que me pongo en su camino.

—¡Oye gato, deja de gritar y busca tu caja de arena! —le aclaro y luego sonrío burlándome —debe estar bien sucia —me río.

Entrecierra los ojos y se detiene.

—Chica bruta, eres insoportable ¡Muevete de mi camino! —exije.

—Sobre mi cadáver —levanto los puños y sonríe, así que levanto una ceja ante su reacción —¿Qué?

—Cavarás tu propia tumba...

Ruedo los ojos.

—¿Otra vez con eso? "Cavarás tu propia tumba, te mataré, te violaré" ¿No tienes nuevas amenazas? —sonrío —cavernícola.

—Lía Channy —expresa calmado —si no te mueves... —me agarra del cuello de repente y me sobresalto —¡¡Te tiraré por la ventana!! —me empuja hasta allí y puede ver el precipicio.

—¡Tú, maldito gato! —pataleo e intento quitar sus manos de mi cuello —¡Suelta!

—Pídelo por favor y lo consideraré —expresa tranquilo mientras la mitad de mi cuerpo está del otro lado de la ventana.

—¡¡Estúpido gato!! ¡¿Quién te crees que eres?! —me quejo aunque eso no ayuda en mi escape —¡¡Aparta!! —giro un segundo la vista.

Ay, no debí mirar hacia abajo ¡Esto está muy alto!

¡¿Por qué siempre termino con la cabeza en un lugar peligroso?!

Al menos esta vez no es el retrete...