263. "La decisión correcta"

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Adelaine

Entro abruptamente al cuarto dónde está Tyrone y camino hasta el furiosa.

—¡¿Qué te pasa?! ¡Haz algo!

Se acomoda el moño mirándose al espejo.

—¿Cómo se pone esto? —hace lío y se ahorca un poco, así que se lo desarma otra vez.

—¡No me ignores! —continua sin mirarme —¡Y es así! —me quejo y se lo arreglo, casi acogotandolo.

—¡Ay ya entendí! —se aleja —¿Qué haces aquí? Aún no es la hora —me señala sin observarme —y te traerá mala suerte mostrarme el vestido.

—Han pasado tres días desde que te conté la situación y no has hecho nada ¿De en serio vas a simplemente callar y ya?

—¿Y qué quieres que haga?

—Decir que no, por ejemplo —levanto una ceja. Me ignora así que agrego —¿Otra vez planeas romperle el corazón a Bruno?

—Sí, eso es correcto.

—¡No seas estúpido, Tyrone! —lo agarro de la ropa —¡Deja de ser cobarde, enfréntate a tus miedos!

—¡No son miedos! —me aparta frunciendo el ceño y baja su vista —. Es que... —presiona los dientes —mi padre.

—Entiendo el respeto que le tienes a tu padre, pero se acabó, corta el cordón umbilical, ya estás grandecito ¡Toma tus propias decisiones!

—No puedo simplemente de un día para el otro cambiarlo todo.

—Sí puedes, porque ya cambio —lo agarro de los brazos —escuchame —me alejo cuando levanta la vista —¿Acaso quieres tener un montón de Tyroncitas y Adelaicitos corriendo por ahí? ¡No! No tiene sentido —se ríe y yo sonrío —¿Ves? Suena hasta gracioso, porque es imposible.

—Te faltó agregar los tres perros y mi gato —se cruza de brazos.

—El gato no va a venir —le sigo el juego.

—Pe... pero mi gato, Lucky estará triste —se ríe.

—Bueno, volviendo a la realidad —dejo de sonreír —espero que mi amigo con beneficios deje de ser idiota o nos iremos todos al tacho, porque sino de en serio tendremos una casa, cuatro animales y muchos nenitos con sus niñeras —levanto un dedo —. Controla tú vida, no dejes que la controlen, yo estoy atada de pies y manos, así que depende de ti —me giro hasta la puerta.

Frunce el ceño.

—Eso que dices parece tan lejano, como podría yo...

Me doy vuelta para mirarlo y le sonrío.

—Está bien lo que decidas, confío en ti, somos amigos y eso no va a cambiar, pero espero que tomes la decisión correcta.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro