Capítulo LXXV

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng


— Eso que lleva...

— Es un machete — termina Derek por mí.

— ¿De dónde coño lo ha sacado?

— Su padre los colecciona — dice Alan. Está muy preocupado y empieza a caminar por la sala. — ¿En qué coño está pensando este chico? No me entra en la cabeza. Le conozco desde que éramos pequeños, no éramos grandes amigos pero nunca le vi capaz de hacer algo así.

— Ha perdido completamente la cabeza — dice Katy tapándose los ojos.

— Lo que no entiendo es qué hace aquí, si supuestamente no me relaciona con su detención.

— Lo sé, pero... — Comienza Christian.

— ¿Pero?

— Creo que le gustabas, Luna.

— ¡¿Qué!? — Exclamamos todos a la vez.

— En comisaría dijo que tenía que haberte escogido a ti en vez de a Mary. Así no habría tenido tantos problemas.

— Lo lleva claro si cree que habría salido con él — me da una arcada y Derek acaricia mi espalda.

En serio, es repugnante, ¿cómo puede pensar que tendría algo con él? Desde la primera vez que le vi hubo algo en él que no me gustó. No sólo su chulería y soberbia, había algo más... oscuro. No quise juzgar sin conocer pero esto confirma mis sospechas. Ese chico no está loco, está enfermo.

— Un psicólogo le ha analizado y ha llegado a la conclusión de que os tiene envidia.

— ¿Envidia? — Dice Derek riendo.

— Sí. Vosotros tres habéis conseguido a las chicas muy fácilmente. Habéis desplegado vuestros encantos y las habéis conquistado.

— Bueno... A mí Alan siempre me ha gustado.

— Eso puede pasar, pero la primera persona que conoció Luna fue a Justin. Fue encantador con ella, ¿o me equivoco?

— Muy cierto — le digo mirando a Justin.

— No lo hice a propósito, yo soy así — Justin se encoge de hombros — no entiendo por qué es un problema.

— Y no lo es, pero con Luna te mostraste tal y como eres, encontraste una persona a la que no ocultarle nada ni con la que tuvieras que aparentar. Ella te aceptó tal cual. Y en cuanto a ti — dice señalando a Derek, — directamente no hiciste nada pero sí fuiste testigo de todo lo que le hicieron a Luna y aún así ella te perdonó.

— Perdona, Christian, pero ¿cómo sabes todo esto? — Le pregunto, no entiendo cómo puede saberlo, a no ser...

— El director y varios profesores han venido a declarar a comisaría. Me han hablado de la buena relación que tenéis como grupo y de lo enamorados que estáis Derek y tú. Y también nos contaron los episodios de bullying que sufriste y quién te lo hizo.

— Fui un estúpido y lo siento, te pediré perdón un millón de veces si es necesario — dice cogiendo mis manos.

— No es necesario, este tema ya está zanjado — le digo a Christian, — no entiendo a qué viene sacarlo de nuevo.

— No me entiendes, Luna. No estoy sacando el tema ni metiendo mierda, si es lo que piensas. Sólo quiero que entendáis la forma de pensar que ahora mismo tiene Luke. Derek se portó fatal contigo y aún así le has perdonado y sois una de las parejas más felices. Justin se convirtió en tu mejor amigo al segundo día de clase, y Alan ha conseguido todo lo que quiere sin tener que abusar de su clase social.

— Y él, siendo rico, guapo y famoso — hago comillas con los dedos — por ser la estrella del equipo... No ha conseguido nada.

— Exacto. No tiene novia, ni amigos y ahora le odia todo el mundo.

Nos quedamos en silencio, es algo complicado de entender.

— No penséis que tenéis algo de culpa porque no es cierto. No creo que vaya a por vosotros porque su obsesión sigue siendo Mary, aún así es mejor que no salgáis solos. Luna, no es buena idea que te quedes aquí sola, sé que tus hermanos se han ido.

— Voy a mudarme con Derek y Katy.

— Bien, tened mucho cuidado, os iré informando — dice mientras empieza a recoger sus cosas.

— ¿Y qué pasa con Mary? — Todos me miran cuando hago esa pregunta. Lo sé, sigo siendo tonta por preocuparme por ella pero hay un loco con un machete por ahí suelto.

— Tiene protección policial pero parece que se lo toma como un juego, no para de salir y despistar a los policías.

— Ella verá, pero es un asunto muy grave — dice Derek negando con la cabeza.

— Cuando tenga más noticias os llamaré — mira a Justin por última vez y se dirige hacia la puerta. Voy tras él y le acompaño.

— Christian — le llamo cuando estamos fuera de casa — esto no va a acabar bien, ¿verdad?

— No lo sé. Quiero pensar que no pasará nada pero no voy a mentirte, no sé cómo va a terminar todo esto. Te ruego por favor que tengáis cuidado, todos vosotros.

— Lo tendremos, muchas gracias por tu ayuda.

Cierro la puerta con llave y vuelvo al salón.

— Luna, cariño, es hora de irnos — dice Derek cogiendo mi mano. Subimos a por mis maletas, nos despedimos de los demás y, mientras cargan mis maletas en el coche, echo un último vistazo a mi casa.

— Hasta pronto — digo en un susurro.

Olivia me ha preparado la habitación de invitados y Derek y Katy me ayudan a instalarme. No tardamos mucho, como doblé bien toda la ropa enseguida llenamos los cajones y las perchas del armario.

Me han hecho también hueco en el baño y puedo dejar mis cosas, no tengo muchas, pero al menos el champú, el gel y mis cremas no están por el medio.

— Sólo tengo una norma — dice Olivia cuando nos sentamos a cenar — en estos días queda prohibido ver las noticias. ¿De acuerdo?

Sé por qué lo dice así que asiento con la cabeza. Yo también prefiero no ver nada, si pasa algo o hay cualquier novedad Christian nos informará.

No tengo mucho hambre pero me como todo mi plato por no hacerle el feo a Olivia.

Me ofrezco a ayudar a recoger y cargo el lavavajillas.

— Olivia...

— Sí, pero no sé por cuánto tiempo podré ocultarlo, cariño.

— ¿Cómo sabías...?

— ¿Qué no querías que se enterasen tus hermanos? — Dice interrumpiéndome.

Asiento con la cabeza.

— Me he puesto en tu situación y sin estar ellos aquí... Imagino que no quieres que se preocupen pero estás a mi cargo, Luna, y no sé por cuánto tiempo se lo puedo ocultar. Está en todas las noticias y tus hermanos no están en otro continente.

— Y aunque lo estuvieran, esto tiene pinta de ser noticia internacional.

— Probablemente.

— Vale, esta noche les mandaré un mensaje y se lo diré.

— ¿Quieres que esté contigo?

— No hace falta, pero muchas gracias. Se van a poner muy nerviosos de todas formas...

— Anda, sube a tu habitación, mañana tenéis que madrugar.

— Buenas noches, Olivia — le digo dándole un abrazo.

— Buenas noches, cariño.

Salgo de la cocina y subo las escaleras. Derek está esperándome en la puerta de mi habitación.

— Se lo voy a contar, cuanto antes lo sepan mejor.

— Vale, ¿quieres...?

— No, pero gracias. Buenas noches, pequeño.

— Te quiero pequeña, descansa.

Me acerco a él, le doy un suave beso en los labios y, ya de paso, le toco un poco el culo. Sonríe y me mira de manera lujuriosa. Esto de vivir en la misma casa puede ser divertido.

Justo cuando cierro la puerta recibo un aviso de videollamada.

— ¡Hola chicos!

— ¡Hola preciosa! Qué habitación tan bonita.

— Es la habitación de invitados, es grande, ¿verdad?

— Sí, ya veo que tienes todo colocado, no tienes las maletas por el suelo.

— Derek y Katy me han ayudado, lo hemos hecho en poco tiempo — le digo a Tom mientras me tumbo en la cama. — ¿Dónde está Sam?

— ¡Estoy aquí! — Aparece en la pantalla con una toalla rodeando su cintura. Acaba de salir de la ducha. — ¿Qué tal el fin de semana?

Oh oh, la pregunta del millón.

— Pues el sábado muy bien, como recordaréis, las chicas vinieron a verme y empezamos la fiesta desde por la mañana. Jugamos a la play, al monopoly, al trivial, al cluedo, vimos American Pie, El Gran Showman, cantamos la B.S.O de la peli y bebimos mucho.

— A ver si adivino, esta mañana os habéis levantado con una resaca monumental.

— Pues un poco sí — les contesto riendo. — Pero ya se nos ha pasado.

— ¿Y hoy que habéis hecho? — Pregunta Tom.

Son demasiadas preguntas. Sabe que estaba con las chicas y teníamos resaca. Es mejor que lo cuente antes de que se enteren por otra persona o por las noticias.

— Os mentiría si dijera que nada, pero sí hemos hecho algo. Hemos conocido al amigo de Justin, se llama Christian, ha estado en casa.

— Ya...

— Luke se ha escapado de su casa y no saben dónde está. Le han puesto en busca y captura porque... porque lleva un machete y anoche estuvo rondando por fuera de casa.

— Pensé que era una noticia fake — dice Sam tras unos momentos de silencio.

— No quería decíroslo todavía, pero imagino que habéis visto las noticias.

— En la televisión no, pero en el móvil sí, no paran de saltar alertas — dice Tom. — Pensamos que eran falsas pero por lo que veo no es así.

— No, pero está todo controlado. La policía le está buscando y no creo que tarden en encontrarle, no es un pueblo muy grande. Antes de que digáis nada, sí, tendré cuidado, todos lo tendremos. He prometido que no saldré sola y eso haré, Derek o sus padres vendrán siempre conmigo y con Katy. Ninguno del grupo estaremos nunca solos.

— Nos tranquiliza oír eso, aún así, me gustaría hablar con Christian. ¿Te importa si le pido su número a Justin?

¿Cómo tienen ellos el número de Justin? Ah, vale, por la fiesta sorpresa. Deben tener los números de todos mis amigos.

— Claro, él os lo dará. ¿Vosotros qué tal? — Pregunto intentando cambiar de tema.

— Bien, agotados, mucho trabajo y poco avance hasta el momento — dice Sam poniéndose una camiseta.

— Tened paciencia, prácticamente acabáis de llegar. No queráis hacerlo todo deprisa y corriendo, tomaos vuestro tiempo y que avance lo que tenga que avanzar. Ya estáis allí, ahora disfrutadlo y seguid trabajando duro.

— A sus órdenes, jefa.

Los tres nos reímos. No se lo han tomado tan a la tremenda como me esperaba, aunque a saber cómo se sienten y lo que dicen cuando colguemos.

— Venga, acuéstate ya — dice Tom un rato después. — Ya es tarde y mañana tienes clase.

— Sí, al menos no me queda mucho para coger vacaciones. Tres semanas y ¡libertad! Aunque queda pasar la época de exámenes.

— Seguro que apruebas con muy buena nota, por algo llevas todo al día.

— Eso es verdad. Mañana hablamos, ¡dormid bien!

— Igualmente, preciosa.

— Dulces sueños, hermanita.

Nos mandamos unos besos y colgamos. Apago la luz y cierro los ojos. Después de esta conversación con mis hermanos estoy tranquila.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro