Cierro mis ojos esperando que esto sólo sea un sueño pero está parado frente a mi con algunos moretones en su rostro que yo misma hice.

-Creo que yo mejor me voy.- habla Sophie huyendo de ahí.

Cierra la puerta dejándonos solos en la casa.

Camino a la ventana, no sé que hacer, siento su presencia a mi lado.

-No puedo creer que estés aquí, no sabes las ganas que tengo de abrazarte pero te fuiste sin decir nada.- me mira a los ojos.- No tienes idea de lo mal que la he pasado, han sido días horribles en los que no consigo dormir por pensar en ti, te amo tanto que duele.- se le cae una lágrima.- Necesito una explicación.

Paso las manos por mi rostro.

-Dante tú eras el hombre perfecto para mí, siempre soñé en tener un chico así de maravilloso a mi lado.

-Entonces que cambió.- toma mis manos.- Mírame, te amo más que a nada en este mundo.

-No lo entiendes.- quito mis manos llorando y golpeo la pared, me mira asustado.

-Qué ocurre?.- me abraza.

Lloro en su pecho, lo apreto con todas mis fuerzas, extrañaba tanto sentir su cuerpo, pero me aparto.

-Dante, tú y yo estamos condenados a no poder estar juntos.

-Nadie nos lo impide.

-Nuestras familias sí, vez como tengo mi rostro y como tienes tú el tuyo.

-Me lo hice peleando con una chica que es hija de.- se detiene al ver la herida que le muestro, se toma la cabeza dando vueltas, camina desesperado casi sin sacar el aliento.- No puede ser verdad.- me mira llorando sin parar.

-Soy Fiorella Marchetti y tú eres Dante Marchisio, estamos condenados, esto es lo que somos.- indico mi herida.- Balas, armas, odio y muerte.

-Me niego a creer esto.- se sienta en el sofá viéndome con dolor.- Esto es peor que la muerte.

-Ni te imaginas el sufrimiento por el que he pasado, esa noche te vi en el hospital dando ordenes para matar a mi hermana, por suerte no lo lograste ni tampoco pudiste matar a mi mejor amiga, la latina fue más rápida.- sonrío cansada.- Fue un hombre de mi padre quién mató a tú hermano, no fue Gabriele, él intentó salvarlo, por el amor que me tienes déjalo en paz, además la latina se va a su país así que ahora podrán volver a hacer lo que hacían antes de mí.

Me gano de rodillas a su lado acariciando su rostro con ternura.

-En que nos convertimos Fiorella, somos asesinos, casi te mato ese día, si tus chicos no llegan hubiese jalado del gatillo, si te hubiese matado luego me habría matado yo, jamás soportaría el hecho de haber matado a la mujer que amo.- me toma de las manos y hace que me siento sobre él quedando frente a frente. Nos abrazamos con todas las fuerzas, ambos lloramos en el hombro del otro.- Perdóname por todo el daño físico y emocional que te causé.

-Perdóname a mí por no haber sido sincera contigo, pero me tengo que ir, casi nos matamos, no quiero que esto sea peor.- tomo su rostro en mis manos, respiro profundo.- Te amo, pero tengo que irme, es obvio que no podemos estar juntos.

-Por favor no te vayas, he sido un perro contigo, déjame arreglarlo, por ti cambio lo que sea necesario, sigamos a escondidas, o acabemos con esta relación pero no te vayas de Italia, puede que seas mi enemiga pero eso no quiere decir que pueda tenerte en mi cama.- sonríe limpiando sus lágrimas.

-Un momento, quieres que siga siendo como era pero que seamos unos amantes?.

-No lo sé, sólo no te vayas, la latina ha formado una gran banda, la diferencia es que de mi parte no te atacaré.

-Mm.- me muevo sobre él.- Ya no tendré al despiadado de los Marchisio detrás de mi para matarme.- lamo su boca.

-Sólo me tendrás detrás de ti en la cama.

-Ay Dante, eso suena tentador pero sabes que no me llevo bien con mi padre, debe estar disfrutando que tengo 18 años para que me marche de su lado.

-Sabes que mi suite te espera, además no hay nada más excitante que follar con tu peor enemiga.- besa mi cuello.

-Veamos que resulta de esto, ahora tengo hablar con mi familia y decir que me voy para ver si realmente les importo.

-Así que esto somos dolcezza, unos enamorados que casi se matan así como en las películas.- roza sus labios con los míos.

-Por respeto a la casa de tu hermana que no te monto ahora mismo.- lo beso intensamente, su lengua baila con la mía.- Ni te imaginas cuanto extrañé estos labios.

-Te necesito.- apreta mi trasero.- Tenemos que resolver la pelea que tuvimos pero debe ser en la cama.- pone sus manos por debajo de mi blusa.

Nos besamos dándonos caricias hasta que me aparto de él.

-Hay que fingir que estamos separados, las chicas ya saben que tú eres el hombre al que amo, ahora debo ir donde Alba antes de que te venga a matar.

-Cuídate dolcezza.- me da un último beso.

Siento que el alma me volvió al cuerpo, pensé que nuevamente íbamos a intentar matarnos pero estamos más enamorados de lo que pensábamos, él lo es todo para mi, debo aprovechar de estar a su lado todo lo que pueda.

Vuelvo a la mansión, me encuentro a Bianca de vuelta, aún le debo muchas explicaciones.

Me voy a mi cama mirando el techo, abrazo la almohada demasiado feliz.

Pongo la mano en mi pecho justo donde él me disparó, su huella siempre quedará grabada en mi, así como también la flecha que puso en mi corazón.

Las chicas me van a odiar pero es esto lo que me hace feliz, el amor prohibido que tenemos, la mala la vida que tengo, las personas que he asesinado, es lo que soy y es lo que somos con Dante, unos mafiosos asesinos que se aman.

Es igual a las películas.

_________________________________________

El amor es fuerte!!