4.5: Las primeras impresiones no son siempre buenas

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*ANTES DE LEER --> ESTE ES UN FLASHBACK DEL DÍA EN QUE JIMIN Y YOONGI SE CONOCIERON, ESTA PARTE DE LA HISTORIA NO INTERFIERE CON LA TRAMA PRINCIPAL (TAMPOCO CON LA ACTUALIZACIÓN DEL 5, ES DECIR, EL CINCO ESTARÁ ENTRE HOY Y MAÑANA),  POR LO TANTO NO ES OBLIGATORIA, ES COMO EL RECUERDO DE YOONGI SOBRE JIMIN, PERO MÁS ESPECÍFICO DE LO QUE SE NARRÓ EN EL 4. ES POR ESO QUE LO COLOQUÉ COMO 4.5. LO IBA A COLOCAR JUNTO CON EL 5 PERO SE ALARGÓ TANTO QUE SI LOS UNÍA SE IBA A VOLVER MUY TEDIOSO. ASÍ QUE AQUÍ ESTA, DESDE YA GRACIAS POR SER TAN LIND*S ♥




(♦)





~2014~





Había muchas cosas por las que Yoongi definitivamente no quería asistir a la fiesta de bienvenida para los nuevos estudiantes de su universidad. Es decir, ¿qué haría él ahí si ya era un estudiante de segundo año? No lo malinterpreten, cualquiera tenía la invitación abierta a la fiesta, pero generalmente eran ocupadas por las nuevas caras de bebés post púber, como les llamaba. Así que, el hecho de que Jin lo haya convencido a ir sólo por el capricho de vigilar a Namjoon, fue casi como si estuviera sucediendo un milagro. No es que a Yoongi no le guste relacionarse con la gente, más bien no le gustaba relacionarse con pequeños niñatos que estaba seguro que no saldrían vivos de esa fiesta que era más como una iniciación al alcohol que una fiesta en sí. 

Y fue como si la vida, Dios o sea quien sea que haya sido, se estuviera riendo de él, riendo en su cara y en su destino por cruzarlo justo con uno de esos niños que lo ponían completamente nervioso, no un nervioso en el buen sentido de la palabra, más bien, un nervioso que estaba al punto del colapso mental, porque en serio, lo único que Yoongi quería hacer con Jimin en ese minuto, era amarrarlo a un maldito árbol y dejarlo ahí mientras él se va por el buen camino, olvidando completamente su existencia. Con ese simple y pequeño pensamiento Yoongi se encontraba manejando por las calles de Seúl sin ninguna dirección en particular, por el rabillo del ojo podía ver un cuerpo removiéndose en su asiento, estaba debatiendo internamente en sacar la cuerda que había detrás de su suv y amarrar al chico con ella al árbol más cercano.

—¿M-manejarás así? —Yoongi escuchó la voz del muchacho en el asiento de copiloto, había curiosidad y ¿nerviosismo? De todas maneras, estaba de acuerdo con aquella pregunta, nadie manejaba cerca de las cuatro de la madrugada con el torso desnudo, al descubierto para cualquier persona que quisiera verlo, aunque a Yoongi le importaba en lo más mínimo si lo veían o no, se encontraba mucho más preocupado del frío y del posible refriado que contraería.

—¿Querías que llevara mi camisa puesta con todo el vómito que tenía gracias a ti Jimin? —Bufó al recordar el bochornoso y molesto momento. ¡Maldición era una camisa cara!

Hace solo unos minutos atrás Jimin lo había vomitado, haciendo que una de sus camisas favoritas quede completamente inutilizable, y por más que le gustara, se deshizo de ella al segundo de haber sido manchada.

—¿Dónde vives? —El tono irritado en su voz era casi palpable.

—¿Uhm? —Cuando se topó con un semáforo en rojo, observó a Jimin a su costado, este se mantenía cabizbajo, jugando con sus propios dedos y mordiendo constantemente sus labios, parecía como si estuviera recibiendo un castigo por parte de él; sentimiento de culpa floreció en su pecho.

—Dime dónde vives, te iré a dejar, suficiente tengo con que me hayas vomitado. —Yoongi trató de no sonar hiriente, pero, de todas maneras, las palabras salieron como si fueran pequeñas cuchillas yendo directamente a la cabeza del menor. Aunque Yoongi no buscaba ser amable, él no tenía ni una pizca de amabilidad fluyendo por sus emociones, ni mucho menos las tendría con una persona a la que había conocido hace apenas unas horas y más encima le había vomitado. Un niñato de 18 años lo tenía al borde del colapso mental, lo único que deseaba era poder llegar a su apartamento, tomar una ducha y yacer en su cama por el resto de los siguientes días.

—Yo, uhm... —Jimin se encontraba completamente nervioso y Yoongi frunció el ceño, notoriamente cabreado, el menor se removió en su lugar, debatiéndose si hablar o no—, yo no lo sé.

Mierda.

—¿¡Qué!? ¡Mierda, cuidado! —Pisó el frenó de manera tan repentina que el cuerpo de Jimin se deslizó hacia delante, y a pesar de que tenía el cinturón de seguridad puesto, le fue inevitable gritarle mientras colocaba un brazo en su pecho, asegurándose de que Jimin no golpeara su cuerpo contra el picaporte.

—Lo siento, lo siento, lo siento. —Los ojos de Jimin estaban cerrados, fuertemente apretados mientras se disculpaba, un sentimiento de pena llenó el pecho de Yoongi, de seguro el menor le tenía miedo—, yo no soy de Seúl, se supone que me iría con Tae, pero no recuerdo como llegar... lo siento.

—¿Quién es Tae? —Ahí estaba, preguntando demás cuando no debería, la vida del desconocido no era de su incumbencia, total, sería la primera y última vez que se verían. De todas formas, las palabras salieron mucho antes de que Yoongi pudiera pensarlas.

—Oh, mi compañero de piso.

—Bien, no queda de otra entonces. —Dobló a la izquierda, tomando la pista que daba hacia el edificio donde vivía, Jimin miró los alrededores por la ventana de su lado y frunció el ceño.

—Hyung ¿a dónde vamos?

—A mi casa.

—¿A-a t-tu casa? —La voz del menor salió más aguda de como Yoongi la recordaba y si las circunstancias fueran otras, ya se estaría burlando, haciendo de este, un momento memorable. —N-no me estás secuestrando ¿cierto?

Yoongi rio y fuerte.

—Bebé, créeme que no necesito secuestrar a nadie para tenerlo en mi casa. —Por el rabillo del ojo lo vio asentir y cuando Yoongi le echó un vistazo completo, pudo ver el rojizo de sus mejillas, aún no podía creer que sea un joven de 18 años, se veía demasiado pequeño e indefenso.

Se detuvo en otro semáforo en rojo y se percató que solo quedaba menos de una cuadra para llegar, las calles estaban vacías a esas alturas de la noche así que se le fue mucho más cómodo aumentar la velocidad y manejar sin preocuparse demasiado en ello, además tampoco se imaginaba el hecho de que la gente lo viera con el torso desnudo y con un niño que parecía poco más un adolescente a su lado que un universitario. Eso hubiera sido horriblemente incómodo.

—H-hyung yo... yo... —Jimin se agarró su estómago mientras se doblaba, el corazón de Yoongi cayó al adivinar sus siguientes palabras—, yo creo que quiero vomitar.

—Mierda, no en mi auto. —A menos de un segundo movió su brazo hasta la guantera que se encontraba frente a Jimin, sacó una bolsa de plástico que por milagro había guardado ahí y se la entregó al menor que de inmediato colocó la mitad de su rostro en ella.

—¿Puedes hablarme de algo? Cualquier cosa sirve —la voz de Jimin se escuchaba ronca y el hilo de miedo en su tono lo delataba—, tengo miedo de vomitar.

—Lo único que quiero hacer en este minuto es golpearte Jimin, ¡Ni siquiera te conozco y ya quieres vomitar en mi auto maldición! —Yoongi no tenía la intención de gritar lo último, pero de todas formas terminó golpeando el volante y maldiciendo, haciendo que Jimin saltara en su propio asiento. —Lo siento cariño, no quise asustarse, solo... no vomites el auto ¿bueno?

—¿Por qué te quitaste tu camisa? —Jimin preguntó unos segundos después de haber asentido a las palabras previas de Yoongi.

—No quiero ir pasado a tu vómito Jimin... —La respuesta de Yoongi fue casi obvia mientras rodaba los ojos. Sabía que el menor preguntaba solo para distraerse y él siendo tan malhumorado no lo estaba ayudando. 

—Hyung mirándote bien tu piel es muy clara, es muy blan- buaaaahgw... —Jimin no alcanzó a terminar la frase cuando toda la bilis comenzó a subir por su esófago hasta llegar a su garganta, obligándolo a formar una arcada que lo dejó devolviendo todo dentro de la bolsa.

—Mierda, maldición, mierda, mierda, mierda, solo, no hagas eso, no lo hagas. —Yoongi abrió las ventanas y al segundo las subió de nuevo por el simple hecho de que la calefacción estaba encendida y un cambio de aire muy brusco podría ser malo para Jimin.

Esperen.

Hizo un mohín cuando se dio cuenta que se estaba preocupando inconscientemente por el menor a su lado, ni siquiera lo conocía.

Jimin vomitó un poco más hasta que llegó al estacionamiento del edificio, apagó el motor y se quedó un breve momento en su asiento mientras observaba al menor que parecía completamente agotado a su lado, como si la energía se hubiera ido de su cuerpo. Se inclinó hacia su lado y tomó la bolsa entre sus manos. Y a pesar de que tenía una mueca de asco, le hizo un nudo con extremo cuidado mientras bajaba y la botaba en el basurero más cercano. Fue hasta la puerta de Jimin y la abrió esperando a que el menor saliera, pero este se encontraba completamente lánguido con la cabeza recostada en el asiento.

—¿puedes moverte?

—Y-yo, todo me da vueltas. —El ceño de Jimin se frunció mientras sus ojos se mantenían cerrados.

—Bien, toma mi mano. —Jimin levantó su brazo sin mucha fuerza, pero Yoongi en vez de agarrar su mano, lo tomó del antebrazo y lo tiró hacia fuera, haciendo que el cuerpo de Jimin chocara con el suyo, desestabilizándolos por un breve momento. La mano desocupada de Jimin se posó de inmediato en su cintura, produciendo una leve corriente eléctrica en esa zona debido a la diferente temperatura de sus pieles.

La temperatura de Yoongi siempre era más baja de lo normal, sus manos estaban la mayoría del tiempo heladas, al igual que su cuerpo, así que sentir la alta temperatura de Jimin sobre su piel era casi adictivo, a pesar de que solo era la palma del menor contra la parte de sus costillas. Su cuerpo respondía como un imán hacia el calor, después de todo, a Yoongi siempre le gustaron más los veranos que los inviernos.

—Yo recuerdo este edificio. —Jimin observó para todos lados apenas llegaron a la entrada del gran concreto, un guardia los observó extrañado, pero a pesar de que no era normal ver a un chico cerca de las cinco de la mañana con el torso desnudo y otro rodeándolo por la cintura como si su vida dependiera de ello, no hizo ningún ademán para detenerlos, conocía a Yoongi y juró haber visto anteriormente al muchacho que se apegaba como un koala.

—¿Se parece al edificio dónde vives? —Yoongi preguntó justo cuando las puertas del ascensor se abrieron. Entró y marcó el último piso.

—Sí, pero el mío es más bonito. —Jimin se acurrucó más a su lado y Yoongi alzó la cabeza riendo.

—Dios, eres un niño, un n-i-ñ-o. —Su risa se hizo más sonora, porque en serio ¿a quién le importa si un edificio es bonito o no? ¿Qué era eso? ¿una pelea de niños de 7mo grado? —no puedo creer que esté cuidando de un niño...

—Hyung, eres bueno en ello. —El menor le dio su aprobación y Yoongi no dijo nada ante aquellas palabras, el ascensor había sonado abriendo sus puertas, indicándoles la llegada al piso destino.

—Woah... —Apenas entraron a la comodidad de su apartamento, Jimin comenzó a girar su cabeza para todos lados, contemplando el amplio lugar, Yoongi se volteó a verlo de una manera divertida.

—Sí, suelo causar ese efecto en la gente. —Le sonrió de lado mientras lo veía abrir los ojos sorprendido.

—Yo no me refería a ti. —El calor pintándose en las mejillas y orejas de Jimin, Yoongi no pudo evitar pensar en lo malditamente tierno que se veía al ponerse así por una tonta broma.

—Ajam... —Fue su último comentario antes de perderse por el pasillo para luego volver con una camisa ligera puesta sobre sus hombros. Jimin seguía parado en el mismo lugar mientras contemplaba lo que veía. El apartamento de Yoongi quedaba en el último piso y solo era compartido por otro apartamento de los mismos; más bien, era una especie de pent-house, era amplio y el diseño minimalista y simple le daban un toque a la elegancia que lo caracterizaba, era de esperarse que un niño como Jimin se sorprendiera de esa manera.

Caminó hacia la cocina por un vaso de agua apostando a que Jimin seguiría en el mismo sitio cuando volviera. Y así fue, el muchacho seguía de pie en el mismo lugar, manos en puños a sus costados.

—Hyung ¿puedo ducharme? Me siento asqueroso. —Yoongi asintió indicándole el lugar donde se encontraba el baño. Jimin entró cuando el mayor le proporcionó un par de toallas y una ropa de cambio, sin embargo, al cerrar la puerta Jimin la volvió abrir minuciosamente, haciendo que solo sus ojos queden a la vista del mayor que se encontraba camino hacia su pieza. —¿Tienes un cepillo de dientes de repuesto?

—Maldición, ¿acaso crees que vives aquí niño? —Yoongi gruñó molesto mientras abría la puerta completamente, haciendo que Jimin se sonroje porque ya se encontraba solo en bóxer, Yoongi no hizo ademán de observarlo, aunque sí presenció el cuerpo completamente tonificado que no concordaba para nada con su cara de niño bueno. De todas formas, siguió buscando en el pequeño estante del baño y cuando encontró un cepillo sellado se lo entregó a Jimin.

Salió dejando solo al menor en el baño, pensando en que él también debería darse una ducha, y a pesar de que Yoongi poseía tres baños más en su casa, no sintió que era necesario usarlos, después de todo el sonido de agua corriendo ya se escuchaba por detrás de la puerta. Observó el pedazo de madera mientras se quitaba la camisa que se había puesto minutos atrás, pensando en que molestar al menor un poco más no le haría daño a nadie.

—¡h-hyung qué estás haciendo! —Jimin trató de cubrirse lo más que podía con sus brazos, pero obviamente, era casi nada, Yoongi lo ignoró de todos modos mientras entraba desnudo a la ducha, quedando a su lado, y ni siquiera tuvo vergüenza en observar el cuerpo del menor mientras era pillado en el acto, porque el cuerpo de Jimin era digno de ser contemplado.

Solo wow, realmente wow.

—Ahorro tiempo Jimin. —Se agachó para tomar el jabón y esparcir un poco en su cuerpo, logrando que en segundos se formara la espuma que se unía al blanco de su aterciopelada piel. A su lado, Jimin lucía horrorizado y no era como si su ducha de pie fuera pequeña, era lo suficientemente grande como para que ambos puedan caber sin rozarse; aun así, Jimin tenía un rostro que a los ojos de Yoongi era malditamente divertido.

—Somos los dos hombres Jimin, no creo tener algo que no hayas visto antes. —El menor seguía observando la pared, esquivando su mirada, completamente incómodo.

—Pero-

—Oh, estás sonrojado. —Jimin agachó su mirada cuando sus orejas se volvieron más rojas que antes ante la apreciación de Yoongi—, ya me viste semi-desnudo todo el viaje al edificio, no tiene nada de malo verme completamente desnudo ¿cierto?

—pero yo-

—¿te gusto cierto? —Sí, Yoongi tenía serios problemas en querer ver al menor completamente sonrojado.

—No yo- ¿qué? —Jimin balbuceó sin sentido mientras que su rostro hervía en vergüenza.

—Estoy bromeando idiota. —Yoongi levantó su mano y despeinó los cabellos del menor—, prometo no mirar demás sino quieres, aunque tienes un cuerpo bonito.

—¡Hyung!

—Lo siento, lo siento —Levantó sus manos—, no diré más.

—Ugh... —Jimin se quejó audiblemente, una cortina de vapor bañaba el ambiente.

—Y ahora que- —Yoongi palideció cuando Jimin se agarró su estómago—, por favor no me digas que quieres vomitar, no en mi ducha. —Abrió la cortina de la ducha mientras posaba una mano en la espalda baja de Jimin guiándolo al inodoro, sin embargo, el menor no se movió.

—Y-yo no me siento bien, yo- yo-

Jimin se estampó contra su pecho, haciendo que pierda el equilibrio y cayera sentado con él encima suyo.

—Mierda, jodido pendejo de mierda. —maldijo por lo bajo, el menor se había desmayado.

Yoongi lo que menos tenía era fuerza, y agradeció a que toda esa musculatura que tenía Jimin no pesara demasiado, el menor se sintió un poco liviano bajo sus brazos. Lo llevó como pudo hasta su dormitorio, ambos cuerpos mojados, haciendo que un camino de agua se forme por donde Yoongi pisaba.

—Mierda, ni siquiera te conozco, maldición... —Yoongi siguió maldiciendo cuando tuvo que aplicar fuerza demás al abrir la puerta de su dormitorio, cuando entró a su cuarto llegó hasta los pies del plumón y sin ninguna delicadeza tiró al menor encima de su cama, haciendo que un ligero sonido de "pop" llenara la habitación. Y mierda, Yoongi lo observó completamente desnudo y lascivo en su cama, tragó duro mientras una pelea se desataba internamente, porque, a pesar de que el menor tenía un cuerpo jodidamente sexy y un rostro que engañaría a cualquiera, lo único que quería hacer en ese minuto era golpearlo, o hacer algo para borrar esa bonita forma que tenía al dormir.

—Agradece que soy un buen tipo, ¡maldición! —Fue hasta su closet y sacó unas toallas, con las cuales se secó y secó el cuerpo de Jimin—, que hubiera pasado si hubiera sido alguien malo ¿eh? ¿te harás el dormido? Jodido Jimin, cuando despiertes estás muerto, completamente muerto.

Si... Yoongi en ese minuto estaba teniendo un colapso mental.

—No aceptes ir con desconocidos, así como así, mocoso. —Peinó el cabello de su frente y luego de eso se vistió para dormir, sin antes, colocar una frazada extra, porque Jimin yacía completamente desnudo en su cama y él no era su niñera para estarlo cambiando así que no lo haría, ¡demonios no!

Apagó la luz de la habitación y el cuarto se llenó de la luz alba del amanecer que estaba recién comenzando. Se acostó al lado de Jimin y dándole la espalda cerró sus ojos. Pasaron unos pequeños minutos y sintió como el cuerpo del menor comenzó a buscar su calor. Rodó los ojos, porque en serio, ¿hasta cuándo duraría su infierno? De todas formas, Yoongi no hizo ningún ademán de alejarlo, porque la temperatura de Jimin era abrigadora, sobre acogedora y completamente pacífica para la suya.

Se quedó ahí, cerrando sus ojos mientras sentía como las pequeñas manos de Jimin se deslizaban por su cintura, apretando su camisa por la parte delantera mientras murmuraba una serie de incoherencias detrás de su nuca. Se quedó ahí, cerrando los ojos mientras Jimin entrelazaba sus piernas con las de él, haciendo de un juego el movimiento de sus pies.

Y Yoongi no supo cuando ni como, y quizás más tarde le echaría la culpa a las copas de licor que se había tomado esa noche, porque en el transcurso de la mañana giró su cuerpo y tiró a Jimin hacia sus brazos, envolviéndolo y recibiendo todo el calor que el menor le proporcionaba. Recién ahí, Yoongi pudo dormir completamente profundo. 




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Gracias por todoooo ♥ espero que les haya gustado y nos leemos mañana, o más bien en unas horas más, quizás suba el capítulo 5 hoy (Jueves) ♥ que estén bien ♥

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