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Dos semanas después

La sirvienta limpiaba otra lágrima que resbalaba por la blanquecina mejilla de Yoongi. Era lo único que podía hacer, ya que pedirle que dejara de llorar era un imposible debido a su situación.

SeokJin entró a la habitación de su hermano, y las sirvientas le indicaron que estaban terminando de alistarlo.

Hoy era su boda con el Khal Park Jimin.

Así es, el escolta de SeokJin tenía razón. El Khal Park aceptó sin ningún pero desposar a Yoongi. En dos semanas hicieron los preparativos, todo sería al estilo y las costumbres de los "Khalasar" - el nombre del ejército y tribu de Park Jimin - además todo fue costeado por el, por lo cual SeokJin no puso ninguna objeción.

Le obsequió un hermoso traje de seda lila a Yoongi, el cual se estaba poniendo en ese momento.

- No ha dejado de llorar señor - le dijo una de las sirvientas. Jin suspiró saliendo de la habitación.

- Terminen de alistarlo y retirense, denle un momento a solas - los sirvientes asintieron y este se retiró.

SeokJin bajó las escaleras encontrándose con su escolta.

- En todo este tiempo no han cruzado palabra, ¿crees que todo salga bien? - preguntó Jin, moviendo sus manos con nerviosismo.

- Todo saldrá bien, los Khalasar no acostumbran tener trato con sus prometidos hasta después del matrimonio.

La boda sería en el campus del norte Daeg, el cual era propiedad de Park Jimin, ya que había conquistado ese territorio hace un tiempo.

Después de unas largas dos horas, bajó una sirvienta a avisar que Yoongi ya estaba listo.

SeokJin miró la posición del sol, dándose cuenta que era las tres de la tarde. Ya era hora.

- Lo esperaré en el carruaje - SeokJin se retiró hasta el carruaje que esperaba frente a su casa.

La sirvienta dio los últimos toques al cabello de Yoongi - Es hora joven Min.

Yoongi se miró al espejo una última vez. Sus pupilas estaban dilatadas a causa del llanto dándoles un brillo sutil. Asintió y se levantó de su silla.

- Vamos.


El gran ejército del Khal Park, estaba acampando en el comienzo del campus, por lo cual SeokJin no pudo evitar emocionarse. Al fin podría acceder a ese ejército una vez su hermano se haya casado.

En cambio Yoongi, veía por la ventana todo lo que lo rodeaba de manera temerosa. Sus manos le temblaban y sudaban.

- Serás un buen esposo - dijo SeokJin, frotando levemente el hombro de su hermano - solo recuerda, jamás debes desobedecer a Park Jimin.

Yoongi apretó sus labios y asintió. Su hermano Jin jamás iba a comprender lo que estaba sintiendo.

Al irse acercando cada vez más al norte del campus, podía ver como un hermoso valle de rosas y árboles perfilaban el camino. Ese ambiente se sentía tan tranquilo y pacífico que, por un momento, Yoongi pudo olvidar el verdadero motivo por el cual estaba allí.

Hasta que finalmente llegaron.

SeokJin bajó primero, pudiendo observar el arreglo al natural del lugar. - No está nada mal - susurró para si.

Estiró su mano para ayudar a bajar a Yoongi, el cual suspiró algunas veces antes de dejar el carruaje.

Contempló fugazmente el hermoso arreglo del lugar. Era todo tan al natural, tan sencillo que, le trasmitió un poco de calma, aunque al comenzar a caminar del brazo de Jin y sentir la mirada de todas esas personas desconocidas para él, sus miedos y nervios volvieron en ráfaga.

Todos comenzaron a murmurar, incluidos los jinetes que estaban a cada lado del camino regado de pétalos florales. Y es que, era la primera vez que veían a personas con ese tono de piel y color de cabello tan blancos.

Además, Yoongi estaba demasiado hermoso, ante los ojos de cualquiera que lo viera.

El traje lila se ceñía a su cuerpo de una manera prudente, pero que demostraba su esbelta figura. Una fina capa colgaba desde sus hombros, la cual llegaba hasta sus tobillos arrastrando levemente las puntas. Sus dedos decorados con finos anillos de oro, y en cabello llevaba una quiara de plata, sencilla pero que resaltaba más su color de cabello.

Si. Min Yoongi estaba más que hermoso. Y obvio que Park Jimin no podía quitar su mirada de él ni un segundo.

Este esperaba a Yoongi, parado bajo un enorme árbol de flores anaranjadas y rojas. La luz del sol le daba ese toque casi mágico a la escena.

Una vez que Yoongi terminó su recorrido y llegó hasta el árbol, todos tomaron asiento.

Park Jimin y Yoongi, cruzaron miradas al fin, pero este último la apartó enseguida. Sentía que si lo veía, rompería en llanto.

- El día de hoy le entrego a mi hermano Min Yoongi, Khal Park.

SeokJin tomó la temblorosa mano de Yoongi, y se la entregó a Park Jimin, quien la recibió apretandola con suavidad.

- El día de hoy, tomo a su hermano Min Yoongi como mi esposo - respondió Jimin, haciendo que Yoongi levantara su cabeza por unos segundos. Era la primera vez que escuchaba su voz, la cual era muy varonil, pero a la vez delicada.

SeoKjin asintió y se retiró para tomar asiento en una de las sillas de la primera fila.

El Dosh Khali - hombre encargado de los rituales, bodas y demás cosas que incluyeran magia Blanca - ya se encontraba parado en medio de aquel árbol, le hizo una seña a Jimin para que se acercaran.

Jimin sostuvo la mano de Yoongi de una manera más cómoda, acariciando con el pulgar sus rosados nudillos. El Dosh Khali dio comienzo, lo que incluía que tenían que soltarse las manos un momento.

Yoongi agradeció mentalmente, ya que sentir el toque de Park Jimin junto con sus sutiles caricias, lo ponía más nervioso de lo que estaba y aumentaba su deseo de salir corriendo de allí.

Sintió la intensa mirada de Park Jimin durante todo el discurso de aquel hombre, por lo que no prestó atención a casi nada de lo que decía este.

Solo hasta el final, cuando tuvo que levantar su mirada si o si.

- Levante su mano, Khal Park - mencionó aquel hombre. Este la levantó, estirandola de forma horizontal hacia el Dosh Khali. Este tomó una daga e hizo un leve corte en la palma de su mano. Todo ante la expectante mirada de Yoongi, quien jamás había visto algo así. La sangre comenzó a salir de aquel corte.

- Levante su mano, Min Yoongi - realizó el mismo movimiento que Park Jimin, con la diferencia que su mano temblaba, y al momento del corte apartó su vista. Solo sentía la sangre escurrir por su mano. - Coloque su mano sobre la del Khal.

Yoongi colocó su mano sobre la de Park Jimin, sintiendo la calidez de esta, y a la vez como sus sangres se encontraban.

El Dosh Khali amarró sus manos con un fino lazo de seda rojo.

- En presencia del sagrado árbol Daeg, yo enlazo estas dos almas, uniendolas para la eternidad. Mirense el uno al otro y digan las palabras.

- Padre - comenzó Jimin.

- Herrero - siguió Yoongi

- Guerrero

- Madre

- Caballero

- Anciano

- Extraño...

Yo soy de él, y él es mío, desde este día hasta el último de mis días. - concluyeron al unísono.

Las personas se levantaron y aplaudieron, sacando a Yoongi de sus pensamientos y trayendolo a su realidad. Se acababa de casar con un desconocido, y de entrar prácticamente a un nuevo mundo muy diferente del que estaba acostumbrado.

El Dosh Khali levantó sus manos y todos volvieron a guardar silencio. Desató el lazo rojo, y Park Jimin entrelazo sus manos, la cuales obviamente estaban manchadas de la sangre de ambos. Las levantó un poco para que todos vieran.

- Puede besar a su Khalesi - mencionó por último aquel hombre. "Khalesi", era el título que se le daba al esposo o esposa de un Khal.

Yoongi sintió su cara arder y sus labios temblar. No tenía idea de cómo besar, y tampoco quería hacerlo. Jimin se acercó a él, llevó su mano libre a la sonrojada mejilla de Yoongi, la acarició y depositó un tierno beso en su frente.

Acto que tomó por sorpresa a Yoongi, quien no supo como reaccionar.











Ya que los primeros capítulos están siendo reescritos, puede que tengan leve errores, así que si es así, pueden hacérmelo saber en un comentario. 🥰









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