San.

Pedir la mano de Grace fue una odisea total, la madrastra se le soltó la boca, lo que ocasiono que el padre de Grace se enterara de la clase de mujer con la que se había casado, mi corderito por primera vez desde que la conozco se armo de valor para correrla del restaurante.

Fue un momento algo extraño, pues terminamos presenciando un futuro divorcio, en mitad de lo que debía ser una cena muy diferente.

—Se que habíamos quedado que me quedaría esta noche aquí, pero mi padre esta algo triste.

Bese su cuello usando mi mano para sostenerlo, mientras mi otra mano se deslizaba por su vientre, cerro los ojos y suspiro cuando sintió mi lengua recorrer su hombro.

—San.

—Te estoy escuchando corderito —se que mi voz grave la ponía un poco mal —pero al parecer su cuerpo tiene otros planes —mi mano se fue debajo de su falda del vestido metiéndose entre su entrepierna haciéndome sentir su humedad bastante palpable —pumpkin esta con él, es un buen compañero.

Se comenzó a frotar contra mi cuerpo, es tan pequeña que su espalda se curva en mi ereccion, estiro su mano para jalar mi cuello y acercarme a su labios, besarla y morder sus labios es ciertamente un vicio. Aprete sus mejillas para detenerla.

—Para lo que quieres debes de pedirlo corderito.

Se dio media vuelta y se quito el vestido, junto con la ropa interior quedando totalmente desnuda, el miembro me apretaba en los pantalones, por lo que le ayude un poco quitándome la camisa, me sente en la cama mirando como se colocaba en cuatro gateando hasta mi.

—San —lamio la costura de mi pantalón donde se abultaba mas —¿puedo?

—Es todo tuyo nena.

Bajo el cierre sacando mi polla, su lengua recorrió la base hasta la punta antes de engullirme, ella había aprendido a ensanchar su garganta, ya que le gustaba rudo, le gustaba cuando empujaba mis caderas de manera frenética. Sus ojos se llenaban de lágrimas por los ahogos pero su entrepierna se mojaba tanto que escurría entre sus piernas.

Jale su cabello para separarla de mi miembro un hilo se saliva bajo hasta sus pechos, sus labios estaban hinchados y su mirada perdida. Me levante arrojándola a la cama boca abajo.

—Sujétate de la otra orilla y no te sueltes corderito.

Obedeció mientras yo frotaba mi erección entre sus tersas y perfectas nalgas, podía ver como se removía ansiosa, el brillo entre sus piernas se anticipaba a mi intrusión. Junte sus piernas entre las mías colocando una mano aun lado y sujetando mi erección con la otra, me introduje lento haciendo que esta posición apretara aun mas mi miembro.

Jadeo de manera fuerte intentando levantarse para que pudiera entrar con mayor facilidad, pero la regrese a su lugar, mi brazo se tenso cuando me metí todo de golpe, ella se aferró a la orilla cuando empecé a moverme mas.

El choque de nuestras pieles sobrepasaba sus jadeos, yo me sentía en la gloria enterrado en su coño que me apretaba demasiado, cada que sacaba la mitad de mi verga para hundirme de nuevo, esta brillaba por los juegos que mi corderito despedía, su clítoris se frotaba en la cama con cada embestida y su cuerpo temblaba mas mientras se acercaba al orgasmo.

Verme desaparecer entre sus nalgas estaba haciendo elevar mi libido a tope, en cuestión de unas cuantas embestidas sentí como me exprimía y jalaba mi orgasmo con el de ella.

Me acerque a morder el lóbulo de su oreja para hablarle ronca.

—Vas a masturbarme con la mano donde esta puesto ese anillo de compromiso, para después montarme y volver a gemir mi nombre hasta que no puedas hablar mas.

Sonrio asintiendo, todo su rostro angelical, todo lo bueno que ella era, se perdía en mi habitación, se convertía en una pequeña zorra, en una amante perfecta, que solo había disfrutado de una sola verga y esa era la mía.

Mi corderito será mía para siempre, sin saber que cumpliré cada uno de sus sueños...

Las que siguen mi canal, saben lo que se viene con estos nenes, pero por el momento llegamos al final con el fic de San, cada vez me gustan mas estos tipos, (no le digan a Hobi) 

en fin un besote en la cola y esperen mas sorpresitas mas adelante!!!