—¿Quién rayos es ese tipo? —Liam sigue echando vistazos hacia el salón mientras salimos—. Ay, no. Ahí viene otra vez.

Me recargo en la barandilla y observo lo que mi mejor amigo señala. El chico rubio de hace un momento viene detrás de nosotros con una gran sonrisa y los brazos abiertos.

Liam se interpone en su camino.

—¿Qué carajos quieres?

Jase se mete las manos en los bolsillos del pantalón.

—Quiero hacer amigos, soy nuevo en la ciudad.

Si, claro. Mi amigo tampoco lo cree porque resopla.

—Ve a hacer amigos a otro lado, además, ¿No estás muy grande como para querer ser amigo nuestro?

Li tiene razón, Jase tiene puesta la camisa de la academia por lo que asumo tiene la misma edad que Ted. Y hablando de él, mi hermano mayor se acerca a nosotros con Harry a su lado.

—¿Qué está pasando? —Teddy fija sus ojos en Jase y frunce las cejas—. ¿Estás molestando a mi hermana?

El rubio le sonríe.

—Solo intento ser agradable.

—No lo estás logrando. —Harry agrega—. Estás molestando a mi papá, al señor Kavanagh y a nosotros porque tenemos qué vigilarte.

—¿A mí? —se señala el pecho—. ¡Pero si no he hecho nada!

Es mi hermano menor el que se acerca a Liam y ambos forman una barrera que mantiene a Jase alejado. ¿Por qué está haciendo esto? ¿Está buscando problemas?

—Solo lárgate. —Liam insiste—. Que nuestros papás se conozcan no significa que tenemos qué conocerte.

Al nuevo no le queda más remedio que dedicarnos una sonrisa burlona y volver sobre sus pasos hasta el salón. Cuando ha desaparecido de nuestra vista, Liam y Harry se recargan en la barandilla.

—Qué molesto. —se queja mi hermanito—. ¿Viste la expresión de mi papá? Lo odia.

Mi mejor amigo se ríe.

—Y parece que mi papá también, aunque no sé por qué. —sus cejas se fruncen—. Tal vez deberíamos preguntar.

Estoy escuchando lo que dicen, pero mi atención se vuelve hacia mi hermano mayor. Sus ojos azules como los de mamá están fijos en las personas que se mueven del otro lado de las ventanas.

—Ted... —lo llamo—. ¿Lo habías visto antes?

Él sabe a lo que me refiero porque niega con la cabeza.

—No. Pero es un Abernathy, lo que significa que su abuelo es el ex jefe de mamá. Y papá. Sin dudas es un junior que cree que puede hacer lo que quiere.

Tres cabezas giran en dirección a Teddy con las cejas arqueadas.

—¿Solo él?

Su expresión cautelosa cambia por una de fastidio.

—Si, lo jodí antes pero ya no. Estoy haciendo las cosas diferentes. —sus ojos se clavan en los míos—. Y no olvides que Jamie era mi cómplice.

¿Cómo olvidarlo? Mi chico estuvo castigado un tiempo y eso lo mantuvo lejos de mi.

—Solo porque quería cuidarte, hermano. Y ahora está del otro lado del mundo, defendiendo a su país.

Teddy hace una mueca y vuelve su atención a los bolsillos de su saco, de dónde saca un cigarrillo y un encendedor, lo pone en sus labios sin encenderlo.

—No se metan en problemas por cinco minutos, ¿Está bien? —dice, y se aleja al otro lado del balcón para fumar.

Vuelvo mi vista hacia el horizonte y la noche para tomar algunas fotos que enviaré a Jamie en mi próxima carta. Dios, de verdad lo extraño mucho. No dejo de pensar que soy la culpable de que se fuera.

Pero estoy aquí para animarme, así que pongo una sonrisa en mi cara y giro para hablarle a Liam.

—¿Y qué se supone que hacen nuestros padres? ¿Por qué les gusta tanto venir a este evento?

Mi amigo señala hacia el salón con las cejas fruncidas y yo sigo su mirada. Ahí, a un lado de la pista de baile están nuestros papás y el de Jamie charlando de algo que parece interesante. Incluso veo a papá manotear.

La curiosidad es muy grande porque me acerco para escuchar lo que dicen.

—Carajo, Luke. Ya dije que no. —se queja papá.

—¿Por qué no? —el señor Sawyer sonríe—. Ella es ahora nuestra jefa, eso te hace a ti la primera dama de la policía.

—¿O el primer caballero? —el papá de Liam contribuye—. No creo que ese cargo exista.

—¡Que no lo soy, carajo! Sigo siendo el detective Grey, no el esposo de la capitana.

—Pero eres su esposo. —dice el señor Kavanagh y suelto una carcajada.

—Lo siento. Buscaba a mamá. —señalo al lugar cerca del bar donde las esposas de estos tres hombres se reúnen.

Ellos esperan hasta que me alejo para seguir discutiendo.

La charla de chicas de mamá no es menos divertida. La señora Sawyer y la señora Kavanagh sostienen botellas de cerveza mientras mamá cuelga una botella de champaña de sus dedos.

—Oh, me encanta que sea así, me hace sentir como una chiquilla. —mamá se ríe—. Pero es diferente cuando estamos en el trabajo.

—Al menos. —la mamá de mi amigo pone los ojos en blanco—. Ethan es demasiado inocente y me preocupa que Liam intente pasarse de listo ahora que comienza a salir con chicas.

Ambas señoras miran a la mamá de Jamie.

—Confien en sus hombres, chicas. Si no han madurado para este punto, lo harán con sus hijos y eso es algo divertido de ver. —toma un sorbo de su cerveza—. Mis niñas hicieron a Luke ver su suerte desde el inicio, y la cosa se puso peor cuando comenzaron a tener citas.

Las otras señoras se ríen, y justo entonces se dan cuenta que estoy ahí parada junto a ellas.

—¿Phoebe, qué haces? —mamá busca con la mirada a mis hermanos, supongo.

—Busco un vaso de agua, tengo mucha sed. —dudo que vayan a ofrecerme una copa.

Mientras mamá pide una botella de agua para mí, la señora Kavanagh palmea mi hombro.

—¿Por qué no bailas un poco con Liam? Dios sabe que ese chico no heredó la timidez de su padre. —yo asiento en respuesta, pero ella sigue sonriendo—. Y mantente alejada de los chicos Abernathy.

—¿Por qué? —no es que quiera fraternizar, pero me parece extraño que todos parecen rechazarlos—. ¿Son problemáticos?

Las tres mujeres comparten una mirada antes de volver su atención a mi.

—Si.

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kat70gr hermosa, muchas felicidades por tu cumpleaños 🥳 Aquí está tu capítulo, espero que lo disfrutes ☺️.

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