45.- No es un adiós, es un hasta luego...

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FIESTA DE GRADUACIÓN. Parte 2/2

Advertencia: Ya que algunas personitas no entienden de que esto es un FANFIC y que nada es real, y por lo tanto se quiere llevar una relación de amigos lo más verdadera posible (ADEMÁS DE QUE ES MI FIC, GRACIAS :3) les digo que habrá sobrenombres y me vale que estemos en el 2020 :), así que te pido que si no te gusta te abstengas de poner malos comentarios, gracias.

Con esto dicho, disfruten de la lectura <3

cuando me metí una cucharada llena de arroz a la boca.

Alcé la vista con la boca llena y mastiqué despacio ante las miradas inquisitivas de mis padres.

— Mucho mejor de lo que te imaginas.— contesté cuando tragué.

— ¿En serio?— preguntó esta vez mi padre sorprendido.

Asentí.

— ¿Y eso por qué?— interrogó mi madre, tanto ella como mi padre habían dejado de comer sus costosos platos de carne y no sé qué cosa a lo vino tinto, desde que había iniciado el pequeño interrogatorio.

Volteé hacia mi costado cuando un mesero pasó por mi lado para atender una mesa de enfrente, el ambiente de este restaurante me hacía sentir un poco incómodo, y no por el hecho de que no encajábamos aquí, porque claramente lo hacíamos. Íbamos vestidos de etiqueta. Pensé bobamente.

Sino que realmente no frecuentábamos este tipo de lugares, pero hoy, era un día especial. Por lo que meritaba comer algo especial, en un lugar especial.

— Él dijo que estaba bien, y que íbamos a terminar una vez que me fuera para no atarme aquí.— respondí cuando mi atención volvió a mis padres frente a mí.

Mi mamá torció los labios en una mueca.

— Vaya.— Acabó de responder en un suspiro.— Que maduro de su parte.

Hice un sonido de afirmación, metiéndome un pedazo de carne a la boca al mismo tiempo que veía a mis padres intercambiar miradas.

— Por cierto, ¿te dijo a qué hora vendrá por ti?— preguntó mi papá.

Negué.— Me dijo que le avisara cuando estuviera listo.

Mi padre asintió dándome una media sonrisa.— Y qué tal están Taehyung y Jin. ¿A qué Universidad se van a ir?

— Bueno, Taehyung se irá a la Universidad de Myongji, aunque no estoy muy seguro qué es lo quiere estudiar realmente, y Jin dijo que iría a la Universidad de Hanyang a estudiar Gastronomía.

— Ay que padre por Jin, supongo que esa escuela es muy cara ¿no?— preguntó mi mamá.

— De por sí la carrera es cara, mujer.

Asentí dándole la razón a mi papá.

Y así fue como nuestra comida se basó en pláticas sobre el plan de mis amigos y en lo que yo quería hacer. Aunque si era sincero, aun no lo sabía, y eso me tenía nervioso y angustiado, porque dentro de poco eran los exámenes y necesitaba enfocarme para saber qué era lo que iba a estar haciendo durante el resto de mi vida.

Y el resto de mi vida era mucho tiempo, por lo que tenía que ser algo que realmente me gustara.

—Y tú, Jungkook. ¿Ya pensaste que quieres estudiar? Los exámenes son en dos meses.

Negué con la cabeza, haciendo que mis papás fruncieran los labios.

— Bueno, puedes pensarlo bien Jungkook.— habló primero mi padre.— Aunque no solo te quedes en pensar.

— Igual y cuando lleguemos a china y veas las Universidades junto con la diversidad de carreras, te ayude a enfocarte.— dijo mi madre emocionada.

Hice una mueca que intenté disimular con un trozo de carne que me metí a la boca.

— Por cierto, Jungkook, qué me dices. ¿Te sientes emocionado por ir a china?— volvió a preguntar mi madre.

— Oh claro que sí.— hablé tratando inútilmente el poder esconder el sarcasmo en mi voz.— Tanto, que no he podido sacármelo de la cabeza desde que me dijiste, y sobre todo, cada vez que paso tiempo con mis amigos, mi novio y gente que es muy agradable aquí.

— Jungkook.— mi papá hablo en tono de advertencia.

Estuve a punto de soltar un ¿Qué?, sin embargo me abstuve de decir cualquier cosa al ver la cara de mi mamá dolida, además de que no era lugar para hacer un escándalo y no quería pelear con mis padres.

— Creo que mejor me voy yendo. — ante el silencio de mis padres, lo tomé como señal de que podía retirarme, así que saqué mi celular y le marqué a mi novio.

Pasaron unos veinte minutos para que Jimin llegara por mí, aunque ese tiempo también sirvió para que las cosas se calmaran entre nosotros, así que pude irme con Jimin un poco más tranquilo.

— Con mucho cuidado.— pidió mi mamá al despedirnos.

— Descuide, lo traeré sano y salvo para que se cambie para el fiesta.— prometió Jimin sonriendo.

Dicho esto, ambos nos metimos en su coche, dejando a mis papás atrás frente a la puerta del restaurante cuando Jimin arrancó el carro.

— ¿Comiste mucho?— preguntó Jimin al detenerse en un semáforo en rojo.

— No, solo unas cuantas cosas.

Jimin sonrió aliviado.— Que bueno, porque después de decirle a mi abuela y pedirle permiso para llevarte.— lo vi reírse como si estuviera recordando algo muy chistoso.— que por cierto no fue nada fácil, decidió que podías ir solo si eras capaz de terminar todo lo que te sirviera, así que no me hagas quedar mal ¿eh? Porque he abogado por ti, porque mi novio no es ningún perdedor.

Reí sin poder evitarlo.

— Vaya, no sabía que eras un presumido.— le piqué el cachete molestándolo, a lo que él trato de morderme mi dedo sin despegar la vista de la carretera.— Oye.— dije riendo al quejarme.

— Solo un poco, cuando quiero serlo.

Negué con la cabeza divertido, me incliné hacia el estéreo del carro y me puse a buscar una estación de radio que más me gustara, por el rabillo del ojo pude ver una sonrisa auto suficiente en los labios de mi novio.

Fruncí el entrecejo ante la expresión de Jimin sin saber el porqué de esta, decidí no darle importancia y mejor me centré en seguir cambiándole a la radio, así que cuando escuché a Stranger de Halsey, me permití perderme entre el coro.

Al llegar a la casa de la abuela de Jimin, me empecé a sentir muy nervioso, demasiado si era sincero conmigo mismo, ¿así fue como Jimin se sintió cuando conoció a los míos? Lo dudaba, pues él había estado sonriente y juguetón, y no lo noté para nada nervioso.

Y si yo creía que mis nervios no podían incrementar, que equivocado estaba, pues los carros estacionados frente a los laterales de la casa, me hicieron saber que había más gente.

— Jimin...

— ¿Sí, Kookie?

— Esos carros...

— Ah, son de mis tíos.— respondió Jimin como si nada, desabrochándose el cinturón y quitando las llaves del auto.

Sin embargo, mi estado de ánimo contrastaba bastante con el de mi novio, quien se le veían tan campante. ¿Qué acaso no se daba cuenta de mi futura crisis?

— N-nunca dijiste que estaría toda la familia.

Al decir eso, Jimin me volteó a ver.

— Bueno, yo tampoco estaba muy seguro de quienes venían, después de todo mi abuela me dijo apenas en la mañana que nos invitaba a comer.— Su vista se posó en la puerta de la casa y después me volvió a mirar.— No me digas que te quieres echar para atrás.

— Claro que no, Jimin. Es solo que estoy muy nervioso.— solté con un suspiro tratando de calmarme.

— ¿Pero por qué?

— ¿Cómo que por qué? Prácticamente me estás presentando a toda tu familia.— Y aunque no quise que sonara como reclamo, mi tono de voz sonó como uno, así que agregué rápidamente.— Necesito unos minutos para agarrar valor.

— Ni que fuera tan malo.— Respondió Jimin sonriendo al voltearse y desabrochar también mi cinturón.— Yo ya conocí a tus abuelos.

— Pues sí, pero solo eran dos personas.— Me defendí.— Además, tú a comparación mía estabas muy tranquilo, podría decir que ni siquiera te preocupaba.

— ¿Y quién dice que no lo hacía?— inquirió formando un bulto con sus labios, uno que me resistí a besar.

Se fuerte Jungkook.

— Fue lo que demostraste.

— Bueno, pero eso no quiere decir que no lo estaba.— respondió orgulloso.— Tenía que aparentar que tenía todo bajo control y creer que las cosas iban a salir bien, así que ahora te toca creerlo.

Resoplé al mismo tiempo que asentía.

— Tienes razón. Si pienso negativamente, entonces las cosas saldrán mal.

— Exacto.— dijo Jimin con una sonrisa al momento que me roso con sus nudillos mi mejilla.— Ahora, qué tal si salimos y nos ponemos manos a la obra.

— Está bien.— Con mi afirmación Jimin asintió agarrando la puerta del carro, sin embargo lo detuve antes de que la abriera haciendo que me volteara a ver confundido.— Beso.

Y con eso alcé los labios hacia él, haciendo que sacara un poco de aire provocando un sonido gracioso cuando se me quedó viendo entre divertido e intrigado, sin embargo no se hizo esperar cuando me agarró de los cachetes y chocó sus labios con los míos.

Y a pesar de que mi intención al principio era solo un pico, no puse mucha resistencia cuando Jimin se dedicó a explorar mi boca entre lamidas y mordiscos, así que con los ánimos renovados me sentí completamente seguro cuando Jimin y yo caminamos tomados de la mano hacia la casa de los abuelos de mi novio.






— ¿Cómo dices que te llamas cariño?

Sonreí tímido hacia la tía de Jimin que me lanzaba miradas al tiempo que acomodaba los platos en la mesa.

— Jungkook.

— Oh cierto, perdóname.— sonrió apenada.— Ando con la cabeza en otra parte.

— No se preocupe.— sonreí hacia ella al mismo tiempo que terminaba de acomodar los vasos sobre la mesa.

Inhalé profundo lo más disimuladamente posible tratando de calmar mis nervios, pues aunque la familia de Jimin se había comportado muy bien conmigo desde que había llegado y me habían recibido como ahora parte de ella, sentía que en cualquier momento podía hacer algo que los hiciera enojar o algo parecido.

Caminé hacia la cocina en busca de algo que pudiera hacer, además de que ahí se encontraba Jimin, y aunque su familia se había comportado muy bien conmigo, aun no me sentía lo suficientemente listo como para andar por aquí solo.

En mi pequeña caminata hacia mi objetivo, casi atropello al primo de Jimin quien era una cosita de 5 años Mingyeon, y si me preguntaban, los primos sí que tenían muy buenos genes, pues a pesar de que el niño aun estuviera muy chiquito podía decir a ciencia cierta que si ahorita no tenía a niñas detrás de él, era seguro que lo harían cuando tuviera 14 y ni decir cuando tuviera 18.

Aunque si tuviera que ser sincero, el primo más guapo de aquí, por supuesto era mi novio.

Cuando lo vi de espaldas con dos refractarios hondos me acerqué a paso rápido hacia él, haciendo saltar sorprendido al picarle sus costados, me volteó a ver con el ceño fruncido, sin embargo una sonrisa apareció en sus labios al ver que había sido yo.

— ¿Todo bien?

Asentí.— Sí, solo quería saber si necesitabas ayuda.

Jimin abrió la boca para decir algo, sin embargo la que habló fue su mamá quién estaba ayudando a la abuela de Jimin a servir la comida en los platos.

— ¿Por qué no te sientas? Después de todo eres nuestro invitado.

— Estoy bien, quiero ayudar aquí.

— Ay Jungkook.— me reprendió con una sonrisa.— Lo mismo me hiciste cuando fuiste a la casa, no dejaste que te atendiera.

Reí apenado.— Es que me da pena.— susurré.

Jimin chisto divertido al oírme.— Déjalo má, está bien que quiera ayudar.

La señora Park negó con la cabeza con una sonrisa en los labios.

— Bueno, en ese caso.— habló la abuela de Jimin quien había sido testigo de nuestra plática, me tendió un plato con comida.— ¿Podrías ponerlo en la mesa, cielo?

Asentí.— Claro.

Lo agarré rápidamente, di media vuelta y volví a hacer mi camino hacia la mesa donde varios ya estaban sentados, entre ellos los más chicos.

— Yo quiere ese.— dijo efusivo con una mano en alto nada más verme con el plato en mano uno de los primos de Jimin, sino mal recordaba se llamaba Chanhee y tenía 11 años.

Volteé a ver a la madre del niño en una seña de aprobación, cuando la vi asentir hacia mí con una sonrisa, entonces me encaminé hacia el niño y le puse el plato frente a él.

Y así hice varias veces mi recorrido de la mesa a la cocina y de la cocina hacia la mesa hasta que terminamos de serviles a los presentes con ayuda de Jimin y de otro primo suyo llamado Junyoung quien era un año menor a nosotros.

Cuando por fin me hube sentado en la mesa sintiéndome satisfecho conmigo mismo por haber hecho algo y ayudado, me di cuenta de que la familia de Jimin era un poco grande a comparación de la mía, pues la mesa era grande, para que cupieran 12 personas en esta y sin embargo se tuvieron que buscar más sillas para acomodarse los que estaban parados, en cambio con mi familia de ambos lados éramos pocos, por lo que una mesa de 12 alcanzaba perfectamente.

Y aunque traté de no hacer mucho contacto visual con las personas que estaban en la mesa, sentí y pillé varias veces a los presentes viéndome de reojo con ojos curiosos, a excepción de los padres de Jimin y de este, pues ellos me regalaban sonrisas tranquilizadoras cada vez que podían.

Sin embargo los que más me veían eran los abuelos de mi novio, y realmente no quería hacerme una mala idea, pues ellos ya eran gente mayor y por lo tanto tenían otro tipo de mentalidad que era muy difícil cambiar a esta altura de su vida.

Así que intenté mantenerme lo más sereno posible y cuando me topaba con las miradas de los presentes, solo atinaba a sonreírles, aunque Mingyeon fue el que se llevó el puesto número uno por verme más y sobre todo reír cuando lo pillaba haciéndolo, sin duda era un niño muy tierno.

— ¿Te gustó mi comida, Jungkook?— me preguntó la abuela de Jimin cuando estaba a punto de meterme un bocado a la boca.

Pronto los pares de ojos no disimularon ni un poco al verme, a la espera de mi respuesta y supe sin ninguna duda de que estaba puesto a prueba.

— Está muy rica.— dije lo más sincero que pude para no parecer un adulador, pues realmente no estaba mintiendo, desde que había llegado a su casa mis tripas habían rugido ante tan agradable olor.

"Mami, al fin encontré a alguien que te hace competencia"

— Vamos no mientas Jungkook.— jadeé sin poder creerlo y volteé a ver a mi novio indignado al oírlo decir eso.

Jimin reía burlón, lo cual solo me hizo querer golpearlo, sin embargo me abstuve de hacerlo, pues no quería quedar como un novio golpeador, así que hice lo que era más conveniente, reclamarle.

— D-deja de decir eso que no es cierto.

— No es cierto abuela, yo lo escuché.

Abrí la boca indignado.— Que mentiroso eres.— dije volteándolo a ver y haciéndole frente, pues Jimin se encontraba sentado a mi costado derecho.

Lo vi abrir otra vez la boca con una sonrisa juguetona bailando en las comisura de sus labios y por poco gruño en advertencia, sin embargo no fue necesario, pues alguien más habló y para mi sorpresa fue alguien que no me esperaba.

— Jimin deja de molestar al pobre.— habló por primera vez el abuelo de Jimin, quién solo había hablado el momento en que llegué a su casa para darme la bienvenida.

Mi novio abultó los labios rendido, sin embargo luego volteó a verme y sonrió.

De ahí en adelante como si esa hubiera sido la señal que todos los presentes necesitaban, la tranquilidad en la mesa se rompió, mostrándome realmente que tan ruidosos podían llegar a ser.

No lo sabía con exactitud, pero justo en ese momento había sentido como si "hubiera pasado la prueba", pues el nerviosismo que hasta ahora hacía presente en todo mi ser se fue dispersando poco a poco al momento en que empecé a disfrutar realmente su compañía, y no es que no lo hubiera hecho en el principio, sino que sentía por inexplicable que fuera, que la barrera se había caído.

Había intercambiado palabras con los abuelos de Jimin, que aunque fueron pocas y cosas triviales fue muy agradable, pues ellos eran muy amables y en ningún momento me habían hecho sentir incómodo, al contrario.

Los tíos haciendo referencia más a las tías también habían sido agradables y no decir de sus primos, que hasta habían hecho que tanto mi novio como yo jugáramos con ellos, así que ninguno tuvo consciencia realmente de la hora hasta que vimos que el sol empezaba a ocultarse, por lo que a las 6:30 salimos de la casa de su abuelos con la promesa de que volvería, aunque lamentablemente no estaba seguro de poder cumplirla.

— ¿Te la pasaste bien?— preguntó Jimin al poco rato de poner el carro en marcha hacia mi casa.

— Claro, son muy agradables.— aseguré, lo vi sonreír satisfecho.

— Me alegro que te hayas sentido a gusto, a decir verdad yo también estaba un poco nervioso, pero me alegro de que todo haya salido bien.

— Es que pensé positivamente.— le guiñé el ojo cuando hice mención de lo que él me había dicho antes de entrar a la casa.

— Atrajiste buenas vibras.— me siguió el juego sonriente.— Por cierto, te paso a recoger más al rato.

— Claro, si quieres.

Jimin rio.

— Quiero, por eso te pregunto.— tamborileó los dedos sobre el volante.— Ya sabes, en la fiesta de graduación las parejas llegan juntos, si no ¡Cristo! ¿Qué clase de pareja seríamos?

Reí ante tu exageración.— Pues entonces no debemos de romper la tradición. Te quiero en mi casa puntual.— exigí con un tono de voz que pretendía de todo menos ser autoritario.

Jimin rio conmigo y me prometió llegar a la hora, aunque realmente no sabíamos bien "cuál era la hora" pues probablemente llegaría por mí cuando ambos estuviéramos listos, pues realmente no importaba que llegáramos temprano, la fiesta iniciaba a las 8, pero nunca llegaban a esa hora, así que podíamos tomarnos nuestro tiempo.

De repente vi a mi novio suspirar y ponerse serio.— ¿Tienes ya todo listo para mañana?

Sentí una punzada en mi estómago al oírlo pronunciar esas palabras, pues parecía ser un tabú entre nosotros el hecho de que me fuera, por lo tanto en el tiempo que estuvimos compartiendo juntos, nada había salido de nuestra boca sobre ese asunto, hasta ahora...

— Ya, solo me falta acomodar algunas cosas personales. — dije un poco dubitativo en busca de alguna reacción suya, al no ver algo que pudiera delatar realmente como se sentía me hizo sentir un poco frustrado.— ¿Me iras de despedir?

Lo vi torcer los labios y no supe si era por enojo o por alguna otra razón.

— No lo sé.

Fue lo único que respondió y a pesar de que esa respuesta me hizo sentir mal, no quise indagar más en el tema, pues no quería que las cosas se tornaban mal.

— Bueno, si decides ir a verme, mi vuelo sale a las 11 de la mañana.

— Hmm...

Me mordí el labio inferior nervioso y a partir de ahí, el viaje a mi casa fue tormentosamente silencioso.




Al menos podía decir que mi despedida con Jimin no fue incómoda... bueno, tal vez cuando nos bajamos del coche, pero solamente ahí porque después fue como si nuestra pequeña conversación nunca hubiera pasado.

Y en cierta parte me alegraba por eso, pues tenía las horas contadas en las que me iría y realmente no quería que las cosas salieran mal en las últimas horas ni mucho menos que nos quedarán recuerdos desagradables.

Así que nos despedimos de beso y con una caricia por parte de él en mi mejilla antes de irse.

Cuando entré a mi departamento mis padres estaban en la sala viendo una serie, al momento en que me escucharon ambos voltearon hacia mi dirección, mi mamá fue la primera en sonreír y hacerme gestos de que fuera hacia ellos.

— ¿Cómo te fue?

Asentí complacido.— Me fue muy bien, me divertí mucho también.

— ¿Y eso? — preguntó curiosa, haciendo que mi papá quién estaba viendo la tele me volteara a ver a la espera de una respuesta mí.— Por cierto ¿qué comiste? ¿Te gustó?

Y con esas simples preguntas, supe que íbamos a tener tema de conversación por un buen rato, pues estaba a punto de aventarle la bomba a mi madre de que por segunda vez en mi vida, había probado la mejor comida casera, porque obviamente la primera era de mi madre.

Por lo que cuando me di cuenta ya eran casi cuarto para las 9 y yo realmente no sabía a qué hora iba a llegar Jimin por mí, así que con el pesar de dejar a mis padres en la sala divirtiéndose, fui a mi cuarto, agarré mi toalla y me metí a bañar.

Aunque no por eso me di una ducha rápida, pues mi ducha de 10 minutos se transformó en 25 cuando una tras otra de mis canciones favoritas se fueron reproduciendo, por lo que a mi pesar, tuve que dar mi concierto en el baño, pues mis fans podían reclamarme luego.

Cuando terminé de bañarme salí con la toalla en la cintura hacia mi cuarto directo a comenzar a vestirme, saqué mi traje que mi mamá me obligó a comprarme hacia dos semanas justamente para la fiesta, pues la fiesta era formal.

Aun no sabía cómo había aguantado casi un día entero con la camisa de manga larga y el pantalón de vestir, pero sinceramente, esperaba no saber nada de trajes durante un buen tiempo.

Me puse mis boxers y justo después mi pantalón, estaba a punto de comenzar a abrocharme la camisa cuando mi teléfono timbró, notificándose de que un mensaje había llegado.

Me dirigí hacia mi cama en busca de mi teléfono.

Una carcajada salió sin poder evitarlo al leer los mensajes.

Pasivas locas❤😰👉👌🌚

Alíen 👽

Wenaaaas 😚

Pig princess 💅

Holaaa 👀👀👀

Alíen 👽

Las tienen 🌚 jahwjsjsba

Pig princess 💅

🙄😒 Ya sé...

Alíen 👽 

:0...
Aver 😏

Pig princess 💅

Al cine 😉

Alíen 👽

Envidioso!!! Cruel!!! 😭😭😭
Pero Jungkook si me las va a enseñar y no solo me va a dejar con las ganas como otroooos. 🖕🖕🖕🖕🖕

Pig princess 💅

Eres muy joto, lo sabias?

Alíen 👽

Uy manita, si habláramos de joterias no sales limpio. 💅
Pero bueno, en vez de hablar si eres o no eres, mejor díganme 🌚🌚, ya se prepararon? 👉😏 👌

Pig princess 💅

Taehyung!!!

Alíen 👽

Qué?! Para la fiesta!!! Que no ves que es si quedaste perfecto? 😏👌

Pig princess 💅

Y este qué? 👉

Alíen 👽

Era para hacer énfasis en las otros dos emoticones 🌚

Pig princess 💅

Aja...

Alíen 👽

De todo tw quejas. JUNGKOOK!
HOMBRO!
Hombro*
Ptm. HOMBRE! *

Pig princess 💅

JAHAHAJAHSHAJ

Alíen 👽

Tu qué? 😠😠😠😠

Pig princess 💅

Nada... XD

Tú.

Ya llegó por quien lloraban. 😉

Alíen 👽

Vaya, hasta que te dignas. Ya hasta me hice viejo.
Estas bueno para una emergencia.
Ya me morí.

Pig princess 💅

No si el drama queen 👑🌺

Tú.

Ya bebesito.

Alíen 👽

Ayñs ❤️, me habló bonito, así si te doy todo, hasta las 🍑.

Pig princess 💅

En serio que luego me preguntó cómo es que Hoseok te aguanta.

Alíen 👽

Porque sabe cómo aguantarme 🌚

Tú.

jahajajajaja

Alíen 👽

Pero ya hablando en serio y no en broma.
Ya van de salida o aún no?

Pig princess 💅

Apenas me iré a bañar...

Alíen 👽

Es que no quiero llegar muy temprano, pero Hobi está que se nos hará tarde.
Alm, ya mejor dime que vas mañana.

Tú.

Estoy terminando de vestirme, de todos modos no creo tardar mucho 🤔

Pig princess 💅

:v o que la canción, ya vas.
Sabes qué, mejor me iré a bañarme, ya que alguien me interrumpió con sus mensajes pensativos.

Alíen 👽

Sisisi, ya vete, te lavas las orejas y por donde no llegué el sol. 🌚

Pig princess 💅

Oh, me ofendes. :v
Digo, respetame 😡😠

#
Avr

Pig princess 💅

Checa priv 😉

Alíen 👽

Jajajajajajajja ya mejor vete a bañar.
Y bueno está bien, avisame cuando ya vayas para allá.
Te irá a buscar Jimin? 😏

Tú.

Sí, vendrá por mí 😚
Lávate bien, y si necesitas ayuda nos llamas 🤭🤭🤭🤭

Alíen 👽

Meno ❤️
Y luego dicen que el sucio soy yo 😭.

Con el último de mensaje de Taehyung volví a centrarme en mi labor de terminar de vestirme, abroché mi camisa y me puse los zapatos y el esmoquin lo dejé hasta el final, pues no quería comenzar a sudar antes de que siquiera saliera de mi casa, así que me lo pondría cuando saliera.

Y pareciera como si lo hubiera invocado, pues a los minutos mi teléfono volvió a vibrar con una llamada entrante, aunque la llamada fue corta pues solo era para preguntarme si ya estaba listo.

Pasaron alrededor de unos veinte minutos para que Jimin llegara por mí, los cuales aproveché para jugar un rato con mi teléfono y de paso, pasé a la cocina a comerme una barra de cereal que estaba en el refrigerador.

Ganándome una negación de mi padre por su parte, pues según ella si seguía comiendo aquí, ya no iba a comer en la fiesta y lo que habían pagado para los platillos, se iban a ir a la basura.

— Está bien má, ya no comeré. Lo prometo.— sonreí metiéndome el último trozo de la barra.

Y cuando mi mamá estaba a punto de decirme algo, la puerta sonó.

Sonreí internamente y salí corriendo hacia la puerta esquivando a mi mamá.

Cuando abrí la puerta casi, babeo, casi, pues tenía que mantener la postura. Si bien mi novio era muy guapo, tenía que admitir que el traje gris le sentaba muy bien, cuando ambos nos despedimos de mis padres, por fin nos pudimos dirigir a la fiesta y de paso le avise a Taehyung que ya me dirigía hacia allá.





Habíamos hecho un excelente trabajo con el salón en el que se llevaría a cabo la fiesta, pues cuando entramos me sentí orgulloso conmigo mismo y todas esas horas dedicadas, pues todo lucía fantásticos ahora que lo veía desde otro panorama, de noche.

A pesar de que habíamos llegado tarde, todavía tuvimos que esperar un rato más para que el salón se viera lleno, cuando llegamos y entramos al salón, lo primero que me recibió fue un Taehyung muy sonriente, quien me apretujó entre sus brazos y me jaló hacia una mesa en el centro del salón donde estaban sentados Hoseok y Yoongi.

Cuando logré que se tranquilizara, (pues me andaba zarandeando) me dijo que Hoseok iba a entrar a la misma universidad que él, por lo tanto estudiarían técnicamente juntos pero en distintas carreras, que prácticamente sería lo mismo a como estaban anteriormente, en salones separados.

Pero al fin y al cabo juntos.

No pude hacer nada más que sentirme feliz por él, aunque si era sincero conmigo mismo, había sentido celos de él, pues yo no iba a poder estar cerca de Jimin, es más, hasta íbamos a terminar.

Jin y Namjoon llegaron un rato después, justo cuando iban a comenzar a servir la comida.

— Te dije que vendrían mañana.— habló Tae con el vaso puesto sobre sus labios antes de darle un trago a su refresco, pues las bebidas alcohólicas estaban prohibidas dentro de la institución.

Y no éramos lo suficientemente "alcohólicos" como para meter bebidas de contrabando, aunque los amigos de Jimin no estaban de acuerdo, pues no sé cómo habían metido una botella al salón, pues antes de entrar nos revisaban por lo mismo.

Asentí con una sonrisa a lo que me había dicho mi amigo, y como si Jin hubiera sabido que estábamos hablando de él, nos señaló acusadoramente.

— ¿Qué? ¿Se están burlando de mí?

— No. Solo nos preguntábamos si hiciste lo que te dijimos.— contesté con una sonrisa inocente.— Por cierto, ¿no necesitaste ayuda?

Jin me iba a contestar cuando mejor se quedó callado en el momento en el que Namjoon le preguntó de qué hablábamos haciéndole subir los colores a su rostro, así que mejor cambio el tema, tanto Taehyung como yo nos comenzamos a reír..

Cuando la comida por fin fue servida, el salón por un momento se mantuvo "en paz" pues cada mesa estaba en su propio mundo comiendo y conversando como nosotros lo hacíamos, pero más que conversar, eran bromas que saltaban de un lado a otro, y obviamente con música acompañando de fondo, de grupos o solistas que estaban sonando o canciones que eran tan pegajosas que siempre estaban presentes en una fiesta sin importar la edad que tuviéramos.

Ni bien terminamos de comer la música cambio de ser lenta a ser más movida, pues oficialmente había iniciado la fiesta de graduación, y aunque hubieron varios que se pararon a bailar, por nuestra parte permanecimos un rato sentados en la mesa, pues aparte de que estábamos llenos, nos permitimos seguir disfrutando el tiempo entre nosotros.

Sin embargo, no pasó mucho tiempo para que Taehyung y Hoseok fueran los primeros en pararse a bailar, pues no era un secreto para nadie que el novio de mi amigo bailaba en cada oportunidad que se le presentara.

Mientras tanto Jimin y yo nos decidimos a bailar un rato después, más que nada a petición de mi novio, pues yo era más de ver bailar a la gente que pararme a bailar, sin embargo, supuse que una vez que lo hiciera no iba a pasarme nada, pues al fin y al cabo iba a ser la última vez que conviviría con ellos en mucho tiempo.

Así que Jimin y yo nos unimos al par de tórtolos con la música de Jay Park de fondo.

¿Y saben algo?

Disfrute mucho estar en la pista de baile, pues a pesar de que no se bailar Jimin se encargó de que no fuera necesario, además de que tampoco me sentí tan mal de mí mismo, pues echando un vistazo a los que estaban bailando, habían unos cuantos en la pista que no sabían ni lo que hacían, pero se veía que se estaban divirtiendo, así que decidí hacer lo mismo y dejarme llevar por la música.

No tardó mucho para que los restantes en nuestra mesa se unieran a nosotros y las risas no se hicieron esperar cuando comenzaron a "bailar" como solo ellos tres sabían hacerlo, en otro momento me hubiera dado vergüenza, no obstante me estaba divirtiendo demasiado como para siquiera pensarlo y en su lugar nos unimos a ellos.

Y dentro de esa burbuja de felicidad, viéndolos disfrutar del momento, supo inmediatamente que no me quería ir, por lo tanto después de mucho pensarlo y a pesar de que yo realmente quisiera, había decidido que lo mejor era que no me fueran a despedir al aeropuerto, pues me iba a ser mucho más difícil soltarlos.

Y podía casi jurar que sería capaz de hacer un show en el aeropuerto a mis padres.

En algún punto de la noche Jimin yo nos apartamos de los demás para sentarnos de nuevo a pesar de que no estábamos cansados.

— Sí que tienen energía.— rió Jimin al ver a los demás con la misma actitud de hace unas horas.

— Pero si siempre tienen energía.— le dije confundido a pesar de que también me estaba riendo ante las ocurrencias de aquel quinteto.— ¿Qué no conoces a tus amigos?

— Sí, pero ahora tienen mucho más energía, ¿No ves que tanto Tahyung como Jin se les suman a sus tonterías?

Ambos soltamos una carcajada cuando Jin intentó hacer el paso del gusano y se terminó pegando en la cara con el piso, y una mueca divertida se formó en mi rostro al ver a Jackson y los demás juntarse con mi grupo de amigos que de por sí ya estaban descontrolados, ahora con su presencia no sabía qué cosas podían pasar.

Cuando volteé a mi novio y lo vi feliz, una parte de mi felicidad se apaciguó un poco, pues tenía que decirle lo que había pensado acerca de despedirme mañana, a pesar de que él aun no me había dicho si iría.

Así que reuniendo el valor necesario, inhalé profundo y le tomé de su mano que estaba recargada en la mesa, llamando enseguida su atención.

Jimin sonrió.— ¿Qué paso?

Me relamí los labios nervioso.

— Retomando el tema de mañana...— lo vi fruncir rápidamente el entrecejo, haciéndome titubear por un momento.— No me has dicho si iras, pero aun así quiero comentarte que lo estuve pensando, y a pesar de que me gustaría muchísimo que fueras... no quiero que vayas.

Lo vi asentir despacio, para después hacer una mueca en lo que creo sería una sonrisa.

— Yo tampoco estaba muy seguro de ir.— se sinceró.— Pero ahora que tú me dices eso, creo entender por qué y está bien, y no porque yo no te dije que si hace rato no quiere decir que no quería ir, simplemente no sabía si debía.

— Está bien.— aseguré, me incliné hacia él y cerré los ojos cuando roce nuestras narices conteniendo un suspiro.

Sin embargo fue Jimin el que suspiro antes de sentir una mano posarse sobre mi mejilla y unos labios presionando sobre los míos, fueron unos minutos en los que nos permitimos disfrutar de nuestro momento antes de que nos llegaran a interrumpir y nos arrastraran nuevamente a la pista de baile.





Al abrir los ojos está mañana y estar completamente despierto, una sensación de vértigo se instaló en la boca de mi estómago, dentro de nada estaría camino al aeropuerto... y a China.

Me había levantado desde las 7 a petición de mi madre para terminar de guardar mis cosas personales y la poca ropa que había ocupado los últimos días, me bañé y me puse una ropa cómoda, pues no pensaba viajar incómodo a pesar de que fueran casi 3 horas de vuelo.

Desayune con mis padres, quienes estaban extrañamente silenciosos y en diferentes ocasiones vi a mi mamá lanzarle miradas a mi padre y este frunciendo los labios, sin embargo no le di importancia, pues probablemente aún tenían cosas que acomodar.

Inevitablemente cuando terminé de desayunar y me metí en mi habitación ahora vacía la sensación de vértigo aumento junto con un nudo en la garganta.

Mantuve una respiración constante y terminé de acomodar mis cosas con mi vista vagando una y otra vez hacia mi celular en busca de alguna notificación nueva, pues a pesar de que tanto Taehyung como Jin me habían estado mandando mensajes, Jimin solo lo había hecho hacia una hora deseándome un buen día y un buen viaje.

Sorbí mi nariz y mis ojos picaron, amenazando con ponerme a llorar cuando terminé de empacar mis cosas, y a pesar de que le había pedido a Jimin que no viniera, eso no quería decir que no quería hablar con él. Estuve tentado a mandarle mensaje en su lugar, pero también podía ser molesto, pues aunque no habíamos dicho nada, el cambio se sintió.

La noche anterior cuando me había venido a dejar, inevitablemente pensé que era oficial, nuestro noviazgo había terminado

Agarré la mochila que me llevaría en la mano por si necesitaba algo con qué distraerme durante el viaje, metí mis audífonos, mi celular, mi cargador y cerré mi mochila, inhalé suficiente aire para darme ánimos, porque una vez que saliera por la puerta de mi cuarto, no había marcha atrás.

Me colgué la mochila en mi hombro derecho y con la izquierda agarré la maleta que hacía falta de meter en el coche de mis padres, ya que esta contenía mis prendas de ayer recién lavadas y me la colgué en el hombro.

Caminé indeciso hacía el pasillo sin voltear a mi cuarto ahora vacío e hice un recorrido hacía el pequeño comedor en donde mi mamá había puesto pequeños bocadillos para el viaje. A lo lejos los escuché ir de un lado a otro recogiendo lo que faltaba por meter en la cajuela del coche, por lo que tenía entendido, sus cosas habían estado ya empacadas y listas, para que un camión de mudanzas llevara sus cosas al aeropuerto, aunque los electrodomésticos algunos se iban a vender y otros los habían movido a la casa de mis abuelos.

Una que mi mamá revisará una y otra vez si nada hacía falta por guardar en mi departamento, los tres nos subimos al carro partiendo directo al aeropuerto con casi dos horas de antelación, pues era la primera vez que íbamos a viajar en avión por lo que ninguno de los tres sabíamos bien hacia dónde dirigirnos, por lo tanto salimos temprano por precaución, pues después de todo no podíamos perder el vuelo.

Nuestro viaje fue un poco tranquilo, pues tanto mi mamá como mi papá intentaron conversar conmigo, sin embargo preferí no hablar mucho, pues no me sentía con el ánimo de tener una conversación con ellos, realmente no quería mal contestarles, así que desistieron de hablar conmigo a poco de llegar al aeropuerto, y solo hablé lo necesario mientras bajamos las maletas, cuando nos revisaron y también cuando nos pasaron a guardar las maletas.

El aeropuerto estaba repleto de gente a pesar de ser un miércoles a las 10 de la mañana, en seguida me empecé a engentar.

— Me iré a sentar mamá.— dije cuando me empecé a sentir como si me estuviera ahogando.

— ¿Te sientes mal?— preguntó preocupada.— ¿Quieres que vaya contigo?

Negué para las dos preguntas.— Solo quiero sentarme un rato, me sentaré ahí.

Señalé unos asientos que acaban de ser desocupados a unos cuantos metros de donde estábamos, mi mamá al verlos asintió diciéndome que tuviera cuidado y volvió a prestar atención a mi padre, quién estaba registrando las maletas, sin embargo en diferentes ocasiones la vi voltear en mi dirección.

Mientras estaba sentado ahí no pude comenzar a sentirme más y más nervioso, e inevitablemente mi tic en mi pierna derecha apareció, volviéndose cada vez más constante y violento, haciendo que varias personas que pasaban voltearan a verme extrañados.

Saqué mi celular de mi bolsillo en busca de nuevos mensajes, pero solo tenía de Jin y Taehyung deseándome un buen viaje, casi tiró mi celular y rió sin gracias al darme cuenta que hasta los amigos de Jimin me habían enviado mensaje hacia unas horas y él no.

Abrí su chat y escribí un mensaje que me arrepentí de haber escrito en el momento que presioné enviado.

"Ya casi me voy"

El golpeteó de mi pierna se volvió más constante si era posible y mis ojos picaron cuando no vi respuesta de él, podría ser que no tuviera su celular a la mano, o a lo mejor estaba ocupado, pero todas esas posibilidades no hacían que el nudo en mi garganta se fuera y solo aumentó cuando el pensamiento de que no quería hablar conmigo se hizo presente.

Y supe que iba a llorar, justamente en ese momento. Supe inevitablemente que iba a llorar todo lo que no llore en esos dos meses para no hacer sentir mal a mis padres, cuando por más que quise parar las lágrimas estas no cesaron.

Guardé mi celular en mi bolsillo en un intento por dejar de martirizarme, y lo peor ahora era que no sabía exactamente por qué lloraba, si porque Jimin no me había hablado, o porque no quería irme, o que no quisiera dejar a mis amigos y a mi novio, tal vez fueran las tres cosas.

Sin embargo no tarde en sentir a mi madre agachada frente a mí con un gesto preocupado mi papá parado detrás con la misma expresión que ella.

— Jungkook, ¿Qué tienes? ¿Te sientes mal? — su mano subió a mi cabeza.— ¿Te duele algo?

— No me quiero ir mamá.— fue lo único que dije en medio del llanto aferrándome a ella.





°°°°°°°

Jajajahajaja me mame, según yo no me iba a extender y salió muchisimo más largo que el anterior alv.

Quiero hacer algunas aclaraciones, cuando es un vuelo internacional tienen que estar en el aeropuerto con 3 horas de anticipación, sin embargo se me pasó acordar bien los tiempos en el capítulo anterior, por lo tanto era mucho más relajo cambiar todo, lamento eso.

Algunas cosas en cuanto a la mudanza no estoy segura de como funcione, por lo que a esos detalles les pido que no le hagan mucho caso, pues a pesar de que intenté informarme, mi investigación fue un fracaso :V

Otra cosa, lamento haber tardado en tardar en actualizar, como verán el capítulo salió muy extenso y eso que quería tocar más puntos con respecto al final de este, sin embargo he decidido tomarlo en otro capítulo.  

Espero que les haya gustado y una disculpa  si en algunas situaciones no lo me lleno en la escena <3

Por cierto, estamos a dos capítulos del final,  el próximo será un Pov de Jimin :3

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