02|Capitulo

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➼|D O S
Cena en apuros
& Divertida

—Nuestro Secreto—Aclare apretando su pequeño meñique.

De inmediato unos pasos se hicieron presentes y cuando volteamos a ver, era nada menos que Hans, quien portaba un traje muy formal y un reloj en su mano derecha.

El pelirrojo se acerca a nosotros y después su vista se dirige al pequeño —Hey, Timmy. Ya es hora de cenar. Esperan por ti en el comedor.

El pequeño ladea la cabeza—¿Qué hay de cenar hoy, Hans?—Preguntaba de manera curiosa—Si comemos brócoli, no iré, preferiría morir de hambre...—Hans rueda los ojos al ver cómo él hacía puchero, yo solo miraba y soltaba unas cuantas risillas.

Hans se agacha para quedar a estatura con Timmy—Sea lo que sea, te prometo que no comerás brócoli, además, Daphne te preparo tus albóndigas preferidas, especialmente para ti.

—¿Albóndigas?—Repitió con entusiasmo—Escuchaste eso, Hiccup, comeré albóndigas—Yo solo asentí la cabeza un par de veces y Timmy daba saltitos de alegría—No se ustedes pero mi barriguita, tiene una cita en estos momentos, Así que los espero allá.

Se fue sin más, mientras fingía el ruido de una motocicleta para después arrancarla e irse al comedor.

Yo solo comienzo a reír al ver la situación y Hans también.

—Es mejor que vayas tú también, Anna, mis padres, los invitados, todos ellos te están esperando. Quieren conocerte—Acomoda su saco y luego me mira con una sonrisa torcida—¿Sientes nervios?

—¿Sentir nervios? ¡Para nada! Solo serán unas cuantas personas ¿Qué podría salir mal?

Mira su reloj con rapidez—Bueno, tengo que irme—Nuevamente se acomoda el saco y su corbata—Te veo en el comedor—Habla y se da la vuelta, llendo a otra dirrección que no es el comedor donde se encuentran todos los invitados.

Meto mis manos en los bolsillos de adelante en mi pantalón y luego guardo mis labios y fruncí el seño, haciendo que mis dos cejas se unieron—Hans ¿A dónde vas? ¿El comedor no queda por ese lado?—Me atreví a preguntar.

Se voltea con una sonrisa maníaca, ilustrada en su rostro—Solo porque seas él novio de mi hermana, Hiccup, no significa que te tenga que dar ninguna explicación de mi vida...—Y nuevamente se voltea y comienza a caminar como si yo no estuviera allí ¿Ven lo que me refiero? Él es frío y tan serio a la vez.

Así que al estar solito ahí parado, decidí ir al comedor, donde Anna me estaba esperando sentada en una de las sillas de la enorme mesa, a su lado estaba una silla libre, entonces me senté a la par de ella.

Anna me mira y me regala una pequeña sonrisa y yo imito el gesto, después veo todos los utensilios en la mesa, ordenados perfectamente, pero a un lado habían pequeñas letras que me guían a saber cuál utilizar, yo solo sonrió y Anna se acerca a mi para susurrar.

—Daphne, se tomó la molestia.

—Oh, Daphne, ella siempre de atenta...

Se escucha como alguien carraspea con la garganta y todos volteamos a ver y era nada menos que Agnarr.

—Gracias a todos por asistir, no saben lo feliz que hacen a la familia Smith.

Una mujer de cabello rubio y ojos color miel, responde—Gracias a ustedes—Pero de inmediato su vista se dirije a mí—Y por cierto, Agnnar ¿Quién es él?—Preguntaba con una sonrisa en su rostro.

Aquel hombre sentado en la silla principal, me mira cautelosamente y luego dirije su vista hacía la mujer—Él es Hiccup, m-m-i —Da un suspiro largo—Mi yerno.

—¡Ay, pero qué lindo! Si estuviera a la par tuya  muchacho, te agarraría los cachetes, pero para tu buena suerte no estás a mi par—Rié y yo le digo el juego riendo sutilmente.

Pero de inmediato, mis labios dijeron una tontería—La dejaría, pero depende de cuales cachetes está hablando, eh...—Cuando respondí eso, todos en la mesa rieron menos Agnarr, quién me miraba con una mirada de muerte, trajo salíva.

—Oh, su yerno están divertido—Idunna asiente la cabeza y ríe mientras dirije su mano a la boca para cubrir su risa, mientras que Agnarr solo hace una risa forzosa .

—Bueno, en vez de hablar chavacanadas—Anna y yo reímos al escuchar eso—deberíamos hablar de negocios— De inmediato todos los hombres de la mesa comenzaron a hablar.

De un momento a otro, traían la comida servida y la acomodaron en la mesa las señoras que trabajaban para la familia Smith.
Había de todo, de cualquier tipo, desde pescado hasta los más pequeños guisantes.

Entre tantas mujeres sirviendo en el comedor, Pude ver como Hans por fin llega a a cenar, estaba despeinado y su traje no estaba tan arreglado, su corbata estaba medio sacada de lugar y su camisa un poco arrugada. Se sienta rápidamente en la mesa.

De inmediato Anna me habla—Oh, mira, Hiccup. Ella la nueva secretaria de mi padre, desde hace un mes— me señala con su cabeza, y pude ver como ella venía asomando después de Hans, estaba arreglando su peinado con unos cuantos ganchitos para el cabello y luego acomodó su vestido y se dirigió a la mesa, teniendo la vista puesta en Hans para después desviarla y charlar con otras chicas de su edad. Realmente me parecía extraño.

Timmy extiende un tenedor y cuchara al aire y grita—¡A comer!—para después meter tres cucharadas de comida a su boca. Todos reímos al verlo.

Comenzamos a comer, y todos comenzaron a preguntar sobre mi.

Una mujer alta y pelinegra, dirige la mirada hacía Anna—Y, bueno querida ¿Cómo se conocieron ambos?—Le pregunto mientras nos señalaba con sus dedos a Anna y a mí.

—Hiccup y yo, siempre hemos sido compañeros de clases, pero al parecer ambos nos gustabamos en secreto—La tomó de la mano y la acaricio sobre la mesa— entonces una vez él se armó de valor y me pregunto si yo quería que él fuera mi novio, y yo pues, acepté.

Comienza a chiscar sus dedos—¿Cuál es la palabra?—Se queda pensando un momento, hasta que por fin la tuvo en la punta de la lengua—Ya sé, salieron de la friendzon.

Yo río y luego respondo—Así es.

—¿Trabaja?—Me pregunta una joven.

Asiento un par de veces con la cabeza—Sí, trabajo. Desde hace un año me dedico a arreglar autos y motocicletas en un taller que tengo con un par de amigos.

—Espera—Hace una pausa al hablar—Ósea que eres como esos chicos tan galanes, guapos, hermosos y dotados que se ensucian su cuerpo al momento de trabajar...

Yo suelto un par de risillas y después ella pronunció con la comisadura de sus labios «Que sexy» Entonces Anna y yo abrimos los ojos como plato, y no solo nosotros, sino que todos los de la mesa.

Suelta un chillido la chica—Anna ¿Cómo le hiciste para conseguirlo?—Mi pelirroja ríe sutilmente y luego deposita un pequeño beso en mi mejilla.

—¿Tendrá algún primo?—Se atrevió a preguntar alguien más.

—Si lo tienes, no dudes en presentarlo—Agrego otra chica.

Y así se escuchaban muchos murmullos por parte de las más jóvenes, hasta que Agnar carraspea su garganta y todos guardaron silencio, hasta yo.

—Bueno, prosigamos con lo importante, lo que realmente íbamos a hablar desde un principio—De inmediato todos los hombres se hicieron presentes ante la nueva plática.

Y así fue como largas platicas se apoderaron de la cena, mientras las risas y enojos se hacían presentes. Cuando terminamos de cenar y todos se marcaron de la mesa Agnnar me llamo y dijo que tenía algo importante que hablar conmigo.
«¿Será la bendición para mí futura boda?»
Ya lo veremos...

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