Diciembre de 1952

Mi querido amor:

Los enamorados siempre retornan, ¿qué son las bombas?, ¿qué son las balas comparadas con mi infinito amor por ti, Kim Taehyung?

No dudes de este amor, yo respiro por nuestro futuro y por el mañana. Es mi único aliento. Entonces nos amaremos plenamente, tal vez algún día lejano, quizás en otra vida, otro lugar, diferentes apariencias, pero lo haremos sin ataduras, sin privarnos de sentir. Lo haremos como una mujer y un hombre, así de libres seremos. Y tomaré tu mano en la misma vereda que libré para ti y nuestros pequeños corretearán entre risas de gozo y júbilo. ¿Lo imaginas, amor mío? Porque yo no paro de pensarlo.

El futuro asusta, pero contigo no le temo.

Hemos sido valientes por demasiado y largo tiempo, nuestros cuerpos fatigados merecen un descanso. Ganamos la guerra, Corea del Sur le han llamado, un país libre para ti, para mí, para nuestros hijos. La fetidez de la muerte por fin dejó de seguirme, soy un hombre nuevo y renovado.

Miro el cielo, entre la bruma del humo y los cadáveres, veo un pequeño pájaro volar bien alto, él extiende sus alas, amor mío. La esperanza es sembrada en mí como una pequeña semilla, es hora de permitirle germinar.

Deseo que mis compañeros caídos estén aquí para celebrar, deseo hincarme en el suelo, dedicarte mi victoria. Renunciaré, amor mío, la guerra ha marcado un antes y un después en mi vida, también en nuestra relación. A partir de hoy me dedicaré al nosotros y a construir los cimientos del porvenir. No hay nada que desee más que estar a tu lado.

En tres semanas, espérame hasta entonces mi Taehyung, ya voy a ti.

Por siempre tuyo

Jeon Jungkook.