Capitulo 4

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Estando ya en el restaurante note que Dhoko en todo momento estaba detrás de mí como tratando de decirme algo y cuando terminó el turno estaba a punto de irme pero él tomó mi brazo

Dhoko: Espera!!, ¿Podemos ir a cenar o quizás tomar un helado?

Tn: Lo siento pero quiero descansar y además tengo  algunos pendientes así que no puedo ir

Dhoko: No me molesta que me rechaces o que no tengas el tiempo pero sé que me estás ocultando algo, prefieres que yo lo investigue o me dirás que sucede.

Ese momento me congele pues a mí no me gustaba mantener u ocultar cosas y me sentí terrible pues era cierto, lo había hecho pero no podía soportarlo más.

Tn: Está bien pero. . . . ¿No te molestarás?

Dhoko: No lo creo, yo podría enojarme con quien sea pero contigo nunca. Ahora vayamos a un lugar más privado.

Él me llevó a un café pero estaba realmente nerviosa, no sabía si contarle todo, solo una pequeña parte o simplemente nada. Llegamos al lugar, me senté y no dije ni una sola palabra por miedo.

Dhoko: Ordena algo,  lo que tú quieras.

Tn: Quizas solo un vaso de agua.

Dhoko: ¿Estás segura? ¿No tienes hambre?

Tn: No, todo está bien ,ni siquiera tengo hambre y me siento perfectamente bien.

Dhoko: Pero no comiste nada en la hora de la comida.

Tn: Por favor, no insistas.

Dhoko: Entiendo, ahora dime que te sucede.

Tn: Pues. . . . tengo otro trabajo, por eso no puedo salir contigo para distraerme o cualquier otra cosa y no hay tiempo.

Dhoko: No lo sabía, ahora entiendo porque siempre estás agotada y muy ocupada. Tu no tienes por qué pasar esa situación, eres muy pequeña y deberías de ir a la escuela.

Tn: Sabes que lo hago por las deudas y no puedo escapar a ningún otro lado porque me encontrarían.

Dhoko: Había estado juntando para irme de vacaciones pero tú eres más importante,  ¿quisieras que yo pagara tus estudios?

Tn: No es necesario, sí tengo mucha suerte y cuando termine de pagar las deudas voy a estudiar. Prefiero que tú vayas de vacaciones porque te vendrá de maravilla.

Dhoko: Por favor, es lo menos que puedo hacer y  quiero verte feliz.

Tn: He dicho que no así que no insistas, además mi felicidad ahora está bien.

Dhoko: No voy a insistir pero al menos podrías decirme en qué consiste tu otro trabajo

Llegué a ponerme aún más nerviosa, es algo que no puedo controlar, sin darme cuenta miraba fijamente el vaso de agua en la mesa, el resto era casi borroso  y no percibía nada más que el latido de mi corazón, hasta que él comenzó a acariciar mi mano y solo asi volví de nuevo a la realidad,

Nada me iba a salvar y probablemente tendría que decir la verdad, no creía en Dios pero algo me había salvado; el ruidito de un teléfono fijo que era de la cafetería, pronto dijeron en voz alta que se trataba de una llamada urgente. No sabía ni quién era pero contesté gustosa y con mucha prisa.

Tn: Hola, ¿quién es?

-Buenas tardes, hablo por parte del Banco X, el motivo de la llamada es que necesitamos que firme unos papeles y por lo cuál la buscaremos.

Tn: No es necesario, yo iré en un momento. Además quisiera saber si hay algún inconveniente con los pagos.

-En 5 minutos.

Aquella persona al otro lado del teléfono colgó, me quedé con la duda y tenía preocupación pues semanalmente hacía pagos para la deuda, por lo cual no había tenido dificultades o problemas hasta ahora.

Justo en ese momento ya no tenía una situación, ahora eran 2 juntas que estaba volviendo mucho más tensa el ambiente; Dhoko y el Banco. Y para empeorar las cosas note de inmediato que Dhoko se alarmó mucho, sentía que algo malo iba a pasar, era bueno que se preocupara por mí pero no demasiado. También me parecía tan hostigador sus actitudes y peor aún ya que yo sabía que él tenía intenciones dudosas conmigo.

Dhoko: ¿Tn? ¿estas bien? ¿tienes problemas?  ¿necesitas dinero? ¿necesitas algo?

Él siguió haciendo preguntas, mi corazón latía rápido, los sonidos de mi alrededor me molestaban, gente hablando, un niño
haciendo berrinche, un mesero y un cliente discutiendo, una pareja de esposos reclamandose entre sí.

Todo era como un tenedor raspando una olla, ese sonido tan chirriante era lo que me hacía querer estallar y sinceramente quería llorar de la desesperación, pero de pronto se acercaron 2 hombres que parecían de temer,  porque vestian de traje trajea, lentes oscuros y con un rostro de seriedad.

Hombre 1:  Señorita, acompáñeme a la salida por favor.

No dije nada, solo empecé a temblar, y para hacer las cosas peores Dhoko se interpuso.

Dhoko: Disculpe, ni siquiera se presentaron y no se la pueden llevar así como así.

El otro hombre movió mi silla para indicarme que me levantara, mi cuerpo respondió de inmediato porque mi mente era una gran nube negra y no supe lo que hacía. Simplemente estaba ahí pero mi mente en otro mundo.

Hombre 2: Lo sentimos mucho pero nuestra fiel cliente tiene que salir por unos momentos.

Dhoko: ¡¡Jamás!! déjela en paz!!!  ¿a donde demonios se la llevan?!!!.

Tn: Dhoko, no hagas las cosas más difíciles, ellos. . .   . son conocidos.

Y mostré una sonrisa que se veía demasiado falsa y reflejaba mis nervios, para ese punto pude notar cómo las demás personas de alrededor empezaban a voltear hacia nuestra mesa.

Dhoko: ¿Estas realmente segura?.

Hombre 1: Por supuesto que nos conoce, ella ya lo ha confirmado •dijo con demasiada firmeza•

Dhoko: ¡¡Alto!! ella solo ha dicho unas cuantas palabras y no me parece convincente!!!!!

Ambos se quedaron discutiendo, Dhoko estaba concentrado en ello que ni siquiera vio cuando el otro hombre me alejaba. En esos momentos no sentía nada, no decía nada, todo se sentía como si yo fuese un simple espectador pues mi cuerpo no me respondía.

El hombre me sacó de la tienda, y apunto de abrirme la puerta de un coche negro fue qué reaccioné  y me detuve de manera repentina.

Tn: s-s-señor dónde me lleva??.

Hombre 2: Te seré sincero, mi jefe nos ha pedido que le llevemos a un lugar pues le ha preparado algo bastante especial.

Con una cara de seriedad como la de ese hombre fue demasiado fácil que  lo malinterpretara y me alarmó bastante saber que eso era "especial",  cuando se trata de cosas así hay que temer y correr por tu vida. No lo dudé ni una vez y salí disparada,  corrí 2. . . 3. . . 4. . . 5. . e incluso perdí la cuenta de cuántas calles.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro