Rosé llegó a casa encontrándose con Lisa sentada en el sillón con un cigarrillo mientras miraba a la nada.

—¿Lisa?

—¿Porque Rosé? ¿Porque no soy como los demás? Porque mis recuerdos de infancia son sobre como viví un secuestro y no como los demás? Todos tienen lindos recuerdos con su familia, en cambio yo ni siquiera le importé a mis padres, a nadie le importo— comenzó a llorar

—No digas eso lisa— Rosé tomó asiento junto a ella y le quitó el cigarrillo— A mi me importas, a pesar de que no te conozco de hace tiempo siento como si nos conociéramos toda la vida, además nunca es tarde para crear recuerdos lindos con los que te rodean— la abrazó— me tienes a mí a Jungkook y a Yoongi también, nos tienes a los tres y pienso que es suficiente, olvida el pasado lis, deja de torturarte con eso, ahora las cosas son diferentes así que solo disfruta

—Quiero hacerlo Rosé pero por más que lo quiera no puedo

—¿Por tus padres?— Lisa asintió—Tal vez si les importas pero el hecho de no haberte encontrado los desanimó

—Si yo tuviera un hijo en la misma situación yo habría movido mar y tierra hasta encontrarlo y si de verdad les importé me hubieran buscado desde hace tiempo

Y así es, los Manoban buscaron a Lisa durante 17 años, su búsqueda nunca paró el problema fue que las personas que se la llevaron la escondieron tan bien que les fue imposible encontrarla. Y fue más difícil al ser llevada a otro país y cambiar su nombre, ahora la habían encontrado en Corea sana y salva.

Luego de charlar otro rato más, las dos chicas decidieron ir a dormir, pero aún así Lisa continuaba llorando en silencio, Kai y Jennie, esos dos le hicieron recordar la última vez que miró a su familia.

Lisa tenía dos amigos si se puede decir así, Bambam y Minnie, pero cuando se trataba de hacer parejas para el trabajo escolar siempre ella quedaba fuera. Cuando se trataba de jugar en pareja, siempre se elegían ellos dos, incluso cuando los dos iban a casa de Lisa a jugar videojuegos ella quedaba excluida.

Siempre la ponía triste cuando los veía a los dos hablando felices mientras que hacían como que Lisa no estaba ahí, eso era lo que más le dolía, el hecho de considerarlos sus amigos pero que nunca estuvieran con ella.

Un día al salir de la escuela, ellos le dijeron que la esperarían para irse los tres juntos pero cuando salió ellos ya no estaban, simplemente la habían dejado ahí.

—Psst!

Lisa volteó a ver a la persona que le llamaba encontrándose con una mujer sonriente.

—¿Te dejaron tus amigos?

—Si

—¿Porque?

—Siempre me dejan a un lado

—Pequeña, cuando tres personas están juntas siempre una queda excluida, pero conozco un lugar donde no te van a excluir al contrario, todos querrán jugar contigo

—¿Deberás?

—Sí, solo tienes que acompañarme y te llevaré a ese lugar

Lisa se puso de pie feliz sin saber que ese lugar sería su peor pesadilla.

Al día siguiente...

Clase de deporte, tal vez si Lisa no se sintiera mal estaría feliz por la clase pero en realidad no tenía ganas de hacer nada.

—¿Y ahora? ¿Porque esa cara?— Jisoo le pregunto a su amiga castaña

—Mírala, se ve tan decaída, siento que es mi culpa que esté así

—No creo que sea tu culpa, además si dijo que a nadie le importaba seguro debe tener otros problemas para que este así—Jennie sólo suspiró

Mientras miraban a la peligris que estaba sentada en el césped viendo como los demás hacían deporte se dieron cuenta que si amiga Nayeon caminaba hacía ella. Cuando llegó tomó asiento junto a la peligris mientras le regalaba una sonrisa.

—¿Que hace Nayeon ahí?

—Lo que tu no te atreviste a hacer, acercarte a Lisa y preguntarle si se encontraba bien

Nayeon miró a Lisa mientas que esta solo miraba a un punto fijo con su mente en otro mundo.

—Hola— Nayeon le sonrió

—Hola

—Te veo algo mal ¿Está todo bien?

—Nada está bien en mi vida

—¿Porque lo dices?

—¿De verdad quieres saberlo?—Nayeon asintió

—Quiero ayudarte

Lisa sólo miró a Nayeon que le dio una amable sonrisa, dándole a entender que de verdad quería ayudarla.

—Cuéntame Lisa...

Justo cuando la peligris estaba apunto de hablar Nayeon gritó un "¡cuidado!" y cuando se dio cuenta del porqué de su grito ya era tarde, el balón se había estrellado en todo su rostro.

—Auch... — Lisa se tocó la nariz

—Tú nariz está sangrando, ven, vamos a enfermería

Cuando Nayeon la ayudó a ponerse de pie llegó un chico que a Lisa no le caía para nada bien y menos ahora.

—¡Lo siento mucho! De verdad no fue mi intención, perdón— Kai se disculpó sincero

Pero la peligris sólo lo miró de mala manera comenzando a caminar junto a Nayeon. Jennie miró la situación y decidió acercarse rápidamente.

—Lisa...— la peligris solo la ignoró

Minutos después, Lisa estaba saliendo de la enfermería con Rosé a un lado de ella, preocupada.

—Ten más cuidado Lisa

—No fue mi culpa, fue ese idiota de Kai

—¿Porque idiota?

—Porque lo detesto

—Pero no te ha hecho nada

—Lo hizo y por eso lo detesto

—¿Que te hizo?

—Lalisa Manoban—Jackson hizo presencia—¿Así que tú también pretendes a Jennie?

—¿De qué hablas?

—No te has la idiota que sabes muy bien de que hablo

–No tengo idea y como no te conozco no te debo explicaciones—Lisa se iba a ir pero Jackson la tomó de la camisa.

—Escúchame bien, Jennie será solo para mí y no quiero que nadie interfiera en mi camino—Lisa rió

—¿Y que te hace pensar que será para ti? Digo sí tiró el ramo de rosas que le diste supongo que no quiere nada contigo

—¿Y crees que contigo si quiere algo?

—Tengo más oportunidad que tú—Jackson la apretó más de la camisa pero la peligris lo empujó.

—Te lo dije, será solo para mí

—Eso si te dejo el camino fácil

Lisa sonrió socarronamente cosa que a Jackson lo hizo enfurecer más, el chico estaba decidido a golear a Lisa pero Rosé intervino.

—Basta los dos

—Pero mira nada más—Jackson miró de arriba a abajo a la rubia— Que hermosa chica—Jackson le acarició la mejilla—Tal vez si no tengo oportunidad con Jennie puedo tenerla contigo

Lisa apartó a Rosé y sin pensarlo le dio un golpe en la mejilla a Jackson.

–A ella ni te le acerques

Jackson esta dispuesto a devolverle el golpe pero Rosé intervino de nuevo y se llevó a Lisa de ahí.

—Lisa, no vas a ganar nada peleando

—Lo sé pero no voy a permitir que ese idiota se te acerque

—Gracias por cuidarme pero el punto es ¿Cómo que no le vas a dejar el camino fácil a el con Jennie?

—Solo lo dije para molestarlo

—¿Es eso o de verdad vas a pelear por Jennie?

—¿Como voy a pelear por alguien por el cual no siento nada?

—Lisa

—No Rosé, no me gusta Jennie

Más tarde....

Lisa se encontraba de pie afuera de la casa de jennie esperando que la castaña saliera. Cuando abrieron la puerta solo se dedico a mirar a jennie.

—¿Lisa? ¿Que haces aquí?

—Solo pasaba para decirte que hables con la persona que te dio aquellas rosas

—¿Con Jackson? ¿Porque?

— Me vino con la amenaza de que tú serías solo para el

—Solo ignoralo

—¿Tú vas a curar mis heridas cuando el me golpeé?

—¿No podrás defenderte?

—Claro que puedo, pero me parece injusto de que me golpee por algo en lo que no tengo nada que ver

—¿Porque?

—El piensa que me gustas

—¿Y no es así?— Jennie empezó a jugar pero al parecer Lisa no jugaría

—No Jennie

"Auch"

—Bueno, intentaré hablar con el

—Bien

Lisa se veía diferente, esa actitud arrogante que solía tener con la castaña ya no estaba, incluso ese apodo "ratita" se había ido.

La peligris de dio la vuelta dispuesta a irse cuando una voz masculina la llamó.

—¡Lisa!

La mencionada se dio la vuelta encontrándose con el hermano de Jennie saludando alegre.

—Que bueno que estás aquí justo estábamos a punto de cenar

—Pero falta mamá... —Jennie susurró

—Ella puede unirse luego...¡Ven Lisa! Pasa

—Gracias pero tengo mucho apuro

—Anda, vamos a cenar

—De verdad muchas gracias per..

—¡Hola mamá! Mira ella es Lisa, justo la estoy invitando a cenar pero no quiere

La señora Kim llegaba del trabajo encontrándose con sus dos hijos en la puerta y una chica peligris afuera.

—¿Lisa? ¿La chica de la que me hablaste?

—Sí mamá—Tae sonrió

—Anda Lisa, vamos a cenar— Ahora también la señora Kim la convencía

—Enserio muchas gracias pero tengo tengo unas cosas que hacer

—Vamos, no creo que sean tan urgentes

Antes de que Lisa se negara de nuevo la señora Kim ya la había tomado del brazo arrastrandola hacia la casa.

—¿Viniste con jennie?— preguntó Naiby

—Eh sí

—Jennie, ya te dije que siempre que tengas visitas las hagas pasar, es de mala educación dejarlas afuera ¿sabes?

—Lo sé mamá

—Entonces que no se repita—Jennie solo suspiró

—Toma asiento Lisa, la cena está casi lista

Lisa admiró la casa de jennie, no era muy grande ni muy pequeña, en realidad era perfecta para vivir en familia algo que la peligris no tiene. Mientras miraba alrededor, en la pared de la entrada se encontró con una foto de una pequeña, al instante supo que se trataba de jennie pues su cara era igual solo que más pequeña y más tierna.

—Era una ternura de pequeña—Tae la sorprendió

—¿De verdad?

—Sí, cuando se enojaba inmediatamente su carita se ponía roja, y sus cachetes se inflaban, y claro nunca faltaba su puchero—Lisa sonrió al imaginarse a la castaña en ee estado

—Ella sigue siendo igual de linda ¿verdad?

Lisa miró a la castaña que al parecer tenía una mini discusión con su madre, y justo su rostro se encontraba como Tae la había descrito, su carita roja, sus mejillas infladas y un puchero.

—Sí...

—¡La cena está lista!— Avisó Naiby

Los cuatro se sentaron a comer mientras la señora kim y Tae se encargaban de avergonzar a jennie con Lisa contando sus historias de pequeña.

—Entonces jennie salió desnuda corriendo a la calle—Su madre reía y las mejillas de jennie estaban más rojas que un tomate

—Mamá, era una niña no tenía uso de conciencia— se quejó la castaña

—Lo sé hija, y dinos Lisa, ¿Tú tienes anécdotas?

La sonrisa que tenía la peligris se desvaneció poco a poco ante la pregunta.

—No...

—¿Como que no? Todos tenemos recuerdos de cuando eramos niños

"O vamos señora, ¿Quiere saber mis recuerdos de niña? Me secuestraron y me torturaron hasta hacerme creer que esas personas eran mis padres, esos son mis recuerdos"

—Bueno soy la excepción

—Tal vez tú no lo recuerdes pero a lo mejor tus padres si saben tus travesuras de pequeña

"Mis padres"

—Tal vez..

—¿Y tus padres? Cuéntanos de ellos

"¿Que les cuento? Que nunca les importé?"

Lisa ya se estaba sintiendo incómoda ahí, simplemente esas preguntas le hacían recordar lo que quería olvidar.

—Bueno... Ellos.. —Su celular comenzó a sonar—Disculpen un momento

Lisa se alejó de la mesa para atender su celular, dándose cuenta que era Rosé quién llamaba

"Gracias Rosie"

Jennie había sido la única que se dio cuenta del cambio de humor cuando su madre le preguntó a Lisa sobre sus recuerdos de niña y sus padres. Esa sonrisa se había borrado al instante volviendo a ese rostro decaído que había visto en la mañana. Todo estaba en silencio salvo que Lisa era la única que se escuchaba; cuando jennie escuchó ese sobrenombre "Rosie" sólo suspiró ¿Esas dos son novias?

—Lo siento pero tengo que irme, gracias por la cena estuvo deliciosa, adiós— se despidió

Jennie no dejaría a Lisa irse así sin antes saber que es lo que le pasa, así que sin más se puso de pie para seguir a la peligris.

—¡Lisa!— La tomó del brazo

—¿Jennie?

—Dime que te sucede

—¿De qué?

—Desde que estábamos en la escuela te miré decaída, incluso cuando mi madre te preguntó sobre tus recuerdos y tus padres volví a verte así y siento que fue mi culpa por lo que pasó ayer... Dime que te pasa Lisa

—No me pasa nada, estoy bien

—No te creo nada

—De verdad jennie, estoy bien

—¿A quién quieres engañar Lisa? No soy ninguna tonta, con todo lo que me dijiste ayer me doy cuenta que tú no estás bien y siento la necesidad de saber que te pasa y así poder ayudarte..

—¿Quieres ayudarme?...

—Sí Lisa

—Es muy tarde Jennie, lo que me pasa ya no tiene arreglo

—¿Porque? Todo problema tiene una solución

—Pero mi problema no jennie

—Sólo dime que estarás bien..

—¿Porque te preocupa tanto?

—Ya te dije que quiero ayudarte— Lisa sonrió

—Estaré bien

"O eso creo"