Capítulo Diez🐞

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Marinette empalideció.

- No lo puedo creer- dijo caminando angustiada por su cuarto. - No no no no, esto no puede ser-

Tikki se puso delante de ella.

- Tranquilízate Marinette- su portadora hizo caso omiso.

- ¿Cómo puede ser posible? Nos cuidamos cuando lo hicimos-

- Escúchame, primero debes calmarte. Respira- la peliazul obedeció. Respiró hondo cinco veces más.

- ¿Mejor?-

- ¿Qué hago? ¿Qué hago?- sintió de nuevo el dolor en su vientre.

- Siéntate Marinette-

- Ahora, ¿segura que la prueba dio positivo?-

- Si, dos rayas quiere decir positivo. Tikki  nadie se puede enterar. ¿Qué voy a hacer?- Marinette se puso a llorar. La criatura le sobó la mano.

- Creo que deberías decirle a tus padres-

- ¿Crees que no se enojen? Preguntarán quién es el padre y...- un sollozo la interrumpió. - ¿Cómo ocultaré esto? ¿Y Chat Noir? ¿Y si el bebé está herido? Dios, todo lo que he hecho como Ladybug- dijo llorando. El dolor en su vientre seguía.

- Marinette, estás sangrando- mencionó Tikki preocupada. - Debes ir a un hospital, eso no es normal-

- ¿Y si me ve alguien de mi clase?-

- No vayas a un hospital que esté cerca entonces, pero anda a un lugar ya-

Pidió un taxi que la dejó afuera de una clínica alejada de su casa. Entró y el dolor le invadió de nuevo. Una enfermera pasaba justo a su lado en ese momento.

- Disculpe, debo ver a un doctor, me duele mucho el vientre- dijo haciendo una mueca.

- Ve a la sala 6, hay tres personas en la fila, no tar-

- No no no, es que estoy embarazada-

- Debo poner tus datos en el registro- mencionó la enfermera alzando su carpeta.

Marinette se presentó con un nombre y apellido que se inventó en ese momento. La enfermera la condujo a una sala en el segundo piso donde no había nadie.

- ¿Planeas abortar? Acorde a tu edad y venir aquí, es lo que muchas chicas suelen hacer- la joven azabache no contestó. Vino a ver un doctor, nunca mencionó el aborto.

- ¿Tienes dinero?- ella asintió sacando su monedero donde traía sus ahorros. - Si pagas ahorita, puedes abortar hoy mismo- dijo entregándole el folleto. Marinette lo observó estupefacta.

- Entre más rapido más barato-

- Yo quiero hablar con un doctor- habló temblorosamente. La enfermera salió y volvió enseguida con un doctor a sus espaldas.

- Me han comunicado que está considerando detener el embarazo. ¿Ya sabe de qué modo?- Marinette le entregó el folleto.

- No... y- yo no quiero ninguno de sus métodos de aborto, solo quiero que ayude a mi bebé- suplicó.

- Si quiere que la revise tendrá que esperar porque tengo más de 10 pacientes antes que usted- dijo el doctor antes de retirarse.

La enfermera se despidió de la peliazul y la condujo fuera de la clínica.

- ¿Ahora qué hago Tikki?-

- Si no les dirás por ahora a tus padres, ¿Qué tal Alya?- Marinette sonrió de lado.

- Buena idea Tikki- la peliazul sacó su celular mientras se subía a un bus.

- Hola Mari-

- ¿Puedes ir a mi casa? Debo contarte algo importante-

- Estaré allí en diez- Marinette colgó y guardó el celular. Al regresar entró rápidamente y subió hasta su habitación.

- Hasta que llegas- Marinette saltó del susto. Se volteó y vio a Alya, en forma de superhéroe, acostada en su sofá rosa.

- ¿Pasó algo?-

- Debo contarte una cosa muy seria, Alya- la nombrada se destransformó. Su kwami voló al plato de galletas al igual que Tikki.

- Adelante, ven, siéntate- palmeó el puesto a su lado. La azabache se sentó y respiró profundo.

- ¿Recuerdas la patada que me dió Hawkmoth?- su amiga asintió.

- Antes de eso, tenía dolores en la barriga. Pero empeoró cuando me golpeó. Sangré pocas veces, pero... hoy fui a comprar algo y descubrí....- bajó la voz.

Dios, que difícil era contarlo. ¿La juzgaría? ¿Podría guardar el secreto? Se supone que confiaba en la morena, pero en estos momentos, la ansiedad que poseía no la dejaban tranquila.

- Ya dímelo Marinette, me pones nerviosa-

- Alya, estoy embarazada- silencio absoluto. Ninguna dijo nada por unos minutos. Marinette observó a su amiga que parecía procesar la información.

- ¿Estás segura?- ella asintió.

- Pues... felicitaciones amiga- Alya abrazó a su amiga no tan fuerte para lastimar al bebé.

- No creí ser tía tan pronto, pero me puedes hacer la madrina. Te ayudaré a cuidarlo, no dudes de eso. ¿Qué ha dicho Chat Noir? Es obvio que es el padre- Marinette la frenó.

- Alya, ¿No entiendes? Estoy embarazada. Tengo 17 años, no me he graduado y ya espero un hijo. ¿Qué dirán los demás? ¿Cómo lo mantendré?-

- Tienes mi apoyo, y el de tus padres- la peliazul no habló. - ¿No se los has dicho verdad?- ella negó. La castaña pasó su mano por su frente.

- Ok, primero, tienes que decírselos. Segundo, ¿Chat ya lo sabe?-

- Él no lo va saber- Alya frunció el ceño.

- ¿Cómo que no? Es el padre-

- Nuestra "relación" es prohibida en primer lugar. ¿Sabes lo que ocurriría si los demás portadores se enteraran? De seguro que Queen Bee le diría al Maestro Fu y él me quitaría mi miraculous. ¿Recuerdas la historia sobre los anteriores portadores? No quiero que nada le pase a mi bebé-

- ¿Y qué se supone que responderás cuando te pregunten quién es el padre?-

- Eso no es asunto de nadie-

- Marinette, tendrás que decirle-

- ¿Estás conmigo en esto o no?- la morena suspiró.

- Cuentas con todo mi apoyo. ¿Cuánto tiempo llevas?-

- No lo sé-

- Mañana seguiremos hablando de esto. Debo irme a dormir o no iré al colegio-

- De acuerdo. Gracias Alya- las dos se abrazaron.

- De nada, nos vemos- dijo y se retiró transformándose.

Marinette se quedó pensativa en el sofá.

- ¿Les dirás a tus padres?-

- Hoy no, pero tengo una pregunta. Si me transformo, ¿Cómo hago para saltar y pasar por edificios?-

- Protegería a tu bebé con mi energía, pero eso consumiría tiempo de la tranaformación, por lo que no durarías mucho tiempo en batalla- Marinette se metió al baño y salió con su ropa para dormir. Se alzó un poco la blusa del pijama para observarse.

Su vientre estaba al descubierto. Desde un ángulo lejano cualquiera diría que esta plano, y lo estaba. No obstante, pronto crecería. Un escalofrío pasó por su espalda. Le atemorizaba lo que pensarían sus padres.

Estarían decepcionados, y creerían que no la prepararon para una situación que nunca debió darse, cuando la descuidada fue ella. Tuvo que ser mas consciente de sus actos. Pero no podía volver el tiempo atrás y arreglarlo.

- Tikki, ¿Cómo es posible quedarme embarazada con mi primera vez?- la criatura carmesí se tragó el pedazo de galleta.

- Parece que forma parte de un porcentaje muy bajo-

- Y yo formo parte de ese porcentaje- se lamentó y se acostó en su cama. - Lo que menos entiendo es cómo si Chat usó un condón. No te confundas, no voy a deshacerme del bebé, pero no es el momento-

No podía recriminar a un niño que no tenía la culpa de nada. Ese hijo o hija que esperaba era inocente, a diferencia de ella. Chat Noir nunca la forzó a hacer algo sin su consentimiento. Y no lo había visto desde hace unos días.

Y así era mejor, prefería mantener distancia para no intensificar su relación. Ella movió la cabeza y se durmió.

***

En otro lugar, con pensamientos distintos, una joven se resignaba con frustración.

- Bee, sabes algo sobre Chat Noir y Ladybug?-

- Sé mucho- la rubia rodó los ojos.

- Por favor, ¿acaso hay algo que no puede pasar con ellos?-

- ¿Adónde quieres llegar con esto Chloe? ¿Estás enamorada de Chat Noir?- ella asintió impaciente.

- Necesito que me digas lo que sepas-

- ¿Para hacerle la vida imposible a Ladybug?-

- ¡Solo quiero a Chat Noir!-

- Igual ellos no pueden estar juntos, ¿De qué te quejas?- la rubia formuló una sonrisa. Bee abrió grande los ojos al detectar su error.

¡Maldición! Nunca había sido descuidada en sus palabras. Era muy sensata al hablar. Su portadora actual era demasiado persistente. Más que las demás.

- ¿Y por qué no?-

- Wayzz me matará- se lamentó.

- ¿Por qué ellos no pueden estar juntos?-

- Olvida lo que he dicho--

- Bee, te llevo preguntando ya muchos días, ¿cuántos más?-

- Sé lo que serías capaz de hacer-

- Con o sin tu ayuda, alejaré a Ladybug de Chat, cueste lo que me cueste-

***
El pelirrojo se hallaba sentado sobre la Catedral de Notre Dame, apreciando la ciudad a sus pies. Pero más apreciaba tener su miraculous. A pesar de que le producía un poco de incomodidad llevar el collar, lo ayudaba a desahogarse. Desahogarse por tener un amor no correspondido.

A veces se arrepentía de haber dejado de lado sus sentimientos por Marinette, pero estaba más que enamorada de Adrien, y, no lo iba a negar, el sujeto era buen tipo, buen estudiante y buena persona. Sin duda, su amiga lo merecía.

Pero parecía que corría la misma suerte, con Ladybug y Chat Noir. Excepto que la chica que le gustaba estaba evitando a su adversario, lo que le daba cierta ventaja. Sin duda Chat Noir era testarudo.

Se paró apretando su flauta. Iba a ganarse el corazón de Ladybug, de una forma u otra.

- Ya verás Chat Noir. No necesito vencerte. Ella vendrá a mí-

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro