Título: El mes de los renos

Elena

– ¿Te gusta esté suéter? –Me pregunta Madie, una de mis hermanas menores. Está sujetando un suéter beige con un reno en él. Todo muy navideño

–Para estas navidades está bien, pero te sugiero que lleves una falda negra. Así se vería más bonito

–Buena idea, entonces lo llevaré. ¿No has pensado que este mes debería de ser considerado el mes de los renos? Olvídalo, es una tontería, iré a...

–No, cuéntame porque crees eso. –Distingo el momento exacto en el que cree que ha dicho una tontería. No me gusta que piense así de ella.

–Bueno... por los renos de Santa, porque hay muchos peluches de renos y ahora también hay ropa con estampados de renos.

–Es una buena observación, de ahora en adelante celebraremos el mes del reno en casa. Seguro a Liv le gusta esa idea. –Madie me da una breve sonrisa y yo me siento algo mejor, pero en realidad quiero ir donde Kian y preguntarle qué le ha hecho a mi hermana.

Desde que están saliendo es distinta.

Pasamos por la caja y nos llevamos varios suéteres de renos, yo tenía planeado mi atuendo para navidad, pero si verme con eso la hará feliz, me lo pondré.

– ¿Todo bien con Kian? –Le pregunto cuando estamos por llegar al auto

–Sí, todo bien. Aunque a veces...

– ¿A veces qué?

–A veces pienso que cree que soy aburrida y tonta.

–Es un imbécil si cree eso de ti, ¿por qué sigues con él entonces?

–Porque él me gusta mucho y me ha dicho que le gusto, supongo que a veces no nos entendemos del todo, pero eso pasa en todas las relaciones ¿no?

–Sí, pero si te dice algo más...

–No me ha dicho nada, es lo que supongo solamente. No tengo las mejores calificaciones, aunque no me va mal. Son sólo cosas mías...

Cómo noto que ya no quiere hablar sobre su relación con Kian, cambio de tema:

–Pon la música del grupo que tanto te gusta.

– ¡Hecho! –Dice más alegre

Durante el resto del trayecto a casa la oigo cantar hasta niveles muy desafinados, pero al menos es feliz.

Esta es su época favorita del año, debería de estar alegre y emocionada. Así es Madie, podrá ser catalogada como infantil por muchos, pero eso es porque en verdad no la conocen. No conocen a la chica compasiva, inteligente, amable, cariñosa y que tiene un talento asombroso para el baile. Y sin duda el estúpido de Kian no merece salir con ella y mucho menos si la hace dudar de sí misma.

Sólo espero que sé de cuenta de que salir con él no vale la pena, ese sería un buen regalo de navidad. Uno que espero que en algún momento se haga realidad.