▪La felicidad no es complicada▪

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Pov Lucy:

-¡Hija! ¿ya estas despierta?- unos golpes en mi puerta me hicieron despertar de mi profundo sueño.

De repente los recuerdos de anoche llegaron a mi mente, un sonrojo invadió mis mejillas, como tan rápido llego igual se marchó.

Mire al otro lado de mi cama asustada, Natsu podría seguir aquí y si mis padres lo veían...¡No! No quería ni pensarlo.

Con miedo voltee mi cabeza y afortunadamente él ya no estaba.
Un suspiro tranquilizador salió de mi.

-¡Lucy!- el insoportable grito de mi madre me hizo dejar mis pensamientos.

-¡Ya desperté!- grite de igual manera.

-Abre la puerta, necesito hablar contigo- un pequeño click me hizo recordar la situación, mi sábana estaba manchada de nuestros fluidos y había una pequeña mancha de sangre.

Me levanté como pude ya que el pequeño dolor que tenía en mi feminidad era incomodo.

Me coloque mi piyama y recogí las sábanas sucias, cogi unas nuevas y lo tendí.

La otra lo coloque debajo de mi cama, luego lo llevaría a la lavadora para limpiarlas.

-¡Lucy Heartfilia, abre la puerta en ese instante!- trate de mantenerme calmada. Y fui a abrir la puerta.

-¿Que deseas?- respondi con un tono serio, después de la pelea de ayer no quería ni verla.

-Háblame bien jovencita, sigo siendo tu madre y ordenó respeto- Yo voltee los ojos y solo me quede callada -Necesito que bajes al comedor, tu padre y yo necesitamos decirte algo muy importante para tu futuro.

-¿Y era necesario ir a mi habitación personalmente para decirme eso?, podías ir con un mayordomo y darle el mensaje para que él me avisara- dijo con cierta duda.

-Eso es fácil querida hija, el mayordomo no iba a darte el siguiente mensaje- cambio la expresión sonriente con cinismo de su rostro a uno enojado y serio- más te vale que te vayas olvidando de aquel rebelde, porque luego de la noticia que se te será dada, nunca más volverás a acercarte a él- después de eso salió de mi habitación -no te demores, sabes que a papá no le gusta tomar su desayuno frío- y cerró la puerta.

Tenía un extraño presentimiento, algo malo iba a pasar, estaba segura.

Deje eso de lado y me enfoque a meterme a bañar, aun me encontraba algo sudada.

Saque un cambio de ropa nuevo y mi toalla, me dirigí a la ducha y prendí la terma.

Nada que un baño caliente no me relaje los músculos.

Me desvesti y me coloque debajo de la regadera, gire la perilla y deje que toda el agua caliente resbalara por mi cuerpo.

De pronto sentí algo que resbalaba desde mis piernas, mire bien y era...
Un sonrojo muy notable pinto mis mejillas, le escencia de Natsu salía de mi cuerpo resbalandose por mis piernas y finalmente cayendo al piso de mayolica de la ducha.

Ahora que me acuerdo... ayer no usamos protección, un susto llego a mi, ¡podía quedar embarazada por esto!

-Pero...un hijo...- pensé mientras mis manos acariciaban mi plano vientre.

Un sonrojo junto a una sonrisa se formaron en mi rostro, siendo sincera...no me importaba quedarme embarazada de él.

[...]

-Hija, ven a sentarte con nosotros- hice lo que mi padre me había dicho sentándome al frente de ellos.

-Buenos días- fingí una sonrisa y una de las sirvientas me trajo un jugo de fresa y unos hotcakes con su jarabe de Maple y unos arándanos decorando la parte superior.

-Yo y tu madre tenemos una noticia que darte- ambos se miraron con una sonrisa cómplice y voltearon a verme, yo tenía el tenedor con una pequeña porción de los Hotcakes.

-A tu padre se le fue invitado al Baile de celebración por asociarse con una de las empresas más reconocidas de todo el mundo, claro, no tan reconocidas como el nuestro- dijo mi madre con ese tono de egocentrismo muy común de ella.

-Felicidades padre, ¿Pero eso en que me afecta a mi?- pregunte aun confundida.

-Verás hija, una parte del trato de unir ambas empresas es que tu contraigas nupcias con el hijo del jefe de la empresa Eucliffe- me quede callada, esto no podía estar pasando...

Voltee a ver a mi madre y esta tenía una sonrisa satisfactoria en su rostro, ahora todo tenía sentido...ella lo sabia y pensó que con esto lograría separarme de Natsu.

¡Ja! Muy bien pensado madre, pero si supieras lo que paso ayer en la noche, ahora más que nunca lucharía por el amor de Natsu y mio.

-Padre yo...- fingí asombro

-Hija se que esto es muy repentino, pero es necesario. Hoy será el evento, allí conocerás a tu futuro esposo- asentí con mi cabeza agachada ocultando una sonrisa de superioridad, eso quería decir que la empresa del padre de Natsu estará invitado también.

-Si no hay más que decir, creo que deberíamos terminar de desayunar para luego ocuparnos del gran evento de esta noche- mi padre me vio con una sonrisa orgullosa y mi madre empezaba a sospechar.

-Me alegra que tomes este tema con mucha tranquilidad y madures Lucy, estoy muy orgulloso de ti- Si supieras padre...

Luego del desayuno todos fuimos a alistarnos, yo llame a Levy-chan, mi mejor amiga desde que tengo memoria, ella siempre me apoyo en todo, era mi cómplice en mis travesuras y definitivamente era una de las personas a la cual le tenía demasiado cariño y aprecio.

Quede con ella en vernos en el Centro Comercial de Magnolia. Sus padres también eran dueños de su propia empresa y al igual que a mi, ella también había sido comprometida con el hijo de la empresa Redfox.

Solo que cuando ambos se vieron fue amor a primera vista, llevando así dos años de noviazgo y en Febrero del próximo año se realizará la tan esperada boda.

Pero en fin, me encontraba colocandome una ropa cómoda y ligera para no tener muchas dificultades en quitármela para probarme vestidos.

Me decidí en una pantaloneta negra con una playera blanca simple y mis converse negros con algunos diseños color blanco.

Una vez lista baje a la sala donde se encontraba mi madre alistandose para ir al salón de belleza.

-Ten la tarjeta de platino- dijo dándomela, yo asentí y me fui sin decirle nada.

Levy-chan me esperaba afuera de la mansión de la familia, se encontraba montada en su auto recién salido de la empresa de sus padres.

Y si, los señores Mcgarden tenían un de las mejores empresas reconocidas por vender automóviles cada vez más modernos a los actuales.

En este caso Levy-chan estaba promocionando el nuevo material que hace menos de 1 mes salió a la venta.

-¡Apresurate Lu-chan!- rápidamente me senté en la parte del copiloto y ella arranco directo hacia el centro comercial.

[...]

-¡Mira! ¡Esto es perfecto para ti- dijo emocionada mi pequeña amiga peliazul sosteniendo un vestido blanco en forma V y algunos diseños en la parte delantera, era hermoso pero no me convenció del todo.

-Quisiera ver otro- dije un poco cansada, llevaba con mi amiga más de una hora visitando tiendas.

-Ahora busco más- y se fue mirando por todos lados algunas otras opciones.

También me decidí en buscar, había muchos vestidos preciosos, pero ninguno me convencía, si no lograba encontrar otro mucho mejor que aquel último vestido, me resignaria y elegiría el vestido de Levy-chan.

De pronto un escaparate llevaba un hermoso vestido color rojo con bobos rosas, escotado en los hombros y en la parte del pecho y los brazos un diseño de rosas color rosado pálido a juego con los bobos.

Me acerqué a ver mejor el vestido, la tela era muy suave, y los diseños se veían mucho mejor.

Le pregunté a una señorita encargada si podía probarmelo, ella con una sonrisa me saco el mismo vestido de otro lugar ya que me dijo que aquel otro era para mostrar.

Me fui al probador y me saque la ropa, me coloque el vestido y mire mi reflejo en el espejo.

-¿Lu-chan?-

-¡Aquí estoy Levy-chan!- saque una mano a través de la cortina del probador -¿Que te parece?- pregunte una vez saliendo a que me vea.

-Wow...Es raro no verte con tus jeans o poleras largas- me dijo, y era verdad, no me gustaba usar vestidos, solo lo hacía en ocasiones especiales.

-¿Gracias?- ella soltó una risa y luego me miró

-Estas muy hermosa Lu-chan, pareces una princesa sacado de un cuento, como la cenicienta por ejemplo- Yo sonreí

-Solo que esta vez, la historia será diferente- dijo con un rostro misterioso.

-¿Eh?- negué con la cabeza y me regrese al probador a sacarme el vestido, obviamente me lo llevaría.

[...]

Luego de un arduo día de puras compras, llegue a casa.

Mis padres estaban con algunos de la servidumbre dictandoles algunas ordenes. No le tome importancia, me dirigí de frente a mi habitación a arreglarme para la tan "Especial" noche.

[...]

Pov Normal:

Una mansión muy brillante se hacía apreciar, dentro de este música clásica se escuchaba, gente millonaria ingresaban con sus hermosos vestidos y sus mejores trajes de gala.

Dentro de ese grupo de gente se encontraban los Heartfilias.

Layla, la madre de Lucy, llevaba un vestido ceñido hasta la parte de las caderas, los hombros libres y el color de vestido era un azul rey.


Jude, la cabeza de la familia, portaba un traje negro con camisa blanca y corbata negra.

Lucy Heartfilia, única hija, llevaba el vestido que había elegido esta mañana. (Multimedia)

Eran una familia "perfecta" a los ojos de la prensa y los demás. Ellos ingresaron, saludando a las personas que se encontrarán en su camino.

Lucy buscaba por todas partes a los Dragneel, pero lamentablemente no los encontraba.

De pronto su padre tiro de su brazo llevándola hacia otra familia.

-Hola Sr Eucliffe. Les presento a mi esposa Layla- ella dio el torso de su mano con una sonrisa hipócrita, el señor beso su mano en forma de saludo -Y ella es mi preciada hija, Lucy.

El señor imitó la acción que hizo con su madre.

-Que hermosa es señorita, me alegra que mi hijo vaya a casarse con una buena mujer- ella solo sonrió y agradeció -Mi esposa le hubiera gustado conocerte, que en paz descanse, él es mi hijo Sting- un rubio de ojos azules y hermosa sonrisa apareció, saludo de manera cortez.

-Creo que es mejor que les demos un tiempo a solas a nuestros hijos para que se conozcan mejor- sugirió Layla mirando a Lucy con una sonrisa malvada.

-Me parece perfecto, mientras tanto quiero platicar algunos nuevos proyectos futuros contigo Jude, ambos tenemos mucho de que hablar- y los padres de ambos se alejaron de ellos.

Ninguno de los dos sabia que decir, el ambiente se notaba tenso. Sting carraspeo la garganta y trato de sacarle tema de conversación a su ahora futura esposa.

-Así que te llamas Lucy, es un bonito nombre- dijo Sting.

-muchas gracias joven Eucliffe- respondió de manera educada sin dejar de buscar con la mirada a su caballero de cabello rosa.

-Por favor dime Sting, después de todo ambos...nos cansaremos supongo...-

-¿No quieres casarte?- pregunto tomándole más atención.

-No quiero que te ofendas ni nada por el estilo Lucy, me pareces una chica hermosa y de buen corazón- empezó a decir sin dejar de mirarla -Pero mi corazón le pertenece a otra doncella. Mi padre me ha obligado a contraer nupcias y no estoy de acuerdo, perdón si te eh ofendido pero lo siento...no puedo casarme contigo.

Aquello había sido como una ayuda de destino, sonrió con sinceridad y respondió.

-No no, no tienes de que disculparte, te entiendo... a decir verdad, mi corazón está ocupado por otra persona, a mi tampoco me agrada la idea de este matrimonio arreglado-

-¿Es enserio?- Lucy asintió y el dejo salir un poco de aire -Gracias Lucy, me hiciste ahorrar un testamento que pensaba decirte, si es que se pudiera, me gustaría que fuéramos amigos.

Ella asintió y ambos sonrieron, a lo lejos ambos padres miraban como sus hijos se llevaban mejor.

-Que buena pinta tiene esto, al parecer nuestros hijos ya se llevan mejor de lo que esperábamos. Creo que habrá una boda muy pronto- ambos brindaron por eso y siguieron hablando de sus temas.

-Pero ahora que lo pienso... ¿como impediremos la boda?- pregunto preocupado el joven.

-No te preocupes, de eso me encargo yo- dijo Lucy con una sonrisa.

-¿Ya viste al joven Dragneel? Es un bombón, dan ganas de comérselo- se escuchó de parte de una de las invitadas.

-Ese hombre es un dios griegos en persona, ¿crees que ya tenga novia?- aquello hizo enfadar a Lucy, ¿que si tenia novia? Pfff, ese hombre era solo de ella.

-¿Me disculpas Sting? Tengo que buscar a alguien- el asintió.

-Yo también tengo que buscar a alguien, suerte- ella camino con pasos rápidos a buscar a su Natsu.

Y allí estaba, portaba un traje elegante con una camisa roja y una corbata negra, se veía muy sexy y guapo con eso puesto.

Agradeció que se encontrará solo, camino hacia él con elegancia sin perder el toque sexy.

Una vez que llego a su lado, le sonrió de manera coqueta.

El pelirosa al verla, se mordió el labio inferior. La cogio de la cintura y se la llevó hacia un lugar apartado.

[...]

-N-natsu...- gimió la rubia al sentir los labios de el pelirosa succionando su cuello, ambos se habían escabullido en una de las habitaciones de esa grande mansión.

Afortunadamente nadie se había enterado de su repentina desaparición. Según lo que le había dicho Gray, él cómplice de Natsu.

El pelirosa bajo desesperado el cierre del vestido de su rubia. Ella tampoco se quedo atrás, empezó a desabotonar la camisa de su novio.

Poco a poco las prendas cayeron al piso, dejando a ambos enamorados desnudos sin dejar de demostrarse su amor.

-Natsu...ah~- gimió al ser llenada por él.

-L-Luce...- y así ambos iniciaron el acto.

Natsu la embestía en diferentes posiciones. Llevandolos a ambos más cerca del orgasmo.

La rubia se encontraba apoyada a la pared cerca a la puerta de espaldas, mientras el pelirosa no dejaba de embestirla y acariciarla en diferentes lugares.

-¿Lucy? ¿Querida estas aquí?- se escuchó a travez de la puerta, su querido "suegro" estaba tocando la puerta.

Ambos pararon su momento de calentura y Lucy se apartó de Natsu.

-Señor Eucliffe, si. Lo que pasa es que me sentía un poco cansada y vine a parar a alguna de estas habitaciones para tomar algo de reposo- se excusó con la primera cosa que se le ocurrió.

Natsu estaba algo frustrado por la interrupción, y no pensaba quedarse así.

Cogio a Lucy de la cintura y entro en ella de manera brusca hasta el fondo.

La rubia tuvo que callar su grito con una mano. El pelirosa no perdió el tiempo y siguió su cometido entrando y saliendo de ella de manera rápida.

La rubia colocó una mano en la pared para apoyarse mientras que la otra tapaba su boca.

-Oh, ya veo hija ¿Ya te sientes mejor?- pregunto el hombre.

-S-si- dijo como pudo- Idiota, ¡para!- grito para sus adentros al sentir como Natsu aumentaba la velocidad.

Ella se encontraba mirando la pared mientras una mano se apoyaba de ella.

-¿Segura querida?- volvió a preguntar el señor.

-Si señor, en un momento bajo- dijo con dificultad, escucho como se alejaba y por fin pudo respirar con tranquilidad.

-¡¡A-ahhh~....!!- grito al llegar al orgasmo. Más Natsu seguía tratando de llegar a su liberación.

-¡Hgm... ah~- gimió el pelirosa al llegar al orgasmo luego de unos minutos más.

-¡Ahh...~!- dijo Lucy al sentir como algo caliente se derramaba en su interior llenadola.

Natsu se la llevó a la cama y se acostó dejando a una rubia encima suyo.

Ambos respiraban agitadamente por la acción anterior. Natsu salio de ella y Lucy soltó un suspiro, ella miró a Natsu y ambos sonrieron para luego besarse con amor. Donde a travez de ese beso inocente ambos se demostraban lo que sentían el uno por el otro.

-Creo que debemos vestirnos y bajar- comento la rubia al estar recostada en el pecho de este.

-Quisiera estar así contigo por siempre- susurro el pelirosa mientras acariciaba el cabello de su novia.

-A mi también me gustaría estar así contigo por siempre- ambos se levantaron y empezaron a colocarse la ropa entre algunos besos y caricias.

-Por cierto Lucy, ¿quien era ese Señor?- pregunto él pelirosa mientras terminaba de abrocharse su camisa.

-Era mi futuro suegro...- susurro al decir eso, sabia como terminaría esto.

-¡¿Q-que?!- exclamó el pelirosa mientras miraba a su novia.

-¡Lo siento! Me entere está mañana, mi mamá lo sabia todo pero no me lo dijo, al parecer ella intentará de todo para separarnos y esto es una de ellas- Natsu se acercó a ella y la abrazo.

La rubia quien tenía su ropa interior puesta, dejo salir sus lágrimas de frustración en el hombro de su amante. Natsu le sobaba la espalda mientras daba algunos besos en su cabellera rubia.

-No me pidas perdón Luce, tu no tienes la culpa. Y créeme que haré hasta lo imposible para evitar que nos separen- dijo despacio el pelirosa mientras secaba con el dorso de su mano las lágrimas que habían resbalado por la mejilla de Lucy.

Ella solo sonrió y termino de vestirse. Cuando ambos estuvieron listos salieron del cuarto.

Se mezclaron con el resto de gente y cada uno se fue por su lado, no sin antes darse un beso.

[...]

Pov Natsu:

Veía como se perdía entre las demás personas, por mi parte fui con mi familia. Allí estaba mi padre, mi madre, mi hermano y su novia junto a algunos socios de mi padre.

-¡Natsu! Justo estábamos preguntado por ti. Tenemos algo que decirte- no se porque pero esto me da mala espina.

Mire al socio de mi padre, era un señor más alto que él. Tenía el cabello albino y a su costado había tres personas mas jóvenes. Suponía que eran sus hijos, había un chico un poco mas bajo que el y dos chicas. Una de ellas tenía el cabello más largo. Y como ha de suponerse, todos eran albinos.

-Dime- pronuncie sin dejar de ver a aquel señor.

-El es el señor Strauss, ellos son sus hijos- me presento mi padre mientras cada uno tenía una sonrisa amigable en su rostro.

-Un placer conocerte, me llamo Elfman Strauss, ellas son mis hermanas- dijo mientras las miraba -Ella es mi hermana mayor Mirajane, y menor Lissana-

Ambas sonrieron y me dieron un beso en la mejilla en forma de saludo.

-Un gusto conocerlas señoritas Strauss- respondi de manera educada.

-Natsu, la noticia que teníamos que darte es que... contraerás matrimonio con la joven Lissana- soltó mi padre mientras sonreía. Mi madre que se encontraba a su lado también tenía una sonrisa.

Mi hermano Zeref bajo su cabeza y negó en silencio a la decisión de ellos, su novia lo apoyaba. Y el señor Strauss junto a su familia sonrieron también.

¡¿Acaso todo el mundo se había puesto de acuerdo en que debían sonreír cuando me dijeran está noticia?!

La hija menor de nombre Lissana se me acercó Sonrojada y tomó mi mano entre las suyas, no podía rechazar su tacto, seria muy descortés de mi parte. Además ella no es la culpable de esta decisión.

-Y-yo me esforzare por hacerte feliz N-natsu...- dijo con timidez

-Y-yo...- trate de decir. Mi padre me miró.

-Vamos Natsu no seas descortés- me hablo mientras con su mirada me decía que acepte.

-Lo siento mucho Lissana...- susurre mientras separaba mi mano de la de ella, mi familia y la de ella me miraba sin entender nada.

-¿Q-que?- dijo ella confundida.

-No puedo aceptar esto, no siento nada por ti y no quiero atarte a mi vida para que seas infeliz- dije mientras me iba afuera a tomar un poco de aire.

-¡Natsu!- exclamó mi padre mientras oía como le pedía disculpas a su socio y sus hijos.

[...]

Pov Normal:

-Vuelvo en un momento- dijo el padre de Natsu mientras seguía a su hijo.

El señor Dragneel siguió a su hijo hasta la fuente que se encontraba afuera de la mansión Eucliffe.

Encontró a su hijo sentado al costado de la fuente, este se acercó.

-Lo siento...- dijo Natsu al saber que su padre se encontraba atrás suyo.

-Porque no le das una oportunidad, se nota que ella siente algo por ti- dijo su padre tratando de no perder la paciencia.

-Es que yo no siento nada por ella padre, es injusto que tu me quieras obligar a casarme con alguien a quien no amo- dijo Natsu mientras se levantaba.

-Mira hijo, Lissana es una muchachita hermosa, sus padres son dueños de una empresa importante al igual que nosotros, con el tiempo el amor surgirá- dijo mi padre mientras se iba.

-Tsk, al corazón no se le puede mandar- pensé mientras volvía a sentarme.

-Eh... H-hola...- escuche una débil voz, mire al responsable y me encontré con la albina, la cual se supone que es mi prometida.

-Hola...- dije algo incomodo.

-Creo que el presentarnos así no fue buena idea- dijo mirando hacia el salón de fiesta.

-Lissana yo...- más ella me puso un dedo en los labios, pidiendo que haga silencio.

-Escucha, se que no sientes nada por mi ahora, más sin embargo... yo si siento algo más que atracción por ti Natsu- Yo aparte su tacto.

-¿Como puede ser eso posible? Nos conocemos hace sólo unos minutos- dije tratando de hacerla entrar en razón.

-Ese es el punto, yo no te conozco desde hace unos minutos, yo te conozco desde hace unos meses- dijo ella mirándome.

-¿Meses...?- dudoso la mire tratando de que me de una explicación.

-Ese ahora no es el punto, Natsu... yo en serio estoy enamorada de ti, por favor déjame... -Ella empezó a acercarse -Enamorarte...

-Lissana que...- pero mis palabras fueron cortadas por los labios de Lissana que se juntaron con los míos.

Intente apartarla pero unas lágrimas de parte de ella me lo impidieron. Me dio un poco de pena, ella enserio me amaba, pero yo lamentablemente no podía corresponderle.

[...]

Pov Lucy:

(Minutos antes)

-Lucy querida, ¿puedes ir a llamar al señor Fullbuster?- pregunto mi padre.

-Claro, ¿en donde esta?- pregunte.

-Afuera, seguramente esta hablando con otros empresarios, pídele que venga de mi parte- Yo asentí y salí del salón para ir al patio.

Y efectivamente allí estaba, cerca de la fuente. Camine hacia él y con una sonrisa le explique el porque de su llamado.

Él inmediatamente fue con mi padre, yo estuve a punto de retirarme cuando una cabellera rosa sobresalía de los arbustos. No había duda, era Natsu.

Camine hacia aquella dirección con la esperanza de poder hablar con él.

Cuando de pronto una imagen me destrozo el corazón.

Él se estaba besando con otra chica.

Las lágrimas no tardaron en salir, me quede quieta sin saber que hacer.

Sentí a alguien tocar mis hombros, era mi madre.

-Yo te lo dije Lucy, los Dragneel solo traen desgracias a nuestra familia- dijo ella.

-Mamá basta...- susurre con un hilo de voz.

-Vamos a casa querida, ahora necesitas descansar- Yo asentí mientras me iba alejando.

Llegue al auto junto a mi madre y el chófer emprendió el camino a casa.

¿Porque él me hizo esto? Si hace un momento habíamos echo el amor.

-...- me quede en blanco, habíamos tenido de nuevo relaciones, sin protección.

Cogi mi celular y le deje un mensaje a Levy.

Continuará...

¡Gracias por leer!

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(Este es el capitulo más largo que eh echo en todas mis obras)

Mei_Dragneel.

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