V. Te ama y te extraña

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Canción del capítulo: Wherever u r

Observaba la luna cada noche antes de dormir, rodeado de estrellas que me recuerdan a ti, a tu brillo, a tu alma resplandeciente. Y te pienso en la oscuridad de una noche solitaria, te extraño cuando las luces se apagan y los recuerdos encienden mi amor que espera pacientemente por su sol —Kim Jade

Dos días nunca se sintieron tan cortos hasta que volvieron a casa después de acampar. Taehyung definitivamente no quería abandonar la paz que tenía en ese lugar.

Después de su conversación con Jungkook todo fue mucho más relajado y divertido. Jugaron con los fuegos artificiales que compraron en el supermercado, comieron todos los postres preparados por Seokjin, cantaron más canciones y rieron por cada una de sus ocurrencias. Taehyung estaba plenamente feliz de estar allí con él, de escucharlo reír, de verlo aguantar el sueño solo para que él se divirtiera un rato más.

Su recuperación fue mucho más rápida después de eso, agradecía que ya no era necesario que estuviera todo el tiempo en casa. Se sintió mucho más renovado cuando pudo volver al trabajo, lo que mantuvo su mente ocupada durante todo el día, con las reuniones, preparándose para volver a abrir el bar, yendo al psicólogo. Estaba siendo productivo una vez más.

Desconectarse de la naturaleza y volver al bullicio de la ciudad fue un poco chocante después de dos días de suma tranquilidad. Volver a la ciudad trajo consigo una avalancha de mensajes en el grupo de chat con Blue Notes, pensó que se había perdido de mucho hasta que vio que hablaban de él y Taehyung, fue entonces cuando recordó la fanática del supermercado y tuvo miedo de leer algo respecto a ello.

Cyrus

Jungkook ya tienes tu primer escándalo, no hay fotos, pero alguien afirma haberte visto en las afueras con un chico que no era ninguno de nosotros.

Jimin

Sabemos que ese alguien más es su novio y no es un escándalo, simplemente lo vieron.

Hyun-jin

Hay una guerra en twitter preguntándose quién es.

Jungkook

Ella solo nos vio comprando carne, no es un escándalo.

De todos modos, qué están hablando?

Cyrus

Bien, bien, ya entendí que no es un escándalo.

Están diciendo que es tu amigo que subes a tus redes sociales, y solo la minoría dice que es más que tu amigo.

Jungkook

Creen que Nam me regañe por esto?

Digo, no hemos hablado de mi relación con Taehyung, pero la empresa sabe de mi homosexualidad, así que no sabría como actuar exactamente.

Hyun-jin

Tu quédate tranquilo y no digas nada. No creo que Nam te diga algo, es decir, Jimin dijo en un en vivo que tiene pareja, el día que se enteren que es su mánager no creo que suceda algo muy bueno. Yo creo que solo debes mantenerte discreto en cuanto a eso, después de todo es tu relación y no tienes que darle explicaciones a nadie.

Jimin

Nuestro Hyun-jin ha crecido mucho.

Estoy conmovido.

Su compañero de banda tenía toda la razón, él no debía pensar en tener que hacer algo. Aunque la disquera no ha abordado ese tema con ellos, todo ha estado muy claro respecto a su relación con un hombre. Entendía que lo mejor era mantenerlo lo más privado que pudiera para evitar controversias que le podrían traer consecuencias a Blue Notes.

La rutina de Jungkook estaba presentando cambios, no solo por el volumen de trabajo que aumentó considerablemente, sino también porque desde que él y Taehyung volvieron a estar en esa conexión que los mantenía unidos y en armonía, se estaba casi acostumbrado a recibir una llamada o un mensaje de su padre los fines de semana.

En sus días libres salían juntos a algún bar y ver deportes juntos, su padre era mucho más fanático que él, pero le agradaba que este hiciera un esfuerzo por entender su amor por la música cuando Taehyung lo invitó a un teatro musical al que fueron solo ellos tres. Luego la salida de ese tipo se repitió, pero esta vez su padre invitándolos a ellos a jugar golf, algo en lo que él era bastante malo, pero tenía a Taehyung que jugaba por él.

—Señor Jeon, es un gran jugador —señaló Taehyung después de haber ganado una partida que fue casi eterna para Jungkook, lo único bueno es que él estaba teniendo una mejor relación con su padre y pasaba tiempo con su novio.

—Es un placer para mí haber jugado con alguien que es tan bueno en el golf —expresó Song-jin.

—¿Podemos ir a comer? Tengo mucha hambre ya —les pidió Jungkook haciendo que ambos lo miraran con una sonrisa enternecida, lo que le confundió un poco.

Los días se volvieron bastante cansados para Jungkook, seguía sin tener mucho tiempo para estar con Taehyung en casa temprano, pero se tomaba un momento del día para escribirle y hablar con él. Como ese sábado en el que aceptaron, casi bajo amenaza, un desayuno en casa de sus padres con Eun-joo, Seokjin y la pequeña Minha que ya estaba dando sus primeros pasos.

Aunque su tiempo era limitado, aceptó quedarse tanto como pudiera porque a Taehyung realmente le entusiasmaba ir a desayunar a casa de sus padres, le sorprendía lo bien que se llevaba con todos, teniendo en cuenta lo encantador que es, no debería extrañarle que tuviera una buena relación con su familia, hasta podría decir que mejor de la que tenía el mismo.

Llegaron temprano en la motocicleta de Jungkook y lo primero que recibió como saludo de su madre fue un regaño por llevar a Taehyung en la moto cuando apenas estaba saliendo de una recuperación por herida de bala. No hubo nada que pudiera decir para que ella cambiara de opinión y gracias al cielo que su novio fue lo suficientemente astuto como para cambiar la conversación a una que emocionaba más a su madre.

Intentó ayudar en la cocina, pero fue echado por una Eun-joo eufórica, como siempre; claramente él no estaría con su novio por mucho tiempo, ellas querían tenerlo solo para ellas.

—Parece que se están divirtiendo allá dentro —comentó su padre, su rostro escondido detrás del periódico que leía todas las mañanas.

—¡Apúrense tengo que salir en unas horas! —gritó Jungkook desde el umbral de la puerta corrediza que daba al interior de la casa—. Y muero de hambre.

—He escuchado a Taehyung hablando en inglés por primera vez en mi vida y todo el inglés que pensé que sabía se fue a la...

—Hey, hey, no frente a la niña —declaró Jungkook cargando a Minha en sus brazos, llenándole el rostro de besos, causando la risa estruendosa de la pequeña—. Es británico, el inglés que nosotros conocemos no se parece en nada al suyo, deberías escucharlo cuando visitamos a su madre.

—¿Y los entiendes o tienen que traducirte? —preguntó Seokjin viendo como su cuñado dejaba a la niña caminar sobre el pasto mientras la sujetaba de sus brazos para que no se cayera.

—A veces tienen que decirme de qué rayos hablan tanto, es difícil entenderlos porque hablan muy rápido, pero ya estoy acostumbrado, así que no es un problema —explicó Jungkook—. Charlotte se siente más cómoda hablando en su idioma con su hijo, no pienso quitarles esa comodidad.

Durante el desayuno Jungkook tuvo a Taehyung sentado a su lado en el comedor, pero apenas y cruzó dos palabras con él. Él estaba completamente inmerso en su conversación sobre plantas y flores con su madre, de postres y recetas con Seokjin y Eun-joo, para rematar de golf con su padre. Él se mantuvo en silencio jugando con la niña sobre el regazo de su novio, quien intentaba meter sus manos en el plato frente a ella.

Taehyung no se apartó de Minha, no lo hizo durante el desayuno y tampoco después. Jungkook observó desde los sillones de la terraza como jugaba con la niña y la hacía reír hasta que su rostro estuviera completamente rojo. No pudo evitar sonreír al verlo tan ameno con Minha, se notaba lo mucho que le gustaban los niños y lo bien que se comunicaba con estos.

—Parece que a Taehyung realmente le gustan los niños, no se ha despegado de Minha —consideró su padre junto a él.

—Le encantan —replicó Jungkook viendo como Taehyung corría con Minha cargada en sus brazos.

—¿Y haz pensando en...

La pregunta de su padre se quedó a medias, por lo que Jungkook ladeo su cabeza para verlo e intentar descifrar qué quería decir, pero este intentaba encontrar las palabras correctas.

—¿Tener hijos? —cuestionó Jungkook volviendo su mirada a Taehyung, perdiéndose en su sonrisa y en cómo besaba los bracitos de Minha.

—Sí, o casarte con él quizás.

—Lo he pensado, pero realmente no estoy seguro de que quiera dar ese paso todavía. Yo sé que Taehyung quizás si quiera tener hijos, es algo que él siempre ha deseado, pero no lo sé, creo que aún no estoy listo para dar ese paso... —admitió Jungkook.

Taehyung se acercaba a ellos con Minha sobre sus hombros, con una sonrisa radiante que podría iluminar un cielo completo.

—¿Eso te hace sentir mal? —preguntó Song-jin mirándolo de reojo.

—Un poco a veces, él y yo estamos en etapas diferentes así que entiendo que él quiera más y tengo miedo de que yo no pueda dárselo, no solo porque no esté listo sino por mi trabajo que cada vez se pondrá más demandante.

—Solo te puedo sugerir que no tomes una decisión si aún no estás listo para dar un paso así de grande, háblalo con él antes. Es comprensible que tengas metas diferentes en la vida, Taehyung ya es un hombre que tiene su vida hecha, lo único que falta es una familia, pero no te sientas presionado por ello.

Jungkook solo asintió y recibió a la pequeña Minha que alzó sus brazos hacía él en cuanto Taehyung llegó a su lado.

—Parece que ustedes tuvieron mucha diversión —consideró Jungkook alzando su mirada hacia el castaño que asintió con una sonrisa de oreja a oreja.

Jungkook apreció sus ojos iluminados mientras se sentaba junto a ellos. Él realmente amaba a los niños.

Los siguientes días fueron como un reto para Jungkook mantener esa armonía con Taehyung. Con el nuevo álbum el ritmo era frenético, estaba realmente muy avanzado. Todo el equipo trabajaba incansablemente, no se imaginaron que volverían a sacar su segundo álbum tan pronto, no es que les haya ido mal con las ventas, de hecho, les fue mucho mejor de lo que esperaban, aun así, Jungkook era consciente de que estaban invirtiendo mucho dinero en este segundo álbum que les exigía más esfuerzo.

Los días y noches se escurrieron en sus dedos como arena, 24 horas en el día no parecía ser suficiente para terminar de seleccionar las canciones que iban y las que no, los arreglos vocales de Hyun-jin y Jimin, los nuevos sonidos que estaban probando con sus instrumentos.

A pesar de que sus días estaba llenos de muchas grabaciones de contenido, interacciones con sus fans, el programa de variedades que salía cada semana y las reuniones ejecutivas en la que discutían el concepto final del álbum y las fechas de lanzamiento, nunca olvidó dejarle una nota a Taehyung todas las mañanas y llamarlo o escribirle cuando tuviera un momento libre, muchas veces hablaba mientras lo maquillaban o le acomodaban la ropa.

A veces resultaba un poco incómodo que otras personas estuvieran al tanto de las cosas que él hablaba con su novio, pero era la única manera en la que podía mantenerse en contacto con él mientras trabajaba.

No importaba que algunas personas del equipo murmurarán en las esquinas cuando él decidía llamar a su novio en medio de una grabación, no importaba las miradas curiosas cuando usaba apodos cursis o se reía por algo gracioso que le haya dicho Taehyung; siempre y cuando sus palabras de aliento continuarán siendo su motor, el resto no importaba.

Su apoyo y la confianza que depositaba en el cuándo el mismo dudaba, lo impulsaba a continuar incluso en los días más agotadores.

Finalmente había encontrado la manera de mantener a Taehyung feliz, lo que también ayudaba a que no lo extrañara tanto antes de llegar a casa. Al principio fue un gran esfuerzo, tal y como su novio se lo pidió, mantuvo el contacto con él con cosas mínimas pero significativas como un vídeo breve de las cosas que estuviera haciendo en el momento aún fuera solo grabando música en la cabina o en las clases de baile.

Hacer ese tipo de cosas hizo que fuera más fácil para él sentirlo cerca y saber cómo iba su día. Los miércoles preguntaba cómo le había ido en el psicólogo o en terapia pos-operación.

Aquella mañana de un domingo lluvioso, Charlotte apareció en la puerta del apartamento de su hijo con un bolso lleno de ingredientes para cocinar, esperaba encontrarse con Taehyung, pero fue recibida por la sonrisa de Jungkook.

—No me digas que Tae fue a casa, le dije que venía de camino, pero no me respondió —señaló la mujer antes de abrazar al pelinegro.

—Tuvo que salir temprano a reunirse con unos extranjeros inversionistas, no debe tardar en volver —declaró dejando pasar a la mujer.

—¿No tienes trabajo hoy? —preguntó ella.

—Sí, mi agenda empieza en la tarde y no sé a qué hora termine la verdad.

—Perfecto, porque traje mucha comida para cocinar, ¿no te molestará ayudarme? —preguntó la mujer entrando a la cocina con Jungkook siguiendo sus pasos.

—De hecho, me encantaría aprender a cocinar un plato inglés.

—Pongámonos manos a la obra, entonces.

Jungkook asintió emocionado, viendo como Charlotte sacaba todo tipo de ingredientes de las bolsas de supermercado. Puso uno de los discos de Taehyung en reproducción y no solo tuvieron el sonido de la lluvia torrencial que caía afuera, sino también la voz de Nina Simone en un tono moderado que les permitía mantener la conversación.

No era su primera vez teniendo en frente un desayuno británico, pero de todos modos le seguía pareciendo extraño que sofrieran el tomate y comieran alubias en la mañana. Siguió los pasos que le indicó Charlotte al pie de la letra, ella le ayudó con algunos vegetales, a batir el huevo, pero el resto de las cosas las hizo él.

—A Taehyung le gusta mucho este tipo de desayunos pesados, nunca se acostumbró al arroz en la mañana, lo suyo son muchas salchichas y pan tostado, el tomate frito no puede faltar jamás —informó Charlotte—. También le gusta mucho el fish and ships, aunque aquí hay pocos lugares británicos, pero tiene a su madre que le prepara todo eso y pronto tendrá a su novio también.

—Él es muy británico, ¿cierto?

—Si que lo es —señaló—. Aunque ama a su padre, siempre se ha sentido más cómodo con la cultura inglesa, supongo que es porque vivió más tiempo rodeado de británicos.

—Tengo entendido que él estudió en Londres y vivió allá por un tiempo, entonces, ¿Por qué volvió a Corea? —cuestionó Jungkook curioso.

—Quería volver al bar a donde su padre fue muy feliz —explicó Charlotte—. Yo volví con él, porque a pesar de que mi familia estaba en Inglaterra, yo siempre estaré donde este mi hijo, sin importar a donde vaya.

—Charlotte —masculló Jungkook—. Es una buena madre, Taehyung la ama mucho.

—Lo sé, me esfuerzo.

En cuanto terminan de preparar el desayuno, Jungkook se siente orgulloso de su preparación. Taehyung llega al apartamento algo húmedo por las lluvias.

—¿Buenos días? —cuestionó el castaño en el instante que sus ojos se posaron en su madre que terminaba de preparar la mesa junto a su novio—. Mamá no me dijiste que vendrías.

—Si lo hice, cariño —expresó la mujer abrazándolo en forma de saludo al mismo tiempo que besaba su mejilla—. Pero parece que no estabas cuando lo hice.

—¿Y todo esto? —cuestionó Taehyung al chico que le daba la espalda mientras dejaba en la mesa algunos vasos.

El suave toque de la mano de Taehyung alrededor de su cintura hizo que se ladeara su cabeza para poder mirarlo y sonreírle con cierta timidez en sus ojos brillantes de emoción.

—Cociné esto para ti —expresó en un tono de voz bajo—. Con mucha ayuda de tu madre.

—Se ve delicioso, honey —susurró con una sonrisa—. Estas hecho todo un británico.

En cuanto se sentaron en la mesa, Jungkook no comió hasta escuchar la reacción de Taehyung y bajó su mirada con una sonrisa en el rostro que se fue agrandando a medida que escuchaba como este saboreaba y hacia sonidos de disfrute con cada bocado. Le dedicó una mirada a Charlotte frente a ellos y esta le hizo señas con los dedos de que estaba delicioso.

En ese momento agradeció lo consejos de su madre y Seokjin en todo lo que tuviera que ver con la cocina, no era un experto, pero podría aprender a preparar una comida decente si se lo proponía.

Los días libres se fueron acortando para Jungkook, por más que quiso continuar yendo a desayunar con su madre o cenando con Taehyung en algún restaurante después del trabajo, no pudo hacerlo. Estaba trabajando en su álbum a tiempo completo y a pesar de que su tiempo para estar con su pareja era limitado, no dejó de escribirle notas en medio de la madrugada cuando tenía que irse a grabar contenido o de dejarle saber cómo estaba yendo su día, aunque fueran pocos mensajes.

Ya eran pasadas las once de la noche cuando Jungkook aún seguía intentando tocar el piano que la agencia le regaló como parte de la clase de música que ellos tenían. Aun no sabía tocarlo, solo algunas notas, pero por las respuestas que estaba obteniendo de sus fans sabía que eso no importaba mucho.

Taehyung se mantuvo sentado en frente a él en una esquina, de modo que no saliera en el marco del teléfono que su novio usaba, estuvo viendo todo el en vivo desde su móvil con sus auriculares puestos y haciendo completo silencio, aunque a veces quiso reír por las cosas que comentaban.

En más de una ocasión tuvo el impulso de salir detrás de la cámara y besar a Jungkook cuando coqueteaba con quienes le pedían que hiciera algo lindo, pero decidió mantenerse tranquilo hasta que su novio decidió terminar el en vivo.

—¿Cuándo sale el álbum? —preguntó Taehyung sentándose en el sofá negro, mientras este terminaba de recoger las cosas de su escritorio.

—Mañana —respondió Jungkook.

—¿Hay alguna canción para mí?

—Tengo muchas canciones para ti, pero solo una fue seleccionada para este álbum, Jimin escribió gran parte junto a Cyrus —admitió mirándolo por encima de sus hombros.

—Estoy seguro de que me gustará tanto como el primero —le aseguró Taehyung al ponerse de pie.

—Vamos a casa. Ya es muy tarde —indicó Jungkook tomándolo de la cintura cuando este se detuvo frente a él con una sonrisa cálida sin mostrar sus dientes.

—Es la hora perfecta para que yo te haga el amor esta noche —admitió Taehyung dejándose acurrucar en los grandes brazos de su novio que lo mantenía pegado a su cuerpo.

Es como si su cuerpo hablara solo y el de Jungkook respondiera al tomarlo de esa manera de la cintura y dedicarle esa mirada llena de amor y deseo que debilitaba su corazón.

—¿No estás cansado? —cuestionó Jungkook tratando de esconder su sonrisa.

—¿Tu lo estás? —preguntó Taehyung devuelta.

—No, si es para eso, no —admitió Jungkook alzando sus cejas y remojando sus labios.

Le estaba provocando. Como le encantaba cuando Jungkook hacía eso.

—Atrevido —señaló Taehyung sonriente—. Mi doctor me dijo que he avanzado mucho con la terapia de movimiento, así que, podré hacerte chillar esta noche, ¿hace cuánto no lo hacemos?

—¿Días? —preguntó Jungkook divertido.

—No, ¿hace que tanto yo no te hago el amor a ti? —reformuló con diversión.

—Ah —expresó formando una O con sus labios—. Meses.

—Me parece justo que rompamos con esos meses. Hoy realmente tengo ganas de...

—No lo digas —le pidió Jungkook posando su dedo índice sobre los labios de Taehyung—. Hazlo.

Jungkook le estaba dando permiso para que hiciera con él las cosas que tenía en mente. El camino de vuelta estuvo lleno de una tensión casi palpable, cualquier roce hacía que sus cuerpos reaccionaran con deseo, un deseo que explotó en el instante que llegaron al interior de su apartamento.

Apenas cruzaron el umbral de la puerta y la misma fue cerrada, Jungkook lo pegó contra la pared, acorralándolo entre sus brazos y arremetiendo contra sus labios con necesidad.

Sucedió tan rápido que no les dio tiempo a reaccionar a nada, sus respiraciones agitadas se mezclaron con el sonido de sus labios mientras se besaban con intensidad. El fuego creció entre ellos cuando la única ropa que quedaba eran los bóxeres y las medias blancas. Los labios de Jungkook se ven hinchados cuando estos se separan en búsqueda del oxígeno que no parecían necesitar mientras sus bocas saboreaban la del otro con indiscreción.

Taehyung le dedica una mirada intensa bañada en lujuria al mismo tiempo que pasa sus dedos por el abdomen trabajado de Jungkook, aun levemente acorralado contra la pared, aprecia lo pequeña que es su cintura, lo fuerte que son sus brazos y lo grande que son sus muslos. A la vista, Jungkook era simplemente fuerte y grande pero lindo, su cuerpo tenía algo de elegancia en la suavidad de su piel y su diminutiva cintura con la que estaba obsesionado.

Sin que el pelinegro lo esperara, Taehyung lo toma de la cintura con ambas manos y hace que de tan solo un par de pasos hacia atrás hasta llegar a la mesa. Ahora es él quien lo acorrala entre sus brazos, mientras este lo mira expectante, con la respiración agitada, tratando de mantener el equilibrio y no sentarse sobre el comedor de madera.

Falló en cuanto Taehyung volvió a unir sus labios. Con más profundidad, más sucio, más descarado. Un jadeo se escapó del ataque que recibía su boca con gusto cuando su novio tomó su rostro, sujetándolo de las mejillas con una mano, lo suficientemente fuerte como para que no pudiera huir de aquel asalto.

Su voz salía ronca y dócil a medida que el beso se fue volviendo más caliente. Taehyung chupó su labio inferior, el hizo lo mismo y como respuesta tuvo un ligero mordisco en su piercing que le hizo gemir contra la boca del hombre que sonrió al escucharlo.

—Tus sonidos de placer son hermosos —declaró Taehyung mirándolo a los ojos, notando como la respiración de Jungkook era errática.

Taehyung inicia un viaje de besos por su cuello, sigue por su mandíbula, sujetándolo fuerte contra su cuerpo, rozando sus intimidades mientras dirigía sus besos por la mandíbula marcada de Jungkook y continúa por sus hombros y pecho hasta llegar a su vientre plano.

Sonrió desde su lugar, alzando la mirada hacia Jungkook que lo observaba desde la altura que ahora gozaba al Taehyung estar hincado frente a él. Sin apartar su mirada, Taehyung se acercó con cautela, pasando sus dedos por el abdomen del pelinegro, logrando que este se contrajera en el proceso y una risita de superioridad salió de su boca antes de besar el ombligo decorado por el piercing de plata de su novio.

Sus manos bajan por sus pelvis hasta llegar al bulto en su entrepierna. Jadeos se escucharon en forma de repuesta y de un tirón se deshizo de su ropa interior.

—Date la vuelta —le ordenó Taehyung subiendo y bajando sus manos por sus muslos.

—¿Qué? —preguntó Jungkook incrédulo.

—Date la vuelta —repitió Taehyung.

Algo dudoso Jungkook le hizo lo que le pedía, sin saber que él haría exactamente, lo supo inmediatamente le dio la espalda y tuvo que apoyar sus manos del comedor al sentir como el cabello de Taehyung le hacía cosquillas en sus muslos internos.

El ambiente se llenó de suspiros y jadeos. Jungkook se sentía tan sensible, no puede asegurar si no es por las cosas que Taehyung hacía con sus manos y con su boca, o el hecho de estar en la sala. No es al a primera vez que lo hacen fuera de la habitación, pero se seguía sintiendo mucho más excitante, prohibido, osado.

—Por f-favor hyung.

Taehyung sonrió contra el trasero de Jungkook al escucharlo llamarlo de esa manera. Estaba usando la carta de "hyung" porque sabe que es débil con esa palabra. Él la usa poco y casi siempre en momentos de súplica como aquel.

—Estas muy sensible, honey —declaró sin dejar de hacer movimientos de tijera en su interior—. ¿Te gusta aquí?, ¿quieres que lo haga aquí?

—Sí, sí, si —gimoteó bajando su cabeza.

—¿Y cómo se dice? —preguntó Taehyung con una sonrisa socarrona que el pelinegro no podía ver.

—Por favor, hazlo ya —suplicó apretando sus manos de la orilla del comedor.

—Ponte un poco más cómodo —le pidió levantado una de sus piernas e inclinado más su cuerpo hacia el frente.

La sala se llenó de los gemidos de Jungkook mezclados con los suspiros y las maldiciones en inglés de Taehyung. Sus embestidas fueron desenfrenadas, no estaba midiendo su fuerza, pero sabía que su amante estaba disfrutándolo por cómo este gritaba de placer sin una pizca de timidez en sus gemidos y peticiones llenas de lujuria.

Las manos de Taehyung sujetaron con determinación la cintura de Jungkook y con un par de estocadas más sintió como todo el cuerpo de su novio se sacudió bajo la fiereza de sus penetraciones. Los gemidos guturales de Jungkook fueron acompañados por gruñido roncos de Taehyung mientras se liberaba junto a él en un orgasmo que contrajo todo su cuerpo e hizo temblar las piernas del pelinegro que ya no sabía de dónde podría agarrarse más que le propio cuerpo que lo sostenía por su cintura.

Un clímax intenso, sudoroso y sobretodo sucio.

—Mañana lucirás radiante en el lanzamiento del álbum —declaró Taehyung al salir de su interior, apreciando como el líquido se deslizaba por las piernas ejercitadas de su novio.

—Vamos a la ducha —le pidió Jungkook al reincorporarse sintiendo como sus piernas aun temblaban cuando enderezó espalda.

—¿Quieres que de un masaje en la cabeza y besos en la cama? —cuestionó Taehyung entrelazando sus manos.

—Si —masculló mirándolo a los ojos.

Sin decir nada más, caminaron juntos hasta el cuarto de baño y se metieron debajo de la ducha. Taehyung se encargó de lavar el pelo de Jungkook y darle masajes, el pelinegro frotó la esponja por su cuerpo de vez en cuando dejando besos en los hombros de Taehyung y susurrando uno que otro te amo.

La intención de Jungkook no era provocarlo, solo estaba siendo cariñoso. Se convirtió en provocaciones cuando Taehyung dejó escapar un gemido en cuanto las manos de Jungkook apretaron su cintura en medio de un beso en su espalda mientras que su otra mano descendía por su trasero bajo la excusa de que estaba enjabonándolo.

—¿De verdad tienes la energía como para hacer esto? —preguntó Taehyung cerrando la ducha que en lugar de enfriar el ambiente entre ellos causaba el efecto contrario.

—Solo si tú quieres.

No hizo falta que Taehyung dijera nada más, con el beso que fue iniciando por Jungkook y la manera en la que le correspondió bajo el hechizo de sus manos sujetándolo de la cintura, besándolo con tal intensidad que erizaba su piel.

Con la necesidad de tenerlo cerca, sus cuerpos se mantuvieron pegados. Sus manos se movían por todo su cuerpo con destreza, conocía sus puntos débiles, sabía donde apretar, donde presionar, donde besar. Jungkook conocía a la perfección sus debilidades.

Un gemido se escapó de sus labios en cuando Jungkook lo levantó del piso y lo pegó al vidrio de la ducha. Taehyung lo abrazó con sus piernas y sus brazos sobre sus hombros, mientras su novio lo sujetaba con fuerza de la cintura sin dejar de besarlo.

—Te gusta mucho cuando te levanto así de fácil —dijo con orgullo contra la boca de Taehyung.

—Conoces mis fantasías y eso es un peligro —declaró Taehyung peinando hacia atrás el cabello húmedo de Jungkook.

—No es un peligro si soy yo, siempre cuidaré de ti.

—Es un peligro porque me calienta hasta el punto que quiera que me hagas cosas muy sucias.

Taehyung se sujetó fuerte de los hombros de Jungkook cuando este se movió al otro extremo de la ducha y sin que este se lo pidiera, Taehyung se sujetó aún más fuerte mientras el pelinegro destapaba el lubricante que escurrió en sus dedos, dejándolo en el aire solo por un par de segundos. A Taehyung el excitó aún más que este pudo sostenerlo, incluso si sus manos no estaban completamente en él.

—Estamos en la ducha, dime las cosas sucias que quieres que te haga —declaró introduciendo sus dedos en su interior, mirándolo a los ojos.

—¿Dónde está el chico que me suplicaba antes? —cuestionó Taehyung entre jadeos.

Volvió a sentir el vidrio en su espalda, pero los movimientos de los dedos de Jungkook no le permitía pensar con mucha claridad.

—Me puedo adaptar al momento y actualmente soy el que tiene el control, lo único que puedes hacer ahora mismo es disfrutarlo, pedirme lo que quieras y gritar mi nombre, ¿harás eso? —cuestionó Jungkook acomodándolo de manera que pudiera entrar en él.

No era lo más cómodo, pero si lo más excitante al estar de pie en medio de la ducha.

—Si me porto bien, ¿tendré algún premio?

—Depende de que tan bien —declaró Jungkook mirándolo a los ojos.

En medio de las fuertes embestidas Taehyung expresó todas esas cosas sucias que quería recibir, una sonrisa cínica de Jungkook solo fue otro motivo de su perdición en un mar de lujuria y placer. La ducha fue inundada por gemidos guturales, el choque de sus pieles humedecidas por el agua que volvió correr para esconder un poco los gritos de Taehyung que fueron cada vez mas alto.

—¡Jungkook! —gimoteó buscando de manera desesperada mantener algún tipo de equilibrio, pero sus manos terminaron pegadas al vidrio.

No podía creer lo profundas que eran sus embestidas, estaba tocando ese punto en su interior que le enloquecía. Ya no podía dejar de maldecir y gemir en voz alta lo mucho que le gustaba. Se sujetó sus bíceps, vio como mordía su labio inferior causando que el hoyuelo en su mejilla se marcara.

El movimiento de su cabello negro mojado y como los músculos de su pecho se contraía con cada subida y bajada. Terminó corriéndose en el pecho de Jungkook, apretando sus piernas alrededor de la cintura de Jungkook mientras este bajaba la velocidad de sus embestidas, gruñendo contra sus labios al llegar al clímax igual de intenso que el anterior.

—Ahora el que quiere masajes y besos en la cama soy yo —declaró Taehyung en cuanto ambos recuperaron el aliento.

—Puedo dártelos, yo también quiero tus caricias en la cama —admitió Jungkook mientras lo limpiaba y esta vez sí lo hizo por completo.

En cuanto se cubrieron con las sabanas en la cama, en la oscuridad de la noche, recostó su cabeza del pecho de Jungkook, tomó su mano que lo abrazaba por la cintura y la beso. Jungkook tomó su mano y también beso el dorso de esta.

—Te amo —masculló Jungkook besando su cabeza—. Te amo tanto, miel.

—Y yo a ti —susurró Taehyung abrazándolo más fuerte por encima de su pecho.

════🎸 ━━━『🍸 °*• ♫ •*° 🍸』━━━🎸════

El segundo álbum de Blue Notes fue lanzado a la media noche del día siguiente. Jungkook se sintió algo cansado por los eventos de la noche anterior, pero no se arrepentía de nada, más bien, estaba muy emocionado y feliz por el lanzamiento.

Aunque Cyrus es el que siempre monitorea las cosas que dicen o hacen sus fans, esa noche todos ellos se mantuvieron expectantes de las opiniones de sus fanáticos en las redes sociales. Jungkook se sintió mucho más aliviado al ver la buena respuesta que estaba teniendo.

Las promociones iniciaron inmediatamente salió el álbum. Las entrevistas en los programas de televisión, las presentaciones de sus nuevas canciones en Music Bank y en la mayoría de los programas de ese tipo.

Taehyung lo acompañó en algunas de esas grabaciones y se sintió mucho menos nervioso sabiendo que él estaría en su camerino en cuanto bajara del escenario y que volvería a casa con él. Era muy importante para Jungkook que estuviera apoyándolo en ese momento, así que agradeció que se hubiera esforzado por levantarse muy temprano y tomar un día libre completo solo para mostrarle su apoyo y dejarle saber que estaba allí y que no tendría que extrañarlo tanto ese día.

Los bailes de sus canciones en las redes sociales eran cada vez más populares, por lo que tuvieron que aprender una coreografía corta con solo el coro del sencillo y complacer la petición de sus fans al publicarlo en su página principal.

Fue difícil para ellos seguir el ritmo o mantenerse coordinados. Un momento lleno de risas mientras intentaban hacer un baile que pensaba se veía ridículo en ellos, pero lo hicieron para hacer feliz a quienes lo apoyaban con tanto amor.

Aunque haya sido un caos, lograron tener una buena toma del baile en la que ninguno, milagrosamente, lo estropeó.

Posicionarse en las listas era importante para la empresa y para ellos también, pero ninguno esperaba que llegaran a ese punto en su segunda semana después de su lanzamiento. Fue emocionante ver el nombre de Blue Notes en las listas de éxitos musicales. Las ventas iban bien, la canción principal se hizo popular en las redes sociales y más gente empezaba a hablar de ellos.

Cada noche en el estudio, cada frustración en la cabina de grabaciones, cada día que tuvo que quedarse por más tiempo, valió la pena, porque definitivamente estaban teniendo más éxito con el segundo álbum y ese era el propósito.

Su presencia en las redes sociales se volvió mucho más activa con el lanzamiento del álbum, así que los en vivo grupales se hicieron más recurrentes, por lo que los fans estaban más que complacidos.

—Taehyung dice que te ama —expresó Cyrus mientras sostenía el móvil en su mano para poder leer los comentarios de los fans, mientras los demás hablaban y hacían tonterías entre ellos.

Jungkook se sorprendió cuando su compañero a su lado mencionó el nombre de su novio. Levantó su mirada hasta el staff que monitoreaba el live y esperó que ellos le dieran alguna señal de que no dijera mucho, pero no lo hubo.

—Yo también te amo, miel —respondió mirando a la cámara frente a ellos.

—Ahora nuestros fans preguntan por qué les dices miel y no gem —respondió Cyrus mirándolo mientras el pelinegro tomaba un sorbo de la bebida que le fue servida junto los demás aperitivos en la mesita de muebles frente a ellos.

—Mmm —Jungkook miró a sus compañeros de reojo antes de continuar—. Solo se me ocurrió.

—Taehyung comentó: Cyrus, tócate una oreja si puedes leer esto. —El rubio se tocó la oreja y leyó el comentario que le siguió—. Dile a Jungkook que lo amo mil millones de infinitos.

—Amigo, Taehyung te ama mil millones de infinitos —expresó Cyrus, lo que hizo que todos se rieran.

Jungkook ocultó bajo su cabeza y se rio bajito.

—Gracias amigo —expresó con la mirada en el rubio a su lado.

Volvió a reírse cuando este le guiñó un ojo en complicidad con lo que solo ellos podrían saber lo que estaba sucediendo allí, por lo que Jungkook se cubrió la boca mientras se reía y sentía sus mejillas calentarse de solo pensar que Taehyung estaba usando la sección de comentarios de su en vivo para comunicarse con él y decirle que lo amaba.

Lo único que lo salvaba de que las demás personas se dieran cuenta de quien decía aquello, es que no estaba usando un perfil oficial o público, además en la plataforma donde hacían sus lives no había mucha información que la gente pudiera usar para saber de quien se trataba. Eso lo dejaba más tranquilo.

—¡Por Dios que cursis! —chilló Jimin tomando el móvil de las manos de Cyrus—. Taehyung, todos aquí te amamos, aunque no podríamos decir que tantos millones de infinitos.

Jungkook se dio cuenta de que aquella acción fue la manera de su mejor amigo hacer de lo sucedido algo más discreto, lo que agradeció porque no tenía idea de cómo podría terminar si el continuaba respondiendo los comentarios de Taehyung de esa manera.

El álbum: "From the other side", con sus melodías pegajosas y letras profundas, resonaba en los corazones de los fans, y toda la promoción que tuvieron por su disquera los impulsó a ser reconocidos en otros países y tener éxito. Igualmente, la empresa no perdía el tiempo cuando se trataba de marketing al hacer una campaña agresiva que incluía mercancía exclusiva en el que destacaba el distintivo logo de la banda, de sus fanáticos y el lema que los caracterizaba.

La apuesta era grande, pero los resultados prometían ser aún mayores.

En medio de su agenda de presentaciones y entrevistas, Blue Notes fue convocado a una reunión con Namjoon y parte de su equipo creativo. Eso solo sucedía cuando ellos tenían algo muy importante que decirles, ellos sabían que les estaba yendo bien, estaban en su mejor momento, así que las probabilidades de que fuera una mala noticia eran muy bajas.

Jungkook no pudo evitar sentirse algo presionado en cuanto llegaron a la sala de juntas, sus compañeros ese día se notaban bastante relajados, lo que le hacía preguntarse porqué él estaba nervioso de lo que sea que estuviera ocurriendo. Quizás el tener una vaga idea es lo que le hacía precipitarse a los pensamientos y lo que tendría que hacer.

Muchas veces sentía que no estaba en la misma sintonía que sus compañeros de banda en niveles de emoción, no podría decir que no estaba igual de emocionado por el éxito que estaban tendiendo después de haber tocado en bares y festivales, pero había algo en su interior que no le permitía estar igual de entusiasmado. El miedo de estar lejos por mucho tiempo de la persona que ama, y aún peor, llegar a perderlo por el poco tiempo que tendrían juntos, era intenso.

Inmediatamente escuchó la noticia, sus amigos fueron los primeros en reaccionar, el se quedó inmerso en sus pensamientos teniendo todo tipo de imaginaciones que siquiera podía tener en orden. Imágenes de gritos, la vibra de la música, un escenario, frustraciones y lágrimas.

Fue entonces cuando la emoción invadió todo su cuerpo y se puso de pie a celebrar junto a sus compañeros. Una gira, pequeña pero significativa para ellos, darían conciertos en lugares pequeños que marcarían su éxito en el extranjero y elevaría su popularidad hacia otros países, todo estaba en que ellos lo dieran todo por quienes pagarán para verlos tocar su música.

Sintió su corazón acelerarse de sólo imaginarse sobre un escenario con personas que estaban allí para verlos y vivir su sueño juntos. Muchas veces soñó con que ese momento llegaría, en numerosas ocasiones se vio a sí mismo en grandes escenarios, tocando la guitarra, disfrutando de lo que más amaba.

Ya era un hecho de que estaría de gira por varios países asiáticos, a Jungkook le sorprendió que ya tenían fechas para cada país lo que le hizo pensar que ellos han estado planificando sus primeros conciertos desde que salió "Across the Love".

Desde que recibió la noticia no ha sabido como decirle a Taehyung, tenía miedo de lo que pudiera pasara entre ellos ahora que estarían distanciados no solo por horas, sino por días, meses. Lo peor de todo es que no tenía seguro cuando volvería exactamente, se podrían abrir nuevas fechas en otros países dependiendo de cómo les fuera con el álbum y las noticias de ellos en conciertos.

—¡Honey eso es maravilloso! —gritó Taehyung emocionado en el momento que finalmente le dio la noticia.

No podía esperar a tener otra reunión con el equipo creativo para decirle, no podía esperar a que solo estuvieran a días de irse del país para empezar a tocar su música en vivo.

Y allí estaba, con Taehyung en el salón privado de ese restaurante que ellos suelen visitar en su tiempo libre, abrazándolo y llenando su rostro de besos.

—¿No estas feliz? —cuestionó el castaño al ver como Jungkook apenas tenía una sonrisa en el rostro—. Es tu sueño, empezarás a dar conciertos y ahora tendrás a muchas chicas y quizás chicos gritando tu nombre: ¡Jungkook te amo! —expresó Taehyung imitando la voz chillona de una fanática.

—Si, estoy emocionado, oh, no sabes cuánto, pero también tengo miedo de muchas cosas —admitió Jungkook mirándolo a los ojos mientras su novio lo tomaba del rostro con ambas manos.

—Es normal que te sientas nervioso, pero no debes tener miedo, estarás rodeado de personas que te aman, incluyéndome, no estarás solo en ningún momento.

—No quiero alejarme de ti.

—Honey, ambos sabíamos de que este momento llegaría tarde o temprano. Si te soy honesto, me estuve preparando mentalmente —declaró acariciando sus mejillas.

—¿Vas a esperarme cierto? —cuestionó Jungkook entrelazando sus manos.

—Claro que si, estaré aquí cuando vuelvas a casa, y te apoyaré donde sea que estés, aunque no pueda verte —le aseguró Taehyung.

—Miel, es muy probable que este lejos el día de tu cumpleaños, será el primer cumpleaños desde que estamos juntos que no te tendré a mi lado.

—No te preocupes por eso, sabremos como celebrarlo en la distancia —expresó Taehyung—. Quiero que te concentres en disfrutar este momento y vivirlo al máximo. Nosotros estaremos bien, yo no iré a ningún lado, tampoco dejaré de amarte porque estés lejos.

Mantener la comunicación en la distancia sería un reto para ellos, uno que Jungkook estaba dispuesto a asumir. La prioridad era que mantuvieran la rutina que ya tenían, sin importar la diferencia horaria o la distancia. Con las palabras de Taehyung se sintió más seguro que podrían hacerlo.

Sus días se llenaron de ensayos y reuniones en las que se compartían toda la información de cómo serían los conciertos, en qué lugares estarían y por cuanto tiempo. Meses, estaría meses lejos de casa, pero estaría cumpliendo su sueño de compartir su música con el mundo.

Era un trago amargo, pero con dulzura. Mantuvo en sus pensamientos la petición de Taehyung, "disfruta lo que amas". Lo iba a disfrutar.

Las maletas ya estaban hechas en la sala de estar, el boleto de avión ya estaba comprado. Se despidió de su familia dos días antes durante una cena preparada por su madre, quien claramente lloró de emoción y tristeza de saber que lo tendría lejos por más tiempo de lo que lo ha tenido desde que empezó a tener éxito. Desde que volvieron a tener una relación más cercana, se veían mucho más seguido que antes y es por ello que la despedida con su padre fue igual de emocional.

—Están invitados al último concierto que será aquí en Seúl —expresó Jungkook entregándole los boletos que tenía para familiares, aunque aún no estaban a la venta.

—Gracias hijo, te esperaremos con emoción —expresó su madre antes de darle un último abrazo.

Esa noche, se acurrucó entre los brazos de Taehyung. A las 12 de la media noche cuando debería estar dormido, sin embargo, estaba con el móvil de Taehyung, quien intentaba ver que era eso tan importante que debía hacer, pero no le dejó saber hasta cuando ellos estuvieran separados.

A pesar del cansancio que pesaba en sus párpados, su mente estaba llena de pensamientos sobre el próximo viaje. Jungkook dejó el teléfono a un lado y se acomodó más cerca de Taehyung, disfrutando del calor de su cuerpo y de la familiaridad reconfortante de sus brazos alrededor de él.

—No puedo evitar sentirme un poco nervioso por el tour —admitió Jungkook, dejando escapar un suspiro.

Taehyung le acarició suavemente el cabello.

—Lo entiendo, pero vas a estar increíble, como siempre. Y yo estaré aquí esperando por ti, cada paso del camino.

Una sensación de calma le envolvió al escuchar las palabras tranquilizadoras de Taehyung. Saber que tenía su apoyo incondicional significaba más de lo que las palabras podían expresar.

El bullicio del aeropuerto se hizo presente, el cúmulo de personas alrededor fue notable inmediatamente llegaron en los coches de la empresa. A Jungkook se le permitió que Taehyung fuera a despedirlo al aeropuerto, su novio en una primera instancia no quiso porque creía que sería más difícil para el irse junto a sus amigos, se volvió más complicado cuando había fanáticas en la entrada del aeropuerto, no eran muchas, pero si lo suficiente como que crear un cúmulo imposible de ignorar en la entrada.

Taehyung tuvo que quedarse dentro del auto a solas con Jungkook cuando sus compañeros empezaban a bajar de los autos y saludaban. No iba a negar que fue difícil verlo bajar del coche después de un beso y un te amo.

Desde el interior del coche, vio como Jungkook saludaba junto a sus amigos hasta que desaparecieron entre la multitud hacia el interior del aeropuerto. No apartó su mirada hasta que la cabellera negra de su novio estuvo fuera de su vista.

En cuanto llegó a casa recibió una notificación con un sonido particular que no había escuchado antes en su teléfono, por lo que miró rápidamente de que se trataba. Fue entonces cuando tocó el icono de mensajería color amarillo que brillaba en su pantalla.

Recordó como la noche anterior Jungkook le pidió su móvil y no le permitió ver que hacía, incluso le pidió que esperara a que no estuviera para ver. Entendió que se trataba de aquella aplicación en su lista de notificaciones.

Sonrió como tonto al ver que incluso le creó una cuenta y le hizo un avatar con su nombre. El color amarillo predominaba dentro de la aplicación, tuvo una bienvenida en la pantalla de inicio con un dibujo de un mensajero dejando una carta en un buzón, pronto descubrió que tenía un formato de cartas en la que podría agregar amigos de otros países, solo tenía a una persona agregada y no tuvo que leer el nombre cuando el avatar tenía los grandes ojos brillantes de su novio.

Fue directo al icono de sobre dentro de la aplicación que tenía una notificación, el mismo lo llevó a otra sección, donde lo primero que llamó su atención fue le icono de una carta sobre un avión de papel color amarillo.

Con una sonrisa en el rostro deslizó su dedo hacia lo que parecía ser la carta que estaba recibiendo en ese momento. Aunque no sabía cómo se usaba la aplicación se las ingenió para llegar a esa parte.

"Notas para mi amor", estaban escritas en letras grandes en el centro del sobre que seguía cerrado, en cuando presionó su dedo sobre la letra, el sobre fue abierto y el formato era muy parecido a una postal. En la esquina superior derecha tenía una estampa de corea misma que al ser presionada se giraba y dejaba ver una fotografía de Jungkook desde el avión.

No podía dejar de sonreír por lo ingeniosa y romántica que resultaba ser la aplicación. Pero con las primeras palabras que leyó sintió como el nudo en su garganta se hizo presente.

Notas para mi amor:

Remitente: Tu luna

Destinatario: Mi sol

Miel, acabo de abordar el avión y ya te extraño. En cada momento llevaré el recuerdo de tu sonrisa, tu encanto y tu amor. Escribo estas notas que se volvieron costumbre entre nosotros para que sepas que no dejarás de recibir mi amor a través de ellas.

Te escribiré una nota por cada día que te extrañe, te enviaré una postal del lugar en el que me encuentre y te diré como me siento, espero que respondas a ellas con el mismo amor que las envío.

No puedo esperar a verte y abrazarnos bajo el mismo cielo.

Aun en la distancia, seguiré siendo tu luna.

Te ama y te extraña,

Tu honey.

Hoy si publicamos tempranito. Espero que les haya gustado este capitulo, quizás estuvo un poco flojo o no lo sé, confío en que fue de su agrado.

Ya empezaron los conciertos de Blue Notes y a partir de aqui empieza un reto para Taehyung y Jungkook mantener su relación estable. ¿Creen que sea difícil para ellos?, ¿Volverán las discusiones? Opiniones.

Por otro lado, tuvimos un momento familiar que aunque no se haya notado mucho, dejó a Jungkook pensando respecto a su futuro con Taehyung en cuanto a formar una familia se trata, ¿Cuál de los dos abordara este tema primero?, ¿Tae o Jk? Los leo.

No podemos dejar fuera esas escenas picantes después de un día en el estudio, yo te doy y tu me das. Que bien comen, cuentéenme que les pareció.  ¿Pagarías por ver a Blue Notes?

Adelanto del próximo capitulo: "Emergencias".

Nos seguimos leyendo el próximo capitulo.

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