Si yo quisiera sacudir este árbol con mis manos, no podría. Pero el viento, que nosotros no vemos, lo maltrata y lo dobla hacia donde quiere. Manos invisibles son las que peor nos doblan y maltratan —Friedrich Nietzsche.

Las vacaciones en Londres fueron como un sueño para Jungkook. Desde el momento en que llegaron, se sumergieron en la vibrante energía de la ciudad, entre los altos edificios, la diversidad de comida y lugares que visitar, el verde de la naturaleza y mucho acento británico.

Cada día era una nueva aventura, una oportunidad para explorar y disfrutar juntos sin las restricciones que enfrentaban en Corea. Caminar de la mano de Taehyung nunca se sintió tan bien, poder abrazarlo siempre que quería, acariciarle la mano por encima de la mesa en cualquier restaurante, dedicarle canciones de amor en los karaokes. Ser libre, finalmente había probado lo que es ser libre y no quería salir de allí nunca.

Por otro lado, Taehyung no dejaba de pensar en cómo los días se fueron acortando para ellos, en que tendrían que volver a su rutina en cuanto salieran de Londres. No negaría que sería difícil para él ahora que la banda era mucho más conocida. Pensó que estaba preparado mentalmente para ocultar su relación con Jungkook por un tiempo, pero realmente no lo estaba. Aun así, era consciente de todo el esfuerzo de la banda, así que prefirió mantener aquellos pensamientos para sí mismo.

Dejó de pensar en las cosas del futuro y se concentró en vivir el momento y tener buenos recuerdos junto a Jungkook en Londres. Probablemente tardarían en volver a tener momentos como ese, en el que se tomaban la mano y demostraban cariño en público.

Cada noche, volvían al apartamento en Marylebone, donde sus veladas a menudo terminaban en apasionados encuentros. Jungkook se sentía más libre y atrevido como si estar en Londres causara ese efecto en él. Taehyung disfrutaba al máximo de esta nueva faceta de su novio en la que era menos tímido y no pensaba tanto las cosas antes de hacerlas. Lo besaba en cuanto llegaban al apartamento y le hacía el amor, en algunas ocasiones cocinó para él mientras cantaba sus propias canciones.

Amo poder haber visto esa versión de su pareja. Mucho más desinteresada y atrevido.

Durante sus vacaciones, Jungkook también tuvo la oportunidad de ver a Taehyung en su elemento mientras trabajaba en Tazzys. Lo admiraba desde la barra, observando cómo interactuaba con los clientes y dirigía el lugar con esa confianza natural que lo caracterizaba. Taehyung era claramente amado y respetado por todos, y eso solo aumentaba el orgullo que Jungkook sentía por él.

Una de las visitas más emotivas fue cuando volvieron a la casa de los abuelos de Taehyung. Allí, Jungkook conoció a los sobrinos y a las hermanas de la madre de su novio.

Fue recibido con abrazos cálidos y palabras amables, aunque a veces tuvo que recurrir a Taehyung para traducir algunos comentarios en inglés.

Pero, como todas las cosas buenas, sus vacaciones en Londres llegaron a su fin. Volver a Corea significaba volver a la discreción y al ocultamiento de su relación, y aquello se notó en el ánimo de Jungkook cuando volvieron a subirse en el avión. Se reflejaba en su semblante que no estaba feliz de dejar Londres, y si se lo preguntaban, Taehyung tampoco quería que sus vacaciones terminaran.

Por ese viaje pudieron reconectarse y profundizar su relación, algo que era necesario para ellos. Pero sabían que volverían a la faena del día a día, a tener cuidado con cada mínima cosa que hicieran.

Cuando aterrizaron, un grupo de fanáticas se reunieron en la entrada del aeropuerto, dificultando su salida sin ser vistos juntos, Taehyung no esperó a que Jungkook le dijera algo, simplemente usó su mascarilla y salió por otra puerta, para luego encontrarse en casa y descansar juntos en la calidez de su hogar.

De vuelta al trabajo, Jungkook se encontró con una avalancha de actividades y actualizaciones sobre Blue Notes. Las redes sociales estaban llenas de comentarios y especulaciones sobre la banda, y Jungkook se esforzó por ponerse al día con todo lo que había pasado mientras estuvo de vacaciones.

La empresa convocó una reunión con los miembros de la banda, y Jungkook se sintió nervioso al no saber cómo saludar a sus compañeros después de tanto tiempo sin contacto cercano.

Cuando finalmente se reunieron para grabar uno de los episodios de su programa de variedades, las cosas mejoraron un poco entre ellos. Mientras recibían instrucciones, Jungkook miró a Jimin, Cyrus y Hyun-jin, buscando algún indicio de cómo actuar. Namjoon fue el primero en romper el hielo.

—Bienvenidos de nuevo —dijo con una sonrisa—. Tenemos mucho de qué ponernos al día. ¿Listos para retomar el ritmo?

Todos asintieron mientras terminaban de retocarles el maquillaje para iniciar la grabación. Actuaron casi por instinto frente a las cámaras, como estaban acostumbrados a actuar cuando grababan el programa en el que se reían y hacían toda clase de actividades, lo que fue impulsado debido a que no querían mostrarse distantes frente a sus fans y que estos pensaran que había un malentendido entre ellos.

Pero en cuanto estas fueron apagadas, el ambiente entre ellos siguió igual de tenso, como si los hubieran metido en una burbuja donde el silencio y la ausencia de todos con todos habían sido dejados fuera.

Namjoon les dijo que quería reunirse con ellos para hablar de algo importante. Todos tenían una idea de cuál sería el tema principal de aquella reunión, bien podría ser por la nueva agenda que tendrían o alguna solución al tema del vídeo. Con él nunca se sabía, podría ser cuál cosa. A esas alturas ninguno podía pensar que hubiera posibilidades de que se tratase de algo bueno.

Entraron en tropel y al ver la mesa llena de cosas dulces que les gustaban todos se miraron entre sí. Sabían que algo raro estaba pasando.

—Bueno, chicos —anunció Namjoon detrás de ellos —. Sé que se preguntan por qué tienen una reunión, y es porque entiendo que deben tenerla entre ustedes mismos —expresó con aquella sonrisa de quien está muy satisfecho y orgulloso de los momentos necesarios de incertidumbre.

—¿Qué? —masculló Hyun-jin con una expresión compleja en su rostro, una combinación entre sorpresa e indignación—. En este momento estás siendo un poco aterrador.

—Lo sé, lo sé y me disculpo por haberlos preocupado y también por hacerles ver que lo sé casi todo —explicó poniéndose la mano solemnemente en el pecho, haciendo una leve reverencia. —Como su mánager y amigo conozco a fondo sus necesidades, café para los que les gusta el café, té para los que les gusta el té y sus snacks favoritos y como confío tanto en ustedes sé que tendrán una maravillosa charla, así que sin más ¡Sayonara! —exclamó cual dramaturgo para luego salir no sin antes tirar un beso volador que dejó a los miembros petrificados en sus lugares.

Después de aquello la atmósfera volvió a ponerse pesada, todos estaban absortos en una pequeña actividad ansiosa que delataba el nerviosismo de enfrentar una conversación en la que sus sentimientos, aunque ya más calmados por el paso del tiempo, podrían salirse de control.

Cyrus tomaba sorbos de café frío con la cabeza hacia el techo, Jungkook emitía un leve sonido con sus botas mientras con la cabeza gacha miraba sus pies inquietos. Hyun-jin había sacado una pequeña lima de uñas y tenía su atención en la forma prolija que siempre les daba, mientras Jimin no paraba de tocarse el cabello cercano a la nuca como si algo le hubiera dado alergia.

A Jungkook y a ninguno en ese salón les gustaba la energía que danzaba alrededor de ellos, la incomodidad como si fueran desconocidos. Aunque el silencio fue necesario para ellos, también trajo consigo las consecuencias de no saber cómo iniciar una conversación.

Un minuto exacto pasó hasta que Cyrus sugirió que comieran primero.

—Hagamos eso, recuperemos la energía que perdimos en la grabación —secundó Jimin.

—Chicos —comenzó Jungkook cuando empezó a notar que todos estaban terminando—. Creo que debo comenzar yo. Sé que muchas cosas se salieron de control por mi culpa, pero al mismo tiempo que trataba de comprender mis sentimientos no pude evitar sentirme angustiado hasta cierto punto por el silencio.

» Me dije a mí mismo: "Todos estamos cansados después de pasar tanto tiempo juntos en la gira", incluso sentí que era justo que cada quien hiciera lo que quisiera, lo que no logro entender es que les hizo permanecer callados. Sé que no estoy en posición de que me apoyen, otra vez descuidé a la banda... ojalá y al menos me hubieran regañado, creo que hubiera sido menos doloroso.

El aire meditativo rondaba en las cabezas de cada uno. Habían levantado sus cabezas, unos podían mirarse a los ojos y otros simplemente retraídos no podían hacerlo. Hyun-jin en particular tenía lágrimas rodando por sus mejillas antes de poder decir nada.

—Creo que todos lamentamos no haber hecho nada. Yo en particular sentí que no podía darte una palabra correcta de apoyo, ni tampoco reclamarte nada porque eres el líder y el mayor —declaró Hyun-jin—. Solo podía pensar en mí mismo después del colapso que tuve en la gira, me abrumó aún más ver una situación que nos ponía a todos en aprietos. Me di cuenta que estaba enojado y no me pareció tan genial la idea de hablar descuidadamente con tantas emociones revueltas.

Jungkook asintió mientras lo escuchaba pensando que era algo que hubiese entendido si se lo hubiese dicho antes, pero igualmente comprendía la posición del menor del grupo. Entendía que si alguien tan elocuente como Hyun-jin o alguien tan extrovertido como Cyrus no tenían nada para decir, entonces ninguno iba a decir nada en ese entonces.

Aun así, quería entender sus verdaderos sentimientos y opiniones respecto a lo sucedido con Taehyung. Necesitaba aclararlo con ellos, después de todo, seguía siendo el líder y su deber allí era escucharlos para poder entenderlos y con ello entender mejor sus propios sentimientos.

—Siento algo parecido —confesó esta vez Jimin—. Creo que tampoco estaba dispuesto a ofenderte. Las cosas que pensé en ese momento no eran propias de mí, las veces que hablabas con Taehyung en todos los minutos de nuestra preparación y nuestros ensayos me incomodaba, porque tenía el presentimiento de que las cosas saldrían mal y no quería ser yo, tu mejor amigo, quien te lo dijera. Sentí tan fuertemente un miedo que no había experimentado antes, el miedo de que nos lastimaran y que esa situación se hiciera mayor que nuestros sacrificios.

—Estoy tratando de comprender, pero creo que me sentí tan abandonado que no puedo hacerlo del todo—respondió Jungkook pasado unos minutos de silencio.

—Un silencio trajo otro silencio y nadie podía defender a nadie, todos nos sentimos abandonados, todos nos sentíamos lastimados. Hoy puedo decir perdón, pero ayer solo podía lamentarme de no poder ser el mejor compañero para nadie. Incluso a mí que nada parece afectarme nunca, por primera vez en mi vida me sentí incapaz de hacer nada por nadie. Esta situación no estuvo en nuestras manos y no digo que es tu culpa, es la primera vez que nos hacemos realmente conscientes de que no podemos tener una vida normal y que, al parecer el amor de alguien, algo tan importante, puede ser una razón para que se desmorone lo que construimos con nuestra fatiga, sudor, noches sin dormir, deudas y decepciones.

» No te pido que lo entiendas hoy, Jungkook. Pero es la primera vez de todos siendo una banda, es nuestra primera vida. Estoy seguro de que nadie nunca hubiera querido herir tus sentimientos y aun así lo hicimos y viceversa. Tu eres la persona que nos unió y porque tu diste la cara por nosotros estamos aquí. Taehyung también es una persona a la que le debemos gratitud, pero aun así tuvimos esa clase de sentimientos complicados.

Cyrus hizo una pequeña pausa que dejó en el aire aquel silencio en el que solo se escuchaban sus respiraciones. Todos tenían sus miradas gachas mientras el baterista hablaba, todo escuchaban con atención, pero especialmente Jungkook que lo tenía al lado.

—Estoy seguro de que esto era algo que nos tenía que pasar —concluyó Jimin—. Ahora que lo pienso nos idealizamos pensando que podríamos con todo, que tendríamos una amistad muy perfecta, y terminamos decepcionados de nosotros mismos. Así como decías —expresó mirando esta vez a Jungkook—. Incluso pasar una semana juntos es agotador, porque todos somos diferentes, no todo es pelea, pero tampoco todo es diversión y aun así elegimos estar juntos.

—Tienes razón, este podría ser un punto de partida para llevarnos mejor —concordó Cyrus.

—Me gustaría, que si tienen algo para decir sea bueno o malo puedan hacerlo —sonrió Jungkook dejando por fin a un lado la pena.

Ahora entendía mucho mejor que las personas tenían desacuerdos y que ellos no serían la excepción.

—Espero que me tengas paciencia, sabes, eso que escribí aquella vez sobre que eres a quien más admiro lo llevo muy presente —confesó Hyun-jin avergonzado.

—Siempre tendré paciencia con mi maknae — aseguró Jungkook volviendo a reír, esta vez arrugando la nariz de manera tierna. —Ahora lo entiendo —suspiró el pelinegro—. Esta vez teníamos que herirnos para saber cómo no hacerlo, no quiero que tomen mis palabras a la ligera, hemos hecho tantas cosas antes y nos hemos puesto de acuerdo en muchas otras. Lamento que por algo mío todo se haya puesto de cabeza, de verdad lo lamento.

"Yo también, yo también, yo también", repitió cada uno.

—Lamentamos haberte hecho sentir miserable —dijo Jimin uniendo los sentimientos de todos mientras asentían.

—Sé que es mucho pedir, pero recompensemos lo que pasamos permaneciendo juntos y pongamos la regla de tratar de resolver nuestras diferencias en un lapso de tres días —consideró Jungkook seriamente.

Todos rieron como si hubieran estado desde el principio viendo un sit com.

—Nuestro humor está realmente roto —aseguró Jimin aun entre risas en un vano intento de ponerse en sintonía con la seriedad de las palabras de su mejor amigo.

—Lo digo en serio —enfatizó el líder cruzándose de brazos.

—Entonces ¿abrazo grupal? —propuso Jimin.

—Abrazo grupal —repitieron al unísono levantándose de aquellas sillas que ahora parecían más ligeras que cuando se sentaron, respirando el olor familiar del otro mientras enlazaban sus brazos en la espalda del otro y sus cabezas se chocaban con torpeza.

Tras escuchar las risas de los miembros, Namjoon supo que ya era un buen momento para entrar y darles la buena noticia que ansiaba darles desde que entraron a la agencia. Ahora que las cosas parecían estar tranquilas alrededor de Taehyung y Jungkook, debían aprovechar ese momento para alzar una vez el nombre de Blue Notes fuera de las vidas privadas de cada uno de ellos.

Al entrar al salón se encontró una escena caótica pero reconfortante. Jungkook abrazando a Hyun-jin por la espalda mientras Cyrus y Jimin lo señalaban casi de manera amenazadora.

—Es el más pequeño, no le pueden poner eso de castigo —se quejó Jungkook apuntándolos con el dedo índice—. Aléjense de él.

—¡Oh vamos Jungkook, es lo justo! —gritó Cyrus tratando de llegar a ellos, pero el mayor de todos se movió junto a Hyun-jin que ya tenía todo el rostro rojo por la risa.

—¡Por encima de mi cadáver! —señaló tratando de reprimir la risa que estaba a punto de escapar.

Namjoon sonrió al ver que ya eran el grupo de escandalosos chicos que se divertían en cada mínima ocasión que tenían. Mentiría si dijera que no extrañaba esas risas y el bullicio.

Pacientemente esperó a que las risas se calmaran un poco antes de hablar.

—Vaya, veo que funcionó todo muy bien —expresó Namjoon quitándose las gafas de sol—. Tengo una noticia importante que darles.

Cuando finalmente tuvo toda la atención del grupo, se sentó frente a ellos con una sonrisa que ya no podía ocultar.

—¿Qué noticia? —preguntó Jimin curioso.

—Blue Notes acaba de recibir sus primeras nominaciones en los premios Asian Star Entertainer Awards en las categorías Mejor Banda de Rock Nueva y Mejor Balada de Rock con Sunshine Miracle.

—¡Sí!, ¡Sí! —chilló Cyrus en victoria levantándose de su lugar emocionado con sus demás compañeros que imitaron su acción.

—¿Esto es real? —cuestionó Hyun-jin de pie a un lado de Jungkook, quien miraba a Namjoon igual de impresionado.

—Claro que es real, aquí tengo las invitaciones de cada uno y las nominaciones —señaló extendiéndole las invitaciones a cada uno.

—Felicidades Blue Notes por su primera nominación, se lo merecen —expresó observando cómo cada uno apreciaba la invitación en sus manos.

Sin esperárselo, Namjoon recibió un abrazo grupal, sintiendo la emoción en sus gritos y risas mientras giraban juntos alrededor.

La frase: "El cielo es solo el comienzo" se sentía mucho más real para Jungkook. Solo estaban en el inicio de un camino exitoso, él solo tenía que hacer una cosa para mantener al grupo en ese camino y era conservar su relación oculta hasta que la empresa estuviera realmente lista para dar ese tipo de comunicado, corriendo el peligro de que mucha gente dejaran de seguirlos, lo cual serían más complicado.

Estaba feliz de estar lográndolo junto a personas que amaba y que quería mantener a su lado por siempre.

La ciudad fue bañada por el resplandor de la luna cuando Jungkook salió de la agencia, la emoción de la nominación aún latente en su pecho. Estaba feliz de llegar a casa esa noche y contarle a Taehyung su nuevo logro junto a la banda. Desde ya podía imaginarse la encantadora sonrisa de su novio tras recibir la noticia y recibir de su parte una avalancha de besos; estaba más que listo para recibirlos.

Subió a su moto y se dirigió a casa con aquellos pensamientos y una sonrisa que no podía borrar de su rostro mientras se colocaba el casco.

El rugido del motor y el viento en su rostro le proporcionaba una percepción de libertad. Sin embargo, una sensación incómoda se instaló en su estómago, una inquietud que no podía sacudirse. Sintió una mirada fija en él, pero cada vez que miraba por el retrovisor, no veía nada fuera de lo normal.

El viaje a casa fue rápido, y pronto se encontró entrando al estacionamiento del apartamento. La sensación de ser observado se intensificó, pero Jungkook decidió ignorarla por el momento. Al detenerse en su lugar habitual, vio a Taehyung llegando en su Cadillac.

«Llegamos juntos a casa», pensó al ver a Taehyung sonriente detrás del volante. Al menos en términos de horario empezaron mucho mejor que como estaban antes de irse a Londres.

Taehyung estaba contento de ver a su novio sobre su moto. Le hacía feliz saber que cenarían juntos, que ninguno de los dos tendría que esperar por el otro para compartir un momento juntos antes de irse a la cama. Le alegraba verlo a pesar de que hace poco estuvieron de vacaciones en otro país.

Cuando se bajó del auto, notó a Jungkook mirando hacia la calle con una mirada seria. Cuando sus miradas se encontraron, Taehyung sonrió aún más, no podía ocultar su felicidad de verlo, apenas hablaron en todo el día ya que los dos estuvieron muy ocupados poniéndose al día en sus trabajos.

Jungkook se quitó el casco y se bajó de la moto, quedando frente a Taehyung, quien se inclinó ligeramente hacia él con la intención de besarlo.

—Miel, aquí no —susurró Jungkook, riendo suavemente mientras tomaba a Taehyung por la cintura.

Taehyung se inclinó más hacia él, dejando sus labios tan solo a pocos centímetros.

—Solo un beso rápido —susurró, y antes de que Jungkook pudiera protestar más, Taehyung le dio un beso de pico lleno de ternura.

El guitarrista suspiró contra los labios de Taehyung, la calidez del momento contrastando con la frialdad de la noche. Fue un beso rápido, estaban en su hogar, así que pensó que no tenía nada de qué preocuparse.

—Tengo buenas noticias —expresó Jungkook tomándolo de la mano.

—¿Si? Yo también creo que tengo buenas noticias —expresó Taehyung apretando su mano.

Mientras entraban al edificio, Jungkook no pudo evitar echar un último vistazo hacia la calle, donde las sombras se extendían bajo la luz de las farolas. La sensación de ser observado seguía ahí, como un recordatorio inquietante de que su privacidad siempre estaba en riesgo.

Sentía que solo estaba siendo paranoico, pero no dejó de sentirse observado hasta que estuvo en el elevador con Taehyung, quien pareció haberse dado cuenta de su alerta y abrazó su brazo con fuerza. Se notaba que estaba emocionado, aunque Jungkook no sabía si se debía a él o a la noticia que quería darle.

Jungkook apretó la mano de Taehyung mientras subían al apartamento, diciéndose a sí mismo que debía encontrar la manera de proteger a Taehyung mientras él estuviera bajo el lente de la fama.

En cuanto entraron a la calidez de su apartamento, la emoción de Taehyung era palpable. Sus ojos brillaban y su sonrisa era contagiosa, a pesar de que Jungkook no podía deshacerse de la sensación incómoda que había sentido en el estacionamiento, desde que llegaron a casa su novio no dejó de hablar sobre su día, y él se esforzaba por mantenerse concentrado en sus palabras, a pesar de la paranoia que lo embargaba.

La buena noticia que quería darle en ese momento era lo último que tenía en mente desde que llegó. No le gustaba sentirse de esa manera, no le agradaba para nada sentirse inseguro cuando estaba alrededor de Taehyung fuera de su privacidad.

Su novio se dirigió directamente a la cocina mientras cerraba la puerta.

—¡Vamos a cocinar algo delicioso esta noche! —exclamó sacando ingredientes del refrigerador con entusiasmo.

Jungkook sonrió dejando sus llaves en el porta llaves en una de las repisas en el umbral de la cocina.

—Claro, suena bien —declaró uniéndose a él en la cocina—. De hecho, muero de hambre. No compré nada porque prefiero nuestra comida casera.

—Me aseguraré de hacer una deliciosa comida —señaló Taehyung dedicándole una sonrisa al mirarlo por encima de los hombros.

Trabajaron juntos, cortando verduras y preparando los ingredientes para la cena. Mientras cocinaban, Taehyung no dejaba de hablar, su entusiasmo por compartir sus noticias era evidente. Jungkook, por su parte, se esforzaba por concentrarse en la tarea y mostrarse igual de emocionado con su novio, ya que después de todo, él también tenía buenas noticias.

Se preocupó por poner la mesa bonita mientras Taehyung terminaba de servir la comida. Destapó una botella de vino y colocó dos copas sobre la mesa, realmente lucía como toda una cena romántica y sonrió al ver el resultado de esta cuando se sentó junto a su novio.

No hablaron mucho mientras cenaban, estaban igual de hambrientos, así que no retornaron la conversación hasta que se sintieron llenos. Jungkook volvió a sentir la emoción burbujeante por dentro, ansioso por contarle sobre la nominación.

—Entonces, ¿qué es esa gran noticia que querías contarme? —preguntó Jungkook tomando el pie de Taehyung debajo de la mesa y dejándolo sobre su regazo con la intención de masajear en esas zonas que siempre le dolían producto de trabajar mucho tiempo sentado o parado.

Taehyung alzó su copa de vino sonriente antes de hablar.

—Tazzys fue nombrado el mejor bar de la ciudad por la revista "Seoul Nightlife" —anunció con su rostro iluminado de orgullo. —¡Y además, Aeken Tazzys ha sido seleccionada para una competencia internacional de cócteles!

Jungkook sonrió ampliamente, toda su preocupación de antes desapareció al instante ante la alegría de su novio. Por más sencillo que se escuchara, aquello era algo muy bueno para Taehyung considerando el terrible estigma que sufrió el bar después del accidente en el que él mismo se vio involucrado.

—¡Eso es increíble, amor! —exclamó Jungkook acercando su silla más a la suya, tomando su rostro entre sus manos para besarlo—. Tazzys siempre ha sido el mejor, me alegra que los medios lo están considerando como tal. Me complace mucho que todo esté yendo bien otra vez.

Taehyung le sonrió contento apoyando sus codos de la mesa y mirándolo directamente a los ojos.

—Y ahora es tu turno. Cuéntame.

Jungkook tomó un profundo respiro, sintiendo como la emoción de Taehyung lo llenaba de una nueva energía.

—Blue Notes ha sido nominado a los Asian Star Entertainer Awards en dos categorías: Best New Rock Band y Best Rock Ballad con Sunshine Miracle.

Taehyung saltó de su asiento con los ojos muy abiertos y lo abrazó con fuerza al sentarse sobre su regazo.

—¡Eso es maravilloso! —chilló abrazándolo por encima de sus hombros—. Honey, es increíble. Estoy muy orgulloso de ustedes. Se lo merecen, son demasiado buenos, confío en que se llevarán el premio.

Jungkook sonrió de oreja a oreja. Por el brillo en la mirada de Taehyung supo que estaba realmente muy emocionado por ellos.

Con sus manos rodeó la cintura del castaño, sintiendo la suavidad del traje de su pareja, lo acercó más a él y rozó sus narices. Ambos cerraron sus ojos ante la suavidad del contacto. Taehyung dejó sus brazos sobre los hombros de Jungkook y pegó su frente a la suya, aun sin dejar de sonreír, sintió como Jungkook acercó su rostro lentamente al suyo hasta dejar tan solo una delgada línea de espacio entre ellos.

—¿No vas a besarme? —cuestionó Taehyung provocativo.

—Solo si tú me besas, lindo.

—Tú tienes el control, no haré nada a menos que tú lo hagas.

—Eso es todo un honor considerando que te gusta tener siempre el control —señaló Jungkook alzando la comisura de sus labios en una sonrisa ladina.

En el mínimo espacio que aún quedaba entre ellos, rieron suavemente antes de que sus labios se encontraran en un beso tierno iniciado por Jungkook. El contacto fue lento y profundo, un momento de conexión que hizo que cualquier preocupación se desvaneciera.

—Gracias, miel —susurró Jungkook sobre sus labios—. También estoy muy orgulloso de mi jefecito.

Aquel apodo solo hizo que Taehyung golpeara de manera juguetona el brazo de Jungkook.

Después de la cena, ambos limpiaron la mesa y acomodaron todo casi de una manera coreografiada; ya estaban acostumbrados a la intimidad que compartían cuando cenaban juntos en casa.

Lo que quedaba del resto de la noche fue destinado a cambiarse de ropa y meterse debajo de las sábanas, donde Taehyung se acurrucó entre los brazos de Jungkook, apoyando su cabeza en su pecho y trazando líneas invisibles sobre su camiseta blanca, pasando por sus hombros y la mandíbula de este que se notaba mucho más marcada desde la posición que tenía.

Jungkook se encontraba con la mirada en el techo, la luz de la única lámpara encendida iluminaba solo un lado de su rostro, sus labios entreabiertos mientras lo abrazaba por la cintura con suavidad.

—¿No me vas a contar qué pasó en el estacionamiento? —preguntó peinando el flequillo del pelinegro—. Noté como estabas, ¿pasó algo que deba saber?

Jungkook dejó salir un suspiro aún sin abrir sus ojos y abrazó a Taehyung más fuerte, apegándolo más a su cuerpo para luego besar su frente.

—Lo siento —masculló apoyando su barbilla en la cabeza de Taehyung—. Por alguna razón me sentí observado, creo que solo estoy siendo algo paranoico.

—¿Y por qué lo sientes? —preguntó Taehyung confundido, saliendo de debajo del agarre de su novio para poder mirarlo a la cara. Apoyó sus antebrazos de su pecho y vio como este abría sus ojos lentamente, dejándole ver aquel brillo que caracterizaba su mirada.

—Por pedirte que no me besaras ahí —masculló—. Sé que no es justo para ti tener que ser extremadamente cuidadoso con cada cosa que hacemos fuera de nuestra casa, pero yo solo...

Jungkook suspiró cerrando sus ojos por un segundo.

—Quiero protegerte a ti y a Blue Notes por igual, quiero mantenerte fuera del lente público mientras la gente olvida esas fotografías de nosotros, no porque me avergüence que me vean contigo, sino porque no quiero que te empiecen a molestar por ello. Puede llegar a ser muy abrumador.

Taehyung asintió esta vez acariciando las mejillas de Jungkook. No respondió nada a las preocupaciones de su novio, pues se tomó el tiempo de pensar en una buena respuesta. Sabía que no le quitaría esas preocupaciones de la noche a la mañana, o la idea de que debía ser el único en hacer algo por ellos o por la banda para que las cosas salieran bien, pero de todos modos quería hacer el intento y de alguna manera hacerle entender que no estaba solo en ello.

—Honey —masculló con dulzura—. No tienes que disculparte por querer protegernos, yo tengo que hacerlo por ser un poco descuidado o desinteresado con ello. Pero quiero que sepas que no tienes que hacerlo todo tú solo, sé que no estoy preparado para una relación pública porque sé lo que eso implicaría y créeme que no lo quiero enfrentar, pero si por alguna razón sucede, sé que te tendré a ti, ¿cierto?

—Me tendrás a mí, siempre me tendrás a mí, miel —susurró apartando el cabello que ocultaba un poco sus ojos a causa del volumen de este.

—Entonces no tengo nada que temer —señaló Taehyung mostrando una sonrisa a medias—. Pero eso de que te sientes observado, creo que deberías hablarlo con Namjoon, aunque solo creas que es paranoia tuya es mejor que te asegures de ello, hay gente acosadora allá afuera que quiere saber todo de ti bajo la excusa de que te admiran y aman.

—Lo sé, es por eso que me preocupa.

—Bueno, luego lo hablas con tu manager y mientras tanto, mantengamos los besos o cualquier muestra de afecto en nuestra privacidad —sugirió volviéndose a acomodar entre los brazos de Jungkook.

Se abrazaron más fuerte, dejando que la tranquilidad de estar juntos disipara las sombras de sus preocupaciones y así lentamente, se fueron quedando dormidos.

════🎸 ━━━『🍸 °*• ♫ •*° 🍸』━━━🎸════

El día de las premiaciones llegó muy deprisa, tanto que apenas les dio tiempo de asimilar que estarían rodeados de grandes artistas y personas que ellos admiraban.

Siempre han visto ese tipo de eventos desde la televisión, así que ser parte de ello solo lo hacía más irreal.

Antes de salir de casa directo a la agencia, Jungkook le dejó saber a Taehyung que si ganaban la categoría en la que estaba su canción, lo saludaría y le haría un corazón de dedos exclusivamente para él.

La emoción estaba en el aire mientras las estilistas los preparaban. Cyrus tocaba la batería mientras esperaba su turno para ser arreglado, Jimin ensayaba palabras de agradecimientos en caso de que ganaran, Hyun-jin leía artículos de cómo fueron las premiaciones del año anterior y quienes habían ganado la categoría en la que fueron nominados.

Por otro lado, Jungkook ensayaba su discurso para ambas categorías sólo por si acaso ganaban, tenía altas expectativas de ganar, aunque fuera una categoría, así que pensar en tener que hablar correctamente frente a personas con las que él ha crecido escuchando y admirando desde lejos, le ponía muy nervioso.

Era consciente de que iba a estar en televisión nacional y que estaría bajo la atención de muchas personas que no lo conocían y de aquellos que ya sabían quiénes eran ellos.

No podía ignorar el peso de sus hombros siendo líder de la banda, aunque tuvo ayuda de Namjoon para preparar su discurso. Ensayó con él la mejor manera de controlar sus nervios y demostrar durante toda la ceremonia que era el líder de la banda.

Jungkook aprovechó ese momento que todos estaban concentrados en lo suyo y que él no tenía a nadie encima suyo peinándolo o maquillándolo, para así poder escribirle a Taehyung antes de salir.

Jungkook
Ojalá pudieras ir conmigo. Necesito mucho de tus besos relajantes.

Taehyung

Honey, todo estará bien.
Te estaré mirando y enviando todas las vibras positivas.
También te estaré presumiendo en el grupo de la familia claramente😌
Ya me conoces.
Estoy viendo la alfombra roja para verte, ¿cuando llegan?

Por la gran cantidad de mensajes Jungkook supo que su novio estaba igual de emocionado y nervioso que él, así que respondió rápido antes de prepararse para salir.

Jungkook
Ya estamos en el auto, así que me verás dentro de poco.

Ese fue el último mensaje que envió mientras estuvieron dentro del auto, así que procuró guardar el móvil en el bolsillo de su pantalón azul marino.

—Nos irá bien —expresó Jimin apretando los hombros tensos de Jungkook, quien se encontraba a su lado en el auto—. Solo tenemos que ser nosotros mismos.

—Estoy muriendo de los nervios —confesó Jungkook al ver que ya se acercaban a su destino, desde donde estaban podía escuchar los gritos de los fanáticos volverse locos—. ¿Qué tal si no nos animan o si no hay nadie que sea Gem?

—No pasa nada, el simple hecho de estar ahí ya es un logro. Nos han notado para nominarnos en dos categorías —expresó Hyun-jin detrás suyo—. Además, hyung, ¿olvidaste la cantidad de personas que fueron a vernos a nuestro último concierto? Confío en que habrá mucha gente que nos reconocerá.

—¿Bromeas? —cuestionó Cyrus eufórico—. Vamos a arrasar, arriba ese ánimo líder.

—¿Quiénes somos? —cuestionó Jungkook sintiéndose cada vez más contagiado por la energía y buena vibra de sus compañeros.

Colocó su mano en el centro viendo cómo cada una se fue agregando sobre la suya.

—¡Blue Notes! —gritaron al unísono.

—¿El cielo? —cuestionó Jungkook alzando su mirada a los chicos que los observaban sonrientes.

El bullicio del exterior se sintió cada vez más cerca.

—¡El cielo es solo el comienzo! —gritaron todos elevando sus manos.

«Solo es el comienzo», se dijo Jungkook a sí mismo. La puerta del auto fue abierta y de inmediato fue envuelto por la energía del exterior.

La alfombra roja se extendía frente a ellos, iluminada por los flashes de las cámaras y rodeada por una multitud de fanáticos que gritaban emocionados. Jungkook fue el primero en salir, seguido por Jimin, Cyrus y Hyun-jin.

Jungkook sintió un cosquilleo de emoción al ver algunas Gems esperarlos con pancartas y cámaras en manos. Le sorprendió aún más cuando escuchó su nombre ser gritado por alguien, lo que hizo que aleteara su mano en dirección al público que los observaba.

Se sintió algo abrumador para ellos por la ola de gritos, los flashes de las cámaras, pero no dejaba de ser emocionante al punto de que ninguno podía abandonar la sonrisa que adornaban sus rostros.

Los fanáticos gritaban sus nombres con entusiasmo mientras los miembros de Blue Notes caminaban por la alfombra roja, saludando y sonriendo para las fotos. Algunas personas voltearon a verlos, seguían siendo nuevos artistas, muy pocas personas los conocían, pero sus fans estaban allí haciendo el trabajo por ellos.

Gems en ese momento era su mejor carta de presentación y eso les llenaba el corazón de amor y orgullo.

Si nadie en aquella alfombra roja llena de grandes celebridades los conocía, en ese momento se enteraron que eran Blue Notes.

Jungkook, a pesar del nerviosismo, se sentía lleno de energía y orgullo. Sabía que estaban allí por una razón, y esa razón era su arduo trabajo y dedicación.

—¿Esperan llevarse el premio esta noche? —cuestionó uno de los camarógrafos mientras ellos continuaban su camino hacia el interior del lugar.

—Nuestro premio es estar aquí y eso nos llevaremos si no ganamos una estatuilla —expresó Jungkook con total seguridad.

Taehyung se encontraba en la calidez de su hogar iluminado tenuemente, con la televisión encendida en la transmisión en vivo de la alfombra roja de los Asian Star Entertainer Awards llenando la sala. Tenía el control remoto en una mano y su teléfono en la otra, listo para capturar cada momento en el que Blue Notes apareciera frente a las cámaras.

Cuando la cámara finalmente enfocó a Blue Notes, Taehyung se inclinó hacia adelante, con los ojos brillando de emoción. Ver a Jungkook, su Jungkook, en ese escenario, rodeado de fanáticos y fotógrafos, le llenaba de un orgullo inmenso.

Jungkook estaba radiante, con una sonrisa confiada mientras caminaba por la alfombra roja junto a sus compañeros de banda. Ese traje azul estaba hecho para que él lo vistiera, su camisa satinada junto a su chaqueta azul marino, mismo color de sus pantalones formales. Su cabello largo estaba acomodado en una coleta, dejando su flequillo cubrir parte de su frente.

Jimin camino junto a su mejor amigo, vistiendo un traje gris con una camiseta de cuello tortuga del mismo color. Cyrus le seguía con un traje blanco de rayas negras, el color resaltaba muchísimo su tono de piel especialmente cuando dejaba gran parte de su pecho al descubierto por el cuello V de su camisa. Hyun-jin igualmente estaba vestido completamente de azul marino, un poco más informal debido a que tenía las mangas de la chaqueta ligeramente remangadas.

—¡Ah, ahí está! —exclamó Taehyung con entusiasmo, casi sin poder contenerse.

No pudo evitar sonreír mientras tomaba fotografías de la televisión con su teléfono, queriendo capturar cada instante. Cada vez que Jungkook posaba para los camarógrafos, Taehyung presionaba el botón de la cámara, queriendo guardar ese momento para siempre.

—Lo estás haciendo increíble, honey —murmuró para sí mismo.

Cada sonrisa, cada gesto, cada palabra de Jungkook era una confirmación de cuánto había crecido como líder de la banda.

La cámara enfocó a Jungkook mientras respondía una pregunta sobre las nominaciones de Blue Notes, y Taehyung sintió un nudo en la garganta debido a la emoción. La forma en que Jungkook hablaba con tanta pasión y dedicación le recordó porqué se enamoró de él en primer lugar.

A su mente llegaron recuerdos de aquella cita "no cita" durante los primeros días que compartió con aquel guitarrista. Recordó cuando le preguntó frente al río Han como se sentía con la carrera que estudió y en su memoria estaba más que claro lo que sintió al escucharlo hablar de la música y lo que le hacía sentir. Recordaba perfectamente como describió lo que significaba para él la música.

"Es parte de nosotros desde que nacemos hasta que morimos", lo vio sonreír de oreja a oreja mientras abrazaba a sus compañeros de banda por los hombros, posando en medio de ellos para una última fotografía y Taehyung sonrió sintiendo el nudo en de garganta hacerse más grande.

—La música siempre será parte de ti —masculló apretando el móvil contra su pecho, ya no siendo capaz de seguir tomando fotografías.

Cada paso que daba Blue Notes era un recordatorio de cuánto habían logrado y cuánto más podrían alcanzar.

Namjoon, vestido con un elegante traje negro coordinó la entrada junto con el escolta que los acompañaba. A medida que avanzaban hacia la entrada del recinto, Namjoon se encargó de que todo estuviera bajo control.

El lugar de los premios era majestuoso. El gran salón estaba adornado con luces brillantes y elegantes decoraciones doradas. La música de fondo creaba un ambiente de celebración.

Juntos se acomodaron en el lugar que tenían reservado, a su alrededor se fueron sentando otros grupos, a quienes saludaron con una reverencia. Frente a ellos tenían una pantalla que proyectaba el escenario más de cerca.

Notaron al público que rodeaba todo el escenario, se sintió como un concierto a medida que los grupos y artistas solistas se fueron presentando. De vez en cuando la cámara los enfocaba mientras ellos bailaban al ritmo de la música.

Fue más que notable el hecho de que ellos no eran como los demás grupos, pues bailaban y cantaban las canciones con emoción.

Aunque Jungkook quiso soltarse tanto como sus amigos, no pudo evitar sentirse abrumado por la magnitud de la noche. Sus pensamientos iban y venían entre la emoción de estar nominado y la presión de mantener la imagen del grupo.

El ambiente en el auditorio estaba cargado de expectación mientras presentaban la categoría de Best New Rock Band. Jungkook respiró profundamente, tratando de calmar los nervios mientras observaba la pantalla gigante que mostraba a todos los nominados.

—Y el ganador es... —anunciaron los presentadores, haciendo una vez más una pausa dramática— ¡Blue Notes!

El auditorio estalló en aplausos y gritos de emoción. Jungkook y sus compañeros se levantaron de sus asientos, saludando con una reverencia a los demás grupos que les aplaudían respetuosamente. Algunas fans en la audiencia gritaban por ellos, emocionadas por la victoria.

—¡Vamos! —expresó Namjoon, empujándolos suavemente hacia el escenario.

Jungkook lideró al grupo hacia el escenario, sentía su corazón palpitando con fuerza mientras aceptaba el premio, procuraba que en cualquier momento se le saldría del pecho.

Sostuvo el trofeo en sus manos, y sonrió ampliamente. Podía sentir en su interior la euforia y la gratitud, pero también el nerviosismo de estar recibiendo por primera vez un premio por su música.

Apreció la estatuilla en sus manos y miró a sus compañeros que lo observaban con la misma alegría.

—Hola, nosotros somos Blue Notes —dijeron al unísono, haciendo su saludo característico.

Jungkook se adelantó al micrófono, tratando de controlar su emoción y que su voz no saliera temblorosa. Miró a la audiencia y tomó una respiración profunda antes de empezar su discurso, por un instante se vio interrumpido por un grito que se escuchó en todo el recinto.

—¡Blue Notes y Gems!

Aquello solo hizo que la sonrisa de Jungkook y de los demás miembros se agrandara.

—Queremos agradecer a todos nuestros fans, a nuestra familia y amigos, y a nuestra agencia por todo el apoyo que nos han brindado —expresó Jungkook con voz firme—. Este premio no es solo nuestro, es de todos ustedes que han estado con nosotros desde el principio.

—Gracias por creer en nosotros, por acompañarnos en este viaje que apenas inicia y por hacer posible que estemos aquí hoy —dijo esta vez Cyrus, quien se acercó al micrófono con Jungkook mirándolo sonriente—. Seguiremos trabajando duro para traerles la mejor música. ¡Gracias!

La ceremonia continuó con un desfile de presentaciones espectaculares y más entregas de premios. Las luces brillaban intensamente y la música resonaba en el auditorio mientras los artistas más talentosos subían al escenario para recibir su reconocimiento.

Blue Notes estaban mucho más relajados después de su primera victoria, disfrutaban de la atmósfera, riendo y comentando cada actuación. Jungkook se sentía realizado y lleno de energía, así que no pensó mucho en la siguiente categoría en la que estaban nominados hasta que llegó el momento.

Dos presentadores subieron al escenario nuevamente, sosteniendo un sobre dorado mientras hacían pausas dramáticas antes de anunciar al ganador.

—Y el ganador en la categoría Best Rock Ballad es... —expresaron al unísono mirandose entre sí—. ¡Blue Notes con Sunshine Miracle!

No se lo esperaba. Jungkook definitivamente no esperaba ganar en esa categoría, de hecho, preparó poco su discurso para esa categoría. Así que le tomó desprevenido escuchar el nombre de la banda y seguido de ello los aplausos y gritos de sus fans.

Se levantaron de sus asientos, sorprendidos y emocionados. Se abrazaron unos a otros antes de dirigirse nuevamente al escenario.

—¡Otra vez! —exclamó Jimin, con una sonrisa que iluminaba su rostro.

Jimin sabía que Jungkook no estaría esperando que su propia canción se llevara un premio, lo supo por su reacción y en su mirada también, es por ello que fue el primero en dirigirse al micrófono y mirar al público

—Queremos agradecer a todos por este increíble honor —expresó con seguridad, su voz cargada de emoción—. Esta canción es muy especial para nosotros, y significa mucho saber que ha resonado. Gracias a nuestros fans, a nuestra familia, y a todos los que han trabajado tan duro para apoyarnos. No podríamos haberlo hecho sin ustedes.

Jungkook se adelantó, acercándose al micrófono para añadir unas palabras. Su corazón latía con fuerza mientras pensaba en Taehyung y en lo que significaba esta canción para él. Le prometió que le haría un corazón de dedos si su canción si se llevaba el premio.

—Sunshine Miracle es una canción muy personal para mí —comenzó a decir Jungkook, tratando de contener sus emociones—. La escribí en un momento muy especial de mi vida, y ver cómo ha tocado los corazones de nuestros de fans, me llena el alma

» No puedo mencionar a todas las personas que me han inspirado, pero quiero agradecer a alguien muy especial que siempre ha sido mi luz, mi apoyo y mi mayor inspiración. Este premio es para ti. Gracias a todos por creer en nosotros y en nuestra música.

El auditorio estalló en aplausos y gritos de emoción. De manera discreta, Jungkook alzó sus manos hacia la cámara que los enfocaba e hizo un corazón de dedos antes de bajar del escenario.

Durante una pausa comercial, Taehyung se encontraba sentado en su sofá, sonriendo de oreja a oreja mientras revisaba las fotos y videos que había tomado de Jungkook en la alfombra roja y durante sus discursos de agradecimientos.

Se sorprendió al ver que pudo captar el corazón de dedos de su guitarrista y sonrió al ver su mirada llena de complicidad.

Recortó la fotografía y la editó para subirla a su estado privado. Estaba a punto de hacerlo cuando, de repente, su teléfono comenzó a vibrar incesantemente con una avalancha de notificaciones. La mayoría eran de Twitter, pero también había muchas solicitudes de amistad en sus otras redes sociales.

—¿Qué es todo esto? —murmuró Taehyung sintiendo su corazón acelerarse.

Confundido y asustado, leyó una de las notificaciones y su rostro palideció al leer el título. Una oleada de pánico le invadió al ver de qué se trataba mientras las notificaciones no dejaban de llegar.

—No puede ser... —susurró, sintiendo que el suelo se desmoronaba bajo sus pies.

Las solicitudes seguían llegando, y Taehyung se dio cuenta de que su privacidad estaba siendo invadida de una manera que nunca había experimentado. Cerró los ojos y tomó una respiración profunda, tratando de calmarse mientras los avisos continuaban apareciendo en su pantalla

El miedo y la preocupación se apoderaron de su cuerpo hasta hacer que sus manos temblaran mientras apenas podía sujetar su móvil. Estaba aterrado por lo que aquello significaba para él y Jungkook, especialmente en una noche tan importante.

Con manos temblorosas, envió un mensaje rápido a Jungkook, esperando que lo viera pronto y supiera lo que estaba pasando. Que supiera por el que su identidad acababa de ser expuesta de la peor manera posible. Que lo que ellos tanto quisieron ocultar estaba en el ojo público.

El solo sentía que estaba al borde de perder el control debido a las manos invisibles que sacudían todo a su alrededor.

!Tan, tan, tan!

Buenos mis solecitos, hasta aqui el capitulo. De verdad espero, a pesar de este final, que les haya gustado el capitulo de esta semana y que hayan disfrutado como yo cada momento. Cuentéenme que les pareció.

Ya lo había dicho antes y de hecho fui dando pistas de esto al mencionar a las fans que se aparecieron en el aeropuerto cuando Jungkook y Tae se fueron a Londres, pero pocos se dieron cuenta de que ello así que aqui estamos.

Tengo que decir que estoy muy orgullosa de Blue Notes, todo el que este orgulloso que deje su corazoncito azul aqui -----)

¿Que pasara ahora con la banda?, ¿que pasará con la relacion de Jungkook y Taehyung?, ¿Ellos mentiran y negaran las especulaciones? Pero.... ¿que tantas pruebas hay de que realmente son pareja? Aun peor, ¿Quien esta detras de todo esto?, ¿Esta persona esta siguiendolos? Los leo.

Adelanto próximo capitulo: Crisis, mudanza.

Nos seguimos leyendo pronto.