Canciones del capitulo:
Counter y Monster de Day 6
OH! de Aqyila

A pesar de todo, cada día de nuestra vida nos trae momentos eternos —Rainer Maria Rilke

Después de su encuentro, la banda retomó su agenda como artistas, la emoción de estar juntos se mezclaba con la responsabilidad de seguir construyendo su carrera musical, sobre todo ahora que las circunstancias habían cambiado. Jungkook, viviendo en Londres con Taehyung, ya no podía estar en Corea tan frecuentemente como antes, lo que significaba que había que ajustar algunos aspectos del contrato y la dinámica del grupo.

Una de las cláusulas importantes era que, a pesar de la distancia, no podrían pasar más de tres años sin lanzar nueva música. Además, se estipulaba que debían mantener la interacción con sus fans de manera constante, lo que incluía actividades anuales como los fanconcerts y otros eventos de fan meeting. La conexión con su público era crucial para su éxito continuo.

Mientras tanto, Taehyung había encontrado un ritmo diferente en su vida diaria. Desde que comenzó a delegar más responsabilidades a sus empleados, su papel en la administración de Tazzys se volvió más relajado. Confiaba plenamente en su equipo y solo intervenía para asegurarse de que todo funcionara bien, eso le dejaba mucho más tiempo libre para dedicarse a otras actividades.

Cuando no estaba visitando Tazzys o supervisando desde casa, Taehyung solía pasar tiempo con la pequeña Minha. Cuidar de ella se había convertido en una de sus ocupaciones favoritas. Le encantaba ver cómo la niña crecía y siempre tenía una sonrisa en su rostro cuando jugaban juntos, de hecho, se volvió tan unido a la familia de Jungkook que, a veces, sentía que tenía más cercanía con ellos que con su propia familia en Corea.

Los días en los que no tenía mucho que hacer, solía encontrar pequeñas cosas para mantenerse ocupado: leía, exploraba nuevos pasatiempos o pasaba tiempo con la familia de Jungkook. Cada día encontraba nuevas maneras de mantener un equilibrio entre su tiempo libre y el amor que sentía por su prometido y por la familia que lo había acogido con tanto cariño.

Jungkook, por su parte, seguía siendo el líder y guitarrista de Blue Notes, pero ahora tenía la ventaja de haberse graduado de producción musical, lo que le daba una nueva perspectiva en su carrera. Estaba comprometido con mantener la calidad y la innovación en la música del grupo, incluso si eso significaba trabajar a distancia o viajar más a menudo para las producciones de sus próximos álbumes.

El nuevo contrato con la disquera reflejaba la evolución de la banda y de sus miembros, especialmente Jungkook. A pesar de los desafíos logísticos, estaban listos para enfrentar lo que viniera, sabiendo que su pasión por la música y el apoyo mutuo siempre los mantendrá unidos.

Que Blue Notes estuviera de vuelta después de una gran pausa, se sentía irreal tanto para ellos como para sus fans que ardientemente habían estado esperando un año y medio. En aquel tiempo muchas de las canciones estuvieron presentes en las listas de Melon y también hicieron posible conseguir el premio de mejor fandom. Así es como Gem creció e hizo de Blue Notes una banda cada vez más notable, especialmente fuera de Asia.

Cada vez más gente los conocía y hablaban de ellos como la nueva banda de rock. También el hecho de que Jungkook expresara su sexualidad abiertamente, atrajo a nuevos oyentes que pronto se convirtieron en fans, no solo que admiraban la música y el talento de Blue Notes, sino también la valentía de su líder al ser públicamente gay.

Finalmente anunciaron el tan esperado comeback desde el momento en que Hyun-jin y Jimin culminaron su servicio militar con éxito. Antes de irse trabajaron en muchas melodías, sin embargo, para ellos las vivencias del día a día y sus experiencias previas fueron la fuente de su inspiración para componer las letras de sus canciones, por lo que, separados y desprovistos de novedades que fueran un poco distintas a lo que habían contado, temían haber prometido un regreso sin sustancia, de esa que tanto disfrutaban brindar.

Reunidos en el estudio debatieron sus inquietudes sobre qué cosas deberían relatar en el nuevo álbum y como si fuera una epifanía, se les ocurrió una grandiosa idea. Todos estaban de acuerdo en que aquella era musical tan personal y romántica debía reanudarse en otro momento y tomar un nuevo rumbo.

—Creo que no hemos pensado antes en escribir algo contado por otra persona o una experiencia que no sea nuestra —consideró Cyrus en aquel momento de iluminación. — ¿Qué les parece si nos retamos pidiéndole a Gems historias que puedan ser canciones?

En ese momento aquella idea parecía una locura y algo fuera de su alcance, pero una vez Namjoon lo informó al equipo de marketing, fue una idea que no pudieron rechazar y ver luego como el fandom respondió tan positivamente a aquella iniciativa con el pensamiento de "algo mío puede ser parte de una canción de Blue Notes" fue impresionante. Miles y miles de historias llegaron a los correos de la agencia y día a día el equipo se mantuvo depurando todas aquellas que pudieran ir acorde con el estilo lírico de la banda buscaba.

Así fue como el primer día que los chicos pisaron la agencia leyeron aproximadamente 50 historias que estaban previamente agrupadas por categorías de experiencias que eran consideradas como similares. Cinco carpetas con diez historias cada una, aunque estaban a su disposición muchas más en caso de que no fueran a quedar satisfechos con esas.

La inspiración, las risas e incluso las lágrimas llenaron aquella habitación después de ver plasmada las confidencias de Gem, por lo que terminaron aquel día haciendo un en vivo en forma de agradecimiento a sus fans por la confianza depositada y pidiendo que esperaran con ansias el próximo mes.

Para recompensar aún más la receptividad de sus fans, los miembros también propusieron un listening party donde de modo aleatorio 30 Gems pudieran participar de todo lo que habían planeado para aquel momento tan significativo, petición que también fue bien recibida ya que el equipo parecía entusiasmado después de tanto tiempo sin actividad.

Aquella mañana Jungkook despertó con un sentimiento nostálgico incrustado en el pecho. Después de haberle echado un último vistazo a Taehyung quien dormía profundamente a su lado, decidió salir a correr, no obstante, no podía dejar de sentirse de aquella forma, como si volviera a aquellos días de su adolescencia en los cuales soñaba desesperadamente con pertenecer a una banda como las que presentaban en televisión.

Intentó descifrar aquellos sentimientos y llegó a la conclusión de que su amor por la música iba más allá de lo que las palabras podían expresar, por más fama, popularidad y experiencia ganada jamás daría por sentado el día en que se lanza un álbum de su banda. Aunque pensaba que probablemente aquel álbum sería el mejor y, estaba muy orgulloso del arduo trabajo de escritura y grabaciones sumado a todas las melodías que habían quedado a la espera de volver a la vida, era el álbum más experimental que han realizado hasta el momento.

A pesar de todo, pensó que el día que perdiera los nervios en una situación como aquella muy seguramente sería el momento de dejar todo. No quería dejar que sus emociones lo consumieran, pero, si algo le había quedado claro era que, esa sensación, más allá de ser un estorbo, le recordaba que no todo se debía a él y que sin importar si era del gusto de alguien o no, él y los miembros vertían toda su pasión.

Al caer la noche, mientras todos aguardaban el momento en la sala de espera, Blue Notes se preparaba para lucir como una banda de rock de los 2000 a toda regla. Jimin vestía una camiseta negra y guantillas a juego, un pantalón con estampado de cuadros tipo escoces en dos tonalidades de verde ceñidos a su figura, zapatos rojos y un pañuelo del mismo color rodeando su cuello. Hyun-jin iba todo de negro, un chaleco de cuero y por encima una chaqueta del mismo material, con pantalones igualmente ajustados a su cuerpo completados por accesorios plateados y botas negras.

Cyrus llevaba el mismo estilismo que Hyun-jin a diferencia de que debajo de la chaqueta tenía una camiseta agujereada y un maquillaje más extravagante que el de los demás, lo que resaltaba más su mirada cautivadora de ojos azules. Por otro lado, el líder de la banda llevaba una camiseta negra sin mangas, un chooker con agujeros plateados, pantalón de mezclilla acompañado de una correa negra que contaba con la mitad de una falda escocesa que combinaba con el pantalón de Jimin.

De eso se trataba precisamente "Revival Frequencies: Nostalgia", el álbum que en cuestión de unas horas estaban por presentar a un público especial antes del lanzamiento oficial.

El lugar reflejaba una atmósfera que evocaba una vibra emo y grunge. Las paredes desvencijadas como las de una calle decadente estaban llenas de grafitis y luces de neón simulando el espíritu juvenil y rebelde de esa época musical. Sobre las mismas estaban pegados de manera descuidada posters de álbumes de bandas como: Evanescence, Radiohead, Arctic Monkeys, Linkin Park, Creed, entre muchos otros. La tarima contaba con una pantalla led que estaba enmarcada con cd's rotos que brillaban cuando insidia la luz en ellos.

Mientras se proyectaba las fotos y videos conceptuales del nuevo álbum, el DJ invitado mezclaba canciones propias de la época con los éxitos anteriores de Blue Notes mientras que los invitados disfrutaban de diferentes actividades como el photobooth temático que rememoraba los videos musicales de los 2000 con elementos como guitarras, micrófonos, chaquetas y gafas de sol.

También la estancia contaba con "el muro de la nostalgia" cuyo objetivo era que los asistentes pudieran dejar notas sobre sus recuerdos de aquella época o simplemente el sentimiento que les provocaba el rock, así como también cualquier mensaje que quisieran dejarle a la banda. Por último, se encontraba el área de personalización de camisetas al estilo rockero que contaba con materiales como aerosoles, parches y pegatinas para decorar.

Después de una hora en la que todos los asistentes incluido Gems disfrutaron de las actividades y socializaron, se apagaron las luces y comenzó a reproducirse el VCR y fue inevitable los gritos de emoción ante el gran momento de la noche.

"Esa herida, ese malestar, la inconformidad de este mundo es lo que teníamos en común hasta que nuestras frecuencias afloraron, como cuando éramos adolescentes y erramos sin sentido, aunque todo nos dolía, no nos pesa más que ahora que perdimos la inocencia hace tiempo, sin embargo, esa vibración dentro de mi es igual que la tuya, como el sonido de esta cuerda que se distorsiona y hace estremecer mis entrañas. Ese olor, esas calles que ya no son las mismas que las que transitamos ahora, se presentan ante mí como una realidad superpuesta. Aunque sea por este momento, volvamos a las raíces, donde todo comenzó, donde aún resuena nuestra rebeldía."

Al terminar aquella narración que dejó a los espectadores con la respiración contenida finalmente salió Blue Notes al escenario provocando nuevamente una ola de gritos y aplausos. Jungkook no pudo evitar notar estando tan cerca la felicidad que transmitía los rostros de sus fans al igual que el de sus conocidos, en especial la amplia sonrisa de orgullo que tenía Taehyung, quien le guiño ojo y le lanzó un beso desde su lugar.

—¡Buenas noches! —exclamó el líder —Nosotros somos...

—¡Blue Notes! —respondieron los demás al unísono.

—En primer lugar, agradecemos que todos estén aquí acompañándonos a escuchar este proyecto tan valioso para nosotros después de tanto tiempo sin actividad —expresó Jimin iniciando con la introducción que habían preparado. —Hyun-jin y yo estamos muy felices de estar de vuelta y que mejor que de esta manera, compartiendo lo que nos apasiona y estando cerca de ustedes, Gems.

—Así es, sinceramente estamos muy agradecidos por el apoyo que nos siguieron brindando y todos los logros con los que, gracias a ustedes, nos han reconocido. —continuó esta vez Hyun-jin con una soltura que no era tan propia de él hasta aquel momento. —Este álbum es probablemente el más especial porque lo hemos hecho en conjunto con ustedes, sus valiosas historias y vivencias, las cuáles tratamos de reflejar lo mejor posible en éstas canciones que les presentaremos.

—Como habrán podido notar por la ambientación, este nuevo álbum tiene una fuerte influencia de los 2000, una época del rock que marcó nuestras vidas y encendió esa llama que nos llevó a aspirar a ser una banda de rock. Esos elementos que en nuestra adolescencia amábamos de esas canciones, los hemos querido rescatar y darle nueva vida e incluir subgéneros del rock como post-grunge, el garage rock revival, alternativo, el indie rock y pop punk —agregó Cyrus como todo un experto.

—A parte de adoptar estos ritmos también a la hora de escribir fue todo un reto ya que en aquella época las líricas eran crudas sobre las frustraciones, crisis sociales, conflictos internos, sobre la vida moderna con cierta rabia y otras veces con despreocupación. La buena noticia es que gracias a ustedes pudimos llevarlo a cabo de manera satisfactoria, espero que puedan sentir esa complejidad emocional y experimentación sonora en la que pusimos todas nuestras energías. Sin más que agregar esperamos que disfruten este viaje musical tanto como nosotros al crearlo. —concluyó Jungkook que junto a sus compañeros bajaron de la tarima hacia las mesas que tenían para ellos.

El pelinegro se posicionó cerca de Taehyung quien le transmitía la tranquilidad que necesitaba en aquel momento, mientras Jimin discretamente se quedó al lado de Namjoon quien había estado acompañando a la invitada de Cyrus, Kazuha, quedando Hyun-jin entre ellos dos.

—Ella es mi amiga Kazuha Nakamura —la presentó Cyrus con premura antes que terminara la cuenta regresiva de reproducción del álbum, todos muy educadamente la saludaron con una pequeña reverencia, mientras que Hyun-jin al estar a su lado le dio un apretón de manos.

Cyrus notó de inmediato como Hyun-jin perdió la soltura que había demostrado en el discurso de inicio, pareció encogerse después de haber tocado la mano de aquella mujer a simple vista tenía una mirada fiera y seductora pero que una vez sonreía todo eso se convertía en una dulzura cautivadora, era dueña de una dualidad que el antes pelirrojo consideraba desde ya peligrosa.

Ella vestía un crop top negro de una sola manga con una rosa de brillos en el centro, este dejaba ver parte de su abdomen, lo que la hacía ver aún más atractiva sin llegar a lo vulgar, unos pantalones negros altos y brillantes. Bisutería plateada cubría su cuello que combinaba a la perfección con las extensiones del mismo color que adornaban su cabellera negra en dos coletas que terminaban de darle un toque coqueto y dulce.

Mientras el álbum sonaba, había una vibra un tanto inmersiva, los invitados conocidos y los fans presentes entendían que era un momento preciado por lo que no se escuchaban gritos, solo la música envolviéndolos entre acordes eléctricos y enérgicos que hacían vibrar por dentro. Había suficiente iluminación como para identificar las expresiones de las personas y efectivamente todos la pasaban bien moviendo sus cabezas y sus cuerpos al ritmo intenso de la música, fruncían el ceño o formaban una "O" inaudible con sus labios cada vez que una frase o melodía les parecía impresionante.

Después de la 3era canción Hyun-jin volvió a relajarse y era imposible no hacerlo cuando la música que había compuesto con sus amigos era tan buena como para no vivirla al máximo, sin embargo, la presencia de la nueva chica que se encontraba a su lado, con quien a veces rozaba los hombros, seguía retumbando dentro de su mente. Aun podía sentir la calidez de su mano y por la cercanía podía percibir el aroma frutal y dulce que desprendía en cada movimiento.

—Las canciones están realmente geniales —casi gritó ella sacándolo de aquella dulce bruma en la que lo mantuvo envuelto y se volvió a tensar al pensar que había pasado lo que deseaba: volver a escuchar su voz y verla sonreír con gracia.

—Es...es muy amable de tu parte, espero que nos sigas apoyando —tartamudeó haciendo una leve reverencia hacía ella, lo que la hizo reír e inclinarse hacia él, más de lo que creyó soportar. Aquel aroma volvió a penetrar en sus sentidos y vio su tersa piel mucho más cerca, sus labios perfectamente pintados de un rosa satinado muy natural, tragó en seco y supo que está a punto de perder una batalla que ni siquiera sabía que iba a enfrentar. Ella también miró los labios del pianista y luego aquellos ojos ahumados que ahora se veían fieros, aunque parecían ocultarse tras el flequillo desordenado que llevaba aquella noche.

Justo en ese momento, recibieron la señal que indicaba que era el momento justo de subir al escenario, bajaron las luces y se colocaron en sus posiciones. Aquello significaba que pronto estaba por terminarse la velada, era momento de tocar en vivo canción principal del álbum: "Tonight, you're mine". Las vibraciones y la electricidad acompañada de aquella letra atrevida fue el final más espectacular para aquella velada que terminó entre aplausos y brindis final que auguraba el éxito del álbum por todo lo alto.

El listening party fue un éxito, compartieron con sus fans, se tomaron fotos con ellos, incluso pudieron hablar algo.

Revival Frequencies: Nostalgia es un álbum que ellos estaban emocionados por lanzar, así que ver los comentarios y algunas reacciones de sus fans y de personas que lo escuchaban por primera vez, era gratificante. Era una nueva era, un nuevo concepto, algo que ninguno había hecho antes en cuanto a música.

Jungkook se involucró mucho como productor, así que se mantuvo viendo cada uno de los comentarios del álbum y aunque se encontró con alguna que otra persona que no le gustó del todo, la cantidad de quienes amaron su nuevo concepto era mucho más grande.

Después de lanzar el áclbum, Blue Notes se sumergió de lleno en la promoción. La banda fue invitada a múltiples entrevistas y programas de variedades, donde hablaron de su proceso creativo, la evolución de su sonido y las experiencias que los llevaron a crear este proyecto. El regreso a los escenarios y los sets de televisión era un recordatorio de la conexión que tenían con su público y cada aparición se sentía como una celebración del trabajo duro que habían invertido en su música.

Durante todo el tiempo que Jungkook estuvo fuera de casa en su agenda de promociones, Taehyung se mantuvo en casa algunas veces mirándolo desde la televisión y como siempre presumiéndolo en el grupo familiar y en sus redes sociales.

Con más tiempo libre entre sus compromisos, Taehyung comenzó a investigar algo que había estado rondando en su mente desde hace mucho tiempo: la posibilidad de adoptar. Por primera vez desde su divorcio, aquella noche, verdaderamente se estaba dando la oportunidad de volver a intentar adoptar y solo esperaba que esta vez tuviera más suerte. Aunque no dejaba de tener miedo de ser rechazado una vez más, aún habitaba en él ese 1% de fe de que podría lograrlo con Jungkook.

Quería saber qué se necesitaba para comenzar ese proceso en Londres, ya que habló antes con Jungkook, aunque brevemente, sobre formar una familia, así que por el momento era todo lo que necesitaba saber. A medida que investigaba, encontró diversas opciones y requisitos que Londres imponía para la adopción y tomó nota de las agencias y organizaciones que podrían ayudarlos.

Esa misma noche Jungkook llegó a casa exhausto después de tocar en un programa. Lo recibió con una sonrisa suave, sirviendo té mientras Jungkook se dejaba caer en el sillón.

—Hoy encontré algunas opciones —comentó Taehyung, mostrándole la pantalla de su laptop que tenía sobre sus piernas—. Sobre lo que hablamos hace tiempo... lo de adoptar.

Jungkook, sorprendido pero curioso, se inclinó para mirar. Aunque el cansancio se notaba en su rostro, una sonrisa emocionada apareció al ver los detalles que Taehyung había reunido. Era una conversación seria, algo que ambos querían en su futuro, pero la realidad de verla plasmada en opciones concretas les dio una nueva perspectiva.

—Wow, Miel... No sabía que ya estabas investigando tanto —expresó Jungkook con la mirada en la pantalla de la laptop, viendo toda la información que su prometido ya había reunido—. Verlo de esta manera, me emociona, no te lo voy a negar.

Taehyung sonrió, aunque con un leve tinte de nerviosismo. Era algo grande, algo que cambiaría sus vidas para siempre.

—Si, a mí también —admitió—. Se ve muy sencillo, como si fuera solo cuestión de llenar unos formularios y esperar.

Jungkook frunció el ceño, recordando algo del pasado, algo que siempre estaba presente en el fondo de su mente cuando se trataba de adopción.

—¿Lo es realmente? —preguntó con suavidad, sabiendo que Taehyung había intentado adoptar antes, durante su matrimonio con Juwon. Esa experiencia había sido dolorosa y frustrante, algo que Jungkook no podía ignorar, especialmente ahora que estaban considerando hacerlo juntos.

Taehyung bajó la mirada cambiando su expresión ligeramente. Había esperado esta pregunta, sabía que llegaría en algún momento.

—No, no lo es —susurró casi como si hablara para sí mismo.

Ambos guardaron silencio por un largo rato, dejando que la pesada realidad de lo que implicaba la adopción se asentara entre ellos. Era un proceso complicado, emocional y en ocasiones, injusto. Pero a pesar de las dificultades pasadas, Taehyung estaba dispuesto a intentarlo de nuevo, estaba seguro que con Jungkook sería muy diferente como lo ha sido todo durante los cuatro años que tenían juntos.

Jungkook notó la tensión en los hombros de su prometido y sin pensarlo dos veces, tomó su mano, entrelazando sus dedos en un gesto de apoyo y confianza.

—Haremos lo que tengamos que hacer para cumplir con los requisitos, tranquilo —expresó acariciando la piel de la mano de Taehyung con su pulgar—. No tenemos que apresurarnos. Lo haremos bien, esta vez será diferente.

Taehyung respiró hondo, sintiendo el alivio y la calidez que las palabras de Jungkook le ofrecían. Aunque el proceso no sería fácil, sabía que tener a Jungkook a su lado lo cambiaba todo. No estaba solo en esta decisión ni en las posibles complicaciones que podrían venir.

—No quería presionarte —admitió Taehyung apretando suavemente la mano de Jungkook—. Solo pensé que podríamos empezar a considerar nuestras opciones, ver si es algo que ambos queremos pronto.

Jungkook lo miró a los ojos, sonriendo de esa manera suave y comprensiva que hacía que Taehyung se sintiera seguro.

—Lo quiero tanto como tú —susurró Jungkook—. Y cuando sea el momento adecuado, estaremos listos.

La conversación esa noche sobre el futuro fue cálida, hablaron sobre las posibilidades, los pasos a seguir y lo que significaría tener una familia. Para ambos, imaginar una vida juntos como padres era un sueño que ahora parecía un poco más tangible, aunque sabían que aún había mucho camino por recorrer.

Unos meses después del lanzamiento del álbum, el anuncio de la gira mundial de Blue Notes sacudió a los fans en todo el mundo. Las fechas para Asia, Europa y América fueron reveladas y las entradas volaron en cuestión de horas.

La banda estaba lista para llevar su música a escenarios internacionales y Taehyung decidió acompañar a Jungkook a cada uno de los conciertos, apoyándolo desde el backstage, no podía pensar en estar lejos de él por tanto tiempo, no otra vez, así que aprovechó el estado en el que se encontraban sus bares en la actualidad para acompañarlo en todo momento y de paso disfrutar de cada uno de los shows ahora que podía estar con él sin miedo de que las personas lo vieran juntos.

Conforme la gira avanzaba, los fans comenzaron a notar que Taehyung aparecía junto a Jungkook en más de una ocasión. Aunque siempre habían sido discretos con su relación, algunas Gems los vieron salir juntos después de los conciertos, caminando por las calles de Tokio, París, Nueva York y otras ciudades. Las especulaciones crecieron, pero ambos se mantuvieron tranquilos, sin responder a los rumores, disfrutando de los momentos juntos mientras viajaban.

Para Jungkook, tener a Taehyung en la gira hacía todo más especial. Cada ciudad que visitaban, cada escenario en el que tocaban, sentía que compartía esos momentos con la persona que más amaba. Taehyung, por su parte, apoyaba a la banda en cada paso, observándolos desde las sombras del backstage mientras brillaban en escenarios más grandes de los que han estado antes.

La dinámica entre ellos seguía siendo la misma antes de subir a presentarse en cada show, sin embargo, la disciplina de Jimin y Hyun-jin fue bastante notable cuando Jimin era mucho más organizado de lo que ya era antes y Hyun-jin se volvió alguien que se preocupaba mucho más por el estado físico.

Jimin, como el perfeccionista que comúnmente era, todo a su alrededor debía estar limpio y si no lo estaba el mismo se ponía a limpiar cualquier cosa que simplemente no estuviera en su lugar.

Por otro lado, Hyun-jin casi siempre lo despertaba temprano los días de concierto, les daba a probar de algún licuado que servía para las articulaciones y un montón de cosas más que solo el menor de ellos recordaba. En otras ocasiones corrían todos juntos en las corredoras del hotel para tener más resistencia durante el concierto y por supuesto que eso también estuvo guiado por Hyun-jin.

Llegó el último concierto de la gira. La banda se presentó en Seúl, donde todo había comenzado para ellos.

El estadio estaba abarrotado, las luces parpadeaban y los gritos de las fans llenaban el aire. Para ellos, esta gira había sido una montaña rusa de emociones. Tocaron en escenarios más grandes que nunca antes, en ciudades que habían soñado visitar y aún se sentía tan irreal lo que estaban viviendo juntos.

La energía en cada concierto era intensa y aunque el agotamiento a veces se apoderaba de ellos, el amor y el apoyo de sus fans los mantenía a flote. Es lo que les gustaba de los conciertos a pesar de que llegaban a punto de agotamiento, no saber qué día volverían a tocar frente a esas personas, es lo que los motivaba a dar lo mejor de ellos en cada show.

Al finalizar el último acorde de la noche, se tomaron de las manos sintiendo sus corazones llenos de gratitud al escuchar al público gritar por ellos.

Jungkook, sudoroso y lleno de emoción, buscó a Taehyung con la mirada entre el público. Lo vio cerca del escenario, sonriendo con orgullo y notablemente igual de emocionado que ellos y el resto del público.

Después de los aplausos finales, la banda se reunió en el backstage, exhaustos pero felices por haber culminado una gira de esa magnitud con éxito.

El último concierto de la gira fue más que espectacular; fue un cierre lleno de emociones que quedaría grabado en sus memorias para siempre. Mientras los fuegos artificiales iluminaban el cielo, todos los integrantes de Blue Notes, junto con el equipo que había trabajado incansablemente, se quedaron afuera del recinto, observando en silencio el espectáculo brillante sobre sus cabezas.

Taehyung abrazaba a Jungkook por sus hombros mientras en el fondo, la melodía de "Fly High", la primera canción que habían escrito para sus fans, aún resonaba en los altavoces, como una despedida simbólica de esta etapa inolvidable.

Jungkook, con los ojos fijos en los fuegos artificiales, tenía sentimientos encontrados, la euforia y la nostalgia emergiendo desde la punta de sus pies hasta su cabeza. Cada chispa en el cielo parecía un reflejo de los momentos compartidos durante la gira, los escenarios que pisaron, las ciudades que recorrieron y los miles de corazones que conectaron con su música. A su lado, Taehyung lo tomó de la mano, dándole un suave apretón, como si no necesitara palabras para expresar lo que ambos sentían en ese momento.

Tras la última explosión de luces en el cielo, el equipo se reunió en los camerinos para compartir un pastel de celebración decorado con la temática del álbum. Entre risas y brindis, agradecieron a todos los que hicieron posible la gira: los técnicos, los músicos, los managers y por supuesto, sus amigos y seres queridos.

Namjoon hizo un brindis emotivo, recordando lo lejos que habían llegado como banda, pero también como personas.

—Esto no hubiera sido posible sin el apoyo de todos ustedes —expresó con una sonrisa mientras alzaba su copa.

—¡Por Blue Notes! —gritaron al unísono, chocando sus copas.

Después de la pequeña celebración, todos, incluyendo a Yoongi y Hoseok, se dirigieron al apartamento de Jungkook y Taehyung para continuar la fiesta de manera más íntima. Era la última vez que estarían todos juntos antes de que la pareja regresara a Londres.

Ya instalados en el apartamento, Yoongi y Hoseok se acercaron a Jungkook mientras el resto charlaba y se relajaba con unas copas en mano.

—Me ha encantado este concierto, estuviste genial, como siempre, no tengo que decirlo —declaró Yoongi con su típica sonrisa traviesa—. Tienes que firmarme el álbum, ya sabes que soy el fan #2 porque sabemos que nadie le quita ese puesto a Taehyung.

—Cariño, deja que al menos respire un poco después de todo lo que han hecho hoy —le dijo Hoseok, dándole una palmada en la espalda a Jungkook.

—No, está bien —señaló Jungkook—. Chicos, Yoongi quiere su álbum firmado por todos nosotros.

—Así como hemos firmado todos los demás —consideró Jimin al llegar a su lado.

—No estoy para peleas contigo cantante de quinta —declaró Yoongi medio bromeando, tratando de quedarse serio, pero sin poder hacerlo al ver la expresión de enojo de Jimin, quien también terminó riendo.

—No debería firmarte nada —expresó Jimin antes de tomar el marcador que le extendió Hyun-jin—. Pero sé que en el fondo soy tu favorito.

Yoongi fingió indignación al llevarse una mano al pecho.

—Me parece una falta de respeto que digas algo así —declaró Yoongi—. Mi favorito es y siempre ha sido el líder. Tendrás que vivir con eso.

—Qué lástima, pensaba ponerte hasta una dedicatoria —expresó Jimin entregándole devuelta el álbum firmado por todos ellos.

—No, no, adelante no te contengas solo porque tienes a tu grandote detrás de ti —declaró Yoongi notando como Namjoon miraba la escena con cierta diversión.

—De acuerdo, una dedicatoria tendrás entonces, no prometo que sea algo tan lindo como lo que escribiría Jungkook.

El mencionado sólo era capaz de ver cómo ellos seguían con aquella dispuesta aún después de tantos años compartiendo juntos, todavía esa noche no entendía a qué se debía toda esa riña, mucho menos que a Namjoon toda la situación le pareciera divertida.

—Aquí tienes, idiota —susurró entregándole el álbum.

—Gracias, cantante de quinta.

—¿De casualidad ustedes fueron pareja en algún tiempo? —la pregunta de Namjoon sorprendió a todos en la sala.

—¡No, qué horror! —respondieron ambos al unísono, fulminando a Namjoon con la mirada, mientras que Hoseok y él solo se rieron de la repuesta de sus parejas.

—Parece que hasta tuvieron un matrimonio con hijos —admitió Hoseok alzando su mirada a Namjoon.

—Qué lástima que no, yo estaba a punto de proponer algo que podría aligerar esas malas vibras. Creo que esa energía se está desperdiciando cuando podría ser utilizada en algo mucho más...

—Interesante... —terminó de decir Hoseok.

—Muy bien, esto se está poniendo un poco raro, volvamos a lo que estábamos —consideró Cyrus mirando devolviéndoles sus copas a cada uno de sus amigos, alentándolos a cambiar de conversación antes de que fuera aún más lejos.

Mientras tanto, Taehyung observaba la escena desde el otro lado de la sala. Discretamente, hizo una seña a Jungkook, quien lo vio y supo de inmediato qué significaba. Con un gesto leve, se levantó y lo siguió hacia la habitación.

—Voy a buscar algo, ya vuelvo —dijo Jungkook con naturalidad.

En la habitación, Taehyung abrió una caja que había mantenido bien guardada. Sacó un conjunto de sobres con invitaciones, cuidadosamente diseñadas, que habían mandado hacer antes de que iniciara la gira. Se las entregó a Jungkook, quien las tomó con cuidado y salió de la habitación, sin que los demás notaran el intercambio.

Taehyung siguió los pasos de Jungkook a la sala de estar donde sus amigos compartían entre ellos y reían, completamente ajenos a lo que sucedía en la habitación. Estaba nervioso, aunque ya todos allí sabían que ellos se iban a casar, tener una fecha y lugar de boda acercaba mucho más el hecho.

Volviendo al grupo, Jungkook se movió discretamente entre sus amigos, entregándoles los sobres uno por uno. Primero, Namjoon levantó una ceja al recibir el suyo, claramente confundido, mientras que el resto de se mostró igual de confundido al ver lo que estaban recibiendo de las manos del anfitrión.

Jimin, al ver el sobre, abrió los ojos de par en par. No pasó mucho tiempo antes de que este chillara de emoción, rompiendo el silencio y lanzándose encima de Jungkook, abrazándolo con una fuerza inesperada.

—¡¿Es en serio?! ¡¿Ya tienen fecha de boca?! —gritó Jimin sin poder contener su emoción, haciendo que todos los presentes lo miraran.

El alboroto llamó la atención de los demás y pronto todos abrieron sus sobres. La reacción fue unánime de asombro, alegría y muchas preguntas.

—No puedo creer que lo hayan hecho de manera tan discreta —expresó Hoseok con una sonrisa amplia, acercándose a Taehyung y abrazándolo fuertemente—. Estoy muy feliz por ustedes.

—Gracias amigo —susurró.

—Te mereces esta segunda oportunidad, te lo mereces más que nadie —le susurró Hoseok al abrazarlo.

Aquellas palabras de su amigo significan mucho. El mejor que nadie conocía perfectamente todas las cosas que tuvo que pasar mientras estuvo casado y luego su divorcio, así que nadie más que él y Jungkook en esa habitación sabían lo mucho que significaba para él estar invitándolos a su boda con el hombre que le ha enseñado a amar, a amar de verdad.

—Siempre supe que eras de los que planean todo en silencio —agregó Yoongi—. No puedo esperar para verlos darse el sí y ser esposos. Para las personas como nosotros, eso es mucho.

La emoción llenó el apartamento y entre abrazos y felicitaciones, el ambiente se tornó aún más íntimo y cálido. Para Taehyung y Jungkook, este era el cierre perfecto para un ciclo increíble: después de una gira mundial exitosa, estaban listos para dar el siguiente paso juntos, acompañados de sus seres queridos.

Cuando la noche avanzaba y las conversaciones seguían, Taehyung se tomó un momento para observar a su alrededor. Todos estaban felices, riendo y brindando, celebrando no solo el éxito de la gira, sino también el futuro que estaba por venir. Jungkook, con una sonrisa tímida pero llena de alegría, estaba rodeado de sus mejores amigos, y Taehyung, mirando a su prometido, sintió que todo estaba en su lugar.

—Nunca me imaginé que llegaríamos hasta este momento —confesó Taehyung en voz baja, sentado junto a Yoongi y Hoseok.

—Tú siempre fuiste de los que consiguen lo que quieren —respondió Yoongi, dándole una palmadita en la espalda—. Y ahora estás justo donde tienes que estar.

Taehyung sonrió, sabiendo que esas palabras eran más significativas de lo que parecían.

Cuando la puerta del apartamento finalmente se cerró, las risas y voces de sus amigos se desvanecieron en la distancia, el silencio se instaló en el apartamento.

Ambos suspiraron aliviados, disfrutando de la tranquilidad después de una noche de celebración. Las maletas estaban ya listas y apiladas junto a la puerta, listas para ser llevadas a Londres dentro de dos días.

—Creo que eso fue todo... —murmuró Jungkook, frotándose los ojos cansados mientras entraban al dormitorio.

—Sí, todo salió según lo planeado —replicó Taehyung.

Ambos se desvistieron lentamente y antes de entrar a la cama, hicieron su rutina de costumbre antes de irse a dormir.

Se deslizaron bajo las sábanas, abrazándose instintivamente, como siempre lo hacían. La habitación estaba en penumbra, iluminada solo por una pequeña lámpara en la mesita de noche de Taehyung, quien se dejaba abrazar por Jungkook, lo que por lo general es al revés.

—¿Sabes? Ahora es real... —masculló—. Ya entregamos las primeras invitaciones. De verdad nos vamos a casar.

Taehyung sonrió ante sus palabras.

—Sí, honey, es real —respondió mientras acariciaba suavemente el rostro de su prometido—. Vamos a casarnos.

Jungkook se quedó en silencio por un momento, dejando que las palabras flotaran en el aire. Nunca había imaginado, en sus sueños más ambiciosos, que la vida le regalaría algo como aquello. Que Taehyung, el hombre que había admirado desde la distancia durante sus tiempos como guitarrista de banda de bar, se enamoraría de él. Que ahora compartirán un hogar en Londres, planeando una boda, y que incluso estuvieran pensando en formar una familia.

Mientras que Taehyung no dejaba de pensar que la vida que él tenía con Jungkook, era todo lo que siempre ha necesitado en su vida. Ya no le importaban las apariencias frente a la sociedad. Solo le importaba que está compartiendo su vida con alguien como Jungkook, que lo ama y que siempre ha estado a su lado en altos y bajos. En sus mejores y peores momentos.

Jungkook sonrió, inclinándose para besar el hombro de Taehyung.

—Es todo lo que necesito —murmuró Jungkook con sus ojos cerrados—. Tú y yo, construyendo algo hermoso.

Se quedaron en silencio por un momento, escuchando solo sus respiraciones tranquilas mientras sus cuerpos se acomodaban uno junto al otro. El cansancio del día, y de toda la gira, pesaba sobre ellos, pero sus corazones estaban ligeros. La realidad de lo que les esperaba en las próximas semanas les llenaba de emoción.

—Te amo mil millones de infinitos —susurró Taehyung dándose la vuelta sobre la cama y dejar su cabeza recostada del pecho de Jungkook.

—Yo también te amo —respondió el pelinegro envolviendo a Taehyung con sus brazos—. Más allá de todos esos infinitos.

La noche avanzaba lentamente, el sonido del tráfico de Seúl comenzaba a apagarse y la calma nocturna les envolvía en una burbuja de serenidad.

En la quietud de la noche sus corazones latieron al unísono, recordándoles que, en un mundo lleno de infinitos, habían encontrado el suyo.

—Estamos justo donde debemos estar —susurró Taehyung antes de finalmente dejarse caer en el sueño.

Y así, mientras el mundo seguía girando, ellos encontraron su paz en los brazos del otro, sabiendo que el verdadero viaje apenas estaba comenzando.

Bueno solecitos, hasta aquí el maratón de hoy. Espero que les haya gustado tanto como a nosotras.

Este capítulo estuvo cargado de muchas emociones. Desde el regreso de Blue Notes a los escenarios hasta el gran anuncio de Jungkook y Taehyung.

El nuevo álbum de Blue Notes, todo el concepto de rock de los años 2000, ¿que les pareció?. El listening party con las fans, donde Hyun-jin conoció a quien podría ser el amor de su vida☺️.

Por otro lado, ya es una realidad, ya si podemos hablar de la posibilidad de que Tae y Jk formen una familia ahora que hablaron sobre las opciones que tienen y los posibles requisitos que tendrán que cumplir para adoptar. ¿Ustedes creen que sea difícil para ellos o será más fácil esta vez?, ¿no les negarán la adopción como ya le sucedió a Tae? Los leo.

Además, la parejita ya entregó sus invitaciones, ahora solo queda una cosa, el gran día. ¿Ustedes cómo esperan que sea la boda?🥹

Esta fue como una despedida de conciertos para Blue Notes, creo que es lo último que escribiremos de ellos, ¿se siento de esa manera cierto? Lloro, estoy orgullosa de mis notitas azules😭

Emoji azul si te consideras una Gem💎 ———->

Adelanto del próximo capitulo: "Esta es la última nota que escribo como tú prometido".

Nos seguimos leyendo en la próxima semana💜✨.