El timbre sonó por todo el departamento hasta que Jungkook se dignó a abrir la puerta, Taehyung podía simplemente colocar la contraseña y entrar al departamento, después de todo Jungkook aún no la cambiaba, pero le abochornaba el tomarse tal atrevimiento, como si aún fuera su departamento o como si la relación de ambos fuera lo suficientemente estable y buena como para entrar con completa confianza al departamento que ya no era suyo.

—Hola —lo saludó Jungkook al abrir la puerta, parecía recién salido de la ducha, su cabello negro estaba mojado al igual que su pecho al descubierto dado a que el alfa solo traía puesto un bóxer que no dejaba mucho a la imaginación, además de cierta obviedad se podían ver las musculosas piernas que orgullosamente portaba.

—Hola, lamento haber llegado tarde, pero es que terminaba de hacer mi tarea —Taehyung se excusó por tardar más de una hora de la hora acordada, pero la tardanza realmente se debía a que Taehyung se sentía muy nervioso, era el celo de Jungkook y sabía perfectamente lo que eso significaba, el trato rudo que recibiría durante el sexo y el trato amoroso y posesivo que recibiría después de ser anudado, su lobo se había emocionado tanto que le dió pánico al empezar a imaginar lo que sucedería y los sentimientos que le generaría.

Había sido mala idea acordar tener sexo durante sus celos.

—No te preocupes, me tomé un supresor y me dí una ducha, de momento estoy bien —mencionó mientras se apartaba de la puerta para dejar entrar a Taehyung.

Al llegar a la sala Taehyung descolgó de su hombro su mochila con sus pertenencias y se sentó sobre el sillón púrpura siendo seguido por Jungkook quien también se sentó sobre el sillón. El alfa le había mandado mensajes diciéndole que estaba entrando en celo, por lo que se acordaron ver en el departamento del alfa apenas Taehyung se diera un baño y alistara su maleta, era un sábado por la tarde, era la tercera semana desde que iniciaron con su relación sexual, así que la tensión aún no se desvanecía entre ellos.

Taehyung seguía dudando de su decisión pero no se arrepentía, le encantaban cada uno de los momentos íntimos que compartían, así que estaba bien con ello, aún cuando su lobo insistía en que no fuera solo sexo.

—¿Qué quieres que hagamos mientras esperamos a que los síntomas vuelvan? —Jungkook rompió el silencio, durante todo ese rato había estado observando a Taehyung en completo silencio.

—No lo sé —Taehyung jugó con sus manos con evidente nerviosismo.

—Podemos ver la tele —murmuró para después estirarse a agarrar el control sobre la mesita de café.

—¿Cuánto dura el efecto del supresor? —lo último que deseaba era pasar demasiado tiempo en esa situación que antes fue tan cotidiana y que ahora era incómoda para él, más cuando el alfa estaba semidesnudo.

—Me tomé unos suaves, solo reprimen mi deseo sexual pero no la temperatura y dolor, no debe tardar mucho —se encogió de hombros y cambió un par de veces en los canales hasta que se decidió por ver mejor una película de los vengadores.

Taehyung se mordió el labio conteniendo un quejido de fastidio, estaba ansioso por ayudar a Jungkook en su celo, pero a la vez se sentía aliviado de poder atrasar el momento el mayor tiempo posible, sin embargo no le gustaba el tener que pasar un momento ameno al lado de Jungkook, como si solo fueran dos amigos viendo la televisión en lugar de exnovios que tienen sexo. Sin embargo, para Jungkook parecía no tener gran importancia y eso hacía dudar a Taehyung. ¿Realmente a Jungkook no le afectaba todo eso? Parecía que para él era algo tan insignificante mientras que Taehyung se moría de nervios que demostraba con su tic nervioso de lamerse los labios.

Todas las veces anteriores que habían tenido sus encuentros sexuales iban directo a lo que les unía, sin siquiera detenerse a charlar o planificar algún fetiche que desearán cumplir, porque cuando eran novios a Taehyung le encantaba que Jungkook lo amarrara de las manos y piernas, algunas veces hasta que le vendara los ojos, pero ahora simplemente hacían lo que debían hacer y ya, cosa que desepcionaba levemente a Taehyung porque aunque el sexo se seguía sintiendo placentero ya no le generaba la misma sensación de calidez.

—Deja de observar como si tuviera algo en la cara y simplemente dí lo que te molesta de mí — Jungkook le volteó a ver después de que Taehyung estuviera alrededor de veinte minutos observado.

—¿Por qué no te molesta todo esto? —cuestionó sin pensar en que posiblemente la respuesta no sería de su completo agrado.

—¿Por qué me debería de molestar? No somos unos adolescentes que no saben lo que quieren, vamos a tener sexo nuevamente y simplemente observamos la tele mientras esperamos a que la pastilla culmine su efecto, no encuentro algo que me debería de molestar —Taehyung frunció el ceño, claramente no eran unos adolescentes, pero tenían una historia de más de tres años que debería haber sido mencionada por el azabache.

—Parece ser que simplemente no te molesta ver la tele antes de follar con tu ex, o hacer cualquier cosa casual antes y después de que tenemos sexo, parece que te da absolutamente igual que fuimos novios y que esas cosas normales ya no se siente igual —lo sacó, sacó ese coraje que tenía desde que tuvieron sexo por segunda vez.

Sabía que era algo estúpido pero era algo que lo afectaba mucho, la idea de que realmente para Jungkook su noviazgo ya no tenia importancia; porque para Taehyung aún significaba más de lo que quería admitir y aunque él fue quien propuso el tener sexo después de rechazar la idea, jamás imaginó que terminaría resentido con la forma en que Jugnkook lo trataba antes o después de algo que para él seguía siendo tan íntimo e importante, porque aun cuando se dijo que solo era sexo, ciertamente nunca se hizo a la idea de que realmente solo era sexo.

—¿Y qué quieres que haga? No me voy a pasar todo el tiempo lamentando por algo que ya acabó, tú fuiste quien terminó nuestra relación sin tomar en cuenta mis sentimientos, pero ahora que ya no somos novios es cuando te pones a pensar en lo que sentía y lo que debería de sentir, crees que para mí todo lo que involucra un "tú y yo" no importa, pero nunca ves más allá de lo que quieres ver —Jungkook observaba a Taehyung con sus oscuros ojos que transmitían su tensión y coraje, su mandíbula marcada por la fuerza ejercida, estaba enojado pero se contenía de seguir hablando y quizás terminar gritando.

Taehyung simplemente observó al alfa en silencio mientras se sentía completamente culpable, Jungkook tenía toda la razón, él había estado siendo egoísta todo ese tiempo, queriendo una relación que él mismo terminó, queriendo solo sexo, pero después pidiendo sentimientos como si no hubiera lastimado al alfa con su ruptura, solo había estado buscando su felicidad y bienestar sin pensar en Jungkook. Jimin tenía razón, su relación con Jungkook no era lo que le hacía mal, pero su amigo también se equivocó, porque lo que le hacía mal era él mismo y su egoísmo.

—Lo siento, fue mi culpa que nuestra relación terminara así y es mi culpa encontrarnos así —susurró Taehyung mientras llevaba su mirada a la tela púrpura del sofá, sus ojos estaban levemente llorosos pues intentaba contener su llanto —, fuí un mal novio y soy un mal ex.

—No fuiste un mal novio y no eres un mal ex, tampoco tienes la culpa de que termináramos, aún si tu dijiste las palabras nuestra relación ya estaba condenada a terminar —Jungkook sujetó con su diestra el rostro de Taehyung y lo obligó a levantar la mirada para observarse mutuamente—. A veces, por más que lo deseamos las cosas simplemente no se dan y no podemos hacer nada para cambiarlo, pero no por eso nos debemos sentir mal.

El labio inferior de Taehyung empezó a temblar mientras pequeñas gotas saladas se deslizaron por sus mejillas dando inicio a un llanto acompañado de pequeños y suaves hipidos, su pecho se sentía comprimido por la tristeza que le generaba hablar con Jungkook de su relación, ciertamente no tenían futuro como novios, pero saber eso solo lo hacía sentir peor pues fue algo que lo estaba atormentando desde antes de romper, se intentó aferrar a lo que tenían con tal de seguir juntos, e incluso ahora, seguía cometiendo el mismo error y aunque les hacía daño se negaba a aceptar que nunca podría suceder un "vivieron juntos para siempre".

Pero aún así quería seguir con esa relación sexual, quería que por lo menos Jungkook siguiera tocando su piel provocando calidez, quería seguir besando sus labios que lo llevaban al mismísimo paraíso y más que nada, quería poder seguir conectando su mirada con aquellos oscuros ojos que brillaban aún más que una galaxia. Porque seguía enamorado y era lo suficientemente masoquista y egoísta como para intentar seguir con lo único que le podía dar casi todo aquello que quería.

Jungkook limpió las lágrimas escurridizas y dejó sus manos sobre las rellenitas mejillas que se habían coloreado por el leve llanto que había tenido Taehyung. Sorbiendo de su nariz Tae, observó los labios del alfa y deseo sentir los besos que Jungkook solía dejar por todo su rostro mientras le decía lo mucho que lo amaba.

—¿Podrías darme un beso?, por favor —cerró sus ojos y se quedó a la espera de sentir los labios de Jungkook sobre alguna de sus mejillas, sin embargo, ambos pares de labios fueron unidos y lentamente se empezaron a mover para dar inicio a un dulce beso cargado de todo aquello que sus lobos anhelaban y que ambos callaban.