41: Gp de España

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22 de mayo, 2022

Toda la mañana me la había pasado pensando en lo de anoche, como un solo roce de sus labios me había hecho quitarme las bragas y como me sentí como una completa estúpida al saber que se había follado a varias "amiguitas" y ni hablar de esa rubia que me dejaba saber todo lo que me faltaba.

Mi autoestima estaba muerta.

Debería estar enojada con él, dejar de pensar en él, pero, no podía dejar de hacerlo, ni a sus estúpidos ojos marrones.

La forma en la que me mira, la forma en la que me sonríe y el como me dice que soy la única a la que quiere, causa en mí un trance y me pinta corazoncitos en el aire.

Estoy mal. Perdidamente mal.

Estoy enamorada.

Perdidamente enamorada.

Leí sus cartas entre suspiros. Guardé todos los escritos en una caja. Solté un último suspiro y me puse de pie. Empecé a alistarme para la carrera, tomé una ducha, me peiné y vestí con algo normal. Aún había tiempo para que la competencia iniciará y por mientras perdería el tiempo viendo edits de Charles en tiktok. No tomé en cuenta que todo mi fyp era de Pablo. Bueno de GAVI. Me moría con las ediciones que le hacían sus fans.

El sonido de una llamada entrante, me sacó de lo embobada que estaba en tiktok. Carla me estaba llamando y por un segundo me planteé pasar de ella, pero al final terminé contestando.

Estoy abajo. Me abres.

—Voy.

Sin ponerme los zapatos fui a abrirle la puerta. Al dejarla pasar vi lo deslumbrante que estaba. Muy glamurosa, brillaba a donde quiera que iba.

—Estás muy elegante para estar toda la tarde en mi sillón y gritarle a la tele.

—Valeria —Se acercó más a mí—. Mira mi cuello, pero primero respira. No quiero que te desmayes.

Mis ojos viajaron a su collar

—Lindo.

—Mira lo otro —dijo sin paciencia. Mis ojos lo vieron.

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Me tapé la boca con mis manos en una prueba de calmar mi emoción. Ahogué un grito, libere mis labios y en un chillido dije:

—¡Estás de joda!

—¡Qué no!

—Oh por dios —Pasé mis manos por mi cabeza, no me lo creía. Carla estaría en el Paddock

—¿Y qué haces aquí? Anda, tonta.

La sonrisa se le desvaneció

—¿Eres tonta? —Me dio un golpe en la cabeza—. Iré contigo ¿Cómo crees que iría a la carrera sin ti? Tonta.

—¿De verdad? —pregunté ilusa.

—Sí. Tengo el otro pase en mi bolso.

Chillé de la emoción, luego regresé a la realidad.

—Pero eso a deber costado una fortuna.

—Es tu regalo de cumpleaños ¡Happy birthday! —Hizo manos de Jazz—Se suponía que debíamos de ir los cuatro días, pero hice una travesura y papá no me quiso dar los pases, hasta que lo convencí. Pero eso no importa, solo ¡feliz cumpleaños!

—No es mi cumpleaños.

—Es un regalo adelantado. Y antes de que digas que no lo aceptas, pues si te niegas a ir, me tiro a la piscina y me ahogo y sí, es una amenaza —Sonrió como un angelito, a la espera de que no le dijeran que no.

—Estás loca.

—Ya me lo han dicho.

—Anda, vamos a ponerte más guapa, para hacer un modelaje como si estuviéramos en el Paddock y fuéramos las más bellas Wags.

Carla me llevó a rastras a mi habitación. Hizo un caos mi armario y en menos de 10 minutos me armó un outfit. Una camiseta de Ferrari, unos vaqueros cómodos de color blanco y sueltos en la parte baja, calzaba unos botines que combinaban con los colores de la escudería a la cual apoyaba. No iba tan sexy como Carla, opté más por estar cómoda y la merch de Ferrari.

Al llegar al circuito no nos demoramos mucho en entrar. Recibíamos miradas por el Charles Leclerc de cartón que traíamos. Carla me convenció "obligó" en traerlo. Estuvimos paseando, curioseando por los pits y fangirleaba en mi interior. Estaba tan cerquita, estaba en el ambiente que veía por la televisión y en donde años atrás había venido con mi familia.

Quise seguir mi recorrido para encontrarme con algún piloto y desmayarme ahí mismo, pero, la vejiga de Carla tenía otros planes. La esperé en el baño y cuando salió, fuimos por algo de comer, aún faltaba para que iniciara la carrera y ya moríamos de hambre.

—Pero que esto se ve muy rico, que me quiero llevar todo —Carla hizo morritos.

—Busquemos una me...

Las palabras se me quedaron estancadas al ver el rostro del chico que me traía loca. Y no, no era Charles Leclerc.

¿Qué hacía Pablo aquí?

Regrese a mirar a Carla.

—¿Tú le dijiste que estaríamos aquí?

—No, claro que no —Le di una mirada acusadora—. Te lo juro, yo no, no se lo dije.

—Entonces que...

No termine de hablar. En ese momento los ojos de Pablo habían dado conmigo. Por su cara supe que no esperaba verme, aunque a la vez tampoco le sorprendía. No había ningún lugar donde esconderme.

—¿Qué hago? —pregunté sin dejar de mirarlo, le había dado una sonrisa.

—Anda saludalo, esta que mira —Ambas sonreímos y hablábamos entre dientes

—Pero hay muchas personas.

—¿Y eso que? Anda acércate, yo te espero —Carla me empujó, mis pies se arrastraron y a mitad del camino dude en acercarme, continúe al ver que Pablo también estaba rompiendo esa distancia entre los dos.

—¿Qué haces aquí?

—¿Tú qué haces aquí? —Le contesté con una pregunta. Pablo se encogió de hombros

—Pues a ver la carrera.

—Ja, ja, ja, pero si no sabes nada de F1, yo te obligue a ver una carrera y te quedaste dormido.

—Me descubriste. La verdad, tenía planeado descansar, pero Pedri me dijo que le acompañará y pues aquí estoy.

No había venido por mí, una punzada de decepción recorrió mi garganta hasta llegar a mi boca en un sabor agrio.

—Buena decisión.

—No sabía que vendrías.

—Pues... —Me encogí de hombros y me hice la interesante al decir—. No te cuento todo.

—Debí suponerlo. Y ya que nos topamos, ¿a qué equipo le vamos?

—Es escudería —aclaré—. Y le vamos a la de mi novio.

—¿Novio?

—Charles Leclerc. Obvio.

Yo en mi momento más esquizofrénico.

—Val, pero mira que casualidad —Llegó Pedri, saludándome con una sonrisa que tal vez iba dirigida a otra persona.

—Sí, menuda casualidad —Carla se puso a mi lado—Y, ya que nos encontramos ¿Les apetece almorzar?

Carla estuvo muy parlanchina en el almuerzo. Tenía la sospecha de que ella había planeado este encuentro con Pablo y Pedri, tenía cero dudas y miles de razones, una de las cuales, fue que al terminar de almorzar me dejó a solas con Pablo.

Reté a Pablo en una competencia en el simulador de carrera. Y adivinen quién ganó. Obvio yo.

Pablo apesta en ese tipo de juegos, pero eso no quitaba lo mucho que nos divertimos y los piques que nos hicimos entre los dos.

Paseamos por el Paddock, a la espera de que iniciara la carrera, él iba a mi lado y yo le explicaba lo básico para que entendiera en donde estaba parado. A cada momento miraba a mis lados, iba muy despierta viendo a mi alrededor, con la esperanza de encontrarme a un piloto. También llevaba a mi Charles.

—Valeria, ¿Te puedo preguntar algo?

—¿Qué no entendiste? ¿Lo de las banderas?

Me puse de puntitas para mirar por encima de las personas. Dejé de mirar al sentir como Pablo sujetó mi mano y me hizo mirarle a los ojos.

—No, eso lo he pillado.

—¿Entonces que?

—De lo que pasó ayer entre nosotros —Le esquivé la mirada, el encuentro aún estaba fresco en mi mente y mi cuerpo se erizaba al recordar el momento íntimo de ayer.

—No pasó nada —Decidí hacerme la desentendida a pesar de su intensa mirada.

—Follamos.

Regresé a mirarlo y le tapé la boca con ambas manos

—Mejor gritalo, Pablo, así te escuchan todos en el circuito.

Liberé su boca y él siguió hablando.

—Lo que hicimos, lo que pasó después... los celos...

—¿Celos? ¿Quién estuvo celoso? —Seguía haciéndome la que se había olvidado lo de la noche anterior, mis palabras eran indiferentes, todo lo contrario a mi corazón.

—Val, no te hagas la desentendida.

—No me estoy haciendo la desentendida, no estuve celosa porque tú y yo, solo somos ¿amigos? Sí, amigos.

—Follaamigos, lo aclaro —Dijo con una sonrisa listilla.

Sonreí por su atrevimiento.

Nuestros rostros se iban acercando y a nada de que nuestros labios chocarán, vi por encima de su hombro al chico de Ferrari que me volvía loca.

—Oh por dios, es Charles Leclerc —susurré como si mi crush no estuviera a unos metros de mí. Dejé atrás el casi beso y corrí hacia donde se encontraba Charles, estaba rodeado de sus fanáticos, que pedían autógrafos y fotos.

Ese día no conseguí ni su autógrafo, ni mucho menos una foto. Lo tuve de cerquita, no lo perseguí ni estuve insistiendo, quizá entre shock y solo me limité a observarlo, sujetándome del hombro de Pablo, para no desmayarme de la emoción.

—Es taaaan guapo —Mordí mi labio.

—Yo soy mil veces mejor.

—Y le viste los ojos, es que UFFF. Me mira y caigo desmayada —Seguí con mi royo.

—Mis ojos son más bonitos —Se alabó, volteé a verlo y fingí ignorarlo. Él añadió—. Pregúntaselo a mis fans y verás.

No se lo iba a negar. Aun así rodé los ojos y le tapé la boca.

—Pero que ego, Pablo.

Sentí como me lamió, hice una mueca de asco y aparté mi mano de su boca.

—Eres un asqueroso —Me limpié en su camiseta.

—Bien que te gusta sentir mi lengua en otras partes.

Un rubor natural se apoderó de mis mejillas.

—¡Pablo!

Se rió en mi cara. Quería reírme junto a él, su risa era contagiosa, pero, me mantuve seria y cruzada de brazos.

Me preocupé cuando dejé de escucharlo reír, le miré y vi que ya no llevaba esa sonrisa, su cara de culo se había adueñado de su risueño rostro.

—¿Sucede algo?

Ignoró mi pregunta.

—Ven —Pasó su brazo por mis hombros—. Vamos a conseguir los mejores asientos para ver la carrera.

Empezamos a andar, él no se apartó de mí y noté su incomodidad.

—¿Pablo qué está sucediendo? —Disimuladamente ladeé mi rostro para ver atrás. Regresé a mirar al frente cuando un flash me cegó.

—Lo siento, no pensé que nos notarían.

¿Cómo no notarlo? Si es el chico estrella de toda Barcelona.































💌💌💌













La carrera ya había acabado, un 1 - 2 a favor de Red Bull y un DNF de Charles.

Se sufre siendo Tifosi y sus malas estrategias a la hora de correr.

—Lo bueno, chequito bebé quedó en podio —Trato de animarme Carla.

—DNF de Charles, es que... —Simulé dispararme a la cabeza.

—Dramática.

Pedri y Pablo, venían detrás de nosotros. En una de esas, Carla cambió de lugar con Gavi y él trató de animarme luego de mi derrota.

—Calla, no sigas. Me pones peor, no conseguí foto, ni autógrafo con Charles y quedó en DNF. El peor día.

—Aún puedes conseguir una foto.

—Claro que no, el pobre debe de estar frustrado luego de la carrera.

—Perooo —Alargó la "o"—. Puede ser con tu Charles de cartón. Anda, ve, yo te tomo la foto.

—Hay personas, me moriré de vergüenza.

—¿Cómo era esa frase que decías? —Se hizo el pensativo—"El que tenga miedo a morir, que no nazca".

—Vale, me prestabas atención.

—Toda mi atención está puesta en ti —oculta una sonrisa, aunque no del todo—. Ahora anda, yo te tomo la foto.

—Vale, pero que sea rápido.

Agarré a mi Charles y me separé unos metros. Vi como Pablo sacó su móvil. Sonreí para la foto y luego hice como si le estuviera dejando un beso en la mejilla a Charles.

—¿La tienes? —Llegué a la misma altura que Pablo, él me enseñó la pantalla de su móvil. Estaba algo roto.

—Sales perfecta ¿La puedo subir?

—¿A redes? —pregunté incrédula.

—A mejores amigos.

Vi la foto. Salía linda

—Vale, pero no pongas nada vergonzoso. Luego me la pasas, que debo de tener la prueba para decir que me tomé una foto con mi futuro novio —dije lo último para picarlo.

—Claro, te la paso... bueno, es que no puedo...

—¿Por qué?

—Porque me tienes bloqueado.

Pequeños detalles que hice para apartarlo, pero Pablo había encontrado la manera de no seguir mis planes y me encantaba.

—A verdad —dije, pensando en una solución—. Entonces se la pasas a Carla y ella me la pasa a mí.

—¿Por qué mejor no me desbloqueas?

¿Por qué no lo hacía? Si las cosas ya iban bien.

Porque si hablábamos por mensajes, las cartas se terminarían. Y no quería que eso se terminará.

—No, mejor no.

—Oye —Iba a replicar le detuve —Iré al baño, le dices a Carla que me espere.

Me corrí y rápido fui a los servicios. Al terminar de hacer pis. Me apoyé en una de las paredes y saqué mi móvil. Le marqué a mi mamá. Unas dos, tres, cuatro veces. Luego recordé que ella no contestaría, ya nunca lo haría.

A veces la mente me fallaba y creía que mamá seguía conmigo, que no la tenía a mi lado porque estaba en el trabajo y que en la cena la vería. No llegaba a la cena. La mayor parte del tiempo la mente me fallaba y yo dejaba que eso me sucediera. Creer que mamá seguía conmigo y que la vería en la cena.

Nunca llegaba.

Le volví a marcar. No contestó. Le dejé un mensaje de voz.

—Hola, Mar Mar. A que no adivinas en donde estoy, te daré una pista... coches veloces. Y sí, estoy en el Gp de Barcelona. No ganó Charles, Red Bull consiguió un 1- 2. Lo positivo, pude cumplir el sueño de estar en el Paddock otra vez, deberías ver a Carla tiene las vibes de ser una Wag. Deberías estar aquí, te hubieses desmayado al ver a Charles y Carlos, ufff que son unos guapotes. En fin, se me acaba el tiempo, espero estés bebiendo un café, ten un lindo día y te espero en la cena.

Seguía pensando que recibiría su respuesta.

Así no era la vida.

Limpie las lágrimas rebeldes que se me escaparon. Me senté en una de las bancas, algo lejos del garaje de ferrari y de los fanáticos. Tapé mi rostro con mis manos y me aguanté las lágrimas, aun así, salían como una fuerte llovizna. Me había venido ese bajón de la realidad, donde estaba sin familia y el hecho de encontrarme en el lugar donde muchas veces había venido con mi familia.

Escuché unos pasos, con la mirada baja me limpié las lágrimas. No me atreví a mirar a la persona que me había interrumpido, solo le vi las botas y luego escuche su voz. Ya la había oído antes. Demasiadas veces en entrevistas.

—Perdón, pensé que no habría nadie por estos lados.

Sin poder creerlo alcé la mirada y lo vi. Y precisamente no era mi Charles de cartón.

—Yo... yo...

Mi cerebro entró en un cortocircuito. Miré a mi gran crush, su magnífico rostro que me lo sabía de memoria, era tan apuesto. Aún llevaba su traje de carrera y noté el semblante triste que llevaba. No era el único.

—¿Me pudo sentar?

Mi cerebro no procesaba, me estaba hablando. A mí. A una simple fan. A una chica que escribía un fanfic sobre él.

—Sí —hablé en español, las lecciones de italiano no se procesaban en mi cerebro. Y el inglés, estaba muy escondido. Moví mi cabeza de arriba a abajo.

Él se sentó.

¿Por qué lloras?

Yo... porque... porque me dio la necesidad de hacerlo hablé en inglés, mi voz salió en un susurró.

Esa necesidad de llorar. Lo entiendo ¿Y la razón?

Me acordé de alguien —Bajé la mirada.

¿Especial?

Muy especial. Es mi mamá —hablar de ella, nunca lo hacía en voz alta—, veíamos cada carrera, cuando era niña veníamos cada año y soñábamos con venir a una luego de la muerte de mis abuelos, pero solo lo he podido hacerlo yo, porque ella... —Miré hacia arriba, la voz se me entrecortó.

Lo siento —Sentí como suave apretó mi hombro—. Sé lo que es perder a alguien especial. Te entiendo. Pero, ¿sabes una cosa?

¿Qué?

Siempre estarán con nosotros, en nuestros recuerdos, en nuestros corazones y lo más importante, siempre nos cuidan desde donde sea que estén.

Sonreí con tristeza y aguante las lágrimas.

Recuérdala en sus mejores momentos, te confortará.

Lo haré —Le miré a la cara. Ese semblante triste seguía, pero llevaba esa sonrisa reconfortante que se le daban a las personas—. Lo siento por tu DNF...

—¿Decepcionada?

Claro que no. Obvio que no.

A veces pienso que decepcionó a mis fans y al equipo. Tenía de todas para ganar, iba de primero. Es... Es frustrante...

No pienses en eso, Joder. Ya verás que habrá mejores carreras, aún queda mucho de la temporada.

Esta vez fui yo la que le dio un apretón en el hombro. Un apretón en el hombro, le estaba tocando y le quería abrazar, pero no lo hice. Uno, seguía en shock y dos, no quería incomodarlo.

—Valeria, aquí estás. Te estaba buscando por todo el lugar... —Mis ojos chocaron con los marrones intensos de Pablo, me miró confuso y luego a mi acompañante —¿Hola?

¿Es tu novio? —me preguntó Charles, me hablaba en inglés por lo que Pablo no entendió.

No... —Mi mirada viajó de Charles a Pablo, un amor platónico y otro amor que en verdad era mi gran amor—. Sí, sí lo es... es algo complicado y lindo a la vez...

Entiendo... —Se puso de pie, me dio una última sonrisa, mis ojos le siguieron y vi como se sacó la gorra. Pensé que se arreglaría el pelo y volvería a ponérsela, pero, no. Me la puso a mí—. Ya verás que todo se soluciona.

Me dio una última mirada y sonrisa, mis ojos le siguieron hasta que lo perdí de vista.

Miré a Pablo y me puse de pie.

—Agarrame que me desmayo —murmuré fuera de órbita.

Celos era lo que expresaban sus ojos, aun así, se acercó a mí.

—Te voy a sujetar —Me agarro de la mano y luego de la cintura—¿Cómo es que te lo encontraste? —interrogó.

—No lo sé.

—¿Hablaron?

—No lo sé.

Seguía procesándolo. Pablo me sujeto al caminar.

—¿Has estado llorando?

—No lo sé.

—¿Le has dado tu número?

—No lo sé.

—¿Es un sí o un no?

—No lo sé.

—Es un sí, porque a veces las fans me dan sus números y como tú estás pillada por él...

—Calla.

—¿Es un no?

—Pablo, cállate, me ha dado su gorra ¡Su gorra!

—Pero...

Seguía volando en mi nube cuando nos encontramos con Carla, ella gritó igual que yo. Me imaginé los chillidos de mamá al contarle que estuve al lado de Charles, volvió a darme el bajón, pero intente tener una sonrisa en mi rostro.

Lo intenté.

—¿Tienen algo que hacer esta noche? —preguntó Pedri. Le di mi atención y negué a su pregunta, de igual forma lo hizo Carla.

—Sí quieren pueden ir a vernos al partido, es a las 10.

—¿Tan de noche? —Pedri se encogió de hombros por la pregunta de Carla.

De igual forma, ella aceptó por las dos.

Miré de reojo a Pablo, llevaba esa cara de molestia y celos.

Estaba celoso de ... ¿Charles? PUAJ

Celoso...

Él... él me seguía queriendo... ¿Él lo seguía haciendo?

Yo le seguía queriendo.

Ya no había nada que nos separara.

Ya no estaba Benjamín.

Pero aún estaban mis inseguridades.

Y el miedo. Miedo a que las nubes grisáceas tapen al sol.

Pero...

Tal vez...


























































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<333

Holiii. Actualizo un día por semana, pero se siente una eternidad 🥺 lxs extraño.

Hoy no iba a actualizar porque en toda esta semana no he podido escribir nada, pero ayer me quede hasta tarde escribiendo y hoy me levante a las 4 para terminar el capítulo. Así que aparecienlo o me molesto 😠

No voy a prometer nada, pero, si logro escribir más, haré un maratón cuando lleguemos a 500k de leídas.

Comenten si les gustó por acá 🥰 y no olviden de dejar su voto, eso me anima a seguir escribiendo 💖

Esta semana tengo exposiciones y exámenes, necesito mucho animo o sino me tiro del puente 🫠. Espero que me vaya bien, porque sino entraré en depresión 🥲

Nos leemos la próxima semana. Cuidense ❤💙

Ig: ancovi12
Tiktok: ancovi12

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© a n c o v i 1 2

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