Cuando Taehyung despertó noto que Hoseok no estaba en la cama, por su mente paso la idea de que le estuviera preparando un rico desayuno, pero la idea murió cuando escucho el sonido de la regadera.

Se levantó sin ganas de la cama, era un domingo y significaba que no tendrían que ir a la oficina, Hoseok solía ir los sábados para revisar a los trabajadores, pero los domingos eran "sagrados" sólo para ellos dos, así que no entendía porque había madrugado.

Terminó por levantarse de la cama y arreglarla un poco ya luego Soyeon se encargaría de limpiar bien todo. Se puso unos pantalones color crema, una playera blanca y salió directo a la cocina.

Soyeon ya estaba ahí limpiando, era una joven muy linda que se ocupada de los quehaceres de la casa.

—Señor Taehyung hoy madrugo— le dijo animadamente.

—Sí, supongo, en realidad Hobi me despertó— se estiró un poco y fue directo a la alacena para buscar algo rápido que desayunar.

—¿Soye dónde está el cereal? — preguntó al no encontrarlo por ningún lado.

—Se acabó ayer joven, Hoseok dijo que hoy compraría la despensa.

—Muero de hambre podrías prepararme algo.

—Sí, señor— respondió la muchacha de cabello rubio.

Hoseok tenía muchos planes para el día, tenía que terminar de entregar invitaciones, seleccionar el pastel de boda y la decoración del salón, era algo difícil tomando en cuenta que tenía que ser del gusto de Taehyung y sus gustos con los del mayor no siempre coincidían.

Se vistió, salió de la habitación y miro a Taehyung desayunando, se acercó hasta él y le dio un beso en la mejilla. —Te levantaste temprano.

—No te sentí en la cama y me asuste, no quiero que me dejes plantado faltando unas semanas— dijo entre risas el castaño.

—Exagerado— se defendió Hoseok tomando asiento y desayunando lo que Soye había preparado. —Hoy voy a ir a ver a mi madre para que me ayude a escoger la decoración. ¿No quieres acompañarme?

Taehyung negó, quería tomarse el día libre y adelantar trabajo antes de la luna de miel.

.-.

Jimin no sabía a donde ir en Seúl, aunque había nacido en Corea había vivido en Busan toda su vida por lo que nunca había visitado la ciudad principal.

Rentar una habitación de hotel era lo que había pensado hacer desde un principio, pero recordaba que Taehyung se había mudado a Seúl hace unos años.

La idea de verlo lo motivó a llamarle, ya no tenían una relación tan cercana, pero seguían siendo amigos, de vez en cuando chateaban en línea y se contaba sobre cómo les había ido en el último mes.

Taehyung contestó igual de rápido que siempre.

—¿Jimin eres tú?

El mayor sonrió. —¿Adivina quién está en Seúl para tu boda?

—No, ¿enserio estas aquí?

—Lo estoy y justó tengo un dilema, ¿puedo quedarme en tu departamento?, rentar un hotel por poco más de dos semanas va a ser jodidamente caro.

—Por supuesto que sí, para que son los amigos.

—¿Pero y que pasa con tu pareja?

—No te preocupes a Hoseok no le molestara.

Jimin sonrió. —Gracias, mándame la dirección correcta, espero estar ahí en menos de una hora.

—Nada de eso, supongo que estas en el aeropuerto todavía— Jimin asintió. —Ve a la cafetería en lo que voy a recogerte.

—Ok, te estaré esperando.