*usa el fondo negro :3

—Mordad, creo saber la respuesta.

—Si es así, quiero escucharla — seguro de su respuesta, levantó la mirada.

—La respuesta es... Nada. No hay nada que el ser humano ame más que la vida, todos temen morir así que no creo que exista un miedo superior a eso, los hombres que lo tienen todo, son incapaces de anhelar algo, y los derrochadores no podrían ahorrar nada y si esa no es una justificación digna, podría decirte que yo mismo ahora me encuentro en la nada.

—Tu respuesta es la correcta.

Una puerta frente a él se abrió mostrando una luz destellante, estaba a tan solo cinco pasos de seguir su camino.

Se encontró de pronto en una habitación sumamente espaciosa, pinturas de ángeles celestiales adornaban las paredes, en el centro se encontraba aquella pintura que Hoseok inmortalizó a oleo una tarde de primavera, era la imagen de Taehyung sonriente debajo del árbol de cerezo de aquella colina, instintivamente sonrió al recordar aquellos momentos.

Sus pies se movieron y sus dedos rozaron el folio acariciando con ternura la mejilla del chico de la dulce sonrisa. Sus ojos recorrieron la silueta con nostalgia, al pie de la pintura se encontraba una inscripción escrita en relieve.

"El guardián que una vez estaba unido

Revela el camino que estaba cerrado.

Dos almas gemelas contenidas, ahora están divididas,

En dos lugares que los separara por siempre".

Repasó la inscripción un par de veces, y una vez más su entrecejo se frunció, su mirada se perdió nuevamente en la figura de Taehyung.

— ¿Mordad?...Y-yo no puedo entender.

— ¿Qué es lo que no logras comprender?

— ¿Qué necesito? — sus palmas se apoyaron sobre la pintura—. ¿A qué camino se refiere?

Sus manos se separaron aferrándose ahora de sus finos cabellos, la pintura se tambaleo y cayó en seco sobre el piso de porcelanato, por reflejo dio un par de pasos atrás, su mirada entonces se posó en la pequeña puerta que estaba oculta debajo del bello cuadro.

Su pregunta había sido contestada, ¿era hora de avanzar? Su mano se posó en el picaporte, lo hizo girar pero no cedió.

—Necesitas la llave Hoseok, debes encontrarla.

— ¿Una llave?

—Abre el camino para que las almas partan, abre el camino y detén su dolor. Encuentra lo que una vez estaba unido...

Mordió su labio inferior y miró una vez más la pintura en el piso, su mirada inspeccionó con sutileza a Taehyung, un pequeño brillo en su cuello llamó su atención, el collar que le había regalado cuando se confesó pendía de su cuello. Llevó su mano derecha a la cadena que rodeaba su propio cuello y miró entonces el pequeño corazón de metal, estaba incompleto, necesitaba de una llave, la llave era el collar de Taehyung.

Era absurdo, Yoongi le dijo un par de veces cuando Hoseok compró ese collar de pareja, era ridículo, pero a para él, era un gesto de ternura, él se quedaría con el corazón, y Taehyung llevaría la llave, estaba premeditado no era descabellado, Taehyung había robado la llave de su corazón así que él deseaba que la llevase a todas partes, era el único con ese derecho, así que ese collar era una representación de su amor.

—La llave...— sus ojos se movieron a la velocidad de la luz, miró todo el lugar a su alrededor, un par de veces más y un poco más le bastaron para detenerse a mirar uno de los bustos que adornaban aquella habitación.

Se acercó sin dudar hasta el busto de porcelana de Virgilio, ahí estaba, la delgada cadena de plata rodeaba el cuello de porcelana. Tomó la llave y corrió hasta la pequeña puerta.

Sus manos temblaron cuando la llave se adentró a la cerradura, solo dos giros fueron necesarios para que se abriera, suspiró con pesadez liberando la tensión acumulada desde hace un par de minutos.

Permaneció en silencio mirando  a los adentros de aquel pasadizo, tomó la llave y unió el collar, ahora era uno.

Relamió sus labios y subió sobre la pared atravesando con miedo el pequeño túnel que lo separaba de la siguiente habitación. Recién su cuerpo estuvo dentro una pequeña compuerta debajo de él se abrió y una caída interminable comenzó.

—Solo el tiempo dirá quien tiene la voluntad de vivir... Solo la luz del sol puede salvarte de tus pecados.

La pequeña luz ahora era solo un pequeño punto en la lejanía.

♣ The Book ♣    

*Virgilio: poeta romano, autor de la Eneida, las Bucólicas y las Geórgicas. En la obra de Dante Alighieri, La Divina Comedia, aparece como su guía a través del Infierno y del Purgatorio.

En un par de horas, el siguiente capitulo. 

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