" ¿Qué tal si te muestro que nada en la vida es lo que parece? (No estoy bien). Te hablo de las veces que has cantado una y otra vez una canción sin saber qué significa. Ser bromista y ver otra línea sin sentido."
—My Chemical Romance

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Las olas calmadas rompían contra la orilla de la playa creando un tranquilo sonido que encajaba a la perfección con los murmullos de naturaleza que los pájaros canturreaban. Jungkook estaba sentado en la arena, jugueteaba con los dedos de sus pies en el agua mientras el sol bañaba su cuerpo, se sentía de algún modo en paz en ese lugar. Lejos del estrés y de las responsabilidades del trabajo, se había dejado llevar por aquello que lo rodeaba, mantenía los ojos cerrados permitiendo que cada pequeño tañido se colase en sus oídos. La melodía de la libertad era espléndida en su opinión.

Taehyung sonrió observando la señal de calma en el gesto del chico y tras sacudir su cabello del agua salada decidió tumbarse a su lado. Una de sus manos buscó contacto acariciando el costado de Kook sin prisa.

—¿Te gusta esto? - preguntó.

—No me puedo quejar - Jungkook dejó que una sonrisa sincera se posase en sus labios.

Taehyung le sonrió de vuelta y lo atrajo hacia su cuerpo, el hermano de Yoongi se sentó a horcajadas de este casi como acto reflejo. La posición era excesivamente íntima para él ahora que Tae se había acercado más y rozaba su nariz contra la suya. Tendría que trabajar en el espacio personal o de lo contrario su intento por hacer eso funcionar se iría a la basura a la primera.

—¿Demasiado? - preguntó el hermano de Hoseok notando el ceño fruncido del chico.

—Es quizás muy pronto para algo así Taehyung. - contestó con sinceridad Jungkook.

El jinete sonrió y cambió posiciones de nuevo manteniendo ahora su cuerpo sobre el del hermano de Yoongi. Kook suspiró sin poder evitarlo al percibir cómo sus pieles se rozaban debido a que ambos se encontraban desnudos y su estómago se hincho levemente notando la atención que estaba recibiendo por parte del jinete quien ahora dejaba un camino de besos por su mandíbula con total calma. Pronto las caricias del hermano de Hoseok regresaron, esta vez de forma menos delicada.

Podía percibir cómo las grandes manos de Taehyung se paseaban por sus muslos y caderas. Aquello en realidad no le molestaba lo más mínimo, a juego con la naturaleza que los rodeaba era un factor tranquilizador más. Se sentía lo suficientemente relajado como para no protestar o apartarse. No le importaba que el chico estuviese tocandolo sin vergüenza.

—Realmente me gusta tu cadera - suspiró con voz ronca el jinete mientras posaba sus manos sobre la cintura del contrario atrayendo nuevamente su atención.

—Empezaré a pensar que tienes un fetiche con eso si no dejas de decirlo cada día. - Jungkook abrió los ojos para mirarlo directamente.

—No puedo evitarlo, tienes todos esos músculos pero al final tu cintura es delicada y pequeña. Atrae mi mirada - Taehyung se relamió los labios - No hay nada malo en que me guste el cuerpo de mi novio.

Cuando los brazos de Jungkook rodearon el cuello de Taehyung este supo que era el momento adecuado para seguir adelante. Sus labios se conectaron en un suave y lento beso que sirvió para obtener un ambiente más pegajoso e íntimo.

—Tus labios están salados - Jungkook dejó escapar una pequeña sonrisa y pasó uno de sus dedos sobre los labios de Tae.

El hermano de Yoongi estaba tranquilo y relajado, lo que hacía destacar su buen humor. Un gemido se atranco en su garganta cuando percibió que Taehyung se apartaba por un segundo para a continuación llevar los besos hasta su torso y pelvis.

En algún momento de aquella sesión de besos por todo su cuerpo, el hermano de Yoongi comenzó a percibir la calor invadiendo su estómago y se estremeció entre los brazos del jinete quien todavía le dedicaba tiempo a la zona central de su pelvis, lamiendo y mordiendo su piel para dejar marcas. Las manos de Jungkook se sujetaron de los hombros del chico advirtiéndole de que aquellos besos estaban encendiendolo, sin embargo el contrario no se apartó. Lejos de eso, llevó la mano hasta la creciente erección de Jungkook y volvió a juntar sus labios sumiéndose así en un profundo beso que solo terminó cuando Kook se estremeció de placer en medio del clímax.

—Realmente me encanta esta característica tuya de llegar al clímax con besos.

Jungkook sonrió levemente atontado por el placer que aún no abandonaba su cuerpo y segundos después se levantó para ir hacia el agua. En realidad estaba siendo un buen día, nada podía superar su mente tranquila y el placer de un orgasmo. Incluso si él no podía disfrutarlo plenamente, ahora sabía que Taehyung sería una gran pareja para cualquier otra persona en el futuro, porque apostaba a que alguien adecuado aparecería para el jinete, entonces él podría retirarse.

El agua salada bañaba sus cuerpos y Jungkook estaba seguro de que a pesar de haber ido a la playa antes, nunca se había encontrado en un lugar así. La arena limpia brillaba al igual que las cristalinas aguas, los colores vivos de aquella isla mantenían el paisaje con aspecto paradisíaco y él realmente quería capturar cada instante en una imagen, algo que sin duda habría hecho de tener una cámara.

Recordaba haber ido en alguna ocasión con sus padres a la playa, sin embargo era demasiado pequeño como para que los detalles permanecieran en su cabeza con claridad. Las reminiscencias de él jugando con Yoongi en la arena, realizando castillos que luego destruian o recogiendo conchas y piedras que le regalaban a su madre para que esta hiciese collares, hacían que su corazón se encogiese. Echaba de menos a sus padres, incluso cuando los recuerdos eran casi nulos. Desearía poder tenerlos a su lado, poder decirles lo mucho que se estaba esforzando para estudiar y obtener un buen futuro.

Sus brazos rodeaban el cuello de Taehyung mientras este sujetaba su cintura y nuevamente se sumían en los besos, se sentía extrañamente emocional en aquel lugar, aquella isla evocaba momentos de su pasado y los lanzaba hacia su mente. Por eso se mantenía tan cercano al jinete, eso en cierto modo no lo hacía sentir tan sumamente idiota como el resto de cosas, era difícil mantener una comunicación con este cuando la confusión y culpabilidad se unían a la añoranza. Los sentimientos de desasosiego seguían en su cabeza así que el contacto servía para entretenerlo, no quería pensar en sus padres. Le dolía pensar en el pasado y en lo que quizás hubiese sido su vida si estos no hubiesen muerto.

—¿Qué sucede Jungkookie? - Taehyung acarició la mejilla de su novio, preocupado por su repentina necesidad de atención y cariño.

—No es nada - susurró el hermano de Yoongi inseguro.

—Ei, ahora somos pareja, puedes confiar en mí para contarme lo que sea. Si puedo ayudarte en algo lo haré Kookie, no me gusta verte mal.

Jungkook no sabía cómo Taehyung había notado que algo le ocurría pues desde que esos recuerdos llegaron a su mente lo único que hizo fue atacar sus labios para desplazar las memorias.

—¿Cómo sabes que me pasa algo? - bufo.

—Porque generalmente haces esto cuando estás mal, me buscas para escapar de la realidad. Tengo experiencia en eso, supongo.

—Lo siento - Kook suspiró - Sé que siempre te uso, y sé que eso está mal.

Jungkook sabía que aquel no era el momento adecuado para abrirse y hablar de todo el dolor que su corazón guardaba, pero de alguna forma también sabía que el chico que ahora lo abrazaba por la cintura podría llegar a entenderlo mejor que muchas otras personas en el mundo.

—¿Qué ocurre cariño? - la voz de Taehyung era sutil y cariñosa. Delicada.

—Es sólo que… Echo de menos a mis padres, ellos solían llevarnos a la playa y la isla me ha traído algunos recuerdos. Generalmente es Yoongi quien tiene estos pensamientos, yo era tan pequeño cuando murieron que no tengo idea de la mayor parte de cosas que guardan relación con respecto a mis padres.

—¿Por qué apartas sus recuerdos? - Taehyung miró a Jungkook, este parecía levemente incómodo ante aquella conversación - Quiero decir, yo lo hago porque mi madre afecto en muchos aspectos en mi enfermedad pero tú eras feliz con tus padres, no intentes apartar lo poco que recuerdas de ellos Kookie. Sé que es duro pensar en alguien que has querido tanto y ya no está a tu lado, pero es parte de tu vida. Parte de ti.

Jungkook suspiró jugueteando nerviosamente con sus manos en la espalda de Taehyung, sus dedos acariciaron levemente la piel de este y escondió su frente en su hombro tratando de evitar el tema.

—Yoongi solía decir lo mismo, pero es más complicado que eso. Yo realmente no puedo sentir dolor por su pérdida porque ya no los recuerdo, no sé cuán duro fue para mi, en ese aspecto me siento culpable porque son mis padres y debería amarlos, es solo que no puedo. En su lugar solo me pregunto cómo sería tenerlos ahora o cómo habríamos crecido Yoongi y yo con ellos cuidandonos.

Taehyung asintió escuchando a Jungkook sin interrumpirlo y abrazándolo con mimo.

—No son tanto los recuerdos como lo que estos implican. Me asusta pensar que no amo a mis propios padres.

—No creo que no los ames Jungkook - Taehyung le sonrió con calidez antes de posar un suave beso sobre sus labios - Tal vez solo has olvidado muchas cosas mientras crecidas, tenías seis años así que es totalmente normal que después de tantos años el dolor por su pérdida comience a desaparecer. No hay nada mala con eso, eras un niño que probablemente sufrió en su momento. No puedes vivir sufriendo cada día por aquellos que has perdido, estarías hundido de esa forma.

—Tú vives de esa forma, cuando recuerdas a tu madre sueles acabar en un mal estado… - susurró Jungkook todavía abrazado al cuello de Tae.

—Te lo he dicho, es distinto. Mi madre hizo cosas horribles con la excusa de su enfermedad, no es recordarla a ella lo que me provoca los ataques sino los sucesos que viví mientras ella estaba viva.

Jungkook se limitó a asentir, si pensaba en sus padres no podía evitar sentir culpabilidad por no sufrir su pérdida cada día. Por supuesto los extrañaba pero había empezado a entender que no a ellos de forma directa sino más bien la figura de estos. Kook siempre había tenido la espinita clavada de la necesidad de cariño, soñaba con encontrar a alguien que lo hiciese sentirse amado y querido.

—¿Qué has recordado de ellos aquí? - preguntó Taehyung con curiosidad. Pudo escuchar un sollozo por parte de Jungkook que lo obligó a estrechar al chico contra su cuerpo con más ahínco - No tienes que hablar de ello si no quieres…

—He recordado los veranos en la playa, solían llevarnos unos días a mi y a Yoongi. Es todo muy borroso pero todavía recuerdo lo mucho que nos divertíamos haciendo castillos de arena, pasando más tiempo del que nos permitían en el agua… Salíamos del mar con los labios morados y nuestro padre nos envolvía en su toalla… Después… Después, cuando volvíamos al coche nos dejaban dormir con nuestro perro mientras papá conducía de vuelta a casa…

Taehyung beso la cabeza de Jungkook escuchando cada palabra que salía de su boca, para él era bonito saber un poco más del pasado feliz del hermano de Yoongi. Le gustaba que este estuviese hablando del tema, confiandole un resquicio de esos recuerdos borrosos. Quizás él podría hacer lo mismo en un futuro, sin embargo sus recuerdos no eran felices pues la mayoría se encontraban minados por la oscura figura de su madre.

El resto del día en la isla transcurrió con total tranquilidad, Jungkook se encontraba mejor de ánimo pero todavía necesitaba el cariño que en esos instantes el jinete le estaba dando. Comieron juntos, disfrutaron de algunos baños más y cuando el barco llegó en su búsqueda ambos se vistieron, sabiendo que en sólo unas horas tendrían que tomar un vuelo de vuelta a Corea.

Sus pequeñas vacaciones de trabajo llegaban a su fin.

El viaje en avión de vuelta a Corea estuvo marcado por la necesidad de escabullirse de Taehyung quien había comenzado a sentir gran angustia desde el preciso instante en el que el avión despegó. Jungkook se mantenía a su lado tratando de calmarlo y confuso ante la repentina ansiedad de su pareja.

—Tae, ¿ha ocurrido algo? Estabas bien hasta que recibiste el mensaje de Jin antes de subir al avión. ¿Qué te dijo?

Taehyung no respondió nada, su mano apretó la de Jungkook y se acurruco contra este buscando protección.

Sus compañeros mostraban tanta preocupación como el hermano de Yoongi y trataban de animar a Taehyung acercándose de vez en cuando para sacarle algunas palabras. Jungkook se limitaba a abrazarlo cada vez que uno de ellos se acercaba pues aquello lejos de ayudar están derivando en que los nervios del chico aumentasen.

Finalmente cansado de ver a Taehyung sufrir decidió ceder dándole la pastilla completa en lugar de sólo la mitad, como era de esperarse el muchacho cayó en el sueño casi al instante apoyando su cabeza en el hombro de Kook mientras buscaba la calor que de repente todo su cuerpo necesitaba.

—¿Qué le sucede? - Jihoon se acercó a Taehyung, este estaba temblando y su frente estaba repleta de sudor a pesar de que Jungkook se mantenía refrescandolo continuamente.

—Tiene fiebre debido a su ataque de ansiedad, necesita descansar - contestó - Estará bien más adelante, no te preocupes.

Sin embargo Jungkook se equivocaba, la prensa hablaba de la empresa de los Jung en televisiones y periódicos cuando llegaron a Corea. Hoseok había prometido realizar una rueda de prensa para clarificar por completo lo sucedido con los autobuses donados, y había afirmado que Jung Taehyung lo acompañaría en dicho acto pues era también uno de los dueños de Hopes Enterprise.

Así que eso era lo que había puesto nervioso a Tae, tener que enfrentarse a las preguntas que los periodistas le harían.

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Hiiiii, aquí os dejo un capítulo porque quizás el miércoles no pueda actualizar. Espero que os guste ♥

Un beso, Mel 😘