De la riqueza a la pobreza parte 2

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Aún con Lynn.

Retomando en donde nos habíamos quedado. Vemos a la deportista de la familia Loud. La cual se encontraba en la cafetería de su escuela a la espera que le dieran su almuerzo.

La castaña tenía una mirada de pocos amigos, y no por nada. Luego del incidente en el partido de fútbol su reputación se vio manchada. Ya que gracias a la lesión que le provocó a su rival sus padres tuvieron que hacerse responsable de los gastos médicos para la chica, quien debido a la gravedad de la falta posiblemente no pueda volver a jugar fútbol en su vida.

Pero la cosa no acaba ahí, sino que la deportista empezó a tener un comportamiento antideportivo, en donde se le veía gritándole a sus compañeros, o también gritando o insultando a sus rivales. Lo que trajo a que los entrenadores de todos los equipos en donde Lynn estaba inscrita tomaran la decisión de betarla de por vida.

Esto claro no le gustó para nada a la castaña, quien comenzó a tener una que otra rabieta e insultando a quienes fueron sus entrenadores. Ahora Lynn ya no forma parte de los equipos de la escuela, y quizás también esto siga así hasta la preparatoria.

_ Estúpidos, no saben el error que cometieron al sacarme de todos los equipos de la escuela. Yo soy Lynn Loud Jr, la deportista número 1 y la futura ganadora de cientos de medallas olímpicas y de múltiples reconocimientos.— dijo Lynn a sí misma.

Unos minutos después recibió su almuerzo y se dispuso a buscar una mesa que no haya nadie, quería estar sola. Mientras caminaba seguía insultando a sus entrenadores y a sus compañeros por sacarla de los equipos de la escuela.

En eso por andar distraída chocó con alguien, lo cual provocó que su bandeja con su comida cayera al suelo echándose a perder. Esto claro no le gustó a Lynn, por lo que se dirige a quien había provocado esto.

_ ¡Fíjate por donde caminas! Por tu culpa tiré mi comida.— exclamó molesta Lynn.

La castaña vio a la persona con la cual chocó. Se trataba de una chica más alta que ella, cabello negro, cuerpo ancho, y usaba prendas que consistía en puro negro. Esa chica de apariencia emo vio a Lynn, y estaba molesta, ya que su ropa se había ensuciado.

_ Mejor sería tú quien debes de fijarte por donde vas. Mira como quedó mi ropa.— dijo la chica emo.

_ ¿Me estás echando la culpa? Tú fuiste la que se cruzó en mi camino. Mejor dame tu dinero para comprar otro almuerzo.— pedía Lynn dinero a la chica.

_ Yo no te daré nada, mejor tú deberías de pedirme disculpas por ensuciar mi ropa.— pedía la chica una disculpa.

_ Ni creas que yo, Lynn Loud Jr se rebaje a disculparse, ni mucho menos con alguien que parece un mamut que apareció en la era del hielo.— dijo Lynn de manera soberbia.

_ ¿Cómo me llamaste maldita enana?— preguntó molesta la chica.

_ ¿Acaso no te has visto en un espejo? Claro que no, con ese cuerpo tan ancho tapas todo el espejo.— volvió a burlarse la castaña.

Algunos alumnos que pasaban por ahí escucharon como Lynn insultaba a la chica emo. Quien no iba a permitir que Lynn siguiera burlándose. A lo que acto seguido la empujó al suelo, cayendo sobre su trasero.

Todos quedaron helados al ver eso, sabían que una pelea se iba a desatar. Varios se reunieron en un círculo para ver la pelea. Algunos animaban diciendo pelea varias veces, otros en cambio se alejaron de ahí para no ser víctimas inocentes.

_ Con que esas tenemos. Déjame decirte que no tendré piedad sobre ti.— dijo Lynn a la chica.

_ Si eres tan valiente entonces ve y demuéstralo.— respondió la chica.

No esperó ni un segundo y así que Lynn se lanzó a pelear con esa chica emo. La castaña no dejaría que esa tipa se salga con la suya por lo que hizo, le haría entender de que nadie debe de retar a Lynn Jr, o pagarán las consecuencias. Se haría respetar tal como lo hizo en su antigua escuela.

Ambas chicas estaban viéndose a las caras fijamente, daban vueltas en el mismo lugar, a la espera de que alguna diera el primer golpe. Mientras estaban a la espera del primer movimiento ambas comenzaron a hablar.

_ Ni creas que por ser más grande que yo te tengo miedo. Me he enfrentado a muchas cosas peores que tú. Será épico el domar a un elefante en miniatura.— dijo Lynn a la emo.

_ Si fuera tú no me confiaría. Aparte me das risa, una enana como tú ni me haría cosquillas.— dijo la chica emo.

_ Al menos no me parezco como una extraña usando esas ropas. Y ni se diga como luces, pareces un hipopótamo en un McDonald.— respondió hiriente la castaña.

_ Pero al menos yo parezco una chica, en cambio tú pareces como si fueras un chico con cabello largo. En pocas palabras, luces como un trapito mal hecho.— contestó de igual forma la emo.

Lynn no le gustó ese comentario, lo que ocasionó que ella fuera la primera en atacar. Lanzó un golpe que la chica emo pudo esquivar. Luego de eso Lynn dio un combo de puños y patadas, de las cuales la chica lograba esquivar algunas y otras no. Fue así hasta que Lynn dio un golpe certero en el rostro de la chica.

La castaña pensó que ese golpe fue suficiente para dejar fuera de juego a la chica, pero en lugar de eso la chica movió su cabeza en la dirección en donde estaba Lynn. Llevó su mano a la zona del golpe y se dio un pequeño masaje.

_ Nada mal, ahora es mi turno de darte una paliza.— dijo la emo.

La chica de ropa negra tomó de la cola de caballo a Lynn y la levantó, dándole todo a su disposición para golpearla repetidas veces. La Loud sentía esos golpes que la chica emo le propinaba, no podía creer que esa chica tenga tanta fuerza de lo que aparenta.

Cuando estaba por darle otro golpe la castaña logra darle un golpe en el abdomen a la emo, lo que hizo que la soltara. Luego de eso ambas comenzaron a pelear de verdad, en donde solo una saldría ganadora. Los alumnos que veían la pelea apostaban por quien ganaría, por Lynn o la chica emo.

Fue en eso que las puertas de la cafetería se abrieron, dejando ver al director de la escuela. Quien fue alertado de una pelea que se estaba llevando a cabo en la cafetería.

_ ¡Detengan esta pelea de una vez!— gritó el director en el lugar.

Los alumnos voltearon a ver al director, quien no se veía para nada contento de lo que estaba pasando. El hombre caminó hasta donde estaban los problemáticos de causar un mal ambiente al lugar. Vio a Lynn y a la emo tiradas en el suelo jalando de sus cabellos.

_ ¡Ustedes dos dejen de pelear ahora mismo!— ordenó el director.

Ambas chicas al oír el llamado de su director dejaron de pelear, aunque se veían de manera amenazante. Ya separadas fue que el director se dirige nuevamente a ellas dos.

_ Ustedes dos se vienen conmigo a mi oficina. Están en graves problemas.— le dijo a las dos chicas.

Lynn y la chica emo fueron detrás de él para así ir a la oficina. Ya adentro el director les dio un reproche a ambas, quienes únicamente veían el suelo sin importarles nada en ver a su director. Más tarde llegaron los padres de ambas chicas, en donde el director no fue benevolente con ninguna, pero más con Lynn, a quien ya la habían reportado en días anteriores sobre otros asuntos.

Luego de una larga platica llegaron a una conclusión, en la cual, quien salió mal parada fue Lynn. La cual fue expulsada de la escuela, eso gracias a las acciones que ha hecho, sobre todo cuando lesionó a su rival en el partido de fútbol. En cuanto a la otra chica solo le dieron tres semanas de detención.

Los señores Loud estaban decepcionados con su hija, de que en poco tiempo causó daños y ahora es expulsada de su escuela. En la van familiar se podía ver a los señores Loud y a su hija.

_ Ni creas que esto ha acabado, cuando lleguemos a casa hablaremos seriamente de esto jovencita.— dijo Rita a su hija.

La castaña por su lado ni se molestó en decir algo, estaba molesta, todo el mundo ha estado en su contra, fue separada de los equipos en donde estaba y se le fue quitado su puesto de capitana, y ahora es expulsada. Se suponía que la suerte estaba de su lado, que los dioses de la suerte siempre le estaría brindando de su pura y majestuosa suerte. Pero tal parece que la dejaron abandonada.

Con Lucy.

Vayamos ahora con la gótica de la familia más caótica. Lucy estaba en la biblioteca de su escuela, leía algunos libros de una sección de novelas. En la cual leía una novela de un hombre que sueña con ser vampiro, y hará lo que sea con tal de lograr su sueño.

Pasado unos minutos paró su lectura para luego retomarla más tarde. Fue a donde estaba la bibliotecaria para así pedirle prestado el libro. Luego fue a otra sección de la biblioteca, en la cual se encontraba algunos chicos con apariencia gótica, tal como Lucy, los cuales eran 3.

_ Hola chicos.— saludó Lucy fríamente.

_ Hola.— devolvieron el saludo.

_ ¿Hay alguna novedad de la que debamos de hablar?— preguntó la pelinegra.

_ Ayer fui a una cafetería con temática que nos gusta, y pude convencer al dueño de que nos dejara recitar nuestros poemas.— respondió un chico.

_ Excelente, entonces iremos más tarde a esa cafetería y recitar nuestros poemas más recientes. Me tengo que ir, los veo luego.— se despidió la gótica.

Lucy se fue dejando la biblioteca y a los chicos con los que estaban. Los cuales esperaron hasta que Lucy se fuera para así pudieran hablar entre ellos mismos.

_ Les soy sincero, ya no soporto a esa chica. Tiene una vibra que me inquieta.— dijo otro gótico a sus amigos.

_ Lo mismo pensaba yo Rain. El otro día vi que escribía algunos poemas y en algunos tenían cosas relacionadas a la buena suerte y mala suerte.— comentó una chica en el grupo.

_ Aparte que no entiendo como le hicimos para que sea nuestra presidenta de nuestro club de poesía. Cuando el puesto siempre era de Lilith.— decía otro chico a sus amigos.

_ Debemos de hacer algo para quitarnos a esa chica de nosotros. Estoy seguro que algo podría hacer cuando menos lo esperemos.— optó otro chico a sus compañeros.

_ Estoy de acuerdo con Joy, hay que sacarla y que Lilith vuelva a ser la presidenta del club.— dijo Rain aceptando la idea.

Más tarde en la salida vemos a Lucy caminar hasta la salida para así esperar a que vengan por ella. En eso aparece un chico de la misma edad de Lucy, el cual era un chico de cabello castaño, dientes de conejo y usaba una camisa verde claro con unos pantalones cafés.

_ Hola Lucy, ¿Tienes tiempo para que hablemos un rato?— preguntaba el niño a la gótica.

_ Aún no viene mis padres a recogerme. ¿De qué quieres hablar conmigo, Mark?— ahora preguntó Lucy.

_ Es que.... te quería decir que.... eres muy linda, y pese a lo que dicen algunos compañeros nuestro sobre ti, yo no pienso lo mismo. Eres una niña muy linda, me gusta tu cabello, aunque cubran tus ojos, a veces me quedo mirando y apreciando tu lindo rostro.

_ Lo que quiero decirte es que.... ¿Quieres ser mi novia?— soltó la pregunta Mark.

Lo que no se dieron cuenta ambos niños es que algunos alumnos vieron lo que Mark le había dicho a Lucy, además de que se le declaró, pidiéndole que sea su novia. Lucy por su parte no se veía sorprendida ante tal revelación, de que su compañero de clase dijera que para él ella es bella, y que estaba dispuesto a ser su novio.

Unos segundos después Lucy daría su respuesta, la cual no sería del agrado de Mark.

_ Lo siento Mark, pero mi corazón oscuro es dueño de alguien más, de alguien que dudo mucho que entiendas a quien me refiero. Solo te pido que no insistas en pedirme que sea tu novia, no va a funcionar.— respondió la gótica.

Lucy vio la nueva van familiar que su padre había comprado, a lo que Lucy se sube y de ahí el vehículo familiar dejó el lugar. Por su lado Mark se quedó en el mismo lugar, estaba destrozado, la chica que le gustaba le había dicho que no quería nada con él, que ya tiene a alguien a quien amar, y que nada ni nadie podría hacer que cambie de opinión.

A lo que comenzó a llorar, llorar por su amor no correspondido. Fue así hasta que algunas personas se acercaron a Mark. Los cuales eran los compañeros del club de poesía de Lucy, quienes vieron todo.

_ Eso fue cruel, y es raro viniendo de mí.— dijo Lilith a Mark.

_ No llores niño, ella no vio en ti a alguien que la amaría de verdad y que sería feliz contigo.— dijo Joy consolado al chico.

_ P-p-pero yo la amaba.... y-y-y me dijo que ya tiene a alguien más..... realmente me gustaba.— lloraba el niño por su amor no correspondido.

_ Descuida, nosotros te ayudaremos a darle su merecido a esa niña, y de paso deshacernos de ella de una vez— comentó Rain a Mark.

_ S-si necesitan a alguien que les pueda ayudar en poner trampas ocultas, le puedo decir a mi hermano mayor que les ayude con eso.— recomendó Mark un poco de ayuda.

_ Perfecto, así no sólo le diremos que ya no la queremos en nuestro club, también la humillaremos.— comentó Lilith gustosa de la idea.

Así los tres góticos y Mark se fueron en donde el niño les presentaría a su hermano mayor para que les ayuden en su plan de darle su merecido a Lucy por haberlo rechazado y dejarlo en ridículo ante la mirada de los demás alumnos.

Más tarde.

Ya en la noche se puede ver a Lucy, quien se preparó para ir a recitar sus poemas con su club de poesía. Fue al punto de encuentro en donde ahí le estaban esperando.

_ Que bueno que llegaras Lucy. Ya es momento de ir a la cafetería.— dijo Joy a su presidenta.

_ Estoy tan emocionada que podría sonreír. Suspiro.— respondió Lucy.

Los chicos comenzaron a caminar para así llegar lo más pronto a la cafetería. Los 3 chicos veían a Lucy, en sus mentes ya deseaban de poner en marcha su rebuscado plan. Llegaron y fueron con el encargado para así darle a entender que acaban de llegar. A lo que esperaron hasta que fueran su turno.

Minutos después ya era momento de ellos en pasar al pequeño escenario que había ahí. Quien fue de primero en ir fue Lilith, luego de ella pasó Joy, y después de él siguió Rain. Ya por último estaba Lucy, quien tenía algunos de sus poemas que ella misma hizo.

_ Es mi turno de pasar. Deseenme suerte chicos.— dijo Lucy a sus amigos.

La pelinegra pasó al escenario, vio a las personas que habían llegado. Se aclaró su garganta para así comenzar a recitar sus poemas.

_ Estos son unos poemas que yo misma escribí. Espero que lo disfruten.— habló Lucy al público.

Fue así que antes de comenzar Lucy miró el papel que traía en manos, el cual tenía varios poemas. Los cuales no eran del todo de ellas, sino que éstos poemas los escribió con la ayuda de Lincoln. Y hablando de él, también en el papel había uno que otro poema que escribió basándose en la mala suerte de su hermano.

Cuando ya estaba por comenzar a recitar su poema fue que sucedería algo en ese preciso momento. Lucy fue bañada de pintura color rosa, además de ser cubierta con plumas. Los presentes al ver eso algunos comenzaron a reír, otros sacaron sus celulares para así grabar este momento tan humillante.

La joven de cabello negro estaba impactada por lo que pasó. Se fue del escenario para así intentar lavarse y que la pintura no se seque. Vio a sus compañeros del club de poesía, quienes la veían con una mirada entre satisfacción y orgullo.

_ Lo sentimos Lucy, pero no nos quedó de otra hacer esto. Fue la única manera de decirte que ya no queremos que seas la presidenta del club de poesía.— dijo Rain a la Loud.

_ Así es, aparte que eres una chica con un ego muy grande. Espero que con esto se te baje.— dijo ahora Lilith.

_ Y no eso, esto también va para el niño que lo rechazaste. Su hermano fue quien nos ayudó en hacerte esta broma para ti.— contó Joy.

_ Esto es por mi hermanito, esto le pasa a las niñas que hieren sus sentimientos.— le dijo el hermano de Mark.

Lucy estaba shockeada, sus propios compañeros del club de poesía le hayan hecho esa broma por el motivo de que ya no la querían como presidenta del club, y también por haber rechazado a Mark cuando este último se le declaró.

No creía que sus propios compañeros le hayan hecho todo eso. De ponerla en esta situación humillante y también de que le hayan dicho de que ya no la quieren como presidenta del club de poesía. Fue tanta la humillación que sentía que se fue de ahí llorando, nunca antes en su vida le había ocurrido algo así.

Corrió hasta que llegó a su casa, no vio a sus hermanas que estaban en la sala mirando la televisión. Algunas fueron detrás de ella para preguntarle que le había pasado, por qué estaba cubierta de pintura y plumas. No quería hablar con nadie, quería estar sola con su dolor interno.

Con Lana.

Pasando ahora con la fontanera de la familia. Vemos a Lana quien estaba en el patio trasero jugando con sus mascotas. A Lana le alegraba de que el patio trasero de su nueva casa sea más amplio a comparación de la otra. Y también de tener su propia habitación y no tener que escuchar las constantes quejas de Lola por sus mascotas.

_ Esto es divertido, tener un patio más grande es mucho mejor que uno muy reducido.— comentó Lana a sí misma.

Siguió jugando con sus mascotas, tanto las domésticas, como sus mascotas propias. Le enseñó uno que otro truco nuevo a Charles, a Cliff, al Diablo, y a Brinquitos. Luego de un rato jugando con sus amigos tanto mamíferos como reptiles descansó un poco.

_ ¿Saben chicos? Esto sería más divertido aún si tuviéramos más compañeros de juego. Vi que hay una tienda de mascotas cerca de aquí, podría ir y traerles un compañero nuevo para ustedes.

Por su lado las mascotas de la rubia estuvieron de acuerdo con lo que había dicho su ama, de tener un nuevo compañero de juego. A lo que Lana se levantó del suelo para ir a la tienda de mascotas.

En eso sintió como algo se había subido en su hombro, vio que se trata de Brinquitos.

_ ¿Que pasa amigo? ¿Me quieres acompañar a la tienda de mascotas?—preguntó Lana a su amigo anfibio.

Por su lado Brincos dio unos saltos para confirmar la respuesta de su ama. A lo que Lana continuó su camino con rumbo a la tienda de mascotas. Caminaba por una zona de Las Vegas que se veía bonito, donde había varias tiendas y uno que otro restaurante.

Cuando estaba por llegar a la tienda de mascotas Brinquitos se baja del hombro de su ama, debido a que vio una mosca volar muy cerca, por lo que empezó a seguirla y comérsela. Lana vio que su amigo de sangre fría se había bajado de ella.

_ ¡Brincos vuelve aquí ahora mismo!— exclamó Lana a su rana mascota.

La rubia comenzó a seguir a su mascota y evitar que le sucediera algo. La siguió hasta dentro de un lugar que no se percató de lo que era. Adentro se ve como Brincos usaba su lengua para atrapar a la mosca, fallaba y fallaba y no lograba atraparlo.

Pero en una de esas pudo conseguir con su prometido. Pudo atrapar a la mosca y así se la comió disfrutando de este pequeño aperitivo. Lana llegó y tomó a su mascota fiel, luego de estar perseguirlo por unos minutos.

_ Oh Brincos, no me hagas pasar por esto. Prométeme que no volverás a irte de mi lado otra vez, ¿Quedó claro?— dijo Lana a Brincos.

Brincos por su lado hizo un gesto dando a entender de que no volvería a hacerlo. Lana vio el lugar en donde estaba, por estar persiguiendo a Brincos no se fijó a donde había entrado. Vio pasar a varias personas de un lado a otro, parecían estar ocupados con algún trabajo.

Vio a un hombre con un portapapeles en mano y también estaba dando órdenes. Lana se acercó a ese hombre y preguntarle que estaban haciendo.

_ Disculpe señor, ¿Podría hacerle una pregunta?— llamaba Lana la atención del hombre.

_ ¿Quién eres tú niña? No deberías de estar aquí, esta es una zona de trabajo.— dijo el sujeto a la rubia.

_ Entré aquí porque mi rana mascota había entrado. Pero le pregunto, ¿Que es lo que están haciendo aquí?— volvió a preguntar Lana.

_ Estamos arreglado este lugar ya que se llevará a cabo un evento de moda. En donde habrá varias participantes quienes mostrarán sus mejores atuendos a varios jueces.— respondía el tipo.

Lana entendió lo que hacían ahí, vio como estaban decorando el sitio y también montando una tarima para que las modelos caminen ahí. Fue ahí que Lana se le ocurrió una idea, por lo que se dirige al tipo nuevamente.

_ ¿No le vendría bien un poco de ayuda extra? Soy buena reparando cosas y construyendo otras.— se ofrecía Lana en ayudar.

_ Lo siento pequeña, pero esto es trabajo para adultos, esto no es cosa para niños.— respondió negativamente el tipo.

_ Por favor, déjeme ayudarles, les prometo que haré un trabajo de calidad. Aparte que no le cobraré nada por mis servicios.— insistió la rubia.

Por su lado el tipo no creía que Lana pudiera hacer el trabajo de un adulto, ya que prácticamente no creía para nada. Cuando estaba por dar su respuesta fue que alguien apareció.

_ Phil, tenemos un problema. Unos de los encargados de poner la tarima tuvo un pequeño accidente. Fue llevado al hospital y estará dos semanas en reposo.— decía un chico al tipo llamado Phil.

_ ¿Que? No puede ser. La tarima tiene que quedar lista para hoy. Mañana será el concurso.— dijo Phil sorprendido.

_ Debemos de buscar a alguien para así terminar esto rápido, o estaremos en problemas.— dijo el chico a Phil.

Por parte de Phil estaba que le daba un derrame, todo estaba marchando bien para terminar este trabajo para hoy, ya que mañana sería el concurso. Debía de buscar a alguien más, pero no tiene tiempo para ir a buscar un reemplazo, todos estaban en lo suyo.

No fue hasta que vio a Lana, la Loud puso unos ojitos de perrito para así convencer al tipo de que le deje ayudar con lo de la tarima. Viendo el panorama y que deben de tener esto listo para mañana, no le quedó de otra que aceptar la ayuda de la fontanera.

_ Está bien, puedes ayudar en el trabajo. Me estoy arriesgando a que me despidan, y espero que hagas un buen trabajo niña.— dio su respuesta Phil.

_ ¡Muchas gracias señor! Le prometo que haré un buen trabajo. Si me disculpa empezaré ahora mismo.— agradeció Lana por el chance.

Sin más Lana tomó algunas herramientas y comenzó a trabajar en la instalación de la tarima. Algunos trabajadores veían a Lana y se hacían preguntas del por qué una niña estaba ahí, ya que este era un lugar de trabajo y no debían de haber niños.

Pero estos mismos quedaron impresionados al ver como Lana instalaba las partes de la tarima con suma facilidad. En cuestión de un par de horas la tarima estaba ya lista. Lana estaba clavando unos clavos en el suelo de madera para que todo quede fijo y seguro.

_ Solo unos cuantos más y ya habré terminado.— dijo Lana.

Ya había clavado algunos, cuando estaba por clavar el último clavo fue que del bolsillo del overol de Lana se salió Brincos, ya que este nuevamente vio otra mosca pasar, por lo que fue detrás del insecto para así comérselo.

_ No otra vez. ¡Brincos regresa!— gritó la rubia.

Lana fue nuevamente detrás de Brincos para que no le suceda nada. Lo atrapó justo cuando Brincos logró atrapar a la misma y comerla.

_ ¿Que te había dicho de salir corriendo detrás de una mosca?— le reclamó Lana a su mascota.

Brincos al ser regañado puso una carita triste, para no recibir más regaños de su ama. Lana por su lado vio a su amigo anfibio poner esa carita y su enojo que sentía se había ido. No podía ser dura con su amigo fiel.

_ Está bien, ya no estoy enojada, pero que sea la última vez que hagas eso. ¿Que estaba haciendo antes de ir detrás de ti? No importa, ya terminé de armar la tarima.

_ Mañana vendremos para así como quedó todo y así ofrecer mis servicios en construcción para futuros eventos de este estilo. Vayamos a casa antes de que mamá se enoje.— le dijo Lana a Brincos.

Así ambos salieron del lugar para así regresar el día de mañana para ver no el concurso de moda. Sino para poder ver como quedó su trabajo al final y de paso ver la cara que pondrá Phil al ver su trabajo.

Día del concurso.

Y

a era el día del concurso, vemos a Lana quien había llegado al lugar. Vio cómo el lugar se llenaba de gente, quienes vinieron a presenciar el concurso.

_ Vaya, me recuerda mucho a los eventos de modelaje de Lola. Tal parece que la gente le gusta esto.— dijo Lana al ver el lugar.

Minutos después el concurso había comenzado, en donde se dio una presentación de un presentador, luego de eso se mostró los diseños que las participantes habían hecho para mostrarlos al público y a los jueces.

Lana al ver a esas mujeres modelar esas ropas le hizo recordar su corta carrera como reina de belleza infantil. Algo del cual no volvería a hacer, o a menos que fuera necesario, pero de momento los concursos de belleza no es lo suyo, eso es para su gemela.

_ La siguiente participante en mostrar su diseño es la joven Leni Loud.— dijo el presentador al público.

_ Wow, no sabía que Leni participaría en este concurso. Aunque era obvio, a ella le gusta este tipo de eventos.— dijo Lana sorprendida.

Se vio a una modelo, la cual llevaba un hermoso vestido hecho por la propia Leni. Lana estaba asombrada al ver a esa chica con ese vestido que su hermana mayor había hecho. Debía de admitir que Leni se lució con ese vestido, pese a que Lana no suele usar ropa muy femenina, debía de reconocer que ese vestido era lindo.

Cuando la modelo estaba por regresar a tras bambalinas fue que ocurriría algo, su vestido se quedaría atorado con algo. Intentó salir de este incómodo momento, pero no podía. Unos asistentes estaban por ir a ayudar a la modelo con el problema que tenía, pero la modelo cansada de esto dio un tirón a su vestido, el cual se rompió como si fuera un papel, quedando ella en ropa interior.

Todos veían a la joven modelo, en donde nadie perdió el tiempo y empezaron a grabar y a tomar fotos. La joven, avergonzada por este humillante momento se fue de ahí con su rostro completamente rojo. Lana vio lo ocurrido, además de escuchar las hirientes palabras de uno de los jueces que le dedicó a Leni, quien se fue de ahí llorando.

Más tarde los encargados fueron a revisar lo que había sucedido en la tarima, del como el vestido que usó la chica se rompió. Fue ahí que vieron el causante de que sucediera eso.

_ Aquí esta el problema, un clavo salido, esto hizo que el vestido se quedara atorado.— dijo uno de los encargados.

Lana se dio cuenta de eso y fue ahí que recordó que no había terminado de clavar ese último clavo, debido a que Brincos se había escapado nuevamente. Phil a ver que había sucedido volteó a ver a la culpable de esto.

_ Fui un estúpido al confiarle el trabajo de un adulto a una mocosa de 6 años. Quiero que te vayas de aquí enana de mierda, ojalá nunca te contraten para trabajos serios y que requieran de mucha experiencia. ¡Fuera de aquí!— dijo molesto Phil.

La rubia mecánica se sintió destrozada, de que ella fuera la responsable de que su hermana Leni fuera descalificada del concurso y que el vestido que le habrá tomado muchas horas de hacerlo se haya echado a perder. Pero más le dolía el oír las palabras de Phil, de que nunca llegaría a nada por su incompetencia.

Por lo que simplemente se fue de ahí llorando y con sus ánimos en el piso. Cuando salió del lugar llegando a la acera Lana se tropieza y cae al suelo. En la caída Brincos salió disparado y cayó un poco más lejos que Lana.

La rubia se levantó y vio al frente suyo, vio que su compañero de sangre fría había caído en la carretera. Cuando se iba a levantar para ir a tomarlo y evitar que le sucediera algo fue que ocurrió lo peor.

Justamente en ese momento apareció un auto que pasaba a toda velocidad, el cual no se percató de Brincos. El pobre anfibio vio como el auto se acercaba a él, en cuestión de segundos el auto le pasó por encima, acabando así con la vida de Brinquitos.

Lana vio con horror lo que había pasado. Brinquitos, su amigo fiel, aquel anfibio que conoció en un pequeño estanque y que crió y cuidó desde siempre había muerto frente a ella. Lana no podía creerlo, no quería aceptar que su amigo anfibio se ha ido y nunca volvería.

Se acercó al cuerpo ya sin vida de Brincos, trató de cualquier modo de salvarlo, pero no tenía pulso alguno, había muerto. Lana, con lágrimas que brotaban de sus ojos tomó a él cuerpo de Brincos y se dirigió a su casa. En el camino comenzó a llover, poco le importaba eso.

Al llegar lo primero que hizo fue ir al patio trasero, en donde se puso a cavar un hoyo, el cual sería la tumba de su difunto amigo. Las demás mascotas de Lana la acompañaron en este triste momento, vieron que uno de sus amigos había pasado a mejor vida.

Ya con la fosa hecha Lana colocó el cuerpo de Brincos y luego lo llenó de tierra. Luego le colocó una rama como si fuera una cruz. Las demás mascotas lloraban al ver que Brincos había muerto. Lana por su lado no dejaba de llorar, el dolor que sentía era incomparable, vio al cielo, el cual seguía lloviendo.

_ Brincos...... espero que estés allí, en el cielo brincando con los ángeles.— dijo Lana a su difunto amigo.

Con Lola.

La siguiente en la lista era Lola. La diva de las pasarelas le encantaba su nueva vida como millonaria. Ahora podía tener todo lo que ha querido y que antes sus padres no podían cumplirle con sus caprichos de niña consentida. Pero ahora todo eso cambió.

Y no sólo eso, también está el hecho de que ahora tiene su propia habitación, en donde ya no tendría que lidiar todos los días con su gemela Lana con sus mascotas. Ahora con su propia habitación podía ponerle llave a la puerta para que nadie entre. Vemos a Lola, quien estaba sentada en una silla y en sus manos tenía un espejo.

_ Espejito Espejito. ¿Dime quien es la niña más linda en el universo?— preguntaba Lola a su espejo.

_ Lola Loud.— dijo una voz.

_ ¿Acaso el espejo me habló? ¿O estaré delirando?— preguntaba Lola sorprendida.

_ Lola soy yo, tu padre. Se te hará tarde en tu primer día en la escuela de modelaje infantil.— dijo Lynn padre a su hija.

_ Enseguida papi, no me tardo.— respondió la rubia de rosa.

Así Lola tomó un bolso en donde tenía todo lo que necesitaría en su primer día en la nueva escuela de modelaje en la que sus padres la inscribieron. Salió de su habitación en donde su padre la estaba esperando, bajaron hasta el primer piso y de ahí fueron a la van familiar.

Dentro de auto Lola pensaba en lo que haría en esta nueva escuela de modelaje, y haría exactamente lo mismo que hizo en su otra escuela de modelaje. Intimidar a sus compañeras y sabotear todo intento de ellas quienes intenten superarla. También de sobornar a los jueces con sus sofisticados trucos de chantaje.

Llegando al lugar padre e hija bajaron, Lynn acompañó a su hija hasta el interior del inmueble. Ya llegando en la habitación en donde Lola recibiría sus primeras clases de modelaje, Lynn señor se despide de su hija.

_ Adiós Lola, que te vaya bien. Vendré más tarde por ti.— se despedía Lynn padre de su hija.

_ Adiós papi, te quiero mucho.— respondió Lola de manera educada.

Una vez que el señor Lynn se fue acto seguido Lola cambió su mirada, de tener una carita adorable a una que impartía miedo. Entró y de ahí vio a sus demás compañeras. Quienes estaban a la espera de que comiencen las prácticas.

Lola fue a cambiarse, se quitó su vestido y se puso un leotardo de color negro y unas zapatilla negras. En eso apareció una mujer de piel morena, la cual es la maestra de impartir las prácticas a las futuras reinas de belleza.

_ Buenos días niñas, espero estén preparadas. Quiero ver lo que tienen para mostrarme el día de hoy.— contaba la maestra a sus alumnas.

Así las niñas presentes hicieron caso a lo que su maestra les pidió. Lola por su lado haría lo suyo, el cual era su famoso baile con listón. Fue así durante una hora de prácticas, en donde Lola dejaba evidenciado su habilidad con el listón, como si fuera parte de su cuerpo.

Algunas niñas veían a Lola y quedaban sorprendidas, otras en cambio no le prestaban atención, y unas muy pocas veían de manera distinta a Lola, más que nada, de manera desconfiada. Ya cuando estaba por terminar las prácticas del día de hoy fue que la maestra se dirige a sus aprendices para contarles algo.

_ Niñas buenas noticias. Me contaron que dentro de unos días vendrán a nuestra escuela de modelaje algunos jueces de modelaje infantil para evaluar el rendimiento de ustedes. Lo cual será bueno para ustedes, ya que así alguna de ustedes podrán competir en concursos regionales de modelaje.— contaba la maestra a sus alumnas.

Todas las niñas estaban emocionadas de que vendrían unos jueces de certámenes infantiles vendrían a su escuela para así buscar a las siguientes competidoras en concursos regionales. Lola vio esta su oportunidad de sobresalir y consagrarse como la futura reina de belleza por excelencia.

Más tarde Lola esperó a que su padre viniera a recogerla, mientras esperaba pensaba en algunas cosas en su cabeza, más que nada sobre la llegada de esos jueces.

_ "Este es mi momento de demostrarle a esas amateur que Lola Loud vino aquí a ganar y proclamarse reina de belleza. Por lo que tendré que hacer algunas cosas para así sellar mi pase a las grandes ligas"— pensó la rubia del vestido.

Su padre llegó y luego subió a la van familiar y regresaron a casa. Durante un par de días Lola estuvo practicando sus rutinas de modelaje. A su vez que le preguntaba a su maestra información de quienes son los jueces que vendrían. Cosa que le facilitó lo que haría y asegurar su pase para competir en concursos regionales.

Día de las pruebas.

Ya el día había llegado, Lola se había preparado para este momento. Tenía todo lo necesario para las pruebas y también otras cosas de más. Cuando su padre la dejó en la escuela de modelaje Lola fue a cambiarse, luego esperó hasta que comience las pruebas.

Vio a la distancia los jueces, los cuales eran dos mujeres y dos hombres. Pero fijó su vista en uno de ellos, ya que ese sería su objetivo principal.

_ Muy bien niñas, llegó la hora. Así que salgan y hagan lo mejor que saben hacer. Todo dependerá de lo que harán y así podrán obtener su pase directo a las grandes ligas.— dijo la maestra a sus alumnas.

Todas ellas asintieron dejando claro que darían lo mejor de cada una. Lola se mostró más que confiada, ya que ella tenía un as bajo la manga. Esto llamó la atención de una de sus compañeras. Luego una por una fueron al escenario a dar lo suyo, poniendo a prueba sus mejores talentos y habilidades.

Los jueces veían todo y algunos se mostraban sorprendidos, otros ni se inmutaron. Era el turno de Lola en salir al escenario. Tomó su listón y fue a dar un gran espectáculo. Hizo un nuevo baile que había aprendido, lo puso a prueba y practicó durante los días de preparación.

Al término de las pruebas se dio un momento de descanso para luego dar el nombre de quien sería la ganadora y afortunada de competir en las grandes ligas. Lola pondría en marcha su plan, fue detrás de uno de los jueces, quien fue al baño luego de que todas las participantes pasaran.

Tras hacer sus necesidades salió del baño para regresar con sus compañeros. En eso vio a Lola, quien le sonreía como todo un angelito, aunque la realidad era que Lola haría algo que ha usado en momentos como este.

_ ¿Sucede algo pequeña?— preguntó el juez a Lola.

_ No mucho, sólo pasaba por aquí para ir al baño. Aparte me gustaría decirle que usted es bueno en lo que hace. Vi que ha sido juez en varios eventos infantiles de modelaje.— comenzó hablar Lola.

_ Gracias, solo hago mi trabajo como es debido.— respondió el tipo.

_ También le vengo a pedirle algo a usted, señor Jeff Armstrong. No es mucho lo que le pido, solo quiero que usted convensa a sus compañero en darme la victoria a mí para competir en el siguiente concurso regional de modelaje infantil.— pedía eso Lola.

_ Creo que eso no se podrá hacer, entre todos escogemos a la ganadora, la cual es la que más se destacó del resto y vimos en ella algo único. Por lo que no niña, no puedo hacer eso. Será mejor que regrese para así dar nuestro veredicto.— dijo Jeff a Lola.

_ Sino hace lo que le pido le diré a todo mundo que usted es un abusador de menores y que intentó hacerme cosas indebidas.— le dijo Lola a Jeff.

El hombre por su lado se detuvo en seco ante lo que Lola le había dicho. Estaba sin palabras por lo que había dicho la rubia, por lo que se dirige a ella para que le vuelva a decir lo que había dicho.

_ ¿Que fue lo que dijiste mocosa?— preguntó Jeff molesto.

_ Lo que oyó. Sino cumple con lo que le digo me veré obligada a contarle a todos de que usted es un asqueroso que se aprovecha de las niñas indefensas como yo.— volvió a decirlo Lola.

_ Eso es estúpido. Yo jamás me he aprovechado de una menor de edad. Y tampoco lo haría contigo, niña.— se defendía Jeff de las acusaciones.

De lo que no sabía Jeff, es que Lola había planificado esto al pie de la letra. Ya que tenía su celular y estaba grabando todo. Lo sacó y de ahí modificó el audio.

_ Muchas gracias buen caballero, ya tengo pruebas suficientes de su falsa acusación de abusador. Y lo usaré si no cumple con lo que le dije.— comentó Lola a Jeff.

_ ¡Maldita mocosa! ¡Solo espera a que te quite ese miserable celular!— exclamó molesto el juez.

Jeff en un intento de arrebato intentó quitarle el celular a Lola. Pero la diva fue más ágil y se quitó del camino, haciendo que Jeff se tropiece y caiga al suelo. Lola estaba por retirarse hasta que voltea atrás de ella.

_ Y recuerde, cumpla con lo que le digo o su imagen se verá manchada de por vida.— amenazó Lola a Jeff.

Por su lado Jeff estaba entre la espada y la pared. No permitiría que esa niña se saliera con la suya, de ninguna manera dejaría que ella gane y logre ir a las grandes ligas de modelaje infantil. Aunque no quería que Lola divulgue ese audio amañado donde lo culpa de algo grave. Si lo llega a hacer su carrera como juez de certámenes infantiles se acabaría e iría a la cárcel.

No le quedó de otra que hacer lo que Lola le pidió, le guste o no le guste. Sin más se levanto y fue con sus demás compañeros.

Pero de lo que no sabía ni Lola ni Jeff, es que alguien desde las sombras los habían visto, y también grabó todo lo sucedido. Se trataba de una de las niñas participantes y aspirantes a competir en las grandes ligas.

_ Sabía que esa arpía de Lola Loud tramaba algo. Debo de mostrarle esto a los demás jueces y vean lo que esa estúpida hizo.— dijo la chica a si misma.

Volviendo al escenario, todas las participantes estaban reunidas y a la espera de quien sería la afortunada de ir directo al certamen regional que se aproxima. Los jueces estuvieron decidiendo quien sería la ganadora. A lo que Jeff optó por Lola, cosa que no quería pero no tenía de otra, sus demás compañeros opinaban lo contrario, pero Jeff insistió hasta que sus compañeros estuvieron de acuerdo.

Una de las juezas presente se levantó, tomó su micrófono y acto seguido diría lo siguiente.

_ Realmente nos sorprendieron con lo que nos mostraron hoy, sin duda tienen un futuro prometedor en el mundo del modelaje. Pero en esta ocasión sólo habrá una sola ganadora, la cual irá al siguiente certamen regional de Las Vegas.

Todas las niñas estaban ansiosas de saber si alguna de ellas habrá ganado. Lola estaba lista y preparada para pasar adelante y proclamarse ganadora.

_ Y la ganadora es..... Lola Lou....

_ ¡Un momento, detengan todo!— gritó una de las niñas.

Todos voltearon a ver quien había interrumpido a la jueza, se trataba de la misma niña que grabó todo entre Lola y Jeff.

_ Quiero decirles de que quien se supone es la ganadora en realidad hizo trampa, o mejor dicho. Cometió un acto de chantaje a uno de los jueces. Y tengo evidencia al respecto.— explicó la chica en cuestión.

La jueza que hablaba por el micrófono se acercó a la niña para ver la supuesta prueba de que Lola había cometido un acto de chantaje. Lola por el contrario estaba a que le salía vapor por los oídos, no pensó de qué alguien sospecharía de ella.

La mujer tomó el celular de la niña y comenzó a ver lo que había grabado. Lo que vio la dejó con la boca abierta. Vio a Lola la cual volteó a otro lado. Le entregó nuevamente el celular a la niña y seguido de eso tomó su micrófono para decir algo.

_ Debido a lo acontecido he cambiado de opinión con respecto a la ganadora. Pero antes de eso quiero decir algo con respecto a la que se supone era la ganadora. Lola Loud. Usted está descalificada y debido a lo que hizo se le vetará de por vida el volver a participar a cualquier concurso de bellaza infantil.

_ Y pasando a la ganadora es para la concursante Margaret McDonald. Felicidades, usted será quien representará a su escuela en el siguiente certamen de belleza.— dijo la jueza a la ganadora.

La chica de nombre Margaret estaba llorando de la felicidad, por su acción de delatar lo que había hecho Lola le fue suficiente para ganar y poder participar en el siguiente certamen regional.

Mientras Lola veía todo con una furia que haría que el mismo Diablo se espante del miedo. Vio cómo su oportunidad de ser una futura reina de belleza se fue por el excusado. Todo lo que había hecho fue en vano, ahora toda oportunidad de intentarlo no funcionaría, debido a que fue vetada de por vida.

A lo que Lola se retiró de ahí maldiciendo a todos los que estaban ahí, insultando a la que le quitó su puesto como la ganadora y a las demás concursantes. Regresando a casa lo primero que hizo Lola fue desquitar su ira con las cosas que tenía en su habitación.

_ ¡¡Los odio malditos hijos de.....!!

_ ¡Lola Loud cuida tu lenguaje jovencita!— le reprendió Rita a su hija.

Lola se cayó al oír el grito de su madre, por lo que tomó su almohada y de ahí gritó todas las malas palabras que ha retenido y que iban dirigidas a todo aquel que se le pasaba por su mente.

Con Lisa.

Ya pasando ahora con la niña genio de la familia, vemos a Lisa en su habitación sumisa en sus experimentos. Lisa, al igual que el resto de sus hermanas, también le alegraba tener su propia habitación, en la cual podía hacer todo tipo de inventos sin que Lily estuviera de por medio.

Y no sólo eso, sino que también su habitación está más reforzada que las demás, esto fue un pedido que le pidió a sus padres, por si ocurría una explosión. Un rato después a la habitación de la genio alguien tocaba la puerta, a lo que Lisa fue a atender el llamado.

_ ¿A que se debe este llamado a mi morada unidad fraternal número 5?— preguntaba Lisa a Lynn.

_ Unas personas te buscan abajo. No sé para qué, solo baja y ya lo sabrás.—respondió Lynn.

Lisa bajó las escaleras para ir a ver a esas personas que vinieron a buscarla. Vio que se trataba de unos científicos, los cuales estaban con sus batas de laboratorio. Lisa se acercó a ellos para hablar, ya que sabía a qué vinieron ellos.

_ Buenos días mis estimados colegas.— saludó Lisa a sus compañeros.

_ Buenos días a usted señorita Loud. Vimos su curriculum y nos sorprendió lo que dice, además de ver algunos de sus aportes a la asociación de científicos de Estados Unidos. Y nos interesa tenerla en nuestra universidad para imparta clases a nuestros estudiantes.— contó uno de los científicos.

_ Es un honor para mí en dejarme estar en su universidad y dar mis conocimientos a las futuras generaciones.— dijo halagada Lisa.

_ Y para eso queremos ver una demostración de parte de usted. Queremos ver alguno de sus inventos, y mostrarlo a nuestros estudiantes y vean el gran intelecto que posee usted.— dijo otro de los científicos.

_ Me gusta lo que me ha pedido, aunque tengo algo mejor. Estoy trabajando en un nuevo invento, el cual aún no está terminado, dentro de unos días lo tendré listo y así se los mostraré primero a ustedes luego a los alumnos.— comentó la genio.

_ Muy bien, entonces le estaremos esperando cuando tenga listo su nuevo invento. Realmente nos emociona de tenerla en nuestra universidad, una mente brillante como la suya merece estar con nosotros.— contó el primer científico.

Así los científicos se retiraron para que así Lisa logre terminar su nuevo invento. La genio regresó a su habitación para así terminar su susodicho invento.

Esto a Lisa le gustaba, de poder impartir su conocimiento y su capacidad intelectual a las mentes de varios aspirantes a ser científicos o doctores. No por nada se ha ganado el reconocimiento de varios colegas en la rama de la ciencia.

Fue así durante varios días, en donde Lisa trabajaba en su invento, el cual tras varias pruebas había logrado con su prometido. Lisa vio como su nueva invención estaba funcionando a la perfección sin algún margen de error o alguna falla de cálculos.

_ Finalmente, he logrado terminar mi nueva creación. Solo tendré que guardarlo y tenerlo listo para mañana. Pero antes iré a la cocina, necesito comer para recuperar fuerzas luego de varios días de trabajo.— comentó Lisa a sí misma.

Lisa salió de su habitación para ir a la cocina por algo de comer. Pero de lo que no se fijó Lisa fue que dejó la puerta de su habitación abierta. En eso se ve a Lynn, quien estaba jugando con una pelota de tenis. La cual estaba lanzando en las paredes y atraparla.

Fue así que en una de esas no la pudo agarrar y entró a la habitación de Lisa, donde rebotó varias veces en las paredes hasta que terminó golpeando el invento de Lisa y cayendo al suelo. Lynn al ver lo que había hecho lo recoge rápidamente, vio que una parte del invento se salió, se lo pone nuevamente para que Lisa no sospeche.

_ Así está, Lisa jamás se dará cuenta que pasó. Mejor me voy antes de que ella aparezca.— dijo Lynn a sí misma.

Tomó su pelota y se fue de ahí como si nada hubiese pasado. Luego aparece Lisa quien traía en sus manos un plato con una rebanada de tarta y un jugo en cajita. Después de su merienda guardó su invento y así mostrarlo el día de mañana a sus colegas científicos.

Al día siguiente.

Vemos en una gran y moderna universidad de Las Vegas, ahí mismo se encontraba Lisa, acompañada de sus colegas científicos y directores de la universidad. Todo estaban en una habitación, en la cual Lisa mostraría su nueva invención.

_ Amigos, colegas científicos y decanos de la universidad. Ustedes serán espectadores de mi nueva creación, algo nunca antes visto y que se creía un mito, pero eso ya quedó en el pasado, porque esto es real.

Tras esas palabras Lisa remueve una manta que ocultaba su invento, la cual era una máquina con una especie de aro grande. Los científicos y decanos de la universidad se hacían preguntas de lo que era ese invento.

_ Les presento, "El Cronotron" el cual es una máquina que puede permitir al individuo viajar a varias realidades o a un punto exacto del tiempo.— presentaba Lisa su invención.

Los presentes estaban sin palabras al oír lo que era esa cosa, se trataba de una máquina del tiempo. Aunque algunos de ellos se mostraban escépticos ante lo que veían. Ya que era imposible de que Lisa haya creado algo que es imposible de crear cualquier ser humano.

_ ¿Cómo sabe si es una máquina del tiempo? ¿Ya la probó antes de traerla?— preguntó uno de los científicos.

_ Afirmativo. La probé cuando terminé de crearlo. Déjenme darles una demostración de que mi invención funciona.— afirmó Lisa.

En eso Lisa conecta su máquina del tiempo y luego de eso aprieta un botón. En eso el aparato emitió una luz de color verde, además de mostrarse un vórtice. Por supuesto los presentes veían con asombro lo que estaban presenciando.

_ Cómo pueden observar funciona a la perfección. El como se usa es fácil, sólo se debe de escribir algunas coordenadas en el teclado y los llevará al lugar que hayan escogido. Incluso cree este brazalete para así usarlo cuando quieran ir a otra dimensión.— explicó Lisa cómo funcionaba.

Mientras Lisa explicaba cómo funcionaba su invención ocurriría algo en ese momento. La luz y el vórtice cambió repentinamente, pasando de ser una luz verde a una de color roja, además de que el vórtice comenzó a succionar todo en la habitación como su fuera un agujero negro.

Todos estaban con miedo de lo que pasaba, por lo que fueron a refugiarse y evitar ser absorbidos por esa cosa. Lisa trataba de apagar su invento con el botón que había apretado, pero este no respondía. En su lugar el vórtice se hizo más grande haciendo que algunos se tomaran de lo que sea para salvarse.

Lisa en un acto de desesperación tiró del cable de su invento, haciendo que este se desconecte, y apagándolo en el acto. Todos estaban aturdidos por lo acababa de pasar. Unos segundos después fue que uno de los científicos se acercó a Lisa.

_ ¡¿Que fue eso?! ¿No se supone que lo había probado antes?— exclamó un poco asustado.

_ ¡No sé que pasó! Todo marchaba bien, puede que algún cable haya hecho un mal contacto y ocasionó que el vórtice actuara de esa manera.— dijo Lisa defendiéndose.

_ Será mejor que no vuelva a conectar esa cosa. Luego de lo que sucedió he cambiado de parecer con respecto a usted señorita Loud. He tomado la decisión de no aceptarla en nuestra universidad y que imparta clases aquí y en ninguna universidad del estado de Nevada. Alguien como usted es un peligro para la integridad física de nuestros alumnos.— contaba uno de los decanos.

_ También nosotros hemos tomado una decisión. Usted está fuera de la organización científica de Estados Unidos. Su invento casi nos cuesta la vida, otro incidente así le costará caro a usted. Es mejor que ya no forme parte de esta organización.— dijo uno de los científicos.

Lisa estaba shockeada de lo que acababa de escuchar, de que la universidad no la hayan aceptado como maestra e impartir clases a los alumnos. Sino que también se le fue revocado su pase a la organización de científicos de Estados Unidos. Y todo por su invento que salió mal y no sabía el por qué, todo estaba bien cuando lo probó.

_ ¿Acaso no puede pasarme algo más?— se preguntó a sí misma Lisa,

A la habitación ingresaron dos personas altas, las cuales usaban trajes de color negros y lentes del mismo color. Ambas personas no les dio importancia lo que había pasado en la habitación, tenía un objetivo, y ese objetivo era Lisa.

_ Lisa Loud. Somos de la Agencia Central de Inteligencia. Hemos recibido un llamado de que usted se infiltró en la base de datos del estado de Michigan de manera clandestina. Lo cual es un delito grave.

_ Por lo que nos mandaron para atraparla y hacer pagar por su crimen. Acepte venir con nosotros por las buenas y así se nos hará el trabajo fácil.— dijo uno de los agentes de la CIA.

_ Ya veo, en ese caso me hago responsable de mis actos y...... ¡¡¿Por Pitagoras que es eso?!!— exclamó Lisa asustada.

Todos voltearon a ver en donde señalaba Lisa. Lo que vieron fue nada, absolutamente nada. Los dos agentes de negro voltearon a donde estaba Lisa, pero la genio se había escapado.

_ Maldita mocosa, nos la jugó muy bien! Debemos de atraparla de inmediato.— dijo el otro agente.

Mientras se puede ver a Lisa correr lo más que podía su pequeño cuerpo. Estaba metida en un problema gravisimo, uno del cual es casi imposible de salir de esta.

_ ¡Tengo que hacer algo y pronto!— dijo mientras corría.

En la mansión Loud.

Por su lado en la mansión Loud ocurría otra cosa, se puede ver al resto de hermanas Loud, quienes algunas estaban llorando, otras estaban calladas, y otras con ganas de romper algo.

Mientras los padres estaban en la cocina hablando de algo importante.

_ Querida, no vas a creer. Compré un local del cual planeo restaurar y convertirlo en un restaurante.— contaba Lynn padre a su esposa.

_ Eso es bueno cariño, sabía que cumplirías tu sueño de tener tu propio restaurante.— felicitó Rita a su esposo.

_ Luego de mucho por fin mi sueño se hará realidad. Nada podría arruinar este momento.— contó Lynn señor.

La puerta de la casa se abrió de manera abrupta, las chicas vieron que se trataba de Lisa. La cual estaba muy agitada y sudando. Lisa se dirigió hasta la sala para así avisarle a su familia de algo.

_ ¡Familia...... debemos de irnos...... no hay tiempo.... que perder.— contaba muy agitada Lisa.

_ ¿De qué estás hablando Lisa? ¿Cómo así que debemos irnos?— preguntó Rita a su hija.

_ Al parecer el gobierno está detrás de mí, debido a lo que hice al infiltrarme a la base de datos del gobierno y hacer la emancipación de Lincoln.— explicaba Lisa lo sucedido.

_ ¡¡¿Queeeee?!!— exclamaron al unísono el resto.

_ Como les dije, debemos de irnos antes que los agentes de la CIA nos encuentren.— volvió a decir Lisa.

_ Espera, espera. ¿Por qué nosotros debemos de irnos también? ¿No es a ti a quien están buscando?— preguntaba Lynn.

_ Lo digo ya que esos agentes también pensarán que todos ustedes son cómplices míos. Y también los arrestarán. Por lo que debemos de irnos y escondernos de las autoridades.— explicaba Lisa la situación.

Los demás al oír lo que Lisa dijo les daba la razón, los agentes también podrían ir tras de ellas al ser familia de Lisa y posiblemente cómplices de lo que ella hizo.

_ Pero...... acabo de comprar un local y haría mi negocio ahí.— comentó Lynn señor.

_ Lo siento unidad paternal, pero no podemos hacer nada, tenemos que irnos pronto.— exigía Lisa en irse pronto.

El resto de la familia no perdieron el tiempo y tomaron lo que podían y se fueron, no querían irse de su nueva casa, pero tampoco querían ir a la cárcel. Subieron todo y se montaron en la van y de ahí partieron con rumbo desconocido.

_ Antes de salir de Las Vegas haremos una parada al banco y sacar todo el dinero antes que congelen mi cuenta.— contaba Lynn señor a su familia.

_ Pero oigan, ¿A dónde iremos ahora?— preguntó Luan.

_ Yo digo que vayamos a Hawai. Ahí nadie nos encontrarán.— propuso Lola.

_ No, mejor debemos ir a Texas.— optó Lana.

_ Opino que vayamos a Pensilvania.— comentó Lucy.

_ Chicas, piensen bien. Mejor es irnos del país, Alaska es una buena opción.— le entró Lori.

_ Familia, mejor vayamos a Los Angeles. Ahí podemos volver a tener lo que teníamos y también estar escondidos de la ley.— le dijo Luna.

Toda la familia estaban escogiendo a que ciudad deberían de ir para así vivir y esconderse de la ley. Tras varias discusiones escogieron a cuál ciudad ir, y sería a Los Angeles. Por lo que Lynn señor fue directo al banco para así sacar el dinero antes de que su cuenta bancaria fuese bloqueada.

Ya con el dinero tomaron rumbo a la ciudad de Los Angeles, California. En donde comenzarían nuevamente sus vidas desde cero, y más aún, mantenerse discretos debido a que ahora son buscados por la ley.

Fin del flashback.

Volviendo al presente, vemos como Lincoln estaba con una cara de incredulidad. Ya que le era imposible creer lo que sus ex hermanas habían hecho. Aunque claro, esto de alguna manera se lo esperaba de ellas, ya que él es la única persona en el mundo que conoce bien a las Loud.

_ En verdad me cuesta creer lo que ustedes hicieron. Aunque no me sorprende, conociéndolas a ustedes todo es posible.

_ Aunque, ¿Cómo fue que terminaron así como están?— volvió a preguntar Lincoln.

_ A ese punto estamos por llegar. Lo que sucedió fue lo siguiente.— decía Lori a Lincoln.

Flashback.

Retomando la historia de los Loud, vemos como estos, luego de unos días habían llegado a Los Angeles. En donde la familia numerosa veían la ciudad, era muy distinta a Las Vegas, pero no quitaba el hecho de que era hermosa.

Lynn señor condujo hasta llegar a un hotel, en el cual se quedarían hospedados hasta encontrar una nueva casa en la cual vivir.

_ Bien familia, tal vez no comenzamos de la mejor manera. Pero estoy seguro que si nos irá mejor en esta ciudad.— dijo el señor Lynn a su familia.

Las mujeres estaban de acuerdo en lo que dijo el patriarca de la familia, de que volverían a comenzar desde cero sus vidas y manteniéndose bajo perfil para evitar ser encontrados por la justicia.

Aunque de lo que no saben es de algo muy pequeño pero a la vez evidente. Y es que por más que quieran hacer las cosas bien, todo termina saliendo ridículamente mal. No por nada su apellido es Loud, una clara alusión de lo que son capaces de hacer.

No pasó mucho tiempo para que las hermanas Loud volvieran a hacer un desastre. Lo cual haría llamar la atención de muchas personas, y por supuesto de la ley. A lo que los Loud no tuvieron otra opción de huir cuál cobardes que son.

Y fue así durante mucho tiempo, días, semanas, meses, años, en los cuales ellos estuvieron viajando de ciudad en ciudad, escondiéndose de la policía y también de las personas a las cuales han hecho daño. A donde iban hacían un desastre, fueron vetados de todo sitio, echados a patadas de locales, y mucho más.

Una gran odisea estaban los Loud, los cuales a donde iban ahí estaba la ley para intentar atraparlos, no importaba lo que hacían para evadir la ley, siempre estaban ahí. Inclusive intentaron huir del país, ya sea yendo a Canadá o a México. Siempre habían un retén policial a la espera de capturarlos.

Vemos como han transcurrido 10 años, en los cuales los Loud no han dejado de ir de ciudad en ciudad. Dentro de la van familiar se podía ver a los señores Loud, quienes ya se les veía viejos y con el peso de la edad en sus espaldas. Junto a ellos estaban sus hijas, las cuales obviamente ya eran mayores, y también se les veía algo cansadas y con sus ropas sucias.

Ellos estaba en una carretera en el estado de Oregon, habían pasado unos días en un lugar que se hacía llamar "La cabaña del misterio" para retomar su camino sin rumbo fijo. Durante el viaje una de las hermanas se dirige a su padre, la era Lana.

_ Papá, no me siento bien. ¿Tienes algo que podría tomar?— preguntó la mecánica a su padre.

_ Les dije que no fuéramos a esa cafetería a comer. Esa señora con su ojo cerrado me causaba inquietud al verla.— se quejaba Lola.

En eso el señor Lynn vio en un compartimiento que funcionaba como hilera, la abrió y de ahí sacó una lata de gaseosa y se la dio a Lana. La mecánica abrió la lata y un poco de su contenido cayó al suelo.

_ Lo siento papá, pero dejé caer sin querer un poco del refresco.— se disculpaba Lana.

_ Descuida cielo, además no creo que algo malo le llegue a suceder a este bebé.— comentó el señor Loud.

Pasado unos segundos después de decir eso el único hombre de la familia ocurriría algo inesperado. En eso Lana soltó un vómito que fue directo al parabrisas del auto, causando que el señor Lynn no viera nada.

_ ¡¡Diablos no veo nada!!— exclamó asustado el hombre.

El señor Lynn trataba de evitar causar una tragedia que pondría en riesgo la vida de su familia, esquivó como pudo varios autos que pasaban por el sentido contrario. Al hacer eso el auto dio algunas vueltas, haciendo que las mujeres adentro empezaran a gritar, además de caerle encima el vómito que había en el parabrisas.

Tras varios giros el señor Lynn puro controlar el auto, haciendo que este se detenga. Luego comienza a respirar pesadamente, eso había sido lo más peligroso que le ha pasado en toda su vida. Volteó a ver a su familia si se encontraban bien.

_ ¿Todos se encuentran bien?— preguntó Lynn señor.

_ Si.... ya me siento mejor.— respondió Lana.

El resto estaban asqueados, ya que parte del vómito les había caído encima, Lynn padre fue a un pequeño sendero que había cerca de ahí y estacionó el auto para limpiar el vómito del parabrisas. Para eso usaron muchas toallas desechables.

_ ¡Esto es asqueroso!— se quejó Lola.

_ Vamos, esto no es tan malo. No te pongas así.— le respondió Lana.

_ Para ti es fácil decirlo, ya que fuiste tú quien vomitó en el parabrisas.— le reprochó Lola a su gemela.

_ Ya dejen de pelear entre ustedes y terminen de limpiar el auto.— ordenó Lori a sus hermanas.

Todas siguieron limpiando el auto par así seguir con su camino. En eso una de las hermanas escuchó algo, miró de dónde provenía ese ruido. Vio que se trataba de un venado, a lo que esa hermana, la cual era Lily, se dirige a sus demás hermanas.

_ Chicas miren, es un venado.— le dijo la menor a sus hermanas.

_ Es un lindo venado, espera un momento, tengo algo que le puede gustar a él.— dijo Lana a Lily.

La rubia de gorra roja fue a la van y de ahí tomó algo, el cual era un paquete de galletas. Tomó una y se acercó al venado lentamente.

_ Ven amigo, no te haré nada, solo quiero darte esta deliciosa galleta.— dijo Lana al venado.

Por su lado el herbívoro le llamó la atención lo que Lana traía en sus manos, a lo que se acercó cautelosamente. Mientras se acercaba fue que Lana se dirige a Lily.

_ Veo que quiere la galleta. Ven Lily, dale la galleta al venado.— le dijo Lana a Lily.

_ No quiero hacerlo. ¿Y si me muerde? — se negó hacerlo la rubiecita.

_ Vamos, yo estaré contigo, no te hará nada. Solo dale la galleta y él se la comerá.— le dio confianza Lana a Lily.

Lily tomó la galleta que Lana sostenía en su mano, luego se la dio al venado, quien comenzó a masticar, le había gustado, a lo que Lily le ofreció otra galleta.

Algunas de las hermanas que estaban limpiando la van se dieron cuenta de lo que hacían las dos rubias.

_ Ooh que adorable, le están dando de comer a ese venadito.— comentó Leni con ternura.

_ Literalmente lo es, debo de sacarle una foto para el recuerdo.— dijo Lori a Leni.

Lori fue a buscar su celular para tomar una foto y guardarla. Ya con su celular en manos se acercó a donde estaban sus hermanas y el venado. Cuando enfocó a las dos rubias y al animal Lori no se dio cuenta de que el flash estaba activado. Lo que provocó que el venado se asuste y ataque a las hermanas.

Lana actuó rápido y se llevó a Lily para evitar que le hiciera algo. Pero el venado no se quedó ahí y fue tras de ellas. Cuando estaba por atacar fue golpeado por Luna, quien había recogido una rama. Pero el venado la atacó golpeándola con una de sus patas.

Las demás fueron a detener a ese venado, Luan, Leni, Lucy, Lola y demás intentaron alejar al animal, pero lo único que conseguían era ser golpeadas. Lori por su cuenta seguía tomando fotos de lo sucedía. Rita vio que su esposo se estaba escondido y asustado.

_ ¡No te quedes ahí y ve a salvar a tus hijas de esa bestia!— exclamó Rita molesta.

Lynn señor acató lo que su esposa le dijo, se acercó con miedo para así espantar a ese venado y evitar que sus hijas salgan lastimadas. Pero lo único que consiguió fue que el venado le diera un golpe en los bajos, y otros más de recuerdo.

Ya con el señor Lynn fuera de combate el venado continuaría con lo suyo, sin embargo había una hermanas más que aún no había luchado con el venado. Se trataba de Lynn.

La castaña se puso en pose de pelea para así darle su merecido al venado por lo que había hecho. Se fue al ataque y de una tacleada derribó al animal, al cual lo estaba sometiendo a una llave de lucha.

_ ¡Ya verás maldito hijo de Bambi! ¡Te mataré y luego de cortaré la cabeza y la pondré arriba de una chimenea!— exclamó molesta Lynn.

Tras varios segundos de retener al animal Lynn lo suelta, a lo que el venado no le quedó de otra que huir. Lynn se aseguró de que el venado se fuera y no volviera. Lori tomó una última foto, había tomado muchas fotos de todo el altercado que hubo por culpa de ese venado.

_ Espero que hayas tomado suficientes fotos. Ya estoy cansada, la van está limpia, larguemonos de aquí.— pidió Lynn en irse de ahí.

_ Está bien hija, solo déjame buscar mis llaves y....

El señor Lynn dejó de hablar debido a que buscaba sus llaves, las cuales no las encontraba en los bolsillos de su pantalón. Revisó en todos y nada.

_ Oh no, mis llaves, no las encuentro. Debieron de caerse cuando el venado me atacó.— dijo el señor Lynn.

_ Genial, sin las llaves no podemos encender la van.— comentó Luna molesta.

_ Descuiden, trataré de encender la van sin las llaves. Mientras tanto ustedes traten de buscarlas por si no logro encender la van.— ordenó el patriarca de la familia.

Así las chicas hicieron caso y buscaron las llaves de la van, cada quien buscaba por un lado. Lynn señor por su lado trataba de encender la van desde el cableado del volante, usando un encendedor para ver mejor. Lana se acercó a su padre para así ayudarle a encenderlo.

_ Papá, si quieres puedo ayudarte. Así se nos hará más fácil encenderlo sin necesidad de las llaves.—  se ofreció Lana en ayudar.

_ Descuida cariño, he hecho esto cuando olvidaba las llaves de la vieja van que teníamos. Es más, encontré el cable para así encenderlo.— respondió el viejo Lynn.

Unió dos cables los cuales en lugar de encender la van lo único que hizo fue encender la alarma. Las chicas que estaban cerca del auto se asustaron y se taparon los oídos. Lynn señor al ver lo que hizo cerró la puerta y luego fue a apagar la alarma, arrancó la bocina que hacía que la alarma se encienda.

_ Listo, problema resuelto. No pasó nada grave.— dijo el señor Lynn.

Cuando cerró el capó del auto lo hizo con mucha fuerza, lo que hizo que el encendedor que estaba adentro cayera al suelo, la flama de la misma empezó a quemar un plástico protector del asiento del conductor, la cual se propagó rápidamente cubriendo de fuego el interior del auto.

_ ¡¡Fuego, el auto se está quemando!!— gritó Lori del pánico.

Los demás escucharon lo que Lori grito y vieron que en definitiva la van se estaba quemando. Las chicas se alejaron del auto por temor que este pudiera explotar o algo similar. Pero en eso se acordaron que adentro había algo importante.

_ ¡El dinero! ¡El dinero sigue adentro del auto!— gritó Lola sobre el dinero.

Lynn al enterarse de que el dinero de ellos estaba adentro trató de sacarlo, intentó abrir la puerta del auto, pero esta estaba cerrada. Hizo lo mismo con las demás y nada, también estaban cerradas.

_ ¡Rápido, denme algo para romper los cristales!— pidió Lynn algo para romper.

Todos trataban de buscar algo para romper los cristales del auto y sacar el dinero. Dentro del auto el fuego ya estaba consumiendo la maleta en donde estaba el dinero. Por su lado los Loud trataba de buscar lo que fuera para romper los cristales, ya sea una roca o una rama, pero no había ni una.

El fuego ya había consumido el auto desde adentro, y se expandió desde afuera. Lynn al ver que no encontraban algo para romper los cristales en un acto de desesperación intentó hacerlo con sus manos, pero era inútil, lo hizo con sus codos y apenas logró hacerle una grieta.

Lisa vio que el fuego había llegado hasta la parte baja del auto. Esto hizo que abriera sus ojos del asombro.

_ ¡Lynn aléjate de ahí el auto va a explotar!— gritó Lisa a su hermana mayor.

_ ¡No pienso irme sin el dinero, lo necesitamos!— exclamó la deportista.

Luna y Leni se acercaron a Lynn para así tomarla de los hombros y alejarla del auto. Justo cuando se alejaron el auto explotó, lo que antes era la van familiar ahora era una gigantesca bola de fuego. El resto de la familia se habían tirado al suelo segundos antes de la explosión.

Vieron como el auto estaba todo incinerado, no había nada que se pudiera salvar del auto. Todo se había quemado, inclusive el dinero que aún les quedaba de los 10 millones que tenían. Todo se redujo a cenizas.

_ No tenemos auto, no tenemos pertenencias, no tenemos dinero. Literalmente no tenemos nada.— dijo Lori de lo que veía.

_ Si esto es una broma del destino déjenme decirles que no es gracioso.— comentó Luan.

_ ¡Todo lo que hemos pasado y sólo nos faltaba esto! ¡¿Que hicimos para merecer esto?!— gritó Lola al cielo.

_ El destino es cruel a veces, y cuando hace de las suyas le gusta ver el sufrimiento de los demás.— mencionó Lucy.

_ Tranquila chicas, sé que esto no es bueno, pero no hay que rendirnos. Debemos de seguir y ya veremos que haremos para sobrevivir.— dijo Rita calmando a sus hijas.

Las chicas por su lado hicieron caso a lo que dijo su madre, de que tendrían que seguir adelante y ver como le harán para sobrevivir ahora que ya no tienen dinero. Por lo que decidieron en salir del sendero de ese bosque en donde estaban.

Justo cuando empezaron a caminar fue que Lana vio algo en el suelo.

_ Papá mira, en donde fueron a caer las llaves.— mostraba Lana las llaves de la van.

Absolutamente todos no podían creer que las llaves habían caído literalmente cerca de ellos y ninguno pudieron verlas. Sin duda esto era un cruel broma según ellos.

Tras esto la familia Loud se las tuvieron que arreglar para mantenerse ahora que ya no tenían dinero. Estuvieron así durante unos cuantos años más hasta que decidieron en regresar al lugar que solía ser su hogar anteriormente.

Fin del flashback.

_ Y fue así que nos quedamos sin dinero. Luego tuvimos que hacer lo que podíamos para sobrevivir hasta que decidimos volver a nuestra casa.— terminó de contar Lori.

Lincoln ahora ya estaba enterado el como su ex familia habían quedado en la ruina, de tener millones de dólares a tener absolutamente nada. Sin duda esto era la prueba definitiva de que la vida no perdona a nadie quien haya hecho alguna atrocidad.

Estuvo por unos segundos callado pensando en lo que les pasó a esas personas que una vez les llamó familia. Cuando pasó al rededor de unos 15 segundos fue que Lincoln inhaló profundamente y luego exhaló el aire en sus pulmones para así soltar una risa que podría ser comparable a la del Guasón.

Ya que para él esto era de lo más chistoso que haya escuchado en su vida. Sin duda alguna su ex familia había superado sus límites en lo que hacer caos se refiere. Los Loud por su lado veían a Lincoln reírse como un desquiciado, unos lo veían como caras de extrañes y otros con disgusto, y una sola lo veían con rabia pura.

_ Esperen, ¿Lo que les pasó fue enserio? Pues déjenme reírme más fuerte. ¡JAJA JAJAJAJA!— volvió a reírse más fuerte el albino.

_ ¡¿Crees que es muy gracioso los que nos pasó?! ¡Tuvimos que lidiar por muchas cosas solo para que tú te reías de nosotros!— gritó molesta Lynn.

La castaña soltó un golpe de la furia que sentía en estos momentos al ver a Lincoln reírse de ellos. Lincoln vio que Lynn estaba por golpearlo, en eso detuvo su golpe rápidamente, Lynn se sorprendió al ver lo que Lincoln hizo, a lo que este le torció el brazo para mantenerla a raya.

_ ¿Que pasó? ¿No que eras la gran Lynn Loud Jr? Me das penas.— se burló Lincoln de Lynn.

La deportista trataba de soltarse del agarre de Lincoln, pero este último ejercía más presión en el brazo de Lynn. En eso alguien se acercó para así tratar de que Lincoln suelte a la deportista.

_ ¡Suelta a mi hermana en este instante!— gritó esa persona a Lincoln.

El peliblanco vio quien se había acercado a él y a Lynn. Lincoln la observó bien y hasta ahora se dio cuenta de esa persona, la cual era una joven rubia nomas de unos 20 años.

Pero al verla mejor fue que sus ojos se abrieron de la sorpresa. No podía creer quien era ella. Sus ojos, los reconocía mejor que nadie, debía de estar alucinando. Fue tanta su sorpresa que soltó a Lynn. La castaña se quejó por el dolor de su brazo.

_ ¿Lily? ¿En verdad eres tú?— preguntó Lincoln aún sorprendido.

_ ¿Cómo es que sabes mi nombre? ¿Y quién eres tú?— preguntó la rubia.

_ Soy yo Lily, Lincoln. Tu hermano mayor, ¿No me recuerdas?— respondía Lincoln.

_ ¿Mi hermano mayor? ¿Acaso esto es una broma o es verdad lo que dice él?— preguntaba Lily a su familia.

_ No lo escuches Lily, él está mintiendo. Solo quiere engañarte.— le dijo Lynn a Lily.

_ Es verdad Lily, yo soy tu hermano mayor. Yo solía jugar contigo cuando eras una bebé, te cambiaba el pañal, te daba de comer, te leía un cuento para dormir. Incluso recuerdo cuando mi amigo Clyde y yo te cuidamos los dos solos.— contaba Lincoln los momentos que tuvo con Lily.

La joven estaba incrédula de lo que Lincoln le había dicho, de que él estuvo con ella cuando era una bebé. No sabía que decir, pero viendo mejor a Lincoln a su cara fue que trató de hacer memoria, de recordar algo que le haga recordar a Lincoln.

No fue que en lo más profundo de su mente pudo ver alguien con una camisa naranja, pantalones azules y zapatillas blancas. Pero lo más destacable es ver un distinguido cabello blanco. Además de una voz que le decía algunas cosas.

"Este es Ace Savvy, y es mi superhéroe favorito" "Nos divertiremos mucho juntos Lily" "Así es Lily, yo soy tu hermano mayor, Lincoln"

Tras recordar esos momentos de cuando era una bebé fue que vio nuevamente a Lincoln y las lágrimas cayeron de los ojos a Lily, de ver nuevamente a su hermano mayor.

_ ¡Lincoln!

Así Lily abrazó a Lincoln y este le devolvió el abrazo. Tantos años, años en los cuales Lincoln nunca supo de su hermanita Lily, no sabía si algo le habría ocurrido estando con su ex familia. Pero ahora ella estaba ahí, con él y ahora ya era toda una señorita hecha y derecha.

_ No sabes como me alegra verte nuevamente Lily. Solo mírate, has crecido mucho, ya no eres para nada esa adorable bebé que solía cargar en mis brazos.— dijo Lincoln viendo a su hermanita.

_ Y tú ya eres todo un hombre. Eres más alto que papá.— dijo Lily a Lincoln.

_ Bueno, bueno, ya fue suficiente. Ahora es momento que respondas a nuestras preguntas. ¿Cómo es que este edificio está en el lugar donde solía estar nuestra casa? Y más que nada, ¿Cómo le hiciste para sobrevivir sin nosotros?— preguntaba Luna a Lincoln.

_ Cuando ustedes me dejaron abandonado tuve que hacer lo que pude para mantenerme. Vendí todo lo que ustedes dejaron tirado. Luego me las arreglé para conseguir un trabajo, fue así hasta que conocí una persona importante para mí y con él hicimos el proyecto para hacer este hotel.— contaba Lincoln lo que ha hecho.

_ ¿Y por qué te pusiste de apellido Jonhston?— preguntó Rita.

_ Esa pregunta es fácil de responder, señora Loud. Y es que el abuelo se enteró de lo que ustedes hicieron, por lo que él se hizo cargo de mí y gracias a la ayuda de un amigo fue que me dio el apellido de él, y déjenme decirles que el abuelo fue más figura paterna que ustedes dos. El abuelo me apoyó en todo, incluso me apoyó con la idea de hacer el hotel. Todo lo que soy al día de hoy es gracias a él.

_ Y si se preguntan sobre los abuelos, ellos aún siguen vivos y siguen viviendo en el asilo de ancianos Sunset Cannon, los visito cada fin de semana.

_ Ahora que ya saben que hice yo y de lo que a ustedes les pasó me toca a mí preguntarles. ¿Que es lo que quieren ustedes?— preguntó Lincoln a los Loud.

_ Queremos 12 de tus mejores habitaciones. Que tengan buena vista y queremos servicio a la habitación y un tratamiento de la mejor calidad.— respondió Lola.

_ ¿A si? Díganme los motivos, razones, y circunstancias por las cuales yo les tendría que darles habitaciones a todos ustedes.— preguntaba Lincoln.

_ Ya que el lugar que está este edificio aún le pertenecía a papá. Por lo cual es una invasión de terreno. Por lo tanto eso nos da derecho a reclamar lo que aún nos pertenece.— alegó Luan.

_ Lo que dijiste es cierto. De qué el lugar le pertenecía al señor Loud. Pero ya dije, le pertenecía, ya que él dejó esta casa abandonada como si fuera basura, y por ende también dejó tirado muchas cosas, como lo son los documentos de la casa.

_ Y con la ayuda de mi socio pudo hacer posible que yo fuera dueño de la casa y el terreno. Por lo que prácticamente el lugar es todo mío y sin que nadie me lo pueda quitar. Así que ¡Ja!— respondió el albino.

En eso aparecieron los hijos de Lincoln, los cuales se acercaron a su padre para pedirles algo.

_ Papi, ¿Podemos ir a la piscina a jugar?— preguntaba Linka a su padre.

_ Claro, pero si comieron antes tendrán que esperar unos minutos antes de nadar.— dio permiso Lincoln a sus hijos.

Los niños se fueron gritando de alegría de que su padre les haya dado permiso de nadar en la piscina. Los Loud vieron lo que había pasado, por lo que las preguntas no faltaron.

_ ¿Quienes eran esos niños?— preguntó Lucy.

_ Ellos son mis hijos, ¿Acaso no le ven el parecido conmigo? Tienen incluso en cabello blanco como yo.— respondió el albino.

_ Son tan adorables, parecen unos conejitos.— dijo Leni conmovida por sus sobrinos.

_ Vaya, quien diría que tú y Ronnie Anne tendrían trillizos. Los felicito.— comentó Lori.

_ De hecho Lori, Ronnie Anne no es la madre de mis hijos. Mi esposa es otra mujer, la cual es el amor de mi vida.—le aclaró Lincoln a la rubia.

En eso apareció Liberty, quien se acercó a Lincoln para preguntarle algo.

_ Amor, ¿Vas a regresar pronto a la oficina? ¿Y quienes son ellos?— preguntaba Liberty a su esposo.

_ Enseguida regreso, y sobre ellos, me estoy encargando de ellos. Espérame en la oficina que ya estaré contigo amor.— le dijo Lincoln a su esposa.

La albina hizo lo que su esposo le dijo, regresó a la oficina de este para seguir con el papeleo que tenía. Pero antes le dio un beso en su mejilla y luego fue al elevador para ir a la oficina.

_ ¿Quién era ella?— preguntó Lisa.

_ Ella es Liberty White, mi esposa y madre de mis hijos.— respondió Lincoln.

_ ¿Tu esposa? Pe-pe-pero se supone que tú y Ronnie Anne serían novios, y ella tendría que ser tu esposa y no esa mujer que se parece a ti.— le reclamó Lori a Lincoln.

_ Y dale con eso, cuantas veces te lo he dicho Lori, y tal parece que no entiendes, así que te lo diré solo una vez más. Ronnie Anne y yo nunca fuimos novios, yo nunca fui el tipo de chico que Ronnie le gusta. Pese a ello seguimos siendo amigos hasta nuestros días.

_ Aparte que ella está felizmente casada y tiene hijos con el hombre que se casó.

_ Y volviendo a lo que estábamos. Será mejor que se larguen de aquí. No pienso tenerlos aquí en mi hotel, no después de lo que me hicieron ustedes hace años. Así que les pido que se vayan de aquí.— pedía Lincoln que se fueran.

_ No nos puedes hacer esto Lincoln, somos familia, eres nuestro hermano.— decía Lana al peliblanco.

_ Ustedes dejaron de ser mi familia cuando me dejaron emancipado. Supe desde ese instante que la familia no es aquella que comparte vínculos sanguíneos, sino aquellos que están para ti y nunca te abandona, cosa contraria a ustedes, quienes no dudaron ni un segundo en dejarme mientras ustedes vivían la gran vida.

_ La única familia que tengo yo son mis hijos, mi esposa, los abuelos y mis amigos. Ellos son los que considero familia para mí. Así que les vuelvo a pedir que se vayan, y a ver si tienen "suerte" en buscar un lugar donde dormir, o esperen, así es, no tienen nada con que pagar.

_ Ahora si no les importa yo regreso a mi oficina, ahí está la salida para que salgan. Y si ustedes no se han ido llamaré a seguridad para que los saquen de aquí a patadas.

Dicho eso último Lincoln se dispuso a regresar a su habitación para seguir con el papeleo que tiene en su oficina con su esposa Liberty. Cuando estaba por subir al elevador fue detenido por alguien. Y ese alguien era nada menos que Lily.

_ Lincoln, no sé qué hicieron mis hermanas y padres contigo. Pero por favor, déjanos quedarnos aquí, no lo hagas por ellos, hazlo por mí. Sin importar como sea ellos, yo lo seguiré queriéndolos, así como a ti. Solo te pido eso, que nos dejen estar en tu hotel.—pedía Lily no echarlos del hotel.

Lincoln vio a su hermana menor y el como ella le rogaba que los dejen quedarse en el hotel a ella y a sus hermanas y padres.

El albino tenía algo fijo en su mente y era más que claro, no quería ver a esas personas que alguna vez llamó familia. No quería volver a verlos, no después de lo que le hicieron, no sólo por lo de la mala suerte, sino de todo en general. Ya que de todo eso Lincoln tuvo que pagar los platos rotos y casi en su mayoría no recibía un agradecimiento de ellos.

En pocas palabras no quería verlos ni en pintura, y los quería tal como lo hicieron hace años, lejos de él. Pero al ver a Lily y la cara que ella tenía lo puso a pensar. De todos ella fue la única que nunca le hizo algo, aunque se puede justificar ya que ella en ese entonces aún era una bebé y no era consciente de lo que hacía, solo imitaba lo que sus demás hermanas hacían.

Lincoln estaba pensando todo detenidamente, por un lado quería lejos a esos traidores que le dieron la espalda sin dudarlo dos veces. Pero por el otro lado Lily le pedía que los dejen quedarse por un tiempo en el hotel, que no lo haga por ellos, sino por ella. Ya que se puede notar que ella los quiere a pesar de lo que ellos hicieron tiempo atrás.

Tras pensarlo más a profundidad fue que Lincoln había llegado a una conclusión. Una que no sólo haría feliz a Lily, sino que también le satisfacería a él mismo, una decisión que sin duda lo disfrutaría con todo su ser.

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Hola amigos, ¿Cómo están? Espero que bien.

Bueno, aquí la segunda parte en donde se nos cuenta que le pasó a la familia Loud. La cual todo lo que habían hecho para tener la vida que querían de vino abajo como una torre de domino. Donde el karma hizo lo suyo.

En el siguiente capítulo se viene una parte que algunos ya sabrán cuál es, una que muchos disfrutaron leerla y que lo volverán a hacer, sólo que mejor.

Solo espero no tardar mucho, ya que este capítulo fue más largo que el anterior. Este tuvo más de 14 mil palabras. No fue fácil escribir este capítulo, no por lo extenso, sino porque cuando quería avanzar siempre había algo o alguien que me interrumpía y me arruinaba la inspiración que me llegaba en ese momento. Espero entiendan.

Ya sin nada más que agregar los dejo con mis angelitos para despedir este capítulo.

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