POV Marcy

El tráfico en Miami nunca ha sido fácil, tenía el presentimiento de que este lugar tenía más coches que habitantes. Estábamos detrás de una enorme fila de autos donde las personas estresadas pitaban sin parar. Tuvimos exactamente 15 minutos para llegar a la oficina, hoy por alguna razón se nos pidió por ser puntual. Según los últimos rumores escuchados, un nuevo presidente se presentaría, le di gracias a Dios por eso, tener que aguantar a ese viejo como jefe era demasiado aburrido.

Por supuesto no teníamos idea de quien ocuparía su lugar, pero no creo que podría ser peor.

Amelia estaba atenta hacia donde nos movíamos, Ivy solo leía sus informes desde el asiento trasero.

-Hoy este lugar parece un infierno- dijo Amelia algo molesta.

-Amelia, no digas eso, por favor - Ivy regañó a Amelia, tuve que suprimir una sonrisa por lo que dijo.

Conocimos a Ivy, tan pronto como comenzamos a trabajar en Industrias Boonchuy, Ella tenía un puesto como asistente en la edición de la publicidad.

Nos llevamos bien desde el primer día, tanto así que después de unos meses decidimos alquilar un apartamento en el centro de Miami. Ivy era una chica de pueblo, muy religiosa, pero era tan dulce y comprensiva. Ella sabía cómo llevábamos nuestras vidas, pero nunca dijo nada, al contrario nos apoyaba.

Después de 10 minutos nos pudimos mover, agradezco la habilidad de Amelia al volante, nos apresuramos a entrar al edificio, al perecer nadie se dio cuenta de nuestro retraso.

Todo el mundo estaba eufórico con la noticia de la presidencia, era al menos una controversia.

-¿Soy yo o todo el mundo está inquieto? -dijo Ivy mientras ponía sus cosas en el escritorio.

- No es tu impresión Ivy, todo mundo está nervioso.

-No se quien estará a cargo, pero quien más tendrá que soportar a la bestia seré yo. -Dije molesta.

-He oído que es una mujer, es algo arrogante.

-¡Por Dios! ¡Espero que no. He tenido lo suficiente con el viejo acosador por años.

-Cielos, él es realmente repugnante.

Hablamos durante unos minutos hasta que Gus interrumpió.

-Es tiempo chicas vamos a conocer a nuestra nueva ama -dijo riendo.

-Recé mucho para, quien sea que es, sea alguien bueno. -menciono Ivy con una sonrisa tímida.

-Espero y Dios te escuche, Ivy.

Caminamos a la sala de conferencia donde el sector administrativo estaba, todos estaban murmurando. Era un fastidio trabajar en ese lugar, era como estar en la selva cada día, tragando y matando por el poder, claro en el buen sentido figurativo.

-Odio llevarme con la gente del sector financiero. -Dije en un gesto de desagrado.

-Hey! Yo soy del sector financiero. -Dijo Gus.

-Menos tú. -Le dije sonriendo.

Gus era supervisor del sector financiero. El primer día que entré empezó a coquetear conmigo, pero nunca lo trate mal por que no ha tratado de cruzar la línea. Me molestaba muchas veces pero no me importaba, si algún día consideraba la oportunidad de estar con alguien en una relación pensaría en él.

-Gracias Marcy, te vez hermosa hoy. -Dijo sonriendo.

-Gracias. -Sonreí

Miré a Amelia que fruncía las cejas como "ugh no me hagas vomitar" sonreí frotando su brazo.

Escuchamos el sonido de la puerta, y pronto nos encontramos con Marco. Después todas las murmuraciones fueron desapareciendo hasta que la habitación quedo en total silencio.

Buenos días señoras y señores, creo que todos saben el motivo de esta reunión, seré breve me estoy retirando como director de la industria Boonchuy, terminé mi ciclo de trabajo con mucho éxito, agradezco a todos los que han trabajado conmigo, y hacer crecer este importante patrimonio en Miami, pero como he dicho ha terminado este ciclo y es hora de dar paso a una nueva generación.

-Ya era hora, yo no quería trabajar para un anciano el resto de mi vida -Escuché Amelia susurrar, tuve que reprimir una sonrisa.

-¡Amelia! -La regañe.

-... Les presento a la nueva Directora, es una mujer muy competente y capaz de aprovechar nuestra empresa, conozcan a Anne Boonchuy.

Oí la voz de Marco en el fondo, seguí la mirada de Amelia, miraba al centro de la habitación donde estaba mi jefe, y no podía creer lo que veía.

Sentí toda la sangre recorrer mi cuerpo, mi respiración era tan lenta que podía oír mis latidos. Era ella, Anne Boonchuy era la mujer a la que le bailé anoche. Amelia me lanzo una mirada sorprendida, sostuvo mi brazo para que no me cayera.

-¿Qué pasa Marcy? - Oí susurrar.

Estaba sin aliento, mis ojos quedaron sobre la hermosa mujer que estaba junto a Marco, llevaba una falda negra, le llegaban hasta las rodillas, un traje negro que la hacía muy atractiva, su cabello estaba atado en una cola elegante.

Y como la noche anterior, su maquillaje era razonable, resaltaba más sus ojos y sus labios. Ella tenía una postura seria y autoritaria y misteriosa así....

Di unos pasos para salir de la habitación.

Camine hasta tocar la pared para que llegara el aire en mis pulmones, Amelia se acercó a mí.

-¿Puedes decirme qué te pasa? -Preguntó preocupada.

-¡Es ella Amelia! La mujer... -dije nerviosa.

Me miró como si estuviera loca.

-¿Qué mujer Marcy?

-La del club, ¡para la que bailé anoche! Anne Boonchuy mi nueva jefa.

-¡Qué! Oh Dios mio, te han jodido. -Dijo asustada.

-Lo sé. No pudo ser peor, tantas personas en este mundo, ¿tiene que ser justo mi jefa? Oh Dios mío, se dará cuenta que soy Darcy, ella va a despedirme, ¡estoy jodida Amelia!

-¡Calma Marcy! -Hablaba mientras me sostenía de los hombros.

-No se enterará, ¡pensemos positivo! Marcy no tiene nada que ver con Darcy, por lo menos de la manera y forma de vestir.

-Lo va a averiguar, ¡Y voy a perder mi trabajo Amelia!

-Ella no lo hará, no será así. Incluso si se descubre, ella no tiene que ver con tu vida fuera de aquí.

Negué con la cabeza caminando de un lado a otro sin parar.

-¿Qué esta sucediendo chicas? ¿Por qué han salido de la sala? -Ivy susurró.

-Marcy está teniendo un ataque. -Amelia hablo con agonía.

Ivy preocupada se acercó a mí, acariciando mi espalda.

-¿Qué te pasa Marcy? Estás blanca como una hoja, trae un poco de agua Amelia.

La vi alejarse para traerme el vaso con agua.

-Dime lo que tienes. -Ivy Preguntó de nuevo con una cara de preocupación.

-¿Recuerdas de la mujer que te hablé esta mañana en el desayuno? ¿A la que le bailaba sensualmente?

Ivy asintió, arreglando un mechón de mi cabello.

-Es Anne Boonchuy, nuestra nueva jefa.

Vi los ojos de Ivy agrandarse, "Jesucristo" salió de su boca.

-¿Y si se entera de quien soy Darcy? Perderé mi trabajo, será el final.

La pequeña me dio un caluroso abrazo tratando de consolarme y Amelia llego con el vaso con agua, me tomé todo el líquido transparente y trate de calmarme.

-Pensemos positivamente chicas, sin duda alguna Anne bebió la noche anterior, sin embargo, Marcy, tu otro lado no tiene nada que ver con tu vida diaria. -Dijo Ivy en voz baja. -Darcy y Marcy son dos personas totalmente diferentes, al menos esa es mi opinión.

-¡Quién diría que esa mujer frecuenta discotecas de striptease! -Dijo Amelia riendo.

-Tiene razón Ivy, voy a tener cuidado en que no me descubra.

-Sería bueno que no tengas tus ataques de pánico cada vez que la veas.

-¡Gran idea! -sonreí débilmente.

Estábamos las tres conversando en el balcón central hasta que vimos a todos dejar la sala de reuniones, probablemente la presentación había terminado.

-Bueno chicas, volvamos a nuestros puestos. -habló Amelia.

Ivy asintió y se alejo de mi lado.

-Deséenme suerte, chicas.

Las dos me miraron con cariño, yo sabia que podía contar con Amelia y Ivy, nunca me dejaron sola. Intercambiamos un abrazo, luego nos fuimos a nuestros debidos puestos. Estaba muy nerviosa, estaba claro que no había manera de ocultarlo, después de todo yo era el brazo derecho de la mujer dentro de la empresa. El pánico de ser descubierta por ella perturbaba mis pensamientos de forma grotesca, podía sentir mis manos sudorosas y una molestia en el estómago con cada paso que daba a la habitación.

Subí a la planta superior donde sería su oficina, me fui a mi mesa que estaba al lado de su oficina. Ella estaba adentro hablando con Marco probablemente. Minutos después mire al señor de pelo blanco salir de la habitación y se dirigió a mí.

-"¡Oh Marcy! déjame presentarte a tu nueva jefa" -Dijo sonriendo.

Cerré mis ojos por una fracción de segundo en el que podría crear mil y un motivos por ahora y les garantizo que ninguno era agradable. Me levanté de mi escritorio con una débil sonrisa. El hombre me miró de abajo hacia arriba como todas las mañanas lo hacía. Llevaba puesto un vestido azul turquesa ceñido a mi cuerpo, de una manera cómoda y elegante. Mi pelo estaba lacio y suelto de forma que caía detrás de mi espalda.

Entré en la habitación, podía escuchar mi corazón latir en mis oídos, me estaba muriendo. Miré que estaba apoyada en una mesa. Alcé la vista y la miré fijamente.

Pos Dios, era hermosa. Anne Boonchuy era una mujer digna para una portada de revista, ahora la podía ver más de cerca y sus fuertes características. Me observo en silencio y yo hacia lo mismo.

"Ella me descubrirá, no, Dios no va a dejar que eso suceda". -Me dije a mi misma.

-Anne, ella es su ayudante aquí en la empresa, la ayudará en todo lo que necesite. -El hombre hablo dando una breve introducción de mí. -Bueno, las dejaré a solas, espero que se lleven bien.

Marco habló mas rápido de lo que pensaba, ahora estaba a solas con ella.

Ella me miró de manera evaluativa, me sentí atrapada, y ella se puso de pie, alisándose el traje caro, caminando hacia donde yo estaba, haciendo que mi corazón se acelere.

-¿Cómo se llama señorita? -Ella preguntó cortésmente, Anne tenia una hermosa voz.

-Mi nombre es Marcy Wu.

-Un placer, señorita Wu, usted ya lo debe saber, pero yo me llamo Anne Boonchuy. -Ella dijo tendiéndome la mano en un saludo cortés.

Apreté su mano suave por unos segundos, sintiendo lástima porque mi mano estaba sudando por tanto nerviosismo.

-Un... un placer. -tartamudee.

Ella me miro de manera divertida, con el ceño fruncido y en una expresión de desconcierto

-¿Se siente bien? Está muy pálida señorita, ¿Quiere tomar asiento? -Ella dijo tirando de una silla. -Le ofrezco un vaso con agua, si lo prefiere.

-Estoy bien señora, solo estoy desconcertada. Pero no se preocupe.

Ella asintió con la cabeza, y me dio el vaso con agua de todas maneras.

-Las personas se sienten desconcertadas al hablar conmigo, pero ninguna de ellas se ha enfermado señorita Wu. -dijo con seriedad.

-Lo siento Sra. Boonchuy, no estaba en mis planes.

-¿Te sientes lo suficientemente bien para trabajar hoy?

Asentí con la cabeza rápidamente, dejando el vaso con agua en su escritorio.

-¡Genial! Así que comencemos, serás mi nueva socia aquí. Yo creo que nos tenemos que conocer mejor. -Ella dijo sentándose en su lugar.

La señora Anne Boonchuy como así decidí llamarla, me explicaba perfectamente como trabajaba, por lo que me di cuenta que era una mujer demasiado centrada en su trabajo, no le gustaba mucho la intimidad con sus empleados, era un tanto reservada. En varias ocasiones me perdía de lo que decía por admirar su extraordinaria belleza, esta mujer fue tallada por los ángeles, no tenía otra explicación. Su mirada era tan intensa, pero era diferente de la noche anterior, sus iris eran ahora un fascinante color verde claro. Su pose autoritaria le hacia parecer tan sexy y atractiva, me pregunté cuantas personas caerán a sus pies todos los días. Por la forma en que me vio bailar la noche anterior estaba segura que Anne Boonchuy era lesbiana, pero todavía no podía afirmar eso ahora. Podría haber sido solo una curiosidad, no, no esta mujer no parecía curiosa o confusa. Tenía un aire demasiado decidido, no confundido.

-Me gustaría que siempre estuviera al tanto de mis negocios señorita Wu, quiero decir ¿Esta al tanto de todos los detalles, no? -Me pregunto, haciendo que saliera de mis pensamientos.

-Si señora, lo haré.

-Eso es todo por ahora, puede retirarse. -Dijo enderezando algunos papeles.

-Muy bien, cualquier cosa solo se comunica conmigo, voy a estar a su disposición señora. -Hablé retirándome de la habitación.

Una vez poniendo los pies fuera de la oficina mi corazón empezó a latir en un ritmo normal. Me dirigí a mi escritorio con el pequeño cuaderno en mis manos, escribiendo todas las explicaciones importantes. Me quedé mirando a la mujer a través de la pared de cristal entre nosotras. Y di gracias a Dios que no haya notado nada. Una especie de alivio repentino se apoderó de mí, mi trabajo estaba seguro ahora.

Yo quería saber más de la misteriosa mujer que ahora era mi jefa, coloqué su nombre en el poderoso conocedor de todas las cosas, como lo llamaba Amelia, Google.

Encontré muchos artículos sobre ella, Anne Boonchuy era una persona importante en la rama empresarial, ha ganado muchos premios y fue nada más que la hija sucesora de Michael Boonchuy, propietario de Industrias Boonchuy que tenía otras sucursales en América Latina hasta Europa. Vi que ella vivió mucho tiempo en Paris debido a su trabajo. Esa mujer era tan reservada que no había nada de su vida personal. Pase el ratón por otra ventana para que se abriera y me salió ella con una mujer hermosa. Bajo una descripción "Anne Boonchuy y su compañera en la inauguración de Industrias Boonchuy en Londres". Parecía una foto intima, la mujer alta y delgada, agarrada al brazo de Anne y con una sonrisa.

-¿Qué estas haciendo? -he oí la voz de Amelia haciéndome saltar de mi lugar.

-¡Por Dios! -Dije poniendo una mano sobre mi pecho. - ¡Que sorpresa Amelia! -Ella se echo a reír en mi cara.

-¿Qué estas haciendo mal para tener tanto miedo? -Me pregunto sin dejar de reír.

-Nada. -Hable minimizando la página web.

Amelia me miro con una de sus cejas levantadas, afirmando que estaba mintiendo.

-¡Esta bien! Estaba investigando un poco sobre Anne. Pero no tuve mucho éxito. -Hablé en desanimo.

-Estas muy interesada en esa mujer ¿no te parece? -Su tono malicioso era evidente.

-¿Yo? ¡No! Sólo quiero saber quien es mi jefe ahora.

-No me engañes Wu. -Ella dijo cínicamente -¿Hablaste con ella?

-Si, casi me desmayé en su oficina, pero aparte de eso todo está tranquila, no noto nada. -suspire de alivio.

-¡Que bueno! sería al menos cómico que te llevaran a la ambulancia después de salir de su oficina. -Amelia volvió a reír.

-¿Por qué te encanta meterte conmigo?

-Porque me gusta chancho. -Ella dijo sonriendo. -Ahora me retiro.

Asentí con la cabeza y Amelia se dirigió a su despacho, observé la foto de Anne y Alexa. Me preguntaba si podrían ser algo más, o tal vez no debería de preocuparme por ello. No debo entrometerme en su vida, era mejor dejarla sola, y eso es lo que yo haría.

No me siguieron pero igual uwu