Acabo de despertar, miro mi habitación, 

—¡Ay! Amo ver toda la selva que he creado — Digo con alegría

Paredes blancas aunque un poco gastadas, pero ya casi ni se ve, tengo muchas planta colgadas y por todas partes, bendito sean los photos que decoran cada parte de mis muros, tiene una hojita que cuelga de otra generando diferentes cadenas por todas partes, que bello despertar así y junto a mi cama, en vez de mesita de noche tengo un asiento de madera alto medio pintado con barniz, me gusta ese brillo que da, es lindo, así que por supuesto tengo aquí mi bella monstera variegada, ¿algo más lindo que esto?, No señores nada de nada, creo que estoy enamorada de las plantas que tienen blanco en sus hojitas, es que la combinación de blanco y verde es verdaderamente linda, resaltan mucho.

—Ya Emma — comento.

Creo que ya debo salir de la cama, miro la fotografía de Daryl y la beso, me siento y vuelvo a admirar mis plantas les doy un saludo a cada una y en especial a mi Ficus lirata, dicen que son muy difíciles, ya que aman la atención y los mimos, pero tampoco hay que exagerar, porque de la nada se mueren... pongo los ojos en blanco, pego un ojo a mi bello helecho que cuelga del techo y lo reafirmo, amo esta pequeña selva que es mi cuarto, me estiro y antes de salir de mi habitación, las miro.

—Hola bebes ¿Cómo están hoy? — sonrió y me voy directo al baño.

 Necesito bañarme, hoy entro a turno así que debo apurarme, creo que no desayunare...

Me miro al espejo, mi piel blanca y tan pálida, mis mejillas perdieron ese color rosa que me quedaba tan lindo, mis ojos cafés se ven apagados, vacíos, miro mi cabello y noto que esta demasiado largo, sin duda terminando el turno lo cortare, creo que necesito un cambio, me meto a la ducha y pongo música en forma aleatoria y suena "The Reason" la canto a todo pulmón... su melodía recorre cada parte de mi cerebro, de pronto... no puedo evitar verte, recordar tantos momentos, una vida juntos.

—¡Ay! Emma, ¿por qué?...— digo y cae una lágrima.

Me siento sola, te extraño tanto Daryl... aun no puedo superar que no estés junto a mi, lo intento día a día, pero es difícil, al final se aprende a vivir así, hace 2 años te fuiste, es mi culpa... no debiste ir por mi después del trabajo, te insistí pero... pero no fue suficiente, ¿por qué no insistí más?, si no fuera por eso... no habrías estado en ese accidente, estaríamos juntos pensando que hacer para comer, haciendo cualquier concurso , el que pierde prepara el desayuno, estaríamos cotilleando sobre los vecinos o nuestros compañeros de trabajo, estarías tocando la puerta para meterte a bañar conmigo, o planeando donde iríamos de vacaciones... ¿sabes? Ya no descanso, evito los tiempos muertos, me lleno de trabajo para no pensar en ti. 

En 3 días es nuestro aniversario serian 6 años, duele tanto, teníamos tantos planes, ¿Por qué?... no debía ser así, tu no merecías eso, yo no merecía una vida sin ti... miro hacia arriba y comienzo a llorar me duele mucho el pecho y siento que ya no puedo respirar, trato de calmarme, de respirar lento pero no puedo me siento y lloro, cierro con fuerza los ojos y me abrazo, nadie te reemplazará. Solo tu, siempre...

Tomo mi medicina, la necesito para controlar mi ansiedad, ya que se desatan crisis de pánico, siempre las e sufrido desde la universidad, pero contigo ya no las sufría, sabias exactamente que decir o hacer para bajar mi estrés, sacabas siempre una sonrisa en mi rostro, no debía fingir que estaba bien ya que junto a ti de verdad todo era perfecto, genuino, ahora debo tomar medicina a diario para poder controlar todo lo que llevo dentro.

—Hoy será un gran día — me digo mientras me miro en el espejo.

Le lanzó una falsa sonrisa que trato de hacer lo más real posible... pero ahora solo es fingir cada sonrisa, nadie lo nota y la verdad es que creen en ellas, no saben como realmente me siento por dentro. Trato de encontrar a la Emma segura que se sentía plena y hermosa junto a ti, pero ya no está, por más que intente no puedo, no estas aquí para hacerme reír cuando me decías lo linda que estaba, creo que aunque lo intente ya no me interesa, ya no quiero que nadie vea esa parte de mí, nadie la merece, se fue contigo, en cierto modo una parte de mi murió contigo.

Abro mi closet y veo todos los outit que deje preparados, todos son de color negro o azul oscuro, elijo un pantalón negro con una blusa blanca y zapatos altos color negro, me miro en el espejo y se ve bien, aunque mi cara no, sonrío y busco mi maquillaje, comienzo aplicando algo de rímel, luego base y un poco de brillo labial, me veo un poco mejor, acomodo mi cabello hacia la derecha, siempre he pensado que mi perfil izquierdo es el mejor, miro la hora y ya voy un poco tarde así que tomo mi bolso, mi computador, miro la foto de Daryl...

—¡Adiós mis bellas! — obviamente dirigido a mis plantitas y emprendo mi camino al trabajo yupi.... sí claro.

Me subo al autobús y me siento feliz ya que tengo asiento en la ventana, me pongo mis airpods y me voy escuchando Coldplay, miro a la gente caminar y no puedo evitar pensar que problemas tendrán todos ellos... se sentirán tristes, enojados, felices... cada cabeza es un mundo, así que les digo mentalmente — fuerza — si yo puedo ustedes también, ¿cierto?,  amo ver los parques y los árboles me generan paz amo el verde y lo que genera en mi, automáticamente siento que es vida, color, que lindo, se viene mi parada así que me levanto de inmediato y toco el timbre, pero el conductor no lo escuchó, no entiendo por qué ponen la música tan fuerte.

—¡Parada, por favor! — grito para que se detenga y frena muy fuerte, me tropiezo y caigo — Perfecto — escucho como la gente se ríe y ni siquiera lo disimulan.

Me levanto rápido y me bajo en cuanto el conductor abre las puertas, camino y trato de olvidar lo sucedido mientras me da un ataque de risa, ahora si puedo reírme tranquila, ¿Por qué me pasan estas cosas a mí?, miro al cielo.

—¿Por qué? — digo muy bajito para que la gente ahora no piense que estoy loca por hablarle a las nubes.

Entro al edificio, hay bastante gente en la entrada como siempre, son los mismos esperando su turno para poder hacer ingreso a sus pisos, algo que me gusta es la seguridad que tiene este lugar, sobre todo cuando trabajo de noche, odio ir al casino cuando esta solo, saludo a Tom el conserje.

—Hola Tom, ¿Cómo estás?

—Bien gracias, ¿y usted Emma?, ¿Qué tal su mañana? — Me río.

—Que le puedo decir, me caí en el auto bus, la gente se río, me baje y me dio un ataque de risa, sobreviviendo — nos reímos juntos — bueno, nos vemos más tarde.

—Que tenga un buen día y siga riéndose de las desgracias, para que vamos a llorar.

—¡Eso mismo! — le grito y sonrío.

Subo el ascensor, piso 13... entro a la oficina y saludo a un compañero de piso ya que esta en otra oficina, él me sonríe y entro a la mía. Ahí está lucas, con sus 15 tazas de café repartidas por todo el escritorio, hojas desordenadas, lápices en el suelo y pongo los ojos en blanco, no entiendo como genera tanto desorden en una noche... ¿Qué hace este sujeto aquí?, ¿hará una fiesta?, ¿invitara gente?, odio su desorden.

Recuerdo como se lo decía a Daryl y el solo defendía a Lucas porque era uno de sus mejores amigos, se conocieron en clase de manejo a los 23 años ya que Daryl siempre había conducido moto pero se compro un auto, que por cierto no uso hasta que pudo tener su licencia y no hubo quien los separara, aunque Lucas aun no logra sacar su licencia, sonrío. Cuando Daryl me lo presento, nos llevamos bien de inmediato, éramos como los tres mosqueteros, enserio Lucas siempre estaba con nosotros, aunque no éramos un mal tercio, era muy divertido. Después postule a esta empresa y quedé, le conté a Daryl que había quedado en MAEX RIC, me convenció para meter a Lucas a trabajar aquí, es ingeniero en minas al igual que yo, lo recomendé y entro, quedamos en el mismo turno solo que el es mi cambio, yo de día y el de noche o viceversa, siempre que he llegado a la oficina el tiene un desastre, se lo decía a Daryl y el decía que había que entenderlo porque los hombres no podían con todo y bueno mirando todo esto pienso que Lucas solo puede con el monitoreo.

A pesar de todo, agradezco tener a Lucas aquí aunque él odie hablarlo, sufrió y sufre igual o mas que yo, ellos se adoraban, se porto tan bien conmigo cuando paso lo que paso, que entendí el aprecio tan grande que sentía Daryl por él.

—Hola Lucas, ¿Cómo estuvo la noche?, ¿sucedió algo? — pregunto porque olvide revisar el correo durante el camino así que no se si ocurrió algo durante el turno.

Trabajamos con radares, monitoreando en pocas palabras una "Mina" que es el conjunto de labores o huecos necesarios para explotar minerales en un yacimiento y en algunos casos, las plantas anexas para el tratamiento del mineral extraído. 

Nuestro trabajo es simple pero complicado, aunque no se entienda es así, debemos mediante los datos, determinar si hay movimiento de la pared del rajo y si mediante los datos que el radar nos entrega se determina que se está generando una deformación debemos dar aviso de inmediato para así sacar al personal que se encuentre trabajando cerca del sector y evitar un accidente, una muerte o que un equipo termine aplastado o dañado.

—Hola Emma, que bella estas hoy, perdón el desorden, pero durante la noche no paso nada, no hubo actividad ni deformación, así que me tomé todas estas tazas de café para no dormirme, por cierto, sacaran los radares 406 y 408 ya que habrá tronadura así que debes crear nueva pared — asiento.

Perfecto estaré horas en eso y debo hacer los informes, ¿Por qué?, miro al techo pidiendo una luz que me diga ¨tranquila será fácil¨, sonrió.

—Odio hacer la pared, son demasiadas figuras, será...

¿Why me?,¿ Why me?, me digo internamente y me da risa inevitablemente, termino contagiándolo y se ríe conmigo como si leyera mi mente.

—Eres la mejor, yo creo que por eso... — se calla y pone cara de "malas noticias" — casi lo olvidaba... — vuelve a callarse y ya me puse ansiosa, trago saliva.

—¿Qué paso ahora?, ¿Qué más tengo que hacer hoy? — sonrió irónicamente.

—Bueno hoy entra un nuevo Ingeniero geomecánico y como tú eres la mejor evaluada... tendrás que hacerle la inducción.

Tiene que ser una broma, el que está en turno noche siempre debe hacer la inducción ya que siempre es más tranquilo y hay que realizar solo 2 informes por radar que son 6 en total y no 4 por radar como es durante el día, sin mencionar los informes de prismas y tronadura que se hacen en turno de día, esto no es justo... respiro hondo, necesito el dinero.

—Qué más puedo decir que... okey — se ríe.

—Lose, pero quieren generar parejas para trabajar, así en las horas de descanso o colación no quedan sola las pantallas, viéndolo así, al final será un gran apoyo, ¿no crees? 

Quedo sorprendida y con una gota de paz, si es así sería maravilloso, uno aquí no puede enfermarse, las pantallas lo son todo, jamás deben quedar solas, para ir al baño hay que correr si suena el teléfono y no contestas estas acabado y no, no estoy exagerando, cambió mi humor y ya me siento relajada, será un día intenso, pero valdrá la pena, veo que lucas guarda sus cosas rápidamente.

—Lucas no olvides llevar tus tasas arriba por favor, no tengo donde dejar mis cosas aquí — digo mientras reviso un radar.

Se molestó lose, pero es su desorden y es demasiado, no tengo por qué ordenar sus cosas.

—Sí claro — dice en tono serio.

Comienzo a revisar cada radar detalladamente, informes de la noche, leo el libro para ver lo más esencial, llamo al jefe de turno, me gusta hacerlo para estar informada de cada cosa que se hará durante el día así puedo estar más pendiente de esos sectores y siento que ellos quedan tranquilos se deben sentir más seguros, saben que estoy aquí vigilando todo.

—Atento jefe de turno mina COMAND — digo tomando el radio.

—Aquí jefe de turno mina COMAND — me responde de inmediato.

—Don Michel, ¿Cómo está?, le hablo para saber que labores se realizarán el día de hoy y en que sectores — no sé porque siento que me están observando, pero ignoro la sensación y continuo — por favor.

—Por supuesto señorita Emma, es muy grato saber que nos está cuidando, estaremos trabajando en el banco 2680 y 2670, a las 15 horas habrá tronadura en el banco 2670.

—Muchas gracias don Michel, buen turno — sonrió aunque nadie me ve.

—A usted señorita Emma.