Ya han pasado más de tres semanas desde que Max se marcho, mañana es mi cumpleaños y él vuelve en un par de días, estoy bastante ansiosa por verlo.

   Patric me despierta con golpes en la puerta y me siento en la cama, entra con un pequeño pastel cantándome feliz cumpleaños, se sienta en mi cama y me entrega un tenedor para que comamos ahí, pita esta desesperada por comer así que debemos salir de la cama, nos vamos a la cocina y suena mi celular, es Keira en cuanto contesto escucho como canta con lucas. 

   Luego de ducharme, elijo un vestido color lila, es muy fresco y tiene mangas ajustadas que luego se vuelven acampanadas, doy una vuelta para ver como se levanta en la parte inferior, se ve muy bello, salgo de la habitación y Patric me aplaude.

   Mi celular comienza a vibrar nuevamente y es Damon para saludarme, me pregunta por Max, sé que no le agrada nada, de todas formas quiere saber si ya me saludo y no... hoy tenía una reunión así que sabía que no lo haría por la mañana.

   Llego al campus y  camino hacia la sala de profesores, saco los exámenes que tengo revisados, hoy solo tengo una clase, luego debo ir al laboratorio. Al llegar al salón, están todos en sus asientos, los llamo uno a uno entregándoles sus exámenes, veo caras felices y otras no mucho, aunque nadie reprobó pudieron haberlo hecho mejor, golpean la puerta y entra el director, lo saludo al igual que toda la sala.

— Hola Profesora — dice y le doy una leve sonrisa—  quería comentarle que hoy tenemos un invitado.

— ¿Nuevo alumno? — pregunto y niega con su cabeza.

— No, es alguien importante, quiere entrar de oyente — asiento y se gira — señor Ricci puede pasar — cuando escucho su apellido no pude aguantarme la sonrisa.

   Entra con una mano en el bolsillo y la otra saludando a la sala mientras los mira, esta sonriendo y se ve guapísimo, no puedo creer que esté aquí, muerdo mi labio para dejar de sonreír, me mira y sus ojos están brillando, me sonríe y siento que en cualquier momento corro a abrazarlo, pero guardo la compostura, estas en tu lugar de trabajo y extrañamente con tus dos jefes.

— Profesora él es Max Ricci Director de la empresa MAEX RIC — dice dirigiéndose a mí, luego se gira — Max ella es Emma, es una maravilla aunque muchos dicen que es muy exigente o no chicos.

— Sí — dicen al unísono y todos se ríen.

— ¿Dónde me puedo sentar profesora? — pregunta Max y me muerdo el labio.

— En cualquier asiento vacío director Ricci — pasa la lengua por sus labios y asiente.

   El director se marcha y Max toma asiento en la tercera fila junto a la escalera, estoy algo nerviosa así que evito mirarlo y vuelvo a mi papel de profesora, me siento sobre el escritorio y hago un par de preguntas al aire, los chicos las contestan de manera correcta, mientras asiento muy seria, me pongo a explicar las diapositivas mientras bajo del escritorio, indico información muy importante.

   Pongo alarma para 10 minutos mas, cuando noto que ya anotaron, les vuelvo a explicar pero de manera mas resumida para que no queden con dudas, termino justo con la alarma y todos quedan en silencio cuando la escuchan, escucho un par de gritos ahogados y miro a Max, los observa, están enserio preocupados y él no entiende que sucede.

— Bueno ya escucharon, guarden todo y dejen una hoja y un lápiz en su escritorio, cuando terminen las dejan en mi escritorio y pueden marcharse.

   Todos sacan su hoja y lápiz en completo silencio, dicto las preguntas, hago solo tres, miro sus rostros y en la gran mayoría veo tranquilidad, son sobre lo mismo que acabamos de ver así que deberían saberlo o por lo menos tener una idea. Al terminar todos me miran.

— Profesora — dice Luna y la miro, me sonríe — supimos que hoy es su cumpleaños — se sonroja por la mirada de todos.

— El profesor Damon nos dijo y queríamos cantarle cumpleaños feliz — dice Carol, sonrío y asiento.

   Todos comienzan a cantarme y me siento muy agradecida y culpable por ser tan exigente con ellos, les agradezco a todos mientras me entregan sus hojas y salen de la sala, miro de vez en cuando a Max quien esta un poco serio mirándome, salen todos y él se levanta, se dirige a la puerta y la cierra, camina en mi dirección, me sonríe y le devuelvo la sonrisa.

— Feliz cumpleaños mi amor — cuando lo escucho siento que todo mi cuerpo hormiguea y explota por dentro de felicidad.

   Max pone sus manos en mi cintura con mucho cuidado y sonrío, lo beso, lleva una mano a mi rostro y yo llevo mis manos a su pecho, su beso es muy intenso con deseo, enserio lo necesitaba, lo deseaba, muerdo suavemente su labio y sonríe.

— ¿Director está intentando propasarse conmigo? — me muerde él labio suavemente mientras lo vuelvo a besar.

— Estas hermosa — dice tomando lentamente una distancia entre ambos, sonrío y el se lame los labios.

   Entra Damon sin golpear, me mira y sonríe, tomo mi bolso y camino junto a Max, Damon lo mira y lo ignora completamente.

— ¿Cómo está la cumpleañera mas hermosa de este mundo? — dice Damon en tono desafiante, quiere molestar a Max. Él pone sus manos en mi cintura.

— Bien, los chicos me cantaron, gracias.

— Quise darte una sorpresa, estás hermosa hoy — vuelve a ocupar ese tono.

— Eso es correcto — dice Max y lo miro — esta hermosa, como siempre— sonrío y le soy un beso en la mejilla — Damon — la tensión enserio es incomoda, se puede cortar con tijeras — quería agradecerte — lo vuelvo a mirar sorprendida, eso no me lo esperaba, para nada — fuiste un gran apoyo para Emma, no cualquiera hubiese estado siempre para apoyarla, es algo que valoro, sobre todo con lo de mi hermano — comenta algo incomodo — agradezco que la cuides y espero que eso no cambie, aun no puedo dar con él y mientras mas personas estemos al pendiente de ella es mejor — de verdad no puedo creer que todo esto haya salido de la boca de Max.

   Damon solo sonríe y asiente, no dice nada, nos despedimos de él y salimos de la sala. Max me acompaña a la sala de profesores a buscar una carpeta para guardar las hojas y sacar la lista de notas de el ultimo examen, lo beso y entro a la sala, no me demoro ni un minuto y ya estoy lista, salgo y él se ríe, me sonrojo, pero no quiero desperdiciar ni un minuto, no se cuanto tiempo estará, me besa y sonríe, le doy la mano y salimos de la universidad, no está Jhon y la verdad siento un poco de alivio quiero privacidad.

— ¿Qué pasa? – me pregunta mientras se acomoda en su asiento, me encojo de hombros.

le digo que debo ir al laboratorio, pone mi misma cara de decepción, me da la mano y conduce con ella todo el camino, llegamos y se baja a abrir mi puerta, me encanta, caminamos hasta mi oficina, dejo mi bolso en el escritorio y Max entra detrás y cierra la puerta, me giro y me besa tomándome por sorpresa, mi celular empieza a vibrar y nos reímos, le doy la espalda y busco mi teléfono dentro de mi bolso, lo saco y es un mensaje...

Feliz cumpleaños Emma, ¿mi hermano ya te

dio la cogida de cumpleaños? o ¿prefieres una mía?

Yo aun quiero cogerte

                                                                Alex Ricci

Miro a Max y le entrego el celular, lo mira y su expresión cambia por completo, esta muy enojado, intenta no explotar, me siento y se gira, vuelve a encender la pantalla y leer el mensaje

— Lo voy a matar — dice — enserio lo voy a matar, lo voy a matar, ¡Maldito enfermo! — grita

Tira el celular y cierra los ojos, mete las manos a sus bolsillos y respira una y otra vez, pero no puede calmarse, esta muy agitado, vuelve a abrir los ojos y se sienta a mi lado, saca su teléfono y comienza a hablar, cierra los ojos y da un par de gritos.

— ¡Quiero que lo encuentren ahora! — nunca lo había visto así, se levanta y corta.

— Tranquilo...

— Perdón — dice — pero no se como reaccionar ante esto , quiero matarlo, si no fuera por mi padre créeme que lo mataría — niego con la cabeza — y no es tu culpa, él es el problema ¿bueno? — me besa, noto como su cuerpo se relaja — Vamos — dice y niego.

 — Debo trabajar — digo y llevo mis manos a su rostro — me ayuda, me distrae, lo necesito — asiente y se sienta.

—Esta bien... — respira hondo — ¿Quieres un café? — asiento y sonríe — voy por dos — sonrío

Sale de la oficina y trato de olvidar el asqueroso mensaje, de pronto tocan la puerta y entra una mujer, alta, bella y de cabello ondulado, no puedo dejar de verlo, es perfecto.

— Hola — dice — soy Hillary

— Hola — respondo, se me hace conocida, ella igual me mira mucho —¿Te conozco? — sonrío.

— Creo que sí, porque te me haces conocida — se ríe y me mira.

— ¿Azul? — hace mucho no me llamaban así, asiento — no puede ser... te juro que pareces otra, ya no hay melena y ni tu mechón azul — comienzo a reír.

— Ya pasé mi época rebelde, éramos compañera en química — asiente emocionada — ¿Trabajarás aquí?

— Sí, me contrataron ayer, hoy es mi primer día — sonrío — me alegra conocer a alguien.

— Lo mismo digo — comento — aunque dime Emma, ya no uso mi segundo nombre — asiente.

— Bueno... aunque es difícil, ¿Te parece Zu? — asiento.

— Sí — sonrío y Max entra.

— Director — comenta ella poniéndose seria — traía estos análisis

   Me los entrega junto con una sonrisa y se marcha, Max me entrega mi café y se sienta enfrente.  

— ¿Te ayudo? — pregunta y asiento — creo que te tocara enseñarme de nuevo — sonreímos.

   Saco muchas hojas con diferentes datos que debo traspasar a una planilla, Max se suelta la corbata y se la quita, luego desabotona dos botones y se quita el Blazer y el gilet, deja todo perfectamente ordenado en la silla y ahí está mi ingeniero geomecánico, me mira con sensación de libertad. 

   Mientras paso los datos, le pido que haga algunas comparaciones de datos que varían mucho, pongo música en mi laptop, él sonríe y se acomoda en su silla por un instante.

— ¿Por qué me miras? — pregunto

— Amo trabajar contigo — sonrío.

— Max...

— Dime

— ¿Quién es Vivian? — su rostro se vuelve pálido

— ¿Qué?

— Escuchaste bien... — me muerdo el labio — él dijo que ella es una razón... — Max se acomoda.

— Acabamos de volver y siento que te voy a perder de nuevo — siento una punzada de dolor.

— ¿Le hiciste lo mismo que él me hizo a mi? — pregunto con miedo.

— No — dice muy rápido — jamás obligaría a alguien a hacer algo que no quiere... — siento algo de alivio.

— ¿Entonces? — respira hondo.

   Comienza a hablar y me pongo nerviosa, solo con escuchar que era la prometida de Alex, indica que era alguien muy importante, me comenta que Alex hizo muchas trampas en base a lo laboral y eso lo llevo a cometer errores peores.

— ¿Qué errores? — pregunto.

— Le hice creer a ella que Alex la estaba traicionando — se pausa — y... luego de eso, cogimos.

— ¿Te cogiste a la prometida de tu hermano? — asiente.

— Él nos encontró en el acto...

— No puede ser... — Max asiente.

— Sé que estuvo mal...

   No digo nada, me concentro en la torre de hojas que tengo en la mesa, él me mira esperando una respuesta, pero no sé que decir, pienso un poco en mi pasado... lo miro y sus ojos suplican alguna palabra.

— Dime algo, por favor... — pide.

— No tengo nada que decir, solo quería entender...

— ¿Qué sientes? — pregunta.

— Obvio no me gusta pensar que hiciste eso... aún así agradezco que seas honesto —me pauso — no tengo nada más que decir al respecto, es parte del pasado.