Capítulo 22

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Su primera cita había resultado mejor de lo que esperaba. No pudo dormir en toda la noche literalmente.

Henry es el chico más admirable que pudo haber conocido, tan confiado, amable, caballeroso, atractivo, no le sorprendía que tuviera un crush en todas las chicas, o al menos en la mayoría. Aunque esa mayoría sólo lo quería por ser capitán del equipo de fútbol y no por cómo es realmente, no dudaría que, si Henry llega a decir que le gusta leer, escribir, que sólo a "salido" con una chica, ellas perderían el interés, no era por mala onda, pero así son las otras chicas.

Como siempre les contó a sus amigas sobre su cita, quienes chillaron de emoción y la molestaron un poco, también le comentaron que sabían sobre la pequeña fiesta de Henry, pues Mark le había dicho a Lazy y Gideon a Avril.

Durante la primera semana de diciembre, como dijo Henry, le dio los otros datos de la fiesta. Sería a las seis de la tarde en su casa y sinceramente no podía esperar. Aunque muchas veces cuando esperas algo el tiempo parece estar a tu favor.

En la semana podría decirse que Avril, Henry y Teresa formaron un pequeño grupo de tres, pues se sentaba en la mayoría de las clases juntos, claro que Avril hacía sus estrategias para también dejar a los otros dos solos. No entendía como no se daban cuenta de nada si eran demasiados obvios.

Todo parecía estar normal y en orden, Lazy y Mark seguían más unidos que nunca, de hecho, después de clases ella comenzó a ir al salón de él para esperarlo he irse juntos, su relación había avanzado, por así decirlo.

Las tres chicas decidieron ir de compras, pues según la justificación que le dieron a Ricardo, es que no tenían qué ponerse para la fiesta. Y sí, claro que este estaba enterado de eso, incluso pidió ir sólo para conocer la casa y despejarse un poco.

Henry no pudo negarse cuando le preguntó Teresa si tenía problema con eso, por un lado, lo entendía, ¿quién no podría evitar cuidar de aquella chica de mirada dulce y personalidad adorable?

Ahora mismo las tres rondaban por las tiendas buscando algo lindo qué ponerse mientras que Ricardo las esperaba en alguna otra tienda. Todo iba normal hasta que tanto Teresa como Avril notaron que Lazy estaba un poco más perdida de lo común.

—Lee, ¿qué tienes te hemos notado más seria? —Preguntó Avril sentándose a un lado de ella y dejando los vestidos que se había probado, de igual forma llegó Teresa a sentarse del otro lado.

—No lo sé es que... no quiero sonar exagerada—colocó ambas manos sobre su rostro, haciendo un leve puchero.

—No pienses en eso Lee, mejor dinos qué te tiene así—animó esta vez Teresa, acariciando levemente su espalda.

—Es Mark...

—¿Pelearon, te hizo algo o qué pasó? —Se acercó más a Lazy, Avril.

Ella negó con la cabeza—. Nada de eso, estamos bien es que...—dejo salir un suspiro—, creo que estoy un poco celosa—bajo la cabeza y consigo su mirada. Teresa y Avril compartieron miradas.

—¿Por qué? —Cuestionó Teresa.

—Ahora que estamos en salones separado pues era obvio que tiene nuevas amistades y empecé a ser yo la que va a su salón para irnos juntos y....—dejo una pequeña pausa antes de seguir—lo he visto hablar muy animado con Amber.

—Pero eso no tiene nada de malo, ¿o sí? —Dijo un poco confundida la ojiverde.

—No, eso no, es que ¡Dios! Parecía ser que Amber estaba coqueteando con él—cubrió su rostro con ambas manos.

—Bueno no sabemos con exactitud si ella lo estaba haciendo o no, pero no debes preocuparte por eso, tienes que tener confianza en él, te ama mucho y lo ha demostrado cientos de veces—mencionó Avril, abrazando por los hombros a Lazy.

—Si no te sientes segura, ¿por qué no lo hablas con él? —Preguntó ahora Teresa.

—No quiero que piense que soy tóxica y que le voy a prohibir que hable con las demás chicas—retiró ambas manos del rostro, dejando su mirada todavía hacia abajo.

—Ambos se conoce en personalidad, en cierto sentido, y tanto él como nosotras sabemos que no eres ese tipo de chica—Avril espero unos segundos a que Lazy dijera algo y al no hacerlo continuó—. Está bien si no lo quieres hablar aún con él, pero cuando veas que te está dando problemas con Amber, háblenlo.

—Lo haré en caso de ser necesario nada más—levantó la mirada hacia sus amigas sonriendo levemente. Teresa las junto a las tres en un abrazo.

—Ahora que solucionamos el humor de Lazy—ella rodó los ojos divertida—¿Qué vestido se me ve mejor? —Cuestionó Teresa extendiendo dos vestidos uno rojo y otro plateado. Las otras dos chicas rieron y continuaron con su tarea de buscar ropa.

Era muy inevitable que las tres se pusieran a hacer fotos y modelar mientras probaban la ropa, fácilmente tardaron alrededor de dos horas en tan sólo eso, sin embargo, estuvieron satisfechas por el resultado.

Y eso no fue todo, un vestido no tiene razón de ser sin zapatos, bolsa y accesorios, ¿cierto?, por lo que fueron unas una o dos horas más de probarse zapatos, buscar una bolsa que combinara y tal vez unos lindos aretes.

—Oye Avril, tú casi nunca nos cuentas sobre tú y Gideon—mencionó Lazy mientras se observaba en el espejo probando unos aretes.

—No hay mucho que contar como ustedes dos, yo y él somos mejores amigos—ella también se miraba en el espejo sólo que probando un collar de perlas.

—Claro, amigos y por eso son muy cercanos desde hace poco tiempo—comentó Teresa en medio de ambas chicas, pues ella ya tenía sus accesorios que llevaría puesto.

—¡Oye! Simplemente tenemos una buena comunicación, además de que a los dos nos gusta la lectura, a mí más, pero entienden mi punto.

Ni Teresa ni Lazy supieron que más decir por lo que permanecieron en silencio y continuaron con las compras.

Algo que caracterizaba mucho Avril es que nunca o casi nunca habla sobre sus sentimientos, es reservada en ese sentido. Por eso muchas veces es difícil, tanto para Teresa como para Lazy, saber si tiene una gran amistad con un chico o está enamorada.

Ella puede decir que siente amistad cuando en realidad siente algo más y viceversa. Sólo ha sido una vez que ha tenido un flechazo por alguien que no sea un famoso o un personaje literario y la única que lo sabe es Teresa.

Sin duda Ricardo estuvo un buen tiempo en ese centro comercial, aunque logró conseguir nueva ropa para sí mismo, era imposible no aburrirse por esperar a las chicas ¿¡Porqué insistió en venir!? Teresa ya tenía permiso de conducir al igual que Lazy y Avril, podrían haberse ido solas, pero no, quiso venir. Sin embargo, al menos valió la pena.

Teresairía a la fiesta con un vestido ajustado color rojo vino que le llegaba a lasrodillas y era de manga larga, con zapatos y una pequeña bolsa plateados. Lazyun vestido color azul pastel (porque Teresa y Avril insistían en que combinabacon sus ojos) sin magas, con zapatos y accesorios blancos y una bolsa colorazul cielo. Finalmente, Avril escogió uno amarrillo, zapatos cafés, accesoriosy bolsa color blancos. Creo que podemos mencionar que Ricardo fue el más casualentre los cuatro, pues llevaría una camisa y jeans negros, con tenis blancos ysudadera de mezclilla.

La semana de su cumpleaños de Henry fue algo extraña por así decirlo, sus compañeros de equipo de fútbol no dejaban de estar encima de él, diciéndole que la fiesta sería genial y que se descontrolaría todo, aunque esto no fuese así. Sorprendió mucho a Teresa que aun así nadie supiera respecto a eso, serían alrededor de veinte personas contando las parejas de algunos jugadores y todavía así no entendía de donde una fiesta se descontrolaría con esa cantidad de personas.

Lazy y Mark, podría decirse que estaban bien, excepto porque al parecer ya era costumbre ver a la tal Amber muy junta con Mark ¿Qué no sabe que ya está ocupado? Lazy no había querido decir nada aún, pues Mark parecía darle el avión a Amber cuando la veía en la puerta. Al menos espera que este consiente de que esa otra chica está intentando coquetearle.

Y no, no estaba inventándolo porque estaba celosa, de verdad Amber estaba coqueteándole a su novio. Fue durante el día miércoles que se dio cuenta de esto.

Sus clases ya habían terminado, los exámenes ya habían pasado y todo estaba, relativamente más calmado. Como siempre. junto sus cosas y se dirigió al saló de su novio que estaba a tan sólo dos salones del suyo.

Escucho varias risas provenientes de dicho salón y curiosa se asomó por el marco de la puerta tratando de no llamar la atención de los demás alumnos que pasaba a su lado.

—¡Eres tan divertido, Mark! —Alcanzó a distinguir la voz de Amber y con un poco de dificultad logró verla golpear juguetonamente el brazo de él. Este se veía un poco incómodo, sin embargo, no decía nada.

Ahora mismo se pregunta Lazy, ¿Por qué apenas Amber de repente le llamaba la atención Mark?, era muy sospecho sin duda.

No sólo eso, sino que también Amber parecía jugar con un mecho de cabello, la más típica de las señales, también a pestañear de forma, ¿coqueta?, parecía que tenía un tic en el ojo, rodó los ojos algo molesta y se alejó de la puerta cuando Mark empezó a tomar sus cosas.

—Hola linda—mencionó una vez salió de su salón abrazándola por la cintura, sin antes besar su mejilla, y comenzando a caminar juntos hacia la salida de la escuela.

—Hola Mark—respondió en un intento de aparentar que todo estaba bien.

—¿Qué pasa amor? —Preguntó acariciando su mejilla derecha.

Ella desvió un poco la mirada—. Nada sólo...estoy cansada por la escuela.

—No te preocupes por eso, aguanta una semana más y podrás descansar todo lo que quieras—tomó con delicadeza su rostro haciéndola voltear a verle, sonriendo hacia ella.

—Te amo—fue lo único que pudo decir Lazy al momento de ver la hermosa sonrisa que tenía su novio, olvidando el motivo del porqué estaba algo molesta.

—Tambiénte amo—dio un beso rápido en los labios de la ojiazul para evitar que algúnprofesor los viera.

¡Bendito sea cuando por fin llegó el sábado!, todo era emoción y movimiento en la casa de los Lambert, preparando todo para la tarde. Como era una ocasión especial ambos hermanos tuvieron el permiso de brindar con un poco de vino, pues sus padres no estarían por un pequeño viaje de negocios. Lo bueno que el día anterior había festejado los cuatro juntos.

—¿Emocionado por esta tarde? —Cuestionó Paula mientras acomodaba la bocina en la sala, la cual ya había sido despejada para hacer espacio.

—Claro que lo estoy, pero todavía no entiendo porque decidiste quedarte en tu habitación, profiter de la fête, sœur—él se encontraba colocando las bebidas, entre ellas refrescos y dos botellas para brindar, realmente piensa que sea suficiente.

—Sabes que no me gustan mucho las fiestas..., además es tú día y tengo que estar al pendiente—finalmente había concluido de poner la bocina y sonrió orgullosa por el resultado, pues también ella se encargó de poner algunas luces alrededor.

—Por lo menos date una vuelta a conocer a mis amigos—sonrió Henry cuando ella llevó su mirada hacia él, Paula negó con la cabeza riendo.

—Lo pensaré y si llegó a bajar ce sera pour rencontrer ma future belle-sœur—guiñó un ojo hacia Henry haciéndolo sonrojar.

-—Je te déteste, dans le bon sens—no pudo evitar sonreír un poco por el comentario de su hermana.

Ohhmerci beaucoup, petit frère—se acercó a abrazarlo a pesar de que Henrytrataba de fingir molestia con ella.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro