Decir que el Omega estaba molesto era poco para como realmente se sentía en ese momento, era la misma cantaleta de los últimos cuatro años en los que se había retocado las canas más veces que en toda su vida.

En su Oficina se encontraban Kim Taehyung y Lee Yangmin; alfas que habían hecho que su paz mental haya bajado, considerablemente.

— Alfa de cuarta.

— Envidiosa de basurero.

— Fenómeno.

— Idiota.

— Defecto de alfa que solo ensucia nuestra casta — gruño ella, tratando de no subir mucho la voz para no recibir otro jalón de orejas por parte del mayor.

— Mira quién lo dice, la estúpida sin cerebro que no se sabe ni poner la cobarta, repitió año dos veces y solo está aquí por los padres — respondió burlón.

La chica le envió una mirada de odio en un intento de intimidarlo, pero Taehyung le sostuvo la mirada sin ningún atisvo de miedo.

—Ese es el trabajo de mi Omega y-

— Pfff, por favor, permite reírme. Ningún Omega o beta se te acerca por tu carácter explosivo, ya quisieras tú tener a alguien — la interrumpió, sonriendo de manera socarrona.

— Que irónica la vida, Kim. Tú aquí criticandome cuando tampoco tienes a alguien por ser defectuoso.

Taehyung le enseño el dedo medio en todo su esplendor junto con un "pudrete"

— De seguro me tienes ganas, dime ¿acado haz soñado conmigo y mis faldas? ¿Es por eso que me odias tanto? Porque daño tu orgullo frágil de alfa al estar en tu mente sin ropa todo el tiempo — sí, así de alto tenía su ego. Yangmin se levantó del asiento de un brinco con una mueca de asco.

— ¡No soy una defectuosa como tú! Yo soy una alfa en todo el sentido de la palabra. Lo único que causas en mí es asco, eres un error andante con tus gustos por lo tierno y delicado. De seguro tú eres el que se imagina debajo de mí gimiendo mi nombre y por eso lo dices. Suc-

— ¡Ya basta! ¡Fue suficiente! ¡Callense los dos! - grito exasperado el adulto ahí, deteniendo la disputa que se estaba comenzando a armar, golpeando el escritorio con la palma abierta de su mano en un ruido sordo — Si siguen así no tendré más remedio que expulsar a ambos, así que más les vale que dejen estas peleas absurdas por el bien de ambos. No me quiero ver en la obligación de llamar a sus padres. Será mejor que se disculpen ahora — ordenó con firmeza, pero los otros hicieron caso omiso cruzándose de brazos y dándose la espalda.

— Lo haré si ella lo hace primero.

El Omega presente hacia changuitos para que la alfa, en su orgullo inquebrantable, se doblegase a las peticiones de Kim y así acabar con todo eso de una vez. Pero como era de esperarse, ella se nego.

— No voy a disculparme con alguien como él. Es más, no debería disculparme con nadie que no sean mis padres porque soy una alfa, no como este calientapollas que hace las cosas a propósito para llamar la atención que no le dan en casa.

— ¡Lee Yangmin! ¡Es suficiente! ¡A detención! ¡Lavaras los baños del primer piso del ala este durante dos semanas!

La chica tomó su mochila y salió de allí hecha una furia mascullando entre dientes un "zorra regalada" Dirigido al otro alfa, cerrando con un fuerte portazo. El señor Kang se recosto en su silla con un suspiro cansado abandonando sus labios, presionando el puente de su nariz entre sus dedos índice y pulgar, anticipando la jaqueca que vendría después.

Mientras Taehyung se mantenía jugando con la corta tela que cubría parte de sus piernas, arrugandola entre sus puños y magullando aún más su labio inferior entre sus dientes.

— Taehyung —, comenzó el hombre con suavidad — te juro que aún no entiendo cómo es que teniendo un desarrollo académico casi impecable, notas casi tan altas como las de tu hermano y una participación estudiantil constante en clases y eventos, dejes que cosas como estas manchen tu expediente. Tan solo quería un inicio de año tranquilo, solo eso pedía ¿por qué hoy? ¿No pudiste hacerlo otro día? — no era su intensión hacer sentir incómodo al estudiante, pero al no recibir respuesta supuso que lo había hecho — Digo, sabes que por mi no hay problema que uses el uniforme de los omegas si así te sientes más cómodo, pero ¿justo hoy no pudiste cumplir las reglas?

Ante aquellas palabras Taehyung alzó la cabeza decidido, frunciendo el ceño y dándole una mirada penetrante al mayor.

— No estoy incumpliendo ninguna regla de la escuela. Vine con el uniforme y eso es lo que importa, me gusta como me quedan las faldas y no voy a cambiar por llevarme bien con personas de mente cuadrada. En ningún lugar dice que un alfa no pueda usar los uniformes de los omegas, así que estoy siguiendo el reglamento al pie de la letra.

Un silencio espeso se apoderaba de aquella oficina donde se llevaba a cabo un duelo de miradas entre alumno y director. El señor Kang sentía respeto y admiración por Taehyung al no dejarse humillar y defender sus gustos y creencias, pero también temía por él, aveces le resultaba incómodo el cómo el alfa se desarrollaba en ciertos ámbitos, pero siempre trataba de no hacer comentarios al respecto.

El sonido de la puerta siendo tocada y una vocecilla que llamaba desde afuera hizo que ambos volviesen a la realidad. El menor tomó sus cosas y sin decir nada salió de ahí con todos los músculos tensos de su cuerpo, no reparando a ver al Omega detrás de la puerta y alejándose a paso firme entre uno de los pasillos.

Hoseok se quedó aturdido por un momento, si no se hubiera hecho a un lado se hubiera pegado contra la madera y caído de bruces al suelo. Pero aparte de eso, el aroma de alfa que llegó de golpe a su nariz hizo a su lobo removerse inquieto, ya que eran feromonas de enojo. En ese momento el instinto de protección le hizo querer seguirlo y darle mimos hasta que se calmase.

— ¿Todo bien? ¿Se le ofrece algo, joven Jeon? — inquirió el otro Omega desde adentro, logrando sacar a Hoseok de su ensoñacion y que estaba a punto de dejarse dominar por su instinto.

— Eh... Sí, lo siento ¿puedo pasar? — cerro la puerta tras de sí al recibir un asentimiento de cabeza afirmativo como respuesta.

— Claro, toma asiento y cuentame que paso ¿algún problema en su primer día?

— No, exactamente. Bueno, en realidad sí, una licenciada no me deja ingresar a clases porque no me tiene en su registro, pero en mi horario tengo que sí me toca con ella — explicó, jugueteando con sus dedos ansioso al percibir que aquel aroma de hace unos segundos seguía en el lugar mezclado con el de otro alfa y el del profesor, algo que hizo que un leve gruñido saliese de su garganta.

El mayor alzó una ceja inquisitivo por su reacción y él desvió la mirada avergonzado. El señor Kang no le dio tantas vueltas al asunto y decidió concentrarse en el porqué Hoseok se encontraba ahí.

— Déjame adivinar, la profesora Han es la que no te deja entrar.

— Sí, ella misma.

El mayor asintió y tecleó algunas cosas en su ordenador para verificar que todo esté correcto, escribiendo una nota junto con su firma en una nota antes de dársela al Omega.

— Con eso te dejara pasar. Debes tener cuidado con ella, es un poco exigente y desconfiada desde la vez que una alumna de otro salón se infiltró en su clase y comenzó a hacerle bromas pesadas.

Hoseok asintió sin prestar real atención a sus palabras, su cabeza solo podía concentrarse en el leve aroma a pino y menta que cosquillaba en su nariz y hacía a su lobo ronronear.

— Una última pregunta — se giró sobre sus talones antes de salir de aquel lugar, no se iba a quedar con las ganas de saber — ¿Quién era la persona que estuvo aquí antes de que yo entre?

El mayor se tensó. No iba a permitir que su escuela se lleve una mala reputación por culpa de unos problemáticos, así que se limitó a contestar un corto: 

 — Nadie importante. 

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Mientras escribía esto se me vinieron muchas ideas a la cabeza, por eso puse una advertencia en la descripción ;-;

Según yo iba a ser una historia llena fluff, brillitos y corazoncitos, pero como que no se pudo, jeje 

¡Gracias por leer! ^^