[Capitulo 2]

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-¡¡IDIOTA!! ¡¡IDIOTA!! ¡¡ESO ES LO QUE ERES, UN MALDITO Y JODIDO IDIOTA!! -Gritaba, sentia aquellas asquerosas y horribles lagrimas desbordar por mis mejillas, caí incado frente su cama, esta culpa me esta matando...

Y este maldito hijo de perra no despierta...por más que le grite, sacuda o hable lo más amable que pueda, siempre termino llorando por su jodida culpa.

4 de Diciembre.

Ahh, sieceramente me gustaria ver a ese chico rubio, desde esa noche desaparecio de mi casa.
Me agrado, fue adorable, es que afuerza queria hacerlo sonrojar.

¡Es que se ve muy lindo! - ¡Pines! - Ese grito me saco de mis pensamientos, voltee y hay estaba el mejor jefe del mundo...jaja... - ¿Qué crees que haces? No te pago por estar en las nubes - Camino hasta mi y avento una carpeta. -Quiero los informes para esta noche.

-Mi turno termino hace una hora - Conteste.

-Pues...si no quieres irte más tarde...empieza de una vez - Fingi una sonrisa nada creible al igual que él, después se marcho.

-Pss, Dipper - Voltee ante el llamado. -Oye, has estado distraido estos ultimos días. ¿Te encuentras bien?.

Sonreí - Mejor que nunca.

Mi turno terminaba a las 08:00 pm el día de hoy, pero mirame ahora. Caminando a casa a las 03:58 am, para ir de nuevo a las 07:00 am.

Subia las escaleras para llegar a mi departamento, pero esta fue una gran sorpresa habia alguien durmiendo frente la puerta con una bolsa con la marca de una tienda de comida...Esto, si me alegro, es tan lindo...y pense que ya no te iba a volver a ver. Me hagache frente él y comence a moverlo suavemente - Bill - Dije dulce y sonriente, sentía como me alegraba cada vez más y más con solo verlo, su cabellera larga y de oro, suave y hermosa. Su piel blanca y con unos cuantoa lunares, pecas en su lindo rostro que se sonroja con facilidad ¿quién no se alegraria al ver alguien así?.

Comenzo a despertar - Bill, oye no duermas ahí, te puedes resfriar - Sigue medio dormido.

-¿Dipper?. -Dijo entre sueños.

-Ah, sí. Recuerdas mi nombre - Reí un poco, le quite el seguro a la puerta - Oye, ¿hablas dormido eh? Se nota que sigues soñando. Incluyeme en ellos para que te alegres como yo al verte.

Lo cargue, se aferro un poco a mi, definitivamente estas dormido aun -Yo....namammm...

-Si, si lo que digas - Conteste divertido.

Camine hasta mi habitacion, abri la puerta y entramos. Lo recoste en mi cama y lo acobije - ¿Cuánto tiempo estuviste ahí? -Le susurre.

-Dijiste...que...sales....-Queria reirme, se ve adorable - a...las 08:00...y tanto...así que -Bostezo - Vine a las...07:00 para...agradecerte lo de ese día...

-Aww...Bill, no tienes que agradecerme nada - Le acaricie sus cabellos, lo termine de dormir. Y me fuí a bañar.

Al salir, tome una almohada y una sabana y me fuí a mi sala. Me iba a acostar hasta que recorde lo que trajo, lo organice t metí al refrigerador, sinceramente no tengo hambre solo quiero dormir.

Me acoste, pienso que solo cerre unos segundos los ojos cuando sono la alama. Obviamente no fue así, me volvi a bañar y aliste, se ve tan tierno al dormir. Camine hasta él y me incline un poco - Adios, Bill. Descansa.

En camino al trabajo solo pensaba en lo lindo que se ve al dormir.

Entre y a hacer la rutina de todos los días. -Hey, Dipper. Luces diferente hoy. - Me comento James, mientras yo hacia un informe.

-¿Ah, sí? Bueno, creo que mi rutina comenzara a cambiar, de una forma adorable. -Conteste.

Bill.

Desperte, de nuevo en esta habitacion la cual nuevamente se siente muy calida. - ¿Dipper? - Dije, diriji mi mirada a un reloj digital que tiene en una mesa de noche. 09:00 am, ya no esta aquí...

Salí de la habitacion, en la mesa estaba una nota.

Bill.

Lamento lo de ayer, hay comida en el refrigerador (la que tragiste). Calientala y desayuna, jaja.
Puedes irte cuando quieras, el seguro lo puedes poner en la manija de la puerta. Adios.

Maldita sea, pensé.

Desayune, note que Dipper tiene mucha comida que se esta hechando a perder. Bueno, entiendo que no lo sepa cocinar...aun decuerdo cuando me dio de cenar. Sinceramente no sabe hacerlo...sabia amargo y quemado.

Comence a reirme un poco al recordarlo. Bueno, ya se como agradecerte...fuíste muy amable ese día apesar de que era un extraño.

Ese cariño que sentí contigo fue...lindo, me trataste como si fueramos amigos de toda la vida.

No me tarde mucho, utilice la mayoria que en poco tiempo ya no iba a servir.

Dieron las siete, las ocho y él no llegaba. Tal y como ayer, hasta que se oyo el sonido de la puerta. Voltee, se veía gastado y serio, camine un poco para saludarlo, also la vista - ¿Bill? -Sonrio.

-Vaya, pense que ya no estarias aquí hoy - Me dijo alegre.

-Si...Supongo que quieres descansar así que ya me ire. Te prepare algo, perdon por eso.

-¿Perdon? ¡¿De qué hablas?! -Dijo divertido - ¡Esta bien! De hecho, huele bien. Vamos - Me tomo de la mano y ambos fuimos al comedor.

El sirvio, en durante toda la cena repetia una y otra vez que tanto le gustaba.

-Dipper, gracias por pretarme tú baño - Dije saliendo de su cuarto - ¿Dipper? -Camine un poco y lo ví dormido en su sofa, se veía calmado.

Estaba sonriendo como idiota, hasta que algo vino a mi mente y se me borro esa sonrisa - Ahh...-Suspire - Mi deuda esta pagada contigo...

Salí de ahí.

Camine un buen rato hasta llegar detras de un bar, me abrieron la puerta tracera - Llegas tarde, "Amber" - se rio, que asqueroso es su aliento.

-Quitate de mi camino, Samuel....-Conteste hirritado, entre.

-¿Donde ha estado la princesa, eh?...Bueno, después de tu castigo no me sorprende que hayas faltado. - Dijo burlon, para después reirse.

Chisté - ¿Donde esta?

-¿Tu vestido de perra? - Este hijo de puta...Comenzo a reirse mientras fumaba - En su camerino, "madam". Oye - Camino hasta mi y abrazo - ¿Ya seras mio?..

-Ni en tus sueños, escoria.- Me aparte.

-Que cruel, Amber. Y bien que con los que te pagan si...

-Jodete - Conteste.

-¿Y si mejor te jodo....? Ya sabes, justo donde muchos han pasado - Llegue a mi limite, camine hasta él y lo golpe, el solo rió al tocarse la mejilla -Cuida tus movimientos, que yo no soy quien anda aquí dando el culo

Sonrio al verme - Quita ese gesto, y ve a hacer tu trabajo, Puta. O él jefe esta vez no te dara una advertencia.

Maldiciendo le hice caso, al estar listo este estupido show empezo para esos jodidos cerdos...


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