Pov Shaoran.

Mierda, mierda, mierda...

Corrí detrás de Sakura, ya no me importaba que murmuraran o hablaran mal de nosotros, ella no merece este sufrimiento, ya ha sufrido mucho.

Llegué rápido al ascensor y lo detuve, me adentre a este, cerré las puerta y lo bloquee, nadie puede salir ni ingresar.

—Sakura déjame...

—Cállate, no quiero escucharte, dejame ir, al fin y al cabo no soy nada tuyo, tu eres libre, simplemente eres el padre de mis hijos ¡No más!. —ella desbloquea el ascensor y oprime el número del primer piso, este comienza a bajar

—Sakura, no es nada de lo que piensas, enserio, yo no estaba bien, yo...

—Nada de lo que digas va ser que cambie la situación, Shaoran, ¡¡vas a tener otro bebé y no soy yo la que te lo dará!!, ¡¡no es conmigo!!, ¿dónde quedó tu promesa? Debiste pensarlo antes ¿No crees? —ella no paraba de llorar, la tomé de los brazos y la arrincone en el ascensor, estábamos pronto a llegar al primer piso —Suelta me, ¡te he dicho que me sueltes!

ella me comienza a golpear con sus pies, estaba muy enfadada. —Sakura perdóname, yo a ti te amo mucho, jamás te cambiaría, eres el amor de mi vida, mi mujer.

—¡No te creo!, ¡NO TE CREO! — me da una fuerte cachetada, me volteo la cara de la fuerza que tenía, ella abre sus ojos, tapando su boca, jamás nos había pasado algo así, sale del ascensor, la recepción estaba llena, pero nadie noto nada.

Mire el espejo, me alcanzó arañar la cara, una gota de sangre bajó por mi mejilla, negué ignorando este detalle, las puertas del ascensor comienzan a cerrar, antes de que se cerrarán las puertas  corrí detrás de ella, pero antes de...

—Choji, necesito que elimines el registro de grabaciones, una hora antes por favor.

—Si señor — el de sistemas siempre lo tengo en la entrada, es lo mas rápido, comienzo a correr hacia donde estaba Sakura, la lluvia estaba bastante torrencial, no paraba. Cada vez era más intensa.

No veía bien el camino, creo que esta vez sí llamé la atención.

Por los dioses, ¿ahora que hago?, la estoy perdiendo definitivamente, moriré si eso llega a pasar.

¡Es mi mujer!, a lo lejos veo que ella estaba caminando, sus manos estaban abrazando sus brazos debe tener frío, por un instante giró su cara hacia atrás, creo que ya me visualizo, ¡si lo hizo!, ahora corre como si hubiera visto un fantasma, ya recuerdo lo atlética que ella era de joven, ¿cuántos años han transcurrido ya, desde entonces?

Corrí y la alcanzó, ella había llegado a un parque pero cae, la alcanzó y la tomó de la cintura, pero ella me da otro golpe para que la suelte

—Te dije que me dejaras en paz Li. —mi corazón se hace pedazos. — Lo que me hiciste  no tiene solución, en nueve  meses nacerá y en un año más te dirá papá. — llora con fuerza. Me arrodillé enfrente suyo, y lloré con ella.

—¡Perdóname Sakura!, no fue mi intención, perdóname — trato de acercarme, pero ella me tomó de los brazos con sus manos y niega.

—No Li, ya no hay manera, serás siempre el padre de mis hijos, pero yo hasta aquí llego, ya veo por qué me trataste tan mal la última vez, sonríes y después me miras mal.

Su brillo se pierde totalmente, aquellas gemas se oscurecen, seguía llorando, yo había provocado esas lágrimas, ¿como carajos llega ella justo en ese instante?.

—Sakura —susurró, ella niega, respira hondo y se levanta

—Señora Hiragizawa para ti, adiós, gracias por todo Shao.. Señor Li. — tapa su boca y corre, venía un auto y ella lo toma, me quedé en el mismo lugar hasta perderla de vista, le di fuertes golpes al lodo y grite con fuerza, este dolor me comienza a matar.

.....

Pov Sakura.

Llegue a la mansión, mire con pesar al chófer, le pedí que esperara, también le daré para que lave la parte de atrás, estaba escurriendo mucha agua y lodo.

Tengo demasiado frío, la soledad de mi corazón, y saber que Shaoran no solo deja de ser soltero a casado y ahora va a tener otro bebe y no es mio. Me deprime.

Suspiré, ingrese a la mansión y le pido a la nana que por favor lleve un dinero a aquel chófer que lo tome completamente.

Subí a mi habitación y me encierro en esta, tomé una ducha en la tina con la ropa puesta, me undi en esta, al salir por falta de aire, me mire al espejo que no estaba tan lejos, y lloré, tenía mis ojos muy rojos, no quería seguir llorando pero no podía parar, me da tristeza esta situación, me duele el corazón, me pesa respirar, trato de limpiar mis lágrimas, pareciera que en estas fuera la lluvia de afuera.

—Aaaaahhhhh — grite, me levanto de la tina, me retiró la ropa, me coloco una suave pijama, salí de mi baño y me tire en la cama, me arropo con las cobijas, tengo demasiado frío, mis estornudos se hicieron presente, creo que pesque un resfriado.

.....

Pov Eriol.

—¡Ya llegué! — al ingresar a la casa, los empleados me miran bastante preocupados, arqueé una ceja —Llegué sano y salvo, no se preocupen.

—No es eso, joven señor. Lo que pasa es que... La señora, llegó muy mal, ella no ha salido de su habitación desde que llegó, ni siquiera preguntó por sus hijos. —Toshiro iba bajando las escaleras

—Papá, creo que tiene fiebre, la acabo de ir a ver, también hace poco llegué —tiré mis cosas al suelo y corrí escaleras arriba, abro la puerta de la habitación y la vi como una oruga envuelta entre aquellas sábanas. Me acerco a ella. Toque su fiebre, estaba delirando.

—¡Por qué me pasan estas  cosas... Mamá, papá... Moriré... —abrí mis ojos, trato de moverla.

—Sakura, amor, Sakura, cariño... —la tomó entre los brazos y nos metimos a la ducha con la ropa puesta, debía bajar esa fiebre, puedo asegurar que tiene 40 de temperatura. —Sakura, todo estará bien.. —cierto la llave y me encaminó a nuestro closed —Perdón Sakura, perdón primito — le quitó la ropa que tenia puesta, expuse sus pecho, mire hacia otro lado, se que me he sonrojado, Sakura no es para nada fea, pero... ¡Esto es muy incómodo para mi!, y tampoco la dejare así.

Le puse una suave blusa blanca y una sudadera, la puse en la cama, y corrí a cambiarme tome unas medias y se las puse a ella, la volví a arropar con las sábanas y así mismo la baje.

—Dile al chófer que nos vamos para el hospital —mire a Toshiro quien tenía sus mejillas llenas de  lágrimas — No te  preocupes, todo estará bien, cuida de tus hermanos, te quiero Toshiro.

—Y yo a ti, cuida de mamá por favor. —asiento, subí al auto, le pedí a la nana que no le quitará los ojos de encima a los  niños.

—Sakura ¿Qué te puso así? ¿Por qué estás en este estado? —su respiración se hace más rápida, estaba sudando, por los dioses, jamás la vi así a ella, ni con depresión.

—Er.. Eri..ol — abre y cierra sus ojos, ella estaba agitada, la silencio con cariño y le pido al chófer que acelere, llamó a Yuki para que prepare todo.

Al llegar al hospital los enfermeros y Yuki estaban esperando en la entrada, la tomaron  y se la llevan rápido para urgencias, Yuki me mira.

—¿Qué pasó con Sakura? —niego, ni yo mismo lo sé.

—No se, tampoco sabía que llegaba hoy de Japón — mi teléfono comienza a sonar, mire el nombre y respondí.

—Shao... —el me interrumpe, la furia invadió todo mi ser  —VEZ LO QUE TE DIJE, MALDICIÓN SHAORAN, SAKURA ESTÁ HOSPITALIZADA Y ES TU CULPA, TE DIJE QUE NO LA HICIERAS SUFRIR MÁS, VETE AL CARAJO IMBÉCIL. —se que esta mal esto, pero... Es Sakura, y la conozco desde pequeña, jamás la dejaría a un lado y siempre estaré más a su favor que de cualquier persona.

....

Camino de un lado a otro, maldita sea, ¿cómo se dio cuenta de ello?.

—¿Se dio cuenta de que Naoko estaba embarazada? —abrí mis ojos, él ríe amargamente — Ella vino a mi, que su abuelo sabía lo bueno que era yo como doctor, ya que trato a Sakura, le dije a ella que Sakura es mi paciente y no estaba disponible para alguien más

Yukito puede ser muy celoso en ese sentido además de que, por más que le pidan sumas de dinero o le ruegue, ese hombre no cambia al cerezo.

—Yuki, una tras otra, cual será la continuación.

—Jmm a este paso.... —suena el móvil de Yuki y corre en dirección donde habían llevado a Sakura, espero que nada malo este pasando.

.....

—Yukito, por favor, solo quiero que tu me atiendas no quiero que nadie sepa de mi proceso, más que usted —iba pasando y Yuki saliendo de la habitación de Sakura, en esas veo que Naoko se acerca a Yuki, pero esta vez la note muy desesperada.

—Naoko, yo no quiero...

—Por favor pienselo, estudie mi caso, nadie más lo sabe, solo tu y mis padres, se lo suplico. —ella sale tenia  unas gafas oscuras pero se que estaba llorando, me escondo detrás de la pared, ella no se percató que estaba aquí.

¿Estudiar su caso?, ¿qué pasa con Naoko?

—¡Yuki! — le llamó, él baja los documentos y esconde el nombre de estos, le sonrió — ¿Sakura como sigue?

—Ya está más estable, está en reposo, es mejor dejarla hasta mañana para hacerle un seguimiento, está muy... Triste, no abre sus ojos pero le salen las lágrimas, jamás la vi así, ni cuando..

—Ni lo digas, si no fuera por ella o que alguien estuviera aquí aparte de ti, iría y buscaría a Shaoran para darle su buen puño en esa cara de niño bonito, le dije que supiera manejar esta situación...

....

Pov Sakura.

Así que tú también lo sabías, ¿no Eriol?

Mire  hacia la ventana, escuche la súplica de Naoko y de paso la conversación de estos dos, hablan de Shaoran, pero son iguales.

¡De qué más me tengo que enterar!

Veo que ingresa a la habitación —¡Vete! —le ordenó, él abre sus ojos —Vete de aquí, también me mentiste — él se quita sus anteojos, y me mira con desilusión

—¡No era yo quien te debía contar, Sakira!.

—Pero si prevenirme, Eriol, se supone que somos un equipo, pero… Ya vi que no.

—¡No sabes lo que dices Sakura!.. —sale de la habitación, me tape con la sabana, y continúe llorando, ahora Eriol me da la espalda y esta a favor de todo lo que esta pasando.

Estoy sola...

....

Horas más tarde, Yuki ingresa a la habitación, me sonríe, pero yo seguía sin emitir alguna alegría, no me nace ahora.

—Sakura, yo tengo que decirte...

Le interrumpo — Trata a Naoko, para que te suplique es porque debe ser  muy importante, además... Es el bebé de Shaoran, podré odiarlo, pero no a su bebé, él no tiene la culpa.

—Gracias Sakura — él comienza a tomar mi presión, a ver como seguía con mi anemia y si ya estaba mejor, aunque no era así.

No estoy bien.

—¡Me quiero ir a casa! —ordene, él niega

—Hasta mañana te podrás ir a tu casa, Sakura. Todavía no estás bien

—Y jamás lo estaré — susurre, cierro mis ojos y mejor trato de dormir un poco.

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Continuará
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