Pov Sakura

Al siguiente día, los enfermeros me checaron para ver como seguía, ya estaba mejor físicamente, porque mentalmente estoy fatal.

Me enviaron medicamentos y reposo por tres días, si hago caso de encerrarme terminaré enloqueciendo, salí de la habitación, Yuki me detenía pero yo no lo dejé, firme mi salida, no iba a esperar a nadie, me solté de él y salí del hospital.

Es mi derecho de irme de este lugar, si ya estaba bien.

Tomé un auto y me dirigí al centro comercial, para comprar algo decente para ir a la empresa, todavía no quiero ir a la casa.

No todavía.

Al llegar al small, compre un Jean claro y una blusa curuba, unos zapatos altos blancos. Pagué y me coloque de una vez la ropa, me importaba poco las miradas y lo que dijeran.

Tomé nuevamente un auto y me dispuse a ir a la empresa, al llegar a esta, todos me saludan muy alegres, yo medio sonreí, lo habían notado, me subí al ascensor para evitar esas miradas

Al llegar, Hikari me dio el reporte, agradecí su esfuerzo y me encerré en mi oficina, le pedí que no fuera molestada.

Suspiré y me tiré a la silla de la sala. Tape mis ojos con el dorso de mi brazo, y llore, era algo que no podía detener, me pregunté una y mil veces, ¿que era felicidad?, ¿que era vivir con un amor que tu siempre vas a amar toda tu vida, pero que jamás lo tendrás en tu vida?.

Me preguntó, si yo debía haber nacido en esta vida.

Me levanté de la sala, bebí agua y me dispuse a trabajar, debía entretener mi cabeza en otra cosa.

Voy a enloquecer.

Comencé a revisar todo los documentos, a trabajar lo que dejé en Japón aquí en China. Debía continuar con los balances de las empresas, debía continuar con mi vida, ver a mi hijos, ser mamá, ser esposa, ser empresaria, ser una máquina andante sin vida y sin sentimientos.

Odio esta vida de mierda, esta vida que sólo te arrebatan tu felicidad de las manos.

¿Cuánto sacrificio se debe seguir pagando para salir adelante de ello?

Que rápido pasa el tiempo, hoy lunes, odio los lunes, qué más debo sacrificar para ver feliz a los míos. Pará ver feliz a mis hijos.

—Señora la busca...

—Sakura, debemos hablar — Hikari estaba asustada, le lance mi lapicera a Shaoran

—¡véte!, véte de aquí con tus mentiras

—Hikari, que nadie nos moleste, no digas nada —ella asiente, Shaoran cierra la puerta con llave, abrí mis ojos, no me moví de mi lugar —¡Debemos hablar Sakura!, no es como tu piensas, la mujer de mi vida eres tú, no veo a nadie mas como te veo a ti.

—¡No te quiero escuchar! — tape mis oídos y cerré mis ojos, si parezco una niña pequeña.

—Sakura ese día bebí demás, bueno Eriol estuvo primero ebrio, después hicimos payasadas, o es lo que mi abuelo me cuenta, Sakura te juro que no supe en qué momento sucedió, solo sé que sucedió, pero no estaba en mis cinco sentidos.

—No, no, no, no, no, no, no...

—Shhh... Amor.. —se acerca a mi, no me di cuenta cuando que ya se encontraba dentro de mi escritorio de trabajo, gira mi silla y se arrodilla para mirarme a los ojos — Te amo con toda mi alma, eres mi vida entera Sakura — él comienza a llorar —Mírame que no te miento, perdoname, por favor, yo jamás te podría herir, eres la mamá de mis bebes,   adoro a mis hijos, estamos luchando por estar siempre juntos, Sakura por favor — yo negaba una y otra vez, él suelta un sollozo — Eres la mujer de mi vida, muero si me sigues rechazando, no te puedo ver lejos de mi, lo sabes — me abraza, mis manos quedan pasmadas en el aire no esperaba a que él me abrazara, su fuerte aroma me hace cerrar mis ojos nuevamente, y pensar lo rico que sería tener ese olor en mi closet, en mi cama, poderle arreglar su ropa y aplicarle sus lociones. —No me abandones... —lloré con él. Lo abrace con fuerza, yo también lo amo, a quien voy a engañar, me duele mucho esta situación

—Shaoran — él se separa de mí y pone sus manos en mis mejillas —Lo mejor será que nos demos un tiempo, esta vez bastante largo, debes hacerte cargo de... — me besa, me calló con un beso, niega encima de mis labios, me levanta de la silla para abrazarme con más fuerza.

—¡Ya te dije!, que si te vas de mi lado, ya no viviré, seré un hombre muerto en vida Sakura, se lo juro.

—Pero.. —vuelve y me besa, me fue sacando de mi escritorio para llevarme a la sala — Shao.. — caemos juntos en el mueble de la sala, él no deja de besarme, pasa su mano por todo mi cuerpo, suelto uno que otro suspiro, hace rato que no lo sentía, su calor, su aroma, todo en el lo extraño, pero tampoco puedo olvidar lo que está pasando, pongo las manos en su pecho y lo separó de mi —Shao... No, esto está mal, yo no...

Me quita las manos y nuevamente junta mis labios con los suyos, no se por que siento que estoy viviendo la misma historia que mi abuela.

¿Será que así es nuestra  despedida?, separe mis labios de los suyos y lo abrace del cuello, negué una y otra vez.

—No Shaoran, yo no me puedo despedir, no me quiero despedir, no soy capaz de despedirme, yo no me quiero alejar de ti, yo no...

—¿Y quien se está despidiendo? Solo tú dices que nos demos tiempo, yo ya te dije mi posición, solo fue un error y me haré responsable y ¿Tú?, jamás me alejaría de ti Sakura, tu eres mi aire, eres vital para mi vida.

Me incorpore en la silla, Shaoran también, esta vez  yo me quite la blusa por si sola, y me subí encima de él, lo bese como una demente, eliminar toda huella que haya dejado esa mujer en su vida. En su cuerpo, en nuestra vidas.

—Te amo Sakura.

—Y yo te amo mas a ti, Shaoran

Esa tarde, hicimos el amor, varias veces…

......

Revise la hora en mi reloj, ya eran las cinco de la tarde, Shaoran y yo seguíamos desnudos, él me acariciaba la espalda y yo su pecho

—Sakura, ¡Quiero huir contigo y con mis hijos!

—Ya no podrás, recuerda que el hijo de Naoko... —mordí mi labio, me duele decirlo, me duele mucho.

—Perdoname, no quise... —lo bese y negué, me levanté y comencé arreglarme

—Será mejor que te vayas, no vayas y sea que nos vean y piensen lo contrario, además, ya has dormido mucho aquí.

—Tienes razón — tomó mis labios y me besó —Gracias por tanto amor Sakura, nos vemos después, te amo cerezo.

Sale de la oficina, al rato escucho un grito de mi secretaria. Salí casi volando, quedé petrificada al ver aquella escena.

La mano de Eriol tenía sangre y Shaoran estaba en el suelo con la nariz y labios reventados

—¡Y agradece que no te doy más duro!, ¿porque continuas con este juego?. — jamás había visto a Eriol tan enojado —Y tú continuas con este circo, quien los  entiende —Eriol vuelve y mira a Shaoran —Te lo dije y te lo repito, deja de estar lastimando a Sakura o yo mismo te mató —tape mi boca, Eriol me da una última mirada de desilusión y se entra a su oficina, realmente estaba molesto y yo...

Hikari va a su puesto y toma una toalla mojada y me la entrega, me arrodillé y limpié la sangre que tenía Shaoran regada en su cara, ya su camisa se había manchado, mis ojos se llenan de lágrimas.

—No llores, es normal, te quiere mucho, es mi culpa cerezo, no lo malinterpretes.

—Por eso te digo que es mejor un tiempo, lo siento Shaoran. — me levanto y me encierro en mi oficina, me dejó caer al piso con mis manos en mi cara, escuché maldecir una y otra vez a Shaoran afuera, hasta que se fue.

No los quiero ver pelear por mi culpa, sonreí con amargura, un recuerdo pasó por mi mente, es como ver a Yuna pelearse con Shaoran, ya van dos veces.

....

Ha transcurrido un mes desde entonces; no he vuelto a saber nada de Shaoran, y así era mejor; las veces que se ha hecho reunión de socios  Eriol las antiende, la excusa para que yo no vaya es, que ando de viaje de negocios, aunque no es del todo mentira.

Pronto partiré para Estados Unidos, debía cerrar un contrato con unos inversionistas, lo extraño es que uno de ellos es japonés y está en aquel imperio, debe tener padres estadounidences

Terminó de acomodar algunas cosas —¡Iré contigo amiga!

Le sonrió con cariño —Ya estoy mejor, Tomoyo

Ella sonríe —Pero quiero ir a Estados Unidos, estoy aburrida, dejame ir, además iras con tus hijos, imaginate, ¡necesitas ayuda!

—Si, más tus hijas, ¿cómo pretendes ayudarme? —ella ríe nerviosa —Está bien, pediré que me alisten el avión de la empresa, no quería viajar en él, ¡pero ya que tú vas! — ella me abraza y pega su grito de emoción como si fuera un viaje de excursión  —Salimos el sábado en la madrugada, debes quedarte aquí, además no caería mal…

—Si Saku, eres la mejor. —me interrumpe, sonrió y niego, Tomoyo todo este mes se la pasó a mi lado, cosa que fue muy a favor de Eriol, pues vio a sus dos pequeñas todo este tiempo, jugó con ellas. Hasta dejó de trabajar por ellas, me ha tocado regañar los, también había responsabilidades y una de ellas era la empresa.

Pero me alegraba mucho ver a mi mejor amigo y confidente con sus amores.

Aunque nuestra relación no era la mejor, todavía seguía  enojada con él y viceversa. Aunque algunas veces que estamos solos él tiende a sonrojarse, jamás había pasado algo así con él. Solo encojo mis hombros e ignoró su presencia.

Debía disculparse por guardar aquel secreto, y se que yo también debía disculparme, pero...

Detesto esta situación.

Llame a mi piloto y le pedí que me tuviera listo el avión de la empresa, debíamos salir el sábado, tengo, no solo es  la reunión, es una cena, donde varios inversionistas estaremos reunidos.

Espero que sea rápido todo esto.

Vuelvo a mirar mi móvil, me estaba llamando, el número era de Yuna, pero... No quiero tomar su llamada, se que el bogara por Shaoran y tal vez me lo pase.

Pero esta vez, no quiero más problemas con nadie.

—Madre, ya aliste todo —abrazo a mi hijo y acarició su mejilla él me sonríe

—¿Qué haría yo sin ti, amor? —saca pecho.

—Nada por que yo soy el hombre de la familia, bueno mientras se soluciona todo y papá toma su lugar.

Agachó mi mirada, y evitó la mirada de mi hijo, mis lágrimas siempre me van a traicionar, soy muy llorona

—Madre, ¿pasa algo? Has actuado muy extraño todos estos días, ¿todo está bien?.

Asiento, limpio mi cara rápidamente —Si, todo está bien.

—Eriol también ha estado raro, bueno, mejor no me meto, ya que son problemas de ustedes.

Le sonrió y salgo de mi habitación para ir a la de mis dos pequeños, mis bebes ya estaban comenzando a gatear, qué rápido quieren crecer y yo queriendo que ellos queden pequeños, Toshiro ya esta muy grande, pronto cumplirá sus 15 años, ya es todo un joven muy apuesto, así como su padre.

—Hijo, ¿y ya tenemos novia? —él se sonrojar y niega

—¡Qué cosas dices mamá! - se altera, reí con diversión.

—¿Qué hay de malo?, lo malo sería que me guardes secretos, eso sí me mataría —él suspira.

—Es solo mi amiga, la primera que tengo, aunque es un poco bullosa, me hace acordar a la tía Meiling, pero ella es más educada — ambos reímos —Hasta que no se arregle esto, no me quiero ilusionar madre, detesto el sufrimiento de las personas, ya que te vi por muchos años así, y quien sabe cuántos más.

Abrí mis ojos, tape mi boca, mi hijo está cargando con la cruz también, no, eso sí que no.

—Haz lo que tú corazón te dicta, no pienses en nuestras circunstancias, peleare siempre, después de que sean mis hijos, por la felicidad de mis hijos me hago....

Mi hijo me tapa la boca con una mano y niega — No digas esa palabra, es muy fuerte, nos quedará plasmada en nuestras cabezas, después de escucharlo —él mira a mis dos bebes, asentí y le sonríe, abrazo a mi hijo.

—Siempre has sido maduro para tu edad, amor

—Lo aprendí de ti, jamás lo olvides.—aunque algunas veces me comportó como una niña.

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Continuará
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