Capítulo cuatro: Amarga respuesta

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Para la inauguración de un nuevo programa de entretenimiento sobre artistas y espectáculos confiables, Jennie, Lisa y Jisoo habían sido especialmente invitadas.

El mánager estaba fuera del set de grabación, sentado al lado de los camarógrafos mientras arreglaban a las chicas. No había de qué preocuparse, en el contrato, la producción del programa les aclaró que no iba a ver ningún tipo de pregunta incómoda o algo que pueda dañar su imagen.

Jennie fue la primera en terminar de alistarse, por lo cual estaba con el celular entre sus manos para fingir de esa manera que no miraba disimuladamente a la única omega. La voz de Jisoo hablándole a la tailandesa, fue la razón de prestarles palpable atención.

—No es nada, Jichu —habló dificultosamente debido a que estaban echándole un poco de brillo labial—. Es solo que tengo un poco de sed, hace más de tres horas que no he tomado nada.

—Oh, no te preocupe —le sonrió—, a mí ya me sueltan y entonces iré a la expendedora por un refresco.

La alfa castaña admiró la escena y entonces no dudó en ser ella quien trajo la bebida favorita para Lisa. Tenía que hacer muchos méritos.

—Lili —le llamó estando cerca al fin—, te traje esto. Dentro de poco tendremos una larga entrevista y no debes tener la garganta seca, podría dolerte luego.

Jisoo miró a su amiga analizadoramente, estaba segura de que ella había escuchado su conversación con la menor. Sonrió con picardía, Jennie no perdía el tiempo.

Lisa esperó a que el estilista terminará su trabajo y luego se levantó aliviada.

—Uh, muchas gracias, Unnie. En verdad que lo necesitaba, es demasiado atenta —le sonrió dulcemente, alterando los latidos de la alfa.

—N-no es nada —carraspeó intentando ocultar su nerviosismo—. Ya sabes que haría mucho por ti.

La mayoría de los presentes lograron escuchar aquello, lo suficiente como para que un ligero rubor se acumulara en las mejillas de la pelinegra.

—¡Bueno, chicas! —el productor aplaudió fuertemente llamando la atención de todas—. ¡Empezamos en un minuto, a sus lugares!

Ellas asintieron, Jennie se acercó traviesamente a la omega y le dio un corto beso en la mejilla, sorprendiéndola aún más.

—Te ves preciosa, como siempre —le susurró, sonriéndole y alejándose para tomar asiento con Jisoo.

Lisa sonrió, sintiéndose dócil y feliz por el simple gesto que para ella estaba siendo un gran revuelo en su interior.

Los minutos fueron pasando de manera acompasada pero divertida. El conductor logró una estupenda química con las más jóvenes y eso se reflejó en las cámaras. Sonreían, contaban anécdotas interesantes y opinaban sobre ciertos temas que se les indicaban. La parte más interesante fue cuando llegaron a la sección de preguntas de todo tipo e incluso en el que participaban los fanáticos.

—Bueno, Jisoo, la primera pregunta es para ti.

—Uh, ya quiero escucharla —le sonrió, acomodando los mechones de su cabello.

—Dice: "Querida Jisoo Unnie, todos hemos visto su gran crecimiento como idol en estos últimos meses. ¿Qué se siente ser alguien tan destacable y perfecta en la industria? Por cierto, la amo a usted y a su empeño en todo lo que nos comparte".

—Primero, no soy su Unnie —dijo con seriedad fingida, incluso en sus facciones. Todos rieron sonoramente y Jennie le dio un zape en la espalda—. Y respecto a lo segundo —su semblante cambió a uno más reflexivo ante la pregunta y se sinceró, todos la miraban con atención—, yo aún no alcanzo lo que verdaderamente debería. Me falta mucho por recorrer y es por eso que llevo en alto mi promesa de ser mejor cada día para quienes me siguen y apoyan. Realmente me siento agradecida con todo el amor que me demuestran y no hay mejor paga que darles presentaciones excepcionales y canciones que pueden compartir muchos mensajes importantes para la juventud de hoy en día. Así que me siento muy bien, y me seguiré sintiendo así mientras mi música siga rompiendo estereotipos y llegue a más personas —sonrió ampliamente, mostrando su linda sonrisa—. Todos —miró fijamente a la cámara, alzando ambas manos—, los quiero mucho, gracias por seguir conmigo en esta travesía.

Todos la. admiraron luego de que terminó de hablar. Lisa en especial la miró con burbujeante orgullo en su pecho. Era increíble la madurez que había adquirido para su trabajo y para seguir sus metas a pesar de las dificultades. Era su ejemplo a seguir.

—Wow, eso es magnífico, nuestra Jisoo es increíble —alagó el conductor, la menor solo sonrió media apenada.

Las preguntas fueron pasando, las tres jóvenes se turnaban para responder de manera ordenada y divertida dependiendo de la ocasión.

—Oh, hay una última pregunta y al parecer es anónima. Es para Lisa y Jennie —ambas se tensaron de manera inevitable, claro que una más que la otra. ¿Qué pregunta les incumbía a ambas?—. Va: "Es obvio el asunto que se traen Jennie y Lisa. No nos pueden engañar por mucho tiempo, sería mejor aclararlo con nosotros sus fans. Así que, ¿qué clase de relación tienen? ¿Ya son pareja? Hay fotos que demuestran que andan en salidas".

La castaña alzó la mirada tan pronto como el conductor concluyó la lectura y el mánager por poco y cortaba la transmisión con fastidio e indignación. ¿Qué clase de pregunta era esa para las chicas?

Lisa se sintió realmente incómoda, tanto que sus mayores pudieron notarlo. Jisoo no sabía cómo alivianar la tensión que de pronto decoraba todo el ambiente. Justo cuando la castaña decidió hablar por ambas, la omega la interrumpió.

—¿De dónde sacaron eso? —intentó sonreír con burla—. Sí acepto que hemos salido, pero solamente como compañeras de trabajo. Jennie es mi Unnie al igual que Jisoo y, por lo tanto solo hay un estrecho vínculo fraternal. No somos pareja y tampoco lo seríamos en algún momento de nuestras vidas, ella va a un ritmo y una etapa distinta a la mía. Realmente es algo gracioso la gran imaginación que tienen ciertos fans, están realmente equivocados —intentó reír—. No hay nada entre nosotras. ¿Cierto, Jen?

La alfa tragó grueso, lamentablemente el amargo nudo en su garganta se lo impedía. Le sonrió como si lo escuchado no hubiera dolido y destruido sus ilusiones, asintió en su dirección sintiéndose patética por creer cosas que jamás iban a poder pasar. Mordió su labio inferior con fuerza mientras agachaba la mirada para ya no ser grabada.

No somos pareja y tampoco lo seríamos.

Mierda, ¿cómo iba a sacar eso de su cabeza? Estaba resonando, como una incesante punzada de dolor.

—Bien, eso es todo. Gracias por aceptar nuestra invitación —determinó el final.

Todos aplaudieron, mas Lisa se sentía descolocada. Aquello que dijo, no era del todo cierto pero era necesario. Quizás solo tenía que planteárselo, nada entre Jennie y ella podía pasar.

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