Mientras secaba su cabello se dirigía a la sala de masajes ahí también se encontraba Milk ya que Bulma y Vegeta habían decidido no desvelarse el día anterior a la boda en una típica despedida de solteros. Esto a Goku se le hizo extrañó pues hasta el había tenido una, pero Vegeta le dijo “si tienes la necesidad de celebrar descontroladamente una noche antes de tu boda porque sientes que vas a perder tu libertar ¿te estas casando con la persona indicada?” de esa forma la pareja prefirió relajarse. Mientras la joven de cabello azul se relajaba y embellecía en un lujoso spa, su futuro marido pasaba un tranquilo día con su hijo mirando películas y comiendo chucherías.
La mañana siguiente fue un descontrol, llamadas de todos lados, reporteros pidiendo asistir al evento ¿y como no? Si una de las magnates mas jóvenes estaba a punto de contraer matrimonio con uno de los abogados mas exitosos. El padre de la joven ya teniendo años de experiencia con la prensa le sugirió invitar a solo dos reporteros que ya eran de su confianza y no tendría que preocuparse por títulos amarillistas, no necesitaba agregarle estrés a ese día tan importante.
-estas hermosa mi pequeña-le dijo su padre mientras caminaban por el largo pasillo decorado con pétalos azules, el color favorito de ella.
-gracias papá-ella siempre había sido el foco de atención por falsas noticias o exageración de la prensa y la verdad ya estaba acostumbrada, pero la atención que estaba recibiendo ahora era completamente distinta, se estaba muriendo de nervios, tenia miedo que esos tacones pisaran sin querer su caro vestido y tropezar-no me dejes caer-susurro-
Cuando la música comenzó a sonar y las personas se pusieron de pie, el corazón de vegeta empezó a latir, pero no se comparo a los latidos frenéticos que sintió en el momento que su hermosa mujer inicio su caminata por ese pasillo cubierto de pétalos de flores
-siempre te sostendré cariño-a pesar de haber crecido en una cultura donde los padres son estrictos y nada demostrativos, su padre siempre había sido cariñoso con ella y con su hermana, era duro cuando ambas lo requerían pero el amor nunca les había faltado-llegamos pequeña-no lo había notado pero ya estaba parada frente al altar, su padre estaba pasándole su mano a Vegeta, ese gesto aunque era algo normal le pareció extrañamente doloroso, definitivamente ya no era una niña. Antes de tomar la mano de su prometido se lanzo a los brazos de su padre dándole un enorme abrazo.
-eres el mejor padre del mundo, te amo-beso su mejilla para luego separarse y dejarlo ir a su asiento entonces ahí si se sintió lista para dar el siguiente paso-estas realmente guapo-le dijo en voz baja a Vegeta lo que lo hizo sonreír, pero no tuvo tiempo de responderle porque el ministro comenzó con su discurso de amor y paz.
-¿Vegeta aceptas a esta joven mujer en sagrado matrimonio, para amarla, respetarla, cuidarla y estar para ella cuando lo necesite?
-tomando uno de los anillos que Goku sostenía dijo-prometo amarte, respetarte, cuidarte y estar para ti hasta el ultimo día de mi vida, mientras tu me aceptes y me creas digno de ti-deslizo el anillo por el delicado dedo de ella.
-el ministro sonrió y volvió a hacerle la pregunta a Bulma entonces ella respondió-yo no creo que haya alguien mas digno de mi que tu, eres el único con el que quiero pasar el resto de mi vida, se que estoy tomando la decisión correcta, también prometo amarte, cuidarte, serte fiel y estar siempre para ti-acto seguido le coloco el anillo en el dedo anular. El ministro los declaro marido y mujer entonces cerraron ese trato con un beso mientras los invitados aplaudían emocionados, sobre todo los padres de la joven pareja.
-cariño ¿Qué haces ahí?-Bulma se encontraba en la mesa donde se dejaban los regalos-luego los veras, tenemos que saludar a los invitados
-quería ver si nos dieron cosas bonitas
-te comprare todo lo que quieras luego-la tomo de la mano y comenzaron a acercarse a las mesas para saludar y tomarse fotos con amigos y familiares. Un incomodo momento se formo al llegar a la mesas de los tíos de ella, justo a quienes no había querido invitar pero por cortesía lo tuvo que hacer.
-esta boda seguro costo una fortuna, y ese vestido es demasiado ostentoso ¿no te parece? ¿Por qué no hicieron una tradicional boda japonesa jovencita? ¿te avergüenzas de tu cultura? ¿sabes lo que dirá la gente?
-por supuesto trabajo todo el año y las cantidades de dinero que  gano son enormes, claro que querría derrochar dinero en un día tan importante para mi, ¿Qué dirá la gente? Lo mismo que ustedes supongo, miren los tiempos cambian y no puedo complacer a todos, disfruten la comida y bebida gratis-con ellos no se tomo una foto, no quería el recuerdo de familiares tan venenosos.
Ella no le tomo importancia a esos comentarios, es mas, ya se los esperaba pero no podía negar que se sentía un poco incomoda. El momento de su primer vals llego, él noto como sus manos temblaban así que le hablo al oído mientras de forma lenta se movían.
-eres la mas hermosa de la fiesta, deberías sentirte segura ¿en donde esta esa mujer sexy que le hace frente a todo y todos?
-hoy no me siento yo misma, siento que debo ser perfecta o todos hablaran-suspiro pero le regalo una sonrisa cuando su marido acaricio su mejilla mientras le respondía.
-siempre eres perfecta-beso su mejilla-disfruta este momento porque luego lo extrañaras y sentirás que no lo aprovechaste lo suficiente-la inclino hacia un costado, al momento que la canción terminaba ellos cerraron ese bonito vals con un romántico beso-eres una reina, actúa como tal.
Para suerte de ambos la fiesta continuo muy bien, las veces que ella había intentado estar al pendiente de cada detalle él estaba ahí para decirle que no se debía preocupar de esas cosas, por algo habían pagado a los empleados, su único deber era divertirse, comer y beber hasta embriagarse si lo deseaba, él la cuidaría.