Jimin miró su ropa interior, tenía boxers, claro que sí, pero también tenía conjuntos de encaje que tanto amaba porque eran bonitos, cómodos y sexis. Sonrió, nadie se enteraría que llevaba ese tipo de ropa interior.

Metió algunas bragas de encaje y algunos boxers, Min no le había dicho cuanto tiempo estarían en Japón. Guardó su pijama y ropa bonita, ropa sexi, ropa elegante y ropa casual, sí, Jimin era de esas personas que llevaban mucha ropa aun sabiendo que solo estaría un día lejos de casa.

Sonrío y después cerró su maleta, pero algo se le olvidaba. Corrió a su mesita de noche, ahí escondía sus juguetes. Abrió el cajón y los miró, ellos habían sido una buena compañía cuando Taehyung se iba de viaje por negocios o cuando quería divertirse y sacarse fotos provocativas para su papi.

Hacía mucho que no se divertía con ellos y les podía dar uso en el viaje a Japón. Tomó sus favoritos y corrió por una bolsita de tela para meterlos y después esconderlos en su maleta.

Ahora sí, su maleta estaba lista. Sonrió y después regresó a su cama, ya había cenado y puesto su pijama, era hora de dormir.

[💦]

Escuchó que llamaban a su puerta. Terminó de mirarse en el espejo y luego corrió para atender.

Min se encontraba del otro lado esperándolo. Abrió con una sonrisa y lo invitó a pasar mientras terminaba de meter sus productos para la piel y demás cosas en su bolso de mano.

—¿Tu maleta ya está? —preguntó. Jimin asintió.

Yoongi la tomó y salió con ella para meterla al auto. Jimin regresó a su habitación para tomar su maquillaje, pronto lo guardó y por último tomó su bolso, mirándose una última vez en el espejo.

Sus ojos estaban un poco hinchados por llorar antes de quedarse dormido, pero ya no importaba, estaba feliz y emocionado, su padre siempre los llevaba a Japón de vacaciones y Jimin conservaba pequeños recuerdos de ellos tres siendo tan felices antes de que todo cambiara y él no volviera a ver a su padre.

Miró a Min entrando nuevamente a su casa, dejó de mirarse en el espejo para cerrar la puerta de su habitación. Apagó todas las luces que no utilizaría en esa semana y con una sonrisa llegó junto al mayor.

—¿Listo? —lo miró de pies a cabeza sonriente. Jimin asintió.

—Listo.

Ambos hombres salieron de casa para subirse al auto del mayor y partir hasta el aeropuerto donde ya los esperaban. Uno de los choferes de Min tomó las llaves y se llevó el auto a casa mientras ellos caminaban dentro del aeropuerto.

[💦]

—¿Estás emocionado? —Min lo miró.

Jimin no había borrado su sonrisa para nada, ni cuando el mayor se acercó para saludar a todos sus socios donde Kim se encontraba junto con su hermano menor.

Jimin apartó la mirada de la ventana del avión y lo miró. Asintió eufóricamente, parecía un niño emocionado por ir por primera vez a Disney y eso le encantó a Yoongi.

—Antes de que todo se arruinara papá nos llevaba a Japón, yo era un niño, siempre me emocionaba y esperaba con ansías la hora de que las aeromozas dijeran que ya habíamos llegado.

—Perdón —Min apartó la mirada.

No podía seguir apreciando esa sonrisa y ese recuerdo tan lindo para Jimin que su padre (el de Yoongi) tantas veces intentó destruir.

—¿Por qué? —su sonrisa se había borrado y ahora lo miraba preocupado.

—Por todo lo que mi padre les hizo, sé que nunca logró destruir a tu padre, pero todo lo demás... Me siento muy avergonzado por eso —suspiró.

Jimin tomó su mano que se encontraba descansando en el respaldo del asiento. Min lo miró sin entender, pero al mirar su sonrisa sintió un gran peso caer de sus hombros.

—No fue tu culpa, pero si con esto te sientes mejor, entonces... Te perdono.

Sonrió para él, haciendo inconscientemente moverse tantas cosas dentro del mayor. Sus corazones estaban en paz ahora.

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¡Hola!

¿Qué les pareció el capítulo?

¿Les está gustando el maratón hasta ahora?

Aquí voy de nuevo

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Esta es la segunda encuesta, ya saben, lo mismo que en la anterior, ustedes van a armar un capítulo de la fic con lo que escogieron

Nos leemos en el próximo capítulo💖

¡Adiós!