Capítulo 5

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Jimin

Curiosidad...

Eso fue lo que sentí la primera vez que te vi. Eras apenas un chiquillo, pero la forma en que te esforzabas a diario para dar lo mejor de ti me hizo admirarte. Solías reprimir lo que sentías, eras tan tímido, callado y con esos ojos de Bambi de expresión asustadiza hiciste que irremediablemente un sentimiento de protección naciera en mí y yo simplemente lo asocié al hecho de que que me recordabas a mi hermano menor. Yo aún no sabía que solo trataba de engañar a mi propio corazón.

Me pegué a ti igual que las pulgas a los gatos callejeros, te seguía a todos lados y tú escapabas asustado por mi loco y extrovertido comportamiento. A veces te ponía incómodo, pero yo solo quería acercarme, me sentía atraído por tu brillo, como las polillas a la luz. Deseaba que tuvieras a alguien en quien confiar y apoyarte. Desde un principio siempre quise estar ahí para ti, ser tu soporte y escudo.

Me esforcé, en serio lo hice, pero tú te abriste a ellos primero, ellos se ganaron tu confianza, aprecio y admiración antes de que yo lo hiciera. Me dolió, pero no quise darme por vencido y seguí siendo esa molesta pulga que se te lanzaba encima, bromeaba con besarte, te pedía citas y buscaba como abrazarte a cada segundo.

Le seguí diciendo a mi corazón que era porque me recordabas a mi hermano. Fuimos tan estúpidos en aquel entonces mi amor.

Los meses pasaron y todo seguía igual, aún salías corriendo cada que me veías y yo en serio que quería seguir iyendo trás de ti, pero entonces muchas cosas se me empezaron a venir encima, aplastando mi alma y destruyendo mi esencia.

Todas aquellas publicaciones en donde "resaltaban" lo molesto que era mi comportamiento, lo mucho que me odiabas por ello y el supuesto deseo oculto que tenías de que abandonara la banda para dejarte en paz, fueron como una fuerte bofetada. Habían tantos análisis sobre eso en las redes sociales que realmente me pregunté si era así, y llegué a la conclusión de que si tal vez no me odiabas aún, ya sentías desprecio por mi persona. Me fui apagando de a poco, me hundí profundo y el sentimiento de soledad me abrumó.

Me aparté de todos, de ti e incluso de Taehyung, quien siempre ha sido un gran apoyo e indudablemente mi alma gemela.

Dejé de seguirte, de abrazarte, de acorralarte para hacer como que te besaría, de decir hasta en las entrevistas que quería salir contigo. Pero ni así logré parar los ataques siguientes, ahora hablaban de mi físico, de mis mejillas rellenas, de que estaba gordo, de mi dientecito chueco, de mi estatura, de mi mal desempeño como cantante. Increíble como con pocas palabras me hicieron sentir inútil y una total mierda sin valor.

Yo quería complacerlos, quería darles la imágen que pedían, pensé que así tú también empezarías a admirarme y finalmente te acercarías a mí. Esa fue mi motivación para pasar de entrenar 10 horas a hacerlo 14 horas del día, para empezar a establecer una dieta que solo consistía en desayunar y cenar agua, y para acudir al dentista a ver si podía enderezar mi diente. Me perdí a mí mismo por querer cumplir con el maldito estándar de Idol perfecto.

Empezaste a hablarme más, me mirabas cuando creías que yo estaba distraído, e incluso me buscabas seguido para aclarar dudas sobre alguna coreografía, cosa que antes hacías con Hobi. Me invitabas a comer cada que podías y te quedabas conmigo cuando entrenaba y ensayaba horas extras.

Me sentí feliz y creí que finalmente me había ganado tu aprecio porque todo el esfuerzo que estaba haciendo había rendido frutos, cuando la realidad era de que tú estabas preocupado por mí.

Me esforcé más y más al sentirme motivado con tu cercanía, hice mi dieta aún más estricta y aumente las horas de práctica. Tú te acercaste aún más de lo que ya lo hacías. Sin embargo, mi burbuja que contenía un mundo de "perfección" en su interior, finalmente explotó aquel día...

Flashback - Narrador Omnisciente

Jimin hyung, ya es muy tarde, ha practicado suficiente por hoy, creo que deberíamos irnos a casa ㅡJungkook estaba sentado en el suelo del salón de prácticas observando preocupado a su mayor, quien llevaba demasiado tiempo ensayandoㅡ. Necesitamos descansar, mañana temprano tenemos que hacer una entrevista ㅡdijo a la vez que se levantaba y tomaba el bolso de Jimin y el suyo.

Solo una vez más, aún no me salen bien algunos pasos, debo mejorarlos ㅡrespondió con la voz entrecortada debido al cansancio. El sudor había empapado por completo su camiseta blanca y su fuerte respirar resonaba en las paredes.

Jungkook aceptó un tanto inseguro, temía que Jimin terminara por lesionarse debido al sobreesfuerzo.

La música se reprodujo otra vez y Jimin empezó a bailar. Jungkook a pesar de disfrutar mucho el ver a su mayor moverse como un completo profesional, lo único que podía sentir ahora era una profunda angustia en su pecho que compartía con los demás miembros.

Todos ellos habían notado como Jimin empezó a perder demasiado peso, como siempre que intentaban que los acompañara a comer trataba de poner excusas para evitarlos, eran conscientes de que el ojimiel se alejaba de ellos y no sabían qué hacer para cambiar la situación que día a día les alarmaba más. Fue entonces que Jungkook tomó una decisión, les aseguró a los demás que se haría más cercano a Jimin para velar por su bienestar.

Hasta el momento había cumplido con lo de acercarse más, pero lamentablemente, a veces no lograba convencer a su hyung de que comiera o descansara lo debido.

Un golpe seco lo sacó del pequeño trance en el que estaba, su vista por instinto fue directo hacia donde antes su hyung bailaba y el castaño sintió su corazón detenerse ante la imágen que tenía de frente. Jimin estaba tirado en el suelo, de su nariz salía bastante sangre y su respirar era débil, sus ojos cansados hacían un gran esfuerzo por evitar cerrarse.

ㅡ¡Hyung!

Jimin vio su reflejo en el espejo y sintió asco de sí mismo, de en lo que se había convertido, se dio cuenta que había tocado fondo. Estaba en lo profundo del océano, pero esta vez Jungkook estaba ahí para salvarlo y llevarlo a la superficie.

¡Hyung! Oh cielos, por favor no te duermas, por favor, joder, no cierres los ojos, no lo hagas...

🦋

ㅡJimin, p-por favor, n-no me hagas e-esto... Por favor, n-no te duermas cariño... A-Amor, no me dejes, p-por favor, por favor, solo respira, n-no te duermas ㅡirónicamente, a Jimin esta situación lo llevó a recordar ese día, en donde un Jungkook más joven entre lágrimas lo cargó en brazos para luego salir de la sala de ensayos corriendo sin parar hasta conseguir un taxi para llevarlo a emergencias.

Esta vez casi todo era igual, bueno, no exactamente, porque ahora la diferencia era que él muy probablemente estaba muriendo, sabía que eran sus últimos minutos para poder apreciar a su amado, quien lloraba sin parar mientras sostenía con fuerza su mano en la ambulancia que iba a toda velocidad hacia el hospital más cercano. La mascarilla en su rostro le molestaba, pero sabía que le ayudaba a estar un poco más de tiempo apreciando a su Jungkookie. El rubio podía sentir como la mano del menor temblaba y bajando su mirada un poco más, notó los brazos y la camisa del castaño llenos de su sangre.

Jimin quería decirle que todo estaría bien, que él estaría bien, pero sabía que con solo hacer el esfuerzo era probable que vomitara más sangre. Después de todo, los paramédicos dijeron que posiblemente alguna de las balas perforó uno de sus pulmones. Su cuerpo dolía horrores y lo que más deseaba era cerrar sus ojos y que todo acabara de una vez, pero no podía hacerle esto a su Jungkook, quien le rogaba entre lágrimas que no se durmiera y él haría un gran esfuerzo por cumplir a esa petición si eso evitaba que su amado sufriera más de lo que ya lo hacía.

ㅡT-Te amo, en serio te a-amo, no m-me dejes, por favor b-bebé, perdóname... P-Perdóname por t-todo, s-solo n-necesito... Te n-necesito a m-mi lado... Ellos t-también te n-necesitan, no p-puedes... No puedes i-irte, p-por favor... Solo resiste amor, s-solo resiste ㅡel castaño no podía apartar su vista del rostro pálido de Jimin, su amado y pequeño hyung Jiminnie, que incluso en esta situación mantenía una sutil sonrisa en un intento de reconfortarlo.

Jungkook aún podía recordar a Jimin cayendo de rodillas hasta desplomarse por completo en el suelo, aún escuchaba el eco de los gritos desgarradores de los demás chicos y las voces desesperadas del público quienes se unieron y no dejaron escapar a aquella chica de alma podrida que se atrevió a dañar a su amado ángel.

La imágen viva del rubio rodeado y lleno de sangre era una completa tortura y sabía que aquello no se iría fácilmente de su memoria. De todo corazón rogaba al cielo para que ese chico tierno que significa su universo siguiera batallando por respirar... Porque de llegar a perderlo, sabía que él también estaría perdido.

Finalmente habían llegado al hospital, trás la ambulancia venían los demás chicos en los autos de la empresa siendo resguardados por guardaespaldas, vieron a un grupo de médicos corriendo hacia ellos ya listos para atender a Jimin, estos se movilizaron rápido para sacarlo de la ambulancia y cambiarlo de camilla.

Llevaron al rubio a la sala de rayos X y confirmaron que dos de las tres balas habían perforado el pulmón izquierdo y la tercera impactó en su hombro derecho. La situación era bastante crítica.

Jimin seguía consciente, pero cada vez se sentía más cansado y su pulso se hacía más débil.

La doctora encargada informó a los miembros y al manager que debían de llevar al ojimiel al quirófano de inmediato. Todos tenían el miedo carcomiendo sus corazones, temían perder a alguien tan especial como Jimin, quien se ganó su amor y confianza sin necesidad de esforzarse demasiado en ello.

Los doctores salieron con rapidez empujando la camilla, los chicos no perdieron tiempo y corrieron deseando verlo antes de que entrara al quirófano. Eran conscientes de que esa podría ser la última vez en que apreciarían el brillo de la vida en los ojos de Jimin.

ㅡEstoy a-aquí mi amor, cuando salgas estaré ahí para ti y t-te daré t-todos los mimos que quieras... Así que p-por favor, n-no te rindas y v-vuelve a m-mí. Te amo ㅡJungkook besó la frente de su chico, quien le vio sintiendo un gran dolor en su corazón por no poder decirle lo mucho que él también lo amaba, lágrimas cayeron por sus ojos sin poder evitarloㅡ. No llores Jiminnie, todo i-irá bien, e-estarás bien cariño ㅡel castaño limpió con suma delicadeza las lágrimas de Jimin.

Los demás trataban de articular alguna palabra, pero simplemente no podían, aún no asimilaban el hecho de que tan horrible situación estuviese ocurriendo realmente, parecía una jodida pesadilla... Ojalá y realmente lo fuera.

Taehyung decidió tomar la iniciativa, aunque sabía que no tenía el tiempo suficiente para decirle todo lo que quería a su amado amigo, ya que cada vez estaban más cerca de llegar al quirófano.

ㅡN-No puedo... No p-puedo perderte a t-ti también, prometiste e-estar co-conmigo, por favor, p-por favor Jiminnie, cumple t-tu promesa ㅡTaehyung tomó con cuidado la pequeña mano del mayor y se encargó de enlazar ambos meñiques, sellando una promesa que tristemente sería rota.

ㅡTe e-estaremos esperando Jimin-ah, t-te daré mucha co-comida deliciosa cuando salgas y hyung promete cuidar m-mejor de ti ㅡSeokjin habló por todos, sentía tanto dolor de ver a esa pequeña bola de energía y sonrisas en ese estado que tuvo que aferrarse con fuerza del brazo de Yoongi, que estaba a lado suyo, para no quebrarse en ese mismo instante.

Jimin les regaló una última sonrisa antes de que los médicos le indicarán a los chicos que ya no podían continuar y que les tocaba esperar en unas bancas fuera de la sala en donde se realizaría la cirugía.

Una hora pasó, el silencio era sepulcral, escucharon al manager hablar con los familiares de Jimin, quienes de seguro ya se habían enterado gracias a la televisión y redes sociales. La noticia de que el Idol Park Jimin había sufrido un ataque se había esparcido por el mundo entero.

Jungkook no quería ni imaginar cómo estarían los Park.

ㅡAsí que... Realmente estaban en una relación ㅡsoltó Namjoon, quien estaba sentado a lado del castaño.

ㅡLo estamos hyung, lo estamos ㅡrespondió sin quitar la vista de la blanca pared.

ㅡDebió ser difícil para ustedes, no sé las razones que tuvieron para ocultarnoslo, pero sabes que ninguno de nosotros les recriminaría algo, estamos para apoyarnos unos a otros Jungkook-ah ㅡNamjoon se acercó para abrazar al castaño y demostrarle que estaba ahí para darle todo su apoyo.

ㅡGracias hyung ㅡrespondió con la voz entrecortada y sin poder evitarlo empezó a sollozar con fuerza mientras se aferraba a Namjoon.

Yoongi, generalmente, aseguraba ser como una piedra, pero los chicos sabían que no era así. Y si bien siempre trataba de ocultar lo que sentía, esta vez simplemente no pudo hacerlo y ahí estaba, con la cabeza gacha, cubriendo sus ojos con ambas manos y el llanto causando espasmos en su cuerpo mientras era abrazado por Hoseok, quien también sentía su corazón romperse en pedazos. Esta vez Hoseok no pudo cumplir su rol de ser la esperanza y el sol del grupo, porque sabía bien que el cielo estaba demasiado nublado. El cielo los acompañaba en su llanto.

Seokjin tenía la cabeza de Taehyung apoyada en su hombro, el menor se quedó dormido después de haber derramado todo un océano por los ojos, el cual ahora seguía siendo derramado por todos los que estaban en esa sala de espera, incluyendo al hyung mayor, quien tenía una fea opresión en su pecho. Era ese molesto sentimiento de que todo estaba por venirse abajo.

Pasaron unos cuantos minutos más y las puertas del quirófano se abrieron. Seokjin se movió haciendo que Taehyung se despertara de inmediato.
Ahora todos veían con confusión al grupo de médicos frente a ellos.

¿Qué diablos hacían ahí perdiendo el tiempo? Ellos debían estar operando a Jimin, ellos dijeron que la cirugía dilataba hasta más de ocho horas.

¿Por qué traían esas malditas caras de arrepentimiento y pena? ¿Por qué les estaban haciendo una reverencia?

No... Por favor no... Jimin no...

ㅡLo sentimos mucho, hicimos todo lo que pudimos, pero... El paciente Park Jimin ha fallecido.

Dejaron de escuchar, no podían hacerlo más, lo habían perdido.

El cielo lloro más fuerte al sentir el dolor que emanaban sus almas, ellos cayeron rendidos y débiles al suelo... Su mundo se había destrozado en millones de pedazos. Ya nada sería igual, nada podría serlo.

El ángel finalmente había sido reclamado por el cielo...

🦋

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