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❛; le transmitía la misma seguridad al igual que aquella persona que perdió.੭ೃ༉
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La chica de orbes azulados tenía su mirada plasmada en el suelo, por la expresión de su rostro se notaba la concentración que tenía, aún seguía procesando los acontecimientos de hace unas horas atrás ¿esto en realidad le estaba pasando?. Amane y ella habían vuelto a "hablar" ya que la chica fue demasiado cortante que apenas a eso se le podía llamar como una conversación decente. Los más importante era que ¡la invitó a salir!. No iba a hacerse ilusiones, nunca le menciono que era de manera romántica como lo hacen los adolescentes de series románticas ¿o si?. Su mente era un lío total. Estaba procesando demasiada información que se le había estampado de golpe como un pelotazo en el rostro.

─Suki-chan ─la llamó por el diminutivo de su nombre al verla tan perdida en las nubes o más bien dicho en las estrellas.

Tsuki siguió con su trance sin responder al llamado de Sakura, sabía que no la estaba ignorando a propósito, la conocía lo suficiente para descartar esa razón, algo se traía entre manos despertando su curiosidad en el asunto, tampoco era imprudente para sacarle la verdad como en las series policiacas. Cabe recalcar que la Nanamine le hacía compañía y viceversa, las dos chicas se encontraban en el salón que comúnmente utiliza el club de radio, sin embargo, el trío de molestos; apodó puesto por la de cabellos verdes, no de encontraban para su paz.

Aunque pareciera algo sorprendente, en estos últimos meses de haberse conocido ─todo gracias a Tsukasa─ Sakura había desarrollado una sincera amistad con Tsuki. No estaba en sus planes amigarse con la fantasma, aveces las cosas no son como esperamos y estaba el resultado. Poco a poco la fue conociendo, le resultó alguien bastante agradable, por lo tanto comenzó a preocuparse por ella como una amiga verdadera.

─.......

─Suki-chan ─sin ninguna otra opción, se acercó hasta ella pasando su mano de arriba hacia abajo enfrente de la cara de la recién nombrada, intentado que volviera a poner los pies en la tierra.

─¿Uh? ¿Paso algo Saku-chan? ─preguntó algo sacada de onda, volviendo a la realidad.

─Eso mismo me preguntó yo. ─colocó sus manos alrededor de sus caderas, inclinado levemente su cuerpo hacía adelante─. Estás muy distraída ¿Te paso algo ayer? ─arqueó una de sus cejas esperando una respuesta concreta de su contraria.

─Saku-chan ¿Puedo confiar en ti para contarte algo un poco estúpido?

─Sabes que no importa que tan ridículo sea, voy a escucharte. Sea lo que sea estoy dispuesta a brindarte mí ayuda ─posó su mano en el hombro de la de cabellos grisáceos mostrándole su apoyo, mostrando una pequeña sonrisa que reflejaba sinceridad. Esas palabras llenaron de alegría a Tsuki, pues la peliverde era alguien que cumplía su palabra.

─Lo que pasa es que... ─tomó un poco aire como si aquella acción le brindará las fuerzas necesarias para expresar lo que iba a decir─, ayer cuando estaba por los pasillos me encontré con... Hanako ─dijó la última palabra en un tono de voz más bajo, quería dejar de sentirse tan mal cuando hablaba del chico, sin embargo, aún le dolía que nunca la fue a buscar.

─¡¿En serio?! ─expresó sorprendida abriendo un poco sus ojos, nunca se espero esa respuesta. Sakura estaba un poco al tanto de la historia de (T/N) y Amane, con lo poco que sabía era suficiente para entender sus sentimientos─. ¿Y que te dijo?

─Quería hablar conmigo y entonces ─cerró sus ojos por unos breves segundos, sintiendo como sus mejillas se volvieron rojas al recordar de la manera en que se lo pidió─. Me invitó a una cita.

Desvió su mirada azulada hacia el suelo al escuchar pero silencio por parte de Sakura; la cual estaba procesando la información en su mente, al llegar a una conclusión llevó sus manos con total sorpresa a su boca, y vaya que si era un poco extraño hacer que cambiara su semblante a uno más expresivo, aunque hace tiempo atrás ya se había hecho varias teorías, la revelación aún era un poco impactante.

─Suki-chan, no me digas que...

─N-no e-es nada de lo que estás pensando ─se apresuró a hablar antes de que la peliverde terminará su oración, movía sus manos nerviosamente a la vez que negaba con su cabeza incontables veces. Resignada, soltó un suspiro para mirarla a los ojos─. Solo es una salida de amigos, al parecer quiere retomar la amistad que tuvimos hace varios años atrás ─su expresión cambió a una llena de melancolía, aquellos tiempos en donde pasaba tiempo con el castaño oscuro eran los mejores─. sabes me gusta la idea de que volvamos a ser amigos.

─¿Pero? Estoy segura que aún hay algo que te incómoda.

─Para serte sincera ni yo misma lo entiendo. A veces lo quiero mantener alejado, cerrar ese capítulo del libro definitivamente, sin embargo, cuando lo tengo frente a mi lo único que quiero es darle un abrazo tan fuerte, no alejarme de él y cuidarnos mutuamente como antes, recuperar lo que alguna vez tuvimos. Lo peor es que existen sentimientos de por medio y se que no serán correspondidos.

Definitivamente se había dejado llevar demás, abrió la boca sin pensarlo. Abrió sus ojos exageradamente observando la reacción de la Nanamine, vaya sorpresa cuando lo que recibió fue una sonrisa; tan sincera y cálida como la de su hermano.

─Y-yo... yo ─de su boca no podía salir ninguna palabra, su cerebro estaba en blanco, por consecuencia no podía crear un excusa creíble para cubrir la confesión que su bocota soltó sin pensar, los nervios no eran de mucha ayuda que digamos. Ay (T/N), a veces deberás que te pasas de pendeja.

─No estés nerviosa ─con su voz serena y su rostro lleno de compresión, se acercó a la joven de cabellos grisáceos para brindarle suaves caricias en su cabeza, está miraba el suelo apenada─. Puedes confiar en mí para lo que sea y puedo aconsejarte si así lo deseas.

Tsuki lo pensó un poco, llevo su azulada mirada hacia arriba encontrándose con los verdosos ojos de Sakura, cada vez veía más el parecido que tenía con su querido hermano mayor.

─Saku-chan ─La recién nombrada soltó un "mmm" para indicar que la estaba escuchando. Ya no podía guardarse más sus pensamientos, le contaría lo que sentía cuando estaba con ella─. Tú me recuerdas mucho a mi hermano ─sonrió con algo de timidez, siempre tenía esa sensación de fraternidad con la peliverde, no supo en que momento la comenzó a ver como una hermana mayor.

─¿En serio? ¿En que nos parecemos? ─preguntó con diversión y curiosidad, aquél dato era muy interesante, en cierta parte ella también la quería como una hermana mejor, técnicamente era una fantasma con más de 50 años, pero aún seguía siendo una adolescente de 13 años que necesitaba alguien que la ayudará en este loco mundo.

─Cuando tenía un problema él siempre estaba allí para aconsejarme, no hubo momento en el que no estuviera preocupado por mi bienestar, acariciaba mi cabeza mientras sonreía... Igual que tú hace unos momentos ─sonrió cerrando sus ojos haciéndola ver adorable, cosa que hablando por completo el corazón de Sakura─. Hay días que lo que extraño demasiado, quisiera poder abrazarlo de nuevo y reírme de lo torpe que podía llegar a ser, en realidad... También extraño a mis padres y a mi amiga.

Otra vez la tristeza quería invadirla, soltó un suspiro reteniendo las lágrimas que amenazaban en caer, ese día había estado demasiado sentimental. Tomó asiento en el suelo, abrazó sus piernas y escondió su cabeza en ellas, sintió nuevamente un delicado tacto en su cabeza, la dueña de la mano era la peliverde con la misma mirada de "tranquila, estoy aquí para tí", está vez no pudo contenerse y se abalanzó sobre ella
─sin llegar a tirarla─ brindandole un fuerte abrazo, el cual fue correspondido al instante con una suaves palmaditas en la espalda.

Y entonces un recuerdo llegó a su mente.

Cierta joven de cabellos castaños como el chocolate, se encontraba paseando por los anchos pasillos de un súper mercado en busca de vários víveres que su madre les apunto en una "larga" lista de compras. Ya estaba comenzando a aburrirse, las compras no eran para nada lo suyo a diferencia de su hermano que las disfrutaba como si fuera un pasatiempo; si a gastar dinero se le puede llamar pasatiempo, lo único positivo que las cosas que compraban se necesitaban en el hogar. Su mirada se iluminó cuando divisó algo de su gusto en uno de los estantes.

─Tadashi-nii~ ─lo llamó infantilmente con la intención que le comprará lo que quería. Por su parte el chico no tuvo la necesidad de verla para saber de sobra de que trataba ese travieso llamado.

─Ya te dije que no llevaremos dulces a casa ─negó con una pequeña sonrisa de lado, mientras observaba un par de lata con embutidos dentro, aunque el tono de voz que tuvo que utilizar fue algo serio; pues su hermana era demasiado insistente cuando tenía algo en mente, le divertía molestarla de vez en cuando.

─¡Pero que malo eres! ─cerró sus ojos al igual que fruncía su ceño, inflo sus mejillas y llevó sus manos a su pecho ofendida─. Niegas dulces a una pequeña y tierna niña ¿que serán de tus pobres hijos?

─Pequeña sí, porque no veo que crezcas ni un centímetro ─expresó con burla a lo que la oji-azul lo vió de manera molesta; más porque tenía toda la maldita razón, ya tenía doce años y seguía midiendo 1.50, se sentía como uno de los enanos de Blancanieves ¿sería que nunca iba a crecer?─. Pero tierna, no lo creo ─hizo una extraña mueca demostrando que de tierna no tenía ni una pizca, obviamente que lo hacía para fastidiarla, ya que su hermanita era lo más bello que tenía.

─Como que nos levantamos modo don comedias hoy y ni cuenta me daba ─habló con sarcasmo ante las bromas para nada graciosas del castaño, provocando que sus burlas aumentarán con más ganas.

─Mira, ¿no es aquel Amane-kun? ─hace un rato que sus orbes verdosos habían divisado al niño que compraba un par de verduras al final del pasillo en el que se encontraban.

─¡Ja! Está vez no voy a caer tan fácil como la última vez ─no era la primera vez que Tadashi le hacía esa broma sobre Amane y ella como todo pendeja enamorada le creía. Sonrió triunfante al no haberse dejado engañar, por desgracia está vez no era mentira.

─No te estoy mintiendo, es cierto ─levanto su mano agitandola para llamar la atención del castaño oscuro, elevó un poco el tono de su voz para decir las siguientes palabras─. ¡Hola Amane! ¿Cómo estás?

─Ya te dije que no me engañarás, sin mencionar que las personas te verán raro por hablarle a la nada ─dice cruzada de brazos con sus ojos cerrados.

─Hola Tadashi-san ─le saludó amablemente, ahora ya no le tenía tanta pena y temor al muchacho; el mismo Tadashi hacia el esfuerzo de no parecer tan intimidante. Sus ojos ámbar se toparon con una cabellera castaña de espaldas, haciéndose la idea de quien era─. Hola a ti también, (T/N) ─tocó el hombro de la chica haciendo que está se sobresalté y caiga al suelo.

─Te lo dije ─Tadashi se agachó un poco para susurrarle sus palabras al oído. Le extendió su mano y le ayudó a ponerse en pie.

─Hay veces en las que te amo y otras en las que te odio ─le dió una mala mirada al mayor, provocandole más risas a este mismo. Ya levantanda sacudió su ropa.

─P-perdon no fue mi intención asustarte y hacerte caer ─se disculpó al instante lleno de pena Amane, en ningún momento tuvo la intención de asustar a la chica.

─No te preocupes Amane-kun, es culpa de mi hermana, ella es algo muy torpe ─habló el castaño mayor con burla, hizo un gesto con su mano de que no debía tomarle importancia. (T/N) no pudo evitar sacarle la lengua ante el modo que se había referido a ella, sabía que a veces era muy torpe, simplemente no tenía que recordarcelo a cada rato─. ¿Vienes solo?.

─Sí, es que ví que faltaban algunos víveres y los vine a comprar para ahorrarle una preocupación a mi mamá ─del bolsillo de su pantalón saco un pedazo de papel que tenía anotada varias cosas; desde productos de limpieza hasta vegetales, carnes, ente otros tipos de comida, por la letra (T/N) supo que él mismo la había hecho─. Además que decidí dejar a Tsukasa cuidando la casa.

─Ya veo.

─Bueno, no les quitó más tiempo ─estaba dispuesto a retirarse y dejar a los hermanos seguir con lo que estaban haciendo antes de su llegada, aunque en su interior quería pasar tiempo con la castaña, pero no de atrevía a pedirle tal cosa que deseaba con su corazón. Su mirada fue a parar en la mano que se había posado en su hombro, siendo el dueño de esta el Nagareboshi mayor.

─Si quieres te puedo prestar a mi hermana para que te ayude con las compras ─le ofreció con una gran sonrisa de forma en su rostro. Confiaba plenamente en el Yugi, sabía que era incapaz de hacerle algo indebido a la chica─. Sin mencionar que nuestras cosas son pocas, yo solo las puedo hacer. Tú necesitas más ayuda.

─N-no creo que (T/N) este de acuerdo
─intervinó rápidamente, era cierto que su lista era bastante larga y haciendo equipo con la castaña podría terminar más rápido. Por otro lado su deseo de pasar tiempo con ella también se podía hacer realidad.

─¿Estás bromeando? ¡Claro que sí me encantaría ayudar a mi lindo Amane! ─expresó sin titubeos, pasó su brazo por los hombros del castaño oscuro con total seguridad, provocando un nerviosismo en este mismo ante tal cercanía─. Además que se que Amane no despreciara mi compañía como "otras personas" que conozco ─remaró las palabras "otras personas" refiriéndose a su hermano.

─Auch ─cerró sus ojos haciendo una mueca fingiendo dolor por las palabras de su hermana menor.

Cuando los dos adolescentes estaban apunto de retirarse para realizar las compras, Tadashi se acercó a (T/N) tomándola del brazo, está al confundida por su acción se limito a esperar que le diera una explicación, después de todo el había sido quien la había ofrecido a ayudarle al castaño, solo faltaba que se hubiera arrepentido de quedar solito.

─Intenta usar las indirectas que te enseñe el otro día.

La castaña no pudo evitar sobresaltarse y abrir sus ojos a más no poder que sentía que se le iban a salir como a un personaje anime cuando recibía una noticia demasiado impactante. Tadashi rápidamente llevo su dedo índice a su boca indicandole que hablara más bajo, había notado su intención de gritar a lo que la chica obedeció asintiendo con su cabeza que no gritaría.

─¡¿Ahora?! ─intentó hablar de forma más baja, pero siempre manteniendo su toque de sorpresa.

─Sí, y tranquila, estaré cerca para ayudarte y en ocasiones burlarme
─la chica le iba a reclamar pero él ya la estaba empujando para que alcanzara al chico.

Y ese día había sido uno de los más divertidos en para (T/N), aunque todas sus indirectas no salían como ella quería y siempre terminaban con una escena algo torpe por parte de ella, sin mencionar que el chico no captó ninguna por lo nervioso que se encontraba o por lo distraído que era. Sin importar todas esas circunstancias, no pudo evitar pasar una tarde agradable con el castaño oscuro

En el rostro de la de orbes azulados se formó una diminuta sonrisa al recordar aquel día tan divertido en compañía de ambos castaños. Dando a conocer que extrañaba mucho más de lo que imaginaba a su hermano mayor, él fue alguien muy importante en su vida, siempre habían sido el uno para el otro y viceversa, apoyandose en los momentos más difíciles. Siendo Sakura para ella la figura fraterna que perdió varios años atrás.

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;;¡Holiwisss mis bellas personitas de mi corazón! ¿Cómo están? Esperó que muy bien <3.

;;¿Que les pareció el nuevo cap? ^^

;;Una vez más perdón por la tardanza, editar toda la mierda que escribía antes cuesta un poco 🏌🏻‍♀️. Ahora la historia tiene más desarrollo y me gusta como va quedando.

;; Talvez más tarde haga memes 🚶🏻‍♀️.

;;En fin, muchas gracias por usar su valioso tiempo para leer, besitos en las patas 🤙🏻.

Sayōnara 🦋🌾

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editado el 10/11/2021.