────────────────────────
ᴀʀᴄᴏ ᴅᴏs ——— ❛La clase 1A contra
los tres grandes.❜
────────────────────────
Omnisciente.
────────────────────────

La clase 1A yacía almorzando. En la cafetería había mucho bullicio, por lo que se oían distintas voces en medio de varias conversaciones. Shoto estaba sentado junto a sus compañeros, charlaban y comían sus platos favoritos para cesar el hambre del medio día. Aún no creía la manera tan fluida en la que había logrado acoplarse a sus compañeros—, ante todo lo que pasó y en cómo se comportaba antes con la sociedad, una parte profunda de su corazón le palmeaba el alma con orgullo—. Sus facciones se veían más serenas y sutiles. Aunque en sí, seguía teniendo un aspecto muy intimidante como atractivo con el que Kai tendría que lidiar. Ella estaba sentada con las chicas, compartía con ellas y hablaba. Hace mucho que no lo hacía y ahora que había arreglado esa discordia con Momo, todo fluía con mayor potencia entre todas. No es que Kai era risueña, también su semblante era serio, pero permanecía tranquila con ellas.

Kai había estado comiendo fideos con caldo de pollo, mientras que oía a Mina hablar de forma rápida y emocionante por la clase de héroes que tomaría en el tarde. Sin embargo, Kai mostraba un poco de inseguridad con eso, debido a la advertencia que le dieron sus profesores. Se sentía a gusto de que ellos se preocuparan por ella, ¿pero acaso dudaban de qué perdiera el control? Sin duda eso le hacía ruido y su mente se llenaba de afirmaciones sobre que ellos no confiaban plenamente en ella ni en su capacidad. Pese a cómo ha ido manejando su don, no la sentían apta. ¿Tenían miedo de que lastimara a alguien más? De pronto Ochaco notó que el semblante de Kai se tornó frío y eufóricos, por lo que llevó su mano hasta la rodilla de Kai para hacerla entrar en la realidad, pero la albina solo transo con el frío recuerdo de estar delante de su madre quebrándose en los añicos del hielo que la había congelado.

—Kai.—llamó Ochaco, la albina se sobresaltó y no tardó en verle cuando luego oyó el timbre de clases resonar en la cafetería.

—Nakamura, ¿todo esta en orden?—preguntó Momo, levantándose con su bandeja en manos para llevarla hasta el cesto de basura.

—Si.—indicó Kai, levantándose con su bandeja y omitiendo su comportamiento con sus compañeras, quienes la miraron preocupadas.

—¡Idiota! No tiene caso que traigan cosas a un examen cuando no se discutió en clases.—Kai pasó por el lado de Katsuki, quien rozó con ella de forma brusca sin intención.

—Lo siento.—se disculpo, sin recibir en lo absoluto una gota de atención por parte del rubio explosivo que siempre estaba ahí para ella.—Idiota.—masculló, incómoda por su actitud.

—Creo que sigue molesto.—ella se giró para sentir como de sus manos le quitaban la bandeja, ahí Shoto veía la dirección de Katsuki mientras que caballerosamente dejaba la bandeja de Kai en el cesto luego de tirar las sobras.

—No puede estarlo para siempre.—comentó Izuku, poniéndose aún lado de Kai, a quien miró de forma detenida cuando noto su inquietud.

—Vamos chicos, no se queden ahí. ¡Tenemos curso de héroes hoy!—indago con ánimo Tenya, impulsando a que su clase caminará fuera de la cafetería.

—¡Por supuesto que lo sigo en todas las plataformas, es el héroe número uno!—indagaron unos alumnos, pasando por el lado de Kai, quien logró ver en su móvil la imagen de Endeavor.

—Aún hablan de su pelea con el Nomu, ¿cómo sigue su condición?—le cuestionó Kai a Shoto, caminando por los pasillos mientras lo veía.

—No es nada serio.—respondió, denotando una expresión fría, que no ofendió a Kai; sabía que era un tema delicado.

—Deberías sentirte bien por eso.—comentó Kai, Shoto suspiró y asintió, con la cabeza bajo camino junto a ella; pensativo.

—Tengo un permiso para salir de la alianza, quiero que me acompañes.—indicó Shoto, deteniéndose con Kai para verla dudar.

—Yo no tengo permiso para salir de la alianza, aunque quisiera acompañarte, no puedo.—respondió Kai, algo entristecida por la negación.

—¿Y si pudiera convencer al profesor Aizawa para que firme tu permiso?—pregunto Shoto, Kai soltó un suspiro de emoción por eso; no había salido, solo a la Isla y antes al cementerio para ver la lápida de su fenecida madre.

—Shoto, ¿de verdad harías eso por mi?—cuestiono ella con ilusión, mirando a Shoto asentir con una expresión neutral.

—Se que mi hogar no es el mejor lugar para ir a visitar, pero me encantaría que estuvieras ahí conmigo.—expresó, por lo que Kai asintió.

El hecho de que Shoto continuará su punto de partida no dejaba atrás el pequeño factor que describía el fuerte resentimiento hacia su padre—, quien ahora era el héroe número uno—. Ironías de la vida que luego de tanto, por fin Enji Todoroki logrará su objetivo, sin embargo no de la manera en la que siempre quiso e incluso la que arrastró a su hijo menor para conseguir dicho capricho. Una parte de Shoto trabajaba de forma diaria y constante en olvidar sus traumas, su terrible niñez y en como su padre destruyó por completo su familia. Kai incluso se sentía egoísta y culpable, porque muchas veces Shoto rechazó sus sentimientos para poder sostenerla del abismo en el que aún ella cae. La clase 1A se adentró al aula del profesor Aizawa, quien los recibió con un pequeño sermón para luego emitirles una tarea mediante un simulacro. "Villanos" se adentrarían a una base de la academia, así que todos corrieron para prepararse y colocarse su atuendo de héroe.

—Los villanos se infiltraron en el campo beta.—hablaba el delegado, mirando desde el techo de una base el humo esparcirse por el campo.—Hasta ahora esa es la única información confirmada. Aunque sea un simulacro, ¡nos esforzaremos al máximo!—exclamo, motivándolos.

—Primero debemos entender la situación, hay que tener reconocimiento.—ordenó Momo, como segunda delegada al mando, no tardó en traer sus ideales y convicciones a los demás.

—Luego formalizar estrategias para resguardar a las víctimas, también una base de defensa en donde les quitemos ventaja.—aportó Kai, como apoyo de los delegados con una voz fría y seria.

—Andando.—inspiró Momo, esperando que cada uno de ellos se moviera por voluntad propia para ejercer la misión correctamente.

Los equipos no tardaron en dividirse. No había visibilidad de los villanos, pero sí un edificio en llamas que estaba tumbado casi llegando al lago. Por lo que debían extinguirse las llamas primordialmente. En este caso quien iría adelante sería Kai—, con su don, no solo podía congelar el agua, si no que retenerla en un estado líquido antes de que sucediera la congelación—. Con su cabello amarrado en una coleta, avanzó gracias a Ingenium. El nombre de héroe de Tenya era muy llamativo, uno que incluso ella misma admiraba. En su grupo, iba acompañada de Shoto quien no tardaría en respaldarla en caso de que no pudiera apagar las llamas, pues el calor era una desventaja que ocasionaba una debilidad en el uso de su don. Kai fue desprendida de la carreta que creó Momo para que Tenya los llevara con su don a suma velocidad, se deslizó con el hielo que creó Shoto para ella en medio de la bruma derivar agua. Calmó una cierta cantidad de llamas, para recibir la ayuda de Shoto.

La potencia de su don era más fuerte y en todo caso, no era algo que Kai envidiaba, si no que admiraba e incluso buscaba adiestrarse para aprender de él. Ella observó su movilidad y como se preparó para fomentar una gran cantidad de hielo que se elevó por todo lo alto. Las llamas cesaron rápidamente, por lo que los demás se dividieron para continuar registrando el área. Kai se quedó parada en seco, observando los alrededores y examinado que no hubiera un "villano" rondando por el área. Aunque se dio el avistamiento de un civil, ella se sorprendió como los demás al ver que se trataba de Mirio. Sonrió al verlo, causando en Shoto un leve celaje que ella noto, pero que pasó a ser irrelevante. Mirio de tercer año se había dado de baja debido a la pérdida de su don, aunque esperaban que pronto pudiera recuperarlo, resguardaba a la pequeña Eri y le enseñaba todo lo que podía. Había sido rescatado por Froppy, quien lo sostenía con su lengua y se retenía del puente.

—Gracias, me salvaste, ¿no?—se preguntaba él, fingiendo ser un residente común.

—Reconocimiento. ¿Hay señales del villano?—se cuestionó Tenya, mientras que Kai y Shoto estaban aún lado de él.

—Intenta de crear una capa sólida de hielo cuando te adentres a lugares de llamas.—aconsejó Shoto, mirando a Kai asentir.

—¿Cómo un escudo?–le preguntó ella, oyendo de fondo que le respondían al delegado la ausencia de los villanos.

—Entendido, sigan trabaja... —una explosión irrumpió a Tenya, quien se giró bruscamente como los demás para mirar por donde habían venido.

—¿Acaso no pude pararlo por completo con mi hielo?—se cuestionó Shoto, dudoso y apretando sus nudillos para esperar un movimiento autorizado.

—¡Es Mina!—indicó Kai, señalando a la heroína que era retenida por el héroe de cinta que la ayudó a elevarse con la gravedad de Ochaco.

—¡Genial, ya no se propagará!—afirmó Tenya, notando el ascenso de Aoyama y como había tumbado algunos cimientos.

—¡Lo detendré por completo esta vez!—exclamó Shoto, deslizándose en el suelo para esparcir un gran destello de hielo que congeló las llamas y creó una bruma fría para todos.

—Shoto.—llamó Kai, señalándole su lado congelado y como debía verse obligado a balancearlo con la temperatura cálida de su otro lado.

—¡Atentos!—se oyó la voz de Jiro en los alrededores, notando la presencia de la hermosa Nejire sostener a Mina; entonces con eso, la participación de Tamaki en la escena daba entrada a los tres grandes.

—No imaginé que los tres grandes serían los villanos.—expresó Tenya, desconcertado y también asombrado por lo que veía.

—Tienen a Pinky como rehén.—señaló Tokoyami, mirando a su compañera estar retenida en el aire por la chica de tercer grado.

—Desde aquí podemos atacar por atrás.—aconsejó Shoto, siendo autorizado por Tenya para así todos emprender a correr para atacar.

—¡Oigan les dije que no se movieran! ¿No me oyeron?—exclamo Nejire con enfado, una voz fingida para tomarse su papel en serio.

—¡Aún lado!—gritó Kai, aplaudiendo sus manos para contraatacar el golpe de Nejire con su don; creando una gran montaña de agua helada que irrumpió su ataque y creó defensa.

—Nada mal, Nakamura.—musitó Mirio, sonriendo para así, volver a lanzarse al agua, creando euforia en los grupos divididos.

—Las víctimas primero, Midoriya y los demás pelearán con Hado. ¡Ayudaremos con el rescate!—indicó Tenya en su orden.

—Yo me quedaré aquí. Puedo ser de utilidad.—infirió Kai, segura de su postura y de cómo podía ayudar a combatir, por lo que Tenya dudó.

—¿Estás segura Nakamura? No debes excederte con tu don, son órdenes de los profesores.—Kai miró detenidamente a Tenya, desconcertada.

—¿Por qué no confían en mi?—cuestiono ella, con un rostro entristecido que hizo a Shoto intentar de sostener la situación.

—Confiamos plenamente en ti y en tu capacidad. Solo queremos cuidarte.—esclareció él de forma más sutil, mirándola.

—No confían en mí los profesores.—volvió a testificar ella de una forma anonadada, recordando la reunión que tuvo con ellos.

—¡No hay tiempo Iida, deja que refuerce sus habilidades! ¡Midoriya estará ahí, los demás también!—indago Shoto, mirando al delegado.

—Confiamos en ti, ¡Nakamura!—exclamo, para poder avanzar velozmente con su don, con la compañía de Tokoyami y Shoto; este último la miró y le dedicó un asentir con la cabeza.

Sin embargo, los pensamientos de Kai se habían tornado fríos. ¿Acaso los profesores no confiaban en ella por lo que había sucedido en la redada al escondite? Si ellos mismos le habían estado diciendo por meses en sus reuniones con ella que no tuvo culpa de lo que pasó y solo fue un peón en el peor momento que All for One optó por utilizar para su plan. Frunció su ceño—, se sentía por un momento traicionada por el pensar de las personas adultas a quienes admiraba—. Apretó sus dientes. Se sentía molesta, como si su miedo de ser una mala persona se hiciera realidad con los pensamientos de sus profesores que se dieron en voz alta cuando volvió a ese abismo oscuro. Veía dedos señalándola, los de sus profesores y también la mano de aquel hombre extendiéndola para que Kai fuera a él. ¿Cuál era la diferencia de ser buena a una mala persona si pensaban mal de ti? Un tentáculo arremetió contra ella, sacándola del transe.

Kai no tardó en sobresaltar, haciendo una pirueta para atrás y elevar una gran fuente de agua helada al tentáculo por el cual se deslizó para poder atacar directamente a Tamaki cuando vio a sus compañeros en apuro. Era buena estratégicamente y también ágil, pese a lo que su mente le mostraba; Kai se enfocó en continuar su defensa para poder ganar. Evadía e ignoraba las voces de sus profesores señalándola, también de All for One. Aunque Hagakure como Yaoyoruzo lograron retener a Nejire—, Izuku había tenido algunos problemas con Tamaki cuando decidió optar por detenerse—. La albina vio el avistamiento de sus demás compañeros, Eijiro y Katsuki llegaban junto a Denki para defenderlos. Ella abrió paso, para que estos pudieran contraatacar de la mejor manera. Por lo que Eijiro arremetió contra Tamaki y Katsuki con su don explosivo lo complementó. Kai cayó de pie en el suelo, mirando.

—Ven tu don como una amenaza. ¿Crees que perteneces a un lugar así?—All for One se manifestaba en su mente, por lo que ella jadeó.

—Kai.—llamó Izuku, mientras oía de fondo la voz desesperante de Katsuki pidiendo una pelea ante el final del simulacro.

—Un don como el tuyo es para explotarlo a todo vapor, nosotros te aceptaremos.—Kai llevó su mano hasta la frente para empezar a negar.

—Lo oigo.—admitió Kai, queriendo cubrir sus oídos cuando Izuku se acercaba a ella u la continuaba mirando preocupado.

—Porque estoy en tu mente, porque no somos tan diferentes.—decía All for One, mostrando su risa en la mente de Kai.

—Tu mataste a mi madre.—indicó ella, disociada de la realidad donde Izuku se paraba delante de ella para verla entrar en pánico.

—No Kailani, fuiste tú.—ella abrió los ojos como plato, mirando a su madre delante de ella; comvirtiéndose en añicos.

—¡No!—gritó ella, para así la detonación de Katsuki cubrir todo el lugar con el humo de los cimientos que alcanzó alrededor.

Ella cayó en el suelo, abrumada por el calor de la explosión. Sintió debilidad en su cuerpo—, pero no sentiría la vergüenza de Katsuki al ser castigado y reprendido por el profesor ante su imprudencia de querer combatir más allá del simulacro que había acabado—. Kai veía el suelo aturdida, aunque los añicos de su madre habían desaparecido, seguían clavados en su mente y en su conciencia. Ensuciada con el polvo de la tierra y los cimientos, levantaba la mirada para ver a Izuku. Él le hablaba pero ella no le oía. Estaba mejor, ella estaba mejorando—, era lo que pensaba él, mirando a su mejor amiga mirar a varios lados de forma aturdida y perdida—. En una prisión, en la lejanía de ese lugar. All for One reía de forma burlona al saber que de una forma u otra con el don que uso de Naoto, pudo quedarse vinculado a Kailani y por tal razón, fragmentarle esa irrealidad en la mente. Lo único que podía sacarla de ahí eran sus amigos e incluso el amor que sentía por Shoto, porque eso la inspiraba a ser mejor.

❍ 150 votos + 100 comentarios =
Próximo capítulo: La familia Todoroki.