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❛Fuego y hielo.❜
OMNISCIENTE
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El bullicio era más que audible en ese estadio de Japón, donde el curso de héroes proveniente a la UA se presentaría con la función de sus dones, las cuales pondría en utilidad próximamente con una base de juegos estructurados para ellos. Kai yacía cabizbaja, el estadio estaba repleto de personas profesionales para la seguridad del festival debido a los catastróficos eventos presentados en la USJ, donde la clase donde ella está ingresada sobresalió victoriosamente contra villanos. Ella tenía sus auriculares, miraba su celular mientras esperaba paciente con sus compañeros en aquel vestíbulo separado para ellos. Kai no dejaba de ver videos de los anteriores festivales, aunque posiblemente no fueran iguales, Kai esperaba tener una ventaja sobre estos. Algunos estiraban y calentaban, otros respiraban hondo mientras cuestionaban la vestimenta de educación física, deseando haber podido utilizar sus trajes. La joven respiró hondo y dejó su celular aún lado suyo, oyendo el bullicio.

Ella también se sentía impaciente. Los últimos días habían sido tensos, mantenían a Kai drenada y con un ánimo demasiado bajo. De solo recordar el putrefacto rostro de su hermano, su estado cambiaba a uno reacio como también hostil. Pero aunque no quisiera aceptarlo, su hermano tenía razón. Kai era débil. Ella miró sus manos detenidamente, tanto poder y la poca movilidad que le daba era absurdo, para ser una recomendada tenía más que demostrar allá afuera. Sus compañeros sin duda tenían dones excepcionales, pero ella podía considerar el hecho de limitar el descenso que recibía su cuerpo luego de utilizar una cantidad de energía. Levantó su mirada, cruzada de brazos observó adelante cómo aquel chico de cabello con dos tonos yacía parado en la mesa de enfrente. Shoto y ella no habían cruzado ni una sola palabra desde los eventos de la USJ. Jamás había mirado tan detalladamente las facciones faciales del joven y por un momento Kai pensó en lo atractivo que de verdad eran, incluso sus brazos, como también las venas que se marcaban en ellas.

—Hay muchos héroes afuera.—Kai dejó de ver a Shoto, girando su mirada para buscar a Uraraka, quien también veía su celular.

—Es por lo que sucedió en la USJ. Quieren mantener la seguridad.—le respondió la joven de cabello blancuzco, sutilmente.

—Estoy muy nerviosa. Además, mis padres no han dejado de llamarme.—comentó, guárdanos su celular para así mirar al suelo.

—¿No vinieron?—le preguntó Kai, algo desconcertada y confundida, vio a Uraraka denegar con tristeza.

—Quiero que ahorren. También que descansen, cuando me convierta en una profesional podré devolverles todo.—Kai miró detenidamente a Uraraka, sintiendo esa tristeza.

—De seguro están orgullosos de ti.—la joven de cabello castaño se asombró ante esas palabras, era la primera vez que oía a Kai darle un tipo de consuelo que necesitaba Uraraka.

—Muchas gracias, Kai.—agradeció, sonriendo y restregando sus ojos humedecidos, Kai asintió, dejando de mirarla para darle espacio.

—Yo también estoy nerviosa.—admitió Kai, mirando a sus compañeros alrededor, quienes parecieron escucharla.

—¿Tú? Luces bastante normal.—comentó Kaminari frente a ella, notando la serenidad de Kai y su manera tan suave de hablar.

—¿Acaso una señorita como yo no puede tener miedo tampoco?—se preguntó Kai, con un tono sarcástico para dirigir su mano a su pecho.

—Solo creemos que como tú madre es la profesora, pudo haberte advertido sobre los obstáculos.—Kai giró su rostro, buscando la voz de Yaoyorozu, aún cruzada de brazos.

—Se le marcan los pechos.—comentó Mineta, aún lado de Midoriya quien abrió sus ojos grandemente ante el comentario.

—¡Infeliz! ¿Por qué no le dices nada sobre eso? ¿Dejarás que siga mirando tus pechos?—se cuestionó Bakugo, notando la serenidad de Kai ante la insinuación de Mineta.

—¿Insinúas que haré trampa, Yaoyorozu?—le preguntó Kai a Yaoyorozu, haciendo una tensión que la hizo denegar.—Suena a que tienes miedo.—añadió, de manera fulminante.

—¡Chicos escuchen! ¿Ya están todos listos? ¡Entraremos pronto!—la voz de Iida sobresalió, interrumpiendo la tensión entre Kai y Yaoyorozu para crear pánico.

—Midoriya.—Kai dejó de cruzarse los brazos, viendo a Shoto caminar frente a Deku, quien lo miró algo intimidado.—Siendo objetivo, consideró que soy mucho más fuerte que tú.—afirmó, haciendo que todos lo miraran desconcertados por su actitud tan arrogante.

—Si...

—Pero es que a All Might solo le interesas tú, ¿no?—le preguntó Shoto en cuanto Deku afirmó su comentario.—No trato de entrometerme en ese tema, pero voy a vencerte.—afirmó, haciendo que todos volvieran a desconcertarse, pero esta ves emocionados.

—Parece que el mejor de la clase declaró una guerra.—comentó Kaminari.

—Oye, oye. ¿Por qué buscas pelea ahora? Estamos por comenzar.—se cuestionó Kirishima al levantarse de la silla, entrometiéndose frente a Deku y Shoto.

—No vinimos a buscar amigos, así que no me importa lo que piensen.—respondió Shoto de una forma hostil, no tardó en girarse para darle la espalda.

—Espera Todoroki.—pidió Deku, haciéndolo detener.—No sé qué piensas cuando dices que me vas a vencer, pero obviamente eres mejor que yo. Creo que tú te desempeñas mejor que la mayoría, viéndolo objetivamente.—esclareció.

—Relájate Midoriya, no deberías ser tan negativo.—le interrumpió Kirishima, haciendo a Kai enfurecer.

—Todos, hasta los estudiantes de otros cursos querrán ganar. No puedo dejar que me superen, también me esforzaré al máximo.—afirmó Deku, desafiando la mirada de Shoto.

Fue una leve tensión. Nadie sin duda espero una declaración de guerra, más aún cuando pertenecían al mismo lado de la moneda. Todos se levantaron en conjunto, la impaciencia ya no les brotaba tanto como el leve pánico que sintieron al saber que debían dirigirse hacia la salida del estadio para dar comienzo a los festivales deportivos que tanto estaban esperando. Sin duda era una oportunidad para que fueran reclutados por profesionales de buenas agencias, no importaba cuál, seguía siendo una oportunidad que no quería desaprovechar, aunque tuvieran que enfrentarse unos contra otros. ¿Pero era ilógico? No. Todos aquí habían venido para esforzarse al máximo, eso era algo que Kai debía saber y tener en mente. El bullicio continuaba, conjunto a los presentadores de los festivales, asomada en aquellas gradas con su cabello suelto Hikari se encontraba para esperar la salida de su hija. Pese a la lejanía que ambas habían tenido en estos últimos días, era su deber alentarla y apoyarla en este tipo de eventos. Ella miró de reojo cuando sintió una bruma calurosa acercarse hacia ella.

—Enji Todoroki.—nombró cuando aquel serio y gran hombre de estatura se acercó cruzado de brazos hacia ella.

—¡Hola! ¡Atención publicó, medios de comunicación, está por comenzar el rodeo escolar de adolescente que tanto aman! ¡El festival deportivo de la UA! ¿¡Están listos!?—se oía a Present Mic, en un tono alto.—¡Es hora de la entrada de los estudiantes de primer año! ¡El festival deportivo de la UA, la gran batalla en la que nuevos héroes se enfrentan entre sí! ¡Estos son los chicos, ¿verdad?! ¡Las nuevas estrellas que superaron un ataque enemigo con sus corazones de acero, la clase 1A del curso de héroes!—anuncio, haciendo que el grupo caminara hacia afuera, siendo aclamado aún más por el público.

—Hay demasiada gente aquí.—opinó Midoriya, atrás de Kai quien de reojo lo vio casi desmayarse por el pánico.

—¿Podremos dar lo mejor de nosotros con tantas personas mirando?—se preguntó Iida, para así Kai bufar.

—Entonces no mereces estar aquí.—le dijo, avergonzándolo por completo, pero ella se sentía igual, aterrada.

—¡Está clase no es tan popular, pero también tiene mucho talento, la clase 1B del curso de héroes! ¡Luego está la clase de curso generales, clase C, D y E! ¡Curso de apoyo, F, G y H! ¡Y cursos de administración de clases, I, J, K! ¡Todos los estudiantes de primer año, están aquí!—Present Mic continuó nombrando los próximos equipos que se acercaron al grupo 1A, ellos eran como una presa.

—Entonces es cierto.—Kai se giró, observando la pereza de esos ojos mirarla.—Te había visto en las clases, pero jamás pensé que era cierto. La hija de un villano realmente quiere ser un héroe.—un silencio se esclareció ante esas frías palabras del joven Hitoshi Shinso.

—¿Disculpa?—se preguntó Kai, ofendida por esa afirmación de un bufón como él.

—Discúlpalo. A él le gusta hablar demás, esperaba poder encontrar alguna debilidad, después de todo competiremos todos en contra.—esclareció una chica de cabello verdoso y largo, como si fueran ramas, con una voz más sutil que la de Kai y serena.

—Vino con la persona equivocada. No tengo ninguna debilidad para ofrecer.—respondió Kai, volviendo a girarse para darle la espalda al chico de cabello violeta que sonrió.

—Vaya, que ego. ¿Hasta donde llega?—volvió a preguntarle, tanto Kai como su clase miraron al joven que hace unos días los fue a examinar en su salón.

—Hasta las nubes. Fuera de la galaxia donde tú porquería de mente no podría llegar al intentar de subestimar a una chica solo porque es hija de un villano.—mascullo ella, en un tono arrogante que hizo a su clase rodear los ojos.

—Me agradas.—afirmó, mirando a Kai detenidamente, hacia que alguien que los veía se enfureciera hasta casi enrojecer.

—Haz la fila, porque no eres el único.—le indicó Kai, señalándole las personas detrás de ella, donde se encontraba el mismo Shoto, quien levantó una ceja ante eso.

—Que molesta.—masculló Shoto, pues la arrogancia de Kai podía ser bastante molesta en situaciones así para él.

—¡Hora del juramento!—todos miraron adelante, las miradas de lujuria empezaron cuando vieron a esa atractiva mujer de cabello negro frente a ellos.—¡Hagan silencio, en nombre de los estudiantes tenemos a Katsuki Bakugo!—llamo la héroe para adultos, con un atuendo llamativo que quito el enfoque de sus alumnos, Midnight.

—¿Él?—se preguntó Kai, viendo como el joven de cabello rubio y puntiagudo con el que había pasado una tarde hace dos días, subió a la tarima con ese frío semblante.

—Les puedo jurar que seré el mejor de todos.—hablo, creando que todos lo abuchearan, mientras que Kai tan solo río.

—Yo hubiera dicho lo mismo.—afirmó ella, haciendo que Midoriya frunciera el ceño ante esa aceptación.

—Al menos traten de ser un buen escalón para mi victoria.—comentó Bakugo ante los que se quejaban por su comentario,como su delegado, Iida yacía avergonzado.

—¡Sin más preámbulos comencemos de una vez! ¡El juego será clasificatorio, muchos sueños acaban en lágrimas todos los años! ¡Este será nuestro primer juego!—miraron la ruleta presentada, creando tensión por el primer juego hasta que se esclareció.

—Una carrera de obstáculos.—murmuró Hikari, mirando desde las gradas a su hija con detenimiento.

—¡Las once clases participarán en esta carrera, correrán alrededor del estadio, son cuatro kilómetros! ¡La libertad es lo que nos define, pueden hacer lo que quieran, mientras todos se mantengan en la vista! ¡Ahora vayan todos a sus lugares!—pidió ella, señalando el comienzo.

—Mi Shoto será el ganador de este festival.—halago Enji Todoroki, con ese tono arrogante que su hijo había heredado.

—Debo admitir que es bueno.—comentó Hikari, quedando frente a Endeavor, quien levantó una ceja ante eso.

—¿Pero...

—Pero tú hijo no ha dejado de mirar a mi hija desde que salieron de los vestíbulos.—musitó sonriente y desafiante, para hacer que él se girara a ver como su hijo camino detrás de aquella chica de cabello blancuzco.

Él se quedó con su mirada fija en ese campo terrenal, donde Shoto tenía su mirada justamente en la espalda de Kai, quien caminaba aún lado de Deku. Esas palabras de Hikari fueron para Enji un trago amargo, tanto que las llamas de fuego se pronunciaron aún más. Hikari sonrió, palmeando el barandal de metal para alejarse. Lo menos que quería ese hombre era que su hijo tuviera algo que ver con esa niña. Frunció el ceño y respiró hondo, notando la bruma de vapor por su boca cuando soltó esa bocanada de aire. Todos se colocaron frente a la línea de salida, así que Kai tan solo respiro hondo y se alejó de ellos. Algunos la miraron, notaron cómo quedó atrás. En cuanto anunciaran que todos podían avanzar, se volvería un completo caos, tanto que no habría aire que respirar y se estarían empujando entre sí. Kai evitaría eso a toda costa, evitaría el pánico y abrumarse. Lo único que quería era llegar a la meta, pero la única forma de hacerlo, era pensando de una manera serena y estratégica. Veía el semáforo verdoso, respiro hondo y se preparó para correr detrás de todo, quedaría en último lugar hasta que pudiera abrirse el campo y moverse de una mejor forma. Pero cuando vio a Shoto quedarse atrás, predijo cada uno de sus próximos movimientos.

De sus talones salió la bruma de agua. Kai sabía a donde se dirigía y lo que haría, así que cuando el semáforo verdoso se apagó, todos los alumnos se dirigieron a la salida donde quedaron pegados contra las paredes ante la poca amplitud del leve callejón. Ella se levantó un poco, quedando atrás cuando todos se empujaban y golpeaban. Parecían unos animales, desesperados por un premio gordo que podrían conseguir en cualquier momento, pero ella no era nadie para juzgar, le convenía una buena agencia donde aprendería de los mejores profesionales. Se levantó aún más, creando una presión de agua a su alrededor cuando justamente Shoto logró inmovilizar a todos con su hielo, reteniéndolos e impidiendo que la mayoría se moviera. Pero como algunos, Kai avanzó detrás de él. Endeavor la miraba desde la gran pantalla, al igual que Hikari. Esa niña era estratégica. Sus compañeros quedaron desconcertados, pero a Todoroki no le importaba en lo absoluto lo que pensaran sobre él, ganaría sin importar las represalias.

—No pensé que tantos superarían esto, especialmente de otras clases.—pensó él, mirando como todos se dirigían hacia su punto, incluso Mineta hasta que se vieron obligados a detenerse luego de que fuera atacado.

—¡Aparecieron obstáculos de repente! ¡Interesante, esta es la primera barrera!—Kai se detuvo en seco, quedando en el lado izquierdo de Shoto cuando Present Mic anunció aquello para todos los televidentes.

—¿Otra vez?—se preguntó Kai, respirando de una manera agitada para ver a esos robots verdosos frente a ella, eran demasiados y crearon pánico en todos los demás.

—¿Estos contrincantes fueron los que utilizaron en el examen de admisión?—cuestionó Shoto, inclinándose en el suelo.—Ya que se tomaron la molestia, debieron haber preparado algo mejor.—musitó, levantando su mano con delicadeza para dejar ver la fría cristalización de hielo.—Porque mi estúpido padre me está observando.—mascullo, arrasando contra aquel robot que congelo por completo con un solo golpe, él era impresionante y muy tenaz.

—¡Miren, podemos pasar entre sus piernas!—anunciaron, pero Todoroki se giró e inmediatamente denegó.

—Yo no haría eso. Los congele cuando estaban sin balance, se caerán.—comentó, mirando como los robots se caían frente a sus compañeros, dejándolos atrapados.

—¡Todoroki de la clase 1A atacó y se defendió con un movimiento, que elegante! ¡Increíble, es el primero en pasar!—decía Present Mic, quedando asombrado.

—Si, pero no es el único.—señaló Aizawa, haciendo que todos mirarán a la pantalla como sobresalía de la bruma la hija del villano que quería ser un héroe.

—¡Nakamura!—aclamó Present Mic, dejando inaudible a la mayoría de los televidentes cuando notó el tenaz movimiento de la alumna.

—Se manejan con lógica y estrategia.—detalló Aizawa, notando que cuando Todoroki congeló todo a su alrededor, Kai había creado una presión de agua que aisló al robot inmóvil para pasar debajo de sus piernas antes de que este perdiera el balance.

—¡Como era de esperarse de unos recomendados!—añadió Present Mic, mirando por la pantalla como Kai buscaba ganarle paso a Shoto quien iba enfrente.

Ella miró atrás. Lamentaba que la mayoría de sus compañeros se hayan quedado, pero había algo que quería demostrarle a todos esos televidentes. Kai no solo quería ganar para tener una lluvia de solicitudes por parte de los profesionales, si no para que su nombre fuera aclamado por su esfuerzo y no por lo que sus padres habían dejado marcado en los corazones de las personas que convivían en ese hermoso país. Aunque fuera agrio, Kai estaba preparada para combatir en contra de sus compañeros y derrotarlos si eso era necesario. Enfrente, Shoto continuó corriendo sin mirar atrás, sabiendo que la chica le seguía el paso y que ella podía utilizar sus dones para alcanzarlo, él sabía precisamente que Kai estaba resguardando sus fuerzas para otro momento. Tenía la opción de incitarla, pero por alguna razón no se permitía hacerlo, porque no soportaba que ella cayera al suelo sin conciencia. Era como si temiera que Kai no volviera abrir sus ojos, una sensación extraña que ni él mismo podía explicarse a sí mismo, así que continuó corriendo sin mirar atrás. Era de esperarse que ella lo alcanzara, Kai no se rendía fácilmente y su orgullo tampoco.

—Cuidado.—el brazo de Shoto chocó con el abdomen de Kai, haciéndola retroceder ante el final del camino.

—Empiezo a considerar que eres bipolar.—comentó ella, sin mirar a Shoto cuando él con una sutil actitud la detuvo para que no cayera al vacío.

—Si, yo también.—afirmo él, haciendo que ella lo mirara con detenimiento, de manera sutil Kai aisló la mano de Shoto, viendo su próxima barrera.

—¿¡Con qué la primera barrera fue muy fácil!? ¿¡Qué les parece la segunda!? ¡Si caen, están fuera! ¡Si no quieren caer, avancen con cuidado!—anunció Present Mic, cuando en las pantallas se veían los caminos entrecortados.

—Hagamos algo, si gano tú y yo hablaremos sobre algo que me está inquietando al final de todo esto.—comentó Shoto, haciendo que Kai levantara una ceja.

—Y si yo gano, tú dejarás de ser tan imbécil.—masculló ella cuando creó una presión de agua en sus pies que la hizo pasar por la cuerda floja que los separaba de caer.

—Maldición.—comentó él, congelando y traspasando la cuerda encima de su hielo para avanzar velozmente hacia la próxima barrera de obstáculos.

—¡Los líderes del grupo avanzan fácilmente!—exclamó Present Mic cuando Kai y Shoto sobrepasaron de caer por el vacío, corriendo por las escaleras.

—Ahora se está emocionando. ¿Siempre es lento al inicio?—se preguntó Shoto cuando miró de reojo a Bakugo intentar de alcanzarlo.—No, es que él tampoco soportar verla conmigo. Como yo no soporto ver como la molesta.—musitó, viendo a Kai quedar aún lado de él.

—¿Por qué no usa sus dones para sobrepasar a mi Shoto?—se preguntaba Endeavor, mirando como ella y Shoto se detuvieron en seco ante el último obstáculo.

—¿Sigues dudando de la capacidad de mi hija? Y eso, que aún no explota sus dones completamente.—musitó Hikari cuando volvió a retomar su lado conjunto Endeavor, viejos amigos veían a sus hijos competir, pero también veían crecer algo más en ellos.

—¿Qué te alegra? Esa niña es así por todo lo que Kenny le enseño.—masculló, creando incomodidad en Hikari.—Que mala suerte, oí que tu hijo se presentó en la USJ. Estoy ansioso por verlo, me debe una de la última vez.—indicó, haciendo que Hikari dejara de mirarlo.—¿Qué pasa? ¿Ya no da risa?—le cuestiono.

—¡Y llegamos rápidamente al obstáculo final, es un campo minado, pueden ver donde están si se fijan con cuidado! ¡Tendrán que forzar sus ojos y sus piernas, estas minas son para los juegos así que no son tan potentes, pero son tan ruidosas para hacer que mojen sus pantalones!—exclamó Present Mic.

—¿Tan imbécil soy?—se preguntó Shoto cuando noto que Kai avanzó sin temor, viendo detenidamente el suelo.

—¿Lo dudas?—le cuestiono ella, sin dejar de mirar el suelo minado.

—No. No lo dudo.—expresó él, intentando de tomar la delantera hasta que una bruma de detonaciones lo alarmó.

—Ya ansió porque dejes de serlo.—indicó ella, sonriéndole a Shoto quien por un momento perdió el balance, siendo sostenido por Kai para que no cayera.

—¿Tanto interés me tienes?—le preguntó de una manera arrogante, haciendo que ella soltara un bufido.

—No te hagas el interesante, tú eres el que no puedes evitar defenderme.–lo exclamo con orgullo Kai.

—De eso vamos hablar.—expresó, intentando de pasarle ventaja a Kai.

—¡Infeliz, no le declares la guerra a la persona equivocada!—fue lo que grito Bakugo, dirigiendo su mano detonante a Shoto.

El problema de ese movimiento es que Kai estaba entre medio de ambos, de una manera sutil y precavida Shoto la tomó del brazo para removerla en cuanto Bakugo detonó el ataque, lo hizo tan cerca que el calor se pegó a la mejilla de Kai y la hizo perder el balance. Shoto congeló el brazo de Bakugo, reteniendo a Kai de caerse encima de una mina que la hiciera detonar. Las llamas de Endeavor sobresalían aún más. ¿Por qué su hijo estaba sacrificando sus movimientos para salvar a una compañera? El suelo tambaleaba, las detonaciones seguían mediante los demás compañeros se removían para llegar a la meta final. Todos se esforzaban al máximo, incluso sintiendo el pánico por quedarse atrás. Bakugo notó eso, notó como Shoto sostuvo el brazo de Kai y la tenía casi encima de él, ambos pisaban el mismo camino que no yacía bloqueado. Él la estaba protegiendo y eso sólo tenía una explicación. Cuando decidió contraatacar, una fuerte detonación rosada los alarmó y Kai sonrió cuando miró al cielo, encontrándose con aquel que también quería ganar sobrepasarlos sin temor.

—¡Midoriya de la clase 1A avanza con una explosión!—exclamó Present Mic, mirando como Midoriya yacía encima de un metal donde se retuvo cuando la explosión le hizo presión para avanzar adelante.—¡Tomó la delantera!—añadió, haciendo que el público aclamara.

—¡Avanza!—le pidió Shoto a Kai, empujando a Bakugo de ella para alejarlo y hacer congelar todo el camino que impediría la activación de las minas restantes.

—¡Deku, no te adelantes! ¡Regresa!—pidió Bakuo, creando detonaciones que lo hacían tomar altitud mientras que Kai corría aún lado de Shoto sonriendo.

—¡Midoriya, eres increíble!—pensó ella, su corazón palpitaba del orgullo, porque si él sería el ganador, eso a ella no le importaría.

—¡Los antiguos líderes dejaron de empujarse, ahora siguen a Midoriya!—decía Present Mic cuando Midoriya estaba perdiendo altitud cayendo casi encima de sus compañeros, pero no lo hizo.—¡Midoriya bloquea a sus oponentes!—detalló cuando antes de caer golpeó el suelo con el trozo metálico que hizo detonar las minas, Kai levantó su mano para crear un campo de agua que bloqueara el ataque.—¡Eraser Head, tú clase es increíble! ¿¡Qué les enseñas!?—pregunto.

—Esto no tiene nada que ver conmigo.—respondió Aizawa, mirando como Kai quedaba entre medio nuevamente de Bakugo y Shoto, mientras que Midoriya iba enfrente.—Ellos mismos se motivaron entre sí.—añadió.

—¡Festival deportivo de la UA, escenario del primer año! ¿¡Quien habría precedido un final así después de todo lo qué pasó?!—se preguntó, los cuatro jóvenes seguían corriendo y aún así, Kai se abstenía a utilizar su don para ganar.—¡El primer estudiante en regresar al estadio es ese chico, Izuku Midoriya!—el confeti cayó por todo el estadio cuando el joven alcanzó su más anhelada meta.

De una manera exhausta, Kai sobresalió en la línea final. Ella tomó aire, para así ver la aclamación del público frente a su amigo. Él se giró para verla, con sus pulmones apunto de salirse, le sonrió a su amiga quien llegó en cuarto lugar, pues sin duda alguna los otros dos jovenes eran más atléticos que ella y se habían preparado con anticipación. Ni siquiera noto que su cabello blancuzco se había desamarrado en la trayectoria. Los demás se deteniéndonosla a tomar aire. En medio del escandaloso bullicio que ocasionó las lágrimas del joven Midoriya, siendo aplaudido por el mismo símbolo de la paz. Kai se acercó a él, para aplaudirle y sonreírle. Ella tenía sus mejillas sonrojadas por la leve fatiga de haber corrido sin utilizar al completo sus dones. Ella removía a Deku, quien sentimental yacía cabizbajo recogiendo los elogios de aquellos que sin duda alguna dudaron que llegaría en primer lugar. El joven se sorprendía de verla sonreír de una manera amplia, como si hubiera desvanecido la amargura de su amiga. También le sorprendía que no estuviera molesta, pero Kai no lo estaría cuando sabía cuánto se esforzó él para esta gran oportunidad.

—No seas tan llorón.—le pidió Kai, removiéndolo para verlo apenarse, mientras que en la lejanía Shoto se aislaba impotente.

—¿Qué cosa fue eso?—se cuestionó Endeavor, aún lado de Hikari, quien sonreía.—Shoto pudo haber ganado si tan solo tú hija no se hubiera entrometido en su camino.—comentó enfurecido, mirando a la mujer de cabello blancuzco y suelto denegar.

—No fue eso.—denegó ella, para hacer que Endeavor mirara nuevamente al terreno.—Tu hijo es el fuego, pero mi hija es el hielo.—comentó, dejando desconcertado al hombre.—Cuando se fusionan, el hielo apaga el fuego, mientras que el fuego derrite el hielo. Son opuestos, pero se complementan a la perfección.—añadió, recostada del barandal.

—¿Qué diablos quieres decir con eso?—cuestiono cuando la vio bajar la cabeza.

—Que pagaremos todo lo que hemos hecho.—respondió ella, para hacerlo ver cómo Shoto aún en la distancia tenía su mirada detenida en la hermosa Kai.—Lo haremos, porque tú hijo y la mía nacieron para estar juntos.—afirmó, con un sabor amargo en su paladar, Endeavor vio a Kai girarse para mirar a su hijo como si no hubiera nadie más ahí en ese festival que ellos dos.

Era como si el mundo no existiera cuando esas miradas conectaban la una con la otra. Mientras tanto. Fuera de ese lugar, a una lejanía estable, alguien más veía los festivales deportivos. El cabello oscuro de aquel joven estaba amarrado en una media coleta, sus ojos azulados alumbraban aún más con la luz. Tenía varios lunares en el rostro, conjunto a algunas pecas. Naoto se mantenía atento, mirando aquel viejo televisor casi decaer al suelo por el peso que le hacía a una vieja y podrida mesa de estar. En esa habitación donde estaba las ratas paseaban al igual que las cucarachas, pero en el fondo había un cuadro, con lazos que seguían a personas. En el medio de ese tablero yacía la foto de su madre, con un cuchillo en su frente. Naoto se giró, mirando el retrato con odio y disgusto cuando en la televisión las cámaras señalaron a su madre. Aún lado de ella también yacía Endeavor, con un serio rostro a diferencia de la hermosa sonrisa que mantenía Hikari. Así que Naoto lanzó un cuchillo al cuadro, enmarcándolo en el retrato de Endeavor. En ese cuadro, había otro retrato y era el de Kai.