🎨🦋 ꣠ ⊹ WELCOME TO 𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐒𝐓𝐎𝐑𝐘 ₊˚.
✧️ ━━ ❨Benedict & Diana's story❩ a
bridgerton fanfiction written by Isi! 👗
I PRESENT YOU THE CHAPTER TEN:
❛ 𝐭𝐡𝐞 𝐞𝐧𝐝 𝐨𝐟 𝐚 𝐬𝐞𝐚𝐬𝐨𝐧 ❜ ｡ﾟ

NINGÚN BRIDGERTON A PARTE DE ANTHONY Y Violet sabían que Diana había pasado la noche en la habitación de invitados, sin embargo, cuando esa mañana la vieron entrar en el comedor con los ojos hinchados y el pelo hecho un desastre, pues aunque habían intentado arreglárselo para que pareciera presentable no lo habían conseguido, la mesa se quedó en completo silencio.

Diana no solía frecuentar la casa durante los desayunos, pero que mostrara un aspecto tan poco aliñado cuando ella siempre iba impecable resultaba incluso más raro. No tardaron más de dos segundos en atar cabos: esa mañana todo Londres se había enterado de la repentina muerte de lord Featherington. La tristeza de Diana se debía a la perdida de su padre.

Al menos, una parte de ella.

Eloise, que había visitado la casa de los Featherington temprano esa mañana para consolar a Penélope, se levantó corriendo de su silla y fue a abrazarla. En cuestión de segundos, Diana estaba sumida en el abrazo más cálido que había recibido en toda su vida. Se había prohibido volver a derramar alguna lágrima, sin embargo ahí estaba ella, llorando de nuevo.

Aunque esta vez el llanto era diferente: no lloraba por lo ocurrido la noche anterior, si no porque ahora tenía una familia que la quería de verdad, que la valoraban. Diana no lloraba de tristeza, lloraba de felicidad.

—Diana se quedará con nosotros a partir de ahora —Anthony dijo, una vez todos se separaron y se sentaron de nuevo en la mesa. Los criados prepararon rápidamente un nuevo asiento para ella y Diana se sentó tras agradecérselo —. Hasta que el caballero más afortunado del mundo se decida a hacerse presente.

—Acabo de llegar y ya me estás echando —se rió Diana. Anthony la atrajo hacia sí por el hombro y le besó la coronilla.

—Sabes que te quiero.

—Será un placer tener a alguien inteligente en esta casa —comentó Eloise.

—¿Me dejarás probarme tus vestidos? —preguntó Hyacinth de repente, con una sonrisa enorme. Gregory le tiró un guisante —. ¡Ey!

—¡Gregory! —su madre le reprendió —. ¡Compórtate o Diana no volverá a bailar contigo nunca más! Aunque tal vez los pies de Diana lo agradecerían.

La familia se rió ante el comentario de la progenitora.

—¿Vendrá el príncipe más a menudo? —siguió preguntando Hyacinth —. ¿Sabes si se marchará del país? ¿Estará aquí el año que viene?

—Hyacinth, por favor, no la atosigues.

El desayuno continuó entre risas, compañía exquisita y más preguntas de Hyacinth. La mayoría de ellas eran sobre el príncipe pero, si Diana era totalmente sincera, ella tampoco sabía si el príncipe se quedaría en Londres o se marcharía a Prusia. Tendría que ir a verlo más tarde.

Colin iba a marchar a su viaje por Europa y la familia se levantó de la mesa para seguirlo. Agarró sus mochilas, salió de la casa a la cabeza del grupo y montó en su caballo a la vez que un criado se hacía cargo del equipaje.

—Os escribiré a todos desde Grecia.

—Y tráeme un regalo —pidió Gregory descaradamente.

—¡Los regalos no se piden! —lo regañó Hyacinth. Sin embargo, añadió —: Sea lo que sea, lo quiero azul o blanco.

Colin sonrió y se despidió por última vez con un asentimiento de cabeza. Lo vieron alejarse poco a poco, a lomos de su caballo negro.

—Anthony, no recuerdo haberte visto anoche —Daphne le dijo, agarrada del brazo de su brillante marido. Simon había conseguido dejar atrás el rencor a su padre y la promesa que le había hecho en su lecho de muerte, y había tomado la decisión más fácil: ser feliz y amar a su nueva mujer.

—Sí, no me sentía muy bien —se excusaba. La verdad era que Anthony también había sido golpeado por la realidad: Siena Rosso había decidido cortar cualquier lazo existente con el vizconde Bridgerton sabiendo que su relación con él nunca sería aceptada por la sociedad —. Discúlpame, hermana. Supongo que os iréis a Clyvedon.

—Hemos decidido quedarnos unos días más y disfrutar el uno del otro.

—Preguntadle que planes tiene —pidió Diana, empujando a Anthony juguetonamente con su hombro. Daphne arqueó las cejas.

—¿Anthony?

—Nada reseñable —se excusó —. Además de encontrar a la nueva vizcondesa y declararle mis intenciones, claro. 

—¿El vizconde está preparado para declarar sus intenciones? —cuestionó Daphne, sorprendida. Miró a su esposo —. ¿Has escuchado eso? ¿A quién?

—No importa. He descubierto lo problemático que es el amor, así que solo he de eliminarlo de la ecuación.

Y Diana no supo por qué, pero en ese momento se encontró mirando al segundo de los Bridgerton, que conversaba y se reía burlonamente con Eloise. Anthony siguió hablando, y eso consiguió que Diana dejara de prestar atención a Benedict y Eloise:

—Se acabaron las distracciones y se acabó eludir mis responsabilidades. Que disfrutéis.

Diana no sabía si Anthony estaba siendo un idiota o la persona más inteligente del mismo, pero sí tenía razón en una cosa: el amor era problemático.

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𝕯udo que pueda haber un final de temporada más interesante que el que nos han regalado los duques de Hastings este año. De lo contrario, esta autora tendrá que tragarse sus palabras.

He sido esta memorable pareja quien ha puesto el broche de oro a otra escandalosa temporada londinense. Mientras que muchos abandonan la ciudad en busca de un cambio de aires, parece que algunos finales son más permanentes que otros... por inciertos que estos puedan ser.

Aún así, parece que no hay un final a la vista para esta autora, que ha descubierto un reciente intento de desenmascararla por parte de una rival de lo más digna.

Quizá algún día me presente. Aunque debe saber, querido lector, que esa decisión solo me corresponde a mí.

Atentamente,

Lady Whistledown.

ISI'S NOTE. . .

this is the end of a decade, but the
start of an age... TERMINÓ EL PRIMER
ACTOOO. el segundo es mi favorito, así
que preparad las palomitas.

cuál fue vuestro capítulo favorito?

espero que os haya gustado <33

os adora,

𝓘𝓼𝓲