𝐧𝐮𝐞𝐯𝐞

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Un juicio justo.

───

Los tres caminábamos vagamente por aquellos largos pasillos, en silencio, pero juntos. Debía admitir que me sentía un poco ansiosa, deseaba saber que se esperaría hoy, porque esto determinaría, cuáles serían mis próximas acciones. Estaba segura que mis "aliados", estarían esperando lo mismo, para tener cercanía con Eren, y planear un plan que no afectará nuestra identidad, y así, llevárselo. No era algo que permitiría, pero era difícil traicionarles, sin perjudicarme. Debía pensar sabiamente, o si no, arruinaría todo. Grandes puertas se abrieron frente a nosotros, ya estábamos establecidos en la corte general. Aún no había avistamiento de Eren, y eso me hacía sentir más ansiosa, pues no le veía desde la restauración del distrito Trost, no hubieron muchas palabras que cruzáramos ese día. Camine en fila, siendo dirigida por los soldados a las estrados, los cuales estaban repletos en ambos extremos. Muchas miradas se acoplaron en nosotros, lo que me hizo tener una mirada firme, y sería. No había manera de que nadie lograra intimidar mi postura, así que continué caminando con mis hombros relajados. De seguro, altos comandos estarían albergando por aquí en dicho juicio, lo que pondría nervioso a Eren, en cuanto estuviera presente. Estaba ansiosa, por ese lado, porque deseaba verle, y el estar pasando los minutos, me hacía sentir más desesperada.

Pasamos frente al estrado en donde estaríamos, y entre allí, pude ver claramente parte de una de las elites más revoltosas, pero a la vez, respetada. El cuerpo de exploración yacía allí, y con eso, entendía a que se llevaría a cabo este juicio. Pasaba, observando a la mayoría, sabiendo que muchos eran conocidos, y sus rumores siempre se esparcían. Mi seria mirada se dirigió primeramente al capitán de un escuadrón, perteneciente al cuerpo de exploración. Aquel soldado era considerado el más fuerte en su rango, era muy respetado. Su mirada era fría, y bastante seria, notaba que le miraba y examinaba, así que no dejo de mirarme ni un segundo. Me fue complicado dejar de mirarle, pues parecía retarme en demostrarme intimidación, pero evadí su mirada para así, mirar con más detenimiento al que llevaba la batuta en esta élite. El comandante Erwin Smith, sus azulados ojos podían recordarme a los de Armin, su postura era firme, y no me miraba en lo absoluto, como si yo no estuviese ahí. Se decía que muchas muertes albergaban bajo sus pies, pero era entendible, esa élite era peligrosa, y se sabía claramente que si salían, muchos no volverían.

-Estoy nervioso.-expresó Armin en cuánto nos acomodaron en los estrados, aún lado de todas esas personas, mientras que yo me mantuve seria, al igual que Mikasa.-La policía militar está al otro lado, ¿de que se basará este juicio?-se preguntaba, y lo mire desconcertada.

-¿Realmente no lo descifraste?-le pregunté, y él intentando de comprender, continué mirándome.-El cuerpo de exploración de seguro desea custodiar a Eren.-insinué, en un tono bajo, logrando que él captara.

-Es cierto.-indicó Mikasa, con una fría expresión.-Ya va empezar.-aviso, y dirigí mi mirada a su horizonte, viendo como abrían las puertas, y como se avecinaban policías militares, sosteniéndole a él, a Eren.

-Eren... -llame en un suspiro al verle, y más cuando le arrastraban y tenían esposado, como si fuese un animal, él nos miró detenidamente.

-¿Chicos?-leí sus labios, y como su mirada entrelazó con la mía, haciéndome sentir una corriente ante eso, me sentía feliz.

-Lo tratan como si fuese un monstruo.-opinó Mikasa, molesta ante el trato que le daban a Eren, mientras que lo esposaban con un tubo, el cual estaba establecido y ajustado dentro de otro metal; para que no lograse escapar.

-No lo es, y eso, lo sabemos.-le dijo Armin en una calmada voz, mientras que visualicé al hombre que se estaría sentado frente a él, él mismo que le juzgaría.-No te alteres, él está asustado, démosle apoyo desde aquí.-pidió el rubio de azulados ojos, poniendo su mano sobre el hombro de Mikasa.

-Vamos a empezar... ¿Eren Jeager verdad?-observe al barbudo hombre, el cual era canoso, su voz era neutral, él se dirigió a Eren, quien me miraba algo abrumado por la situación.-Eres un soldado que ha jurado defender al pueblo con su vida, ¿o me equivoco?-Eren asintió levemente con respeto, y era justo, la situación en la que estaba no era la mejor.-Se trata de un caso especial. A continuación serás juzgado por el tribunal militar, todas las decisiones serán tomadas por mi. Juzgaremos una vez más, si vives o mueres.-dijo, creando tensión entre nosotros y claramente, Eren.-¿Alguna objeción?-pregunto, dirigiéndose a Eren ante su postura, por más que deseáramos interrumpir, no podíamos.

-No, señor.-mire a Eren, quien respondió de manera neutral y respetuosa, estaba con una expresión abrumadora, todos le miraban.

-Me alegra que entiendas directamente, es por eso que iremos al grano.-Zackly demostró su transparencia, para así, cortar más el tiempo. -Era imposible ocultar tu existencia, por lo obstante, cuando hagamos un anunciado oficial acerca de ti, vamos a tener que que dar otra explicación acerca de los titanes. Hoy decidiremos qué élite se encargará de ti, si la policía militar o el cuerpo de exploración.-explicó, y por un momento me sentí grata de mi misma ante haber sabido la situación, sin ser juzgada o determinada antes.-En primer lugar le cedo la palabra a la policía militar.-indicó, a lo que el estrado frente a nosotros creo silencio, para así dar su opinión respecto al tema, y a la postura de Eren ante tener el poder de un titán.

-Yo, comandante de la policía militar, Nile Dawk, tomó la palabra.-mi mirada se dirigió al delgado hombre con cabello negro azabache y algunos vellos faciales que sostenía un papel en sus manos, se veía serio, y de alguna forma intimidaba a Eren.-Es un hecho que el poder de titán que posee Eren, nos salvó de una tragedia esta vez. Sin embargo, su existencia es ahora también una arma política que puede iniciar una guerra civil. Por lo tanto, queremos obtener la mayor información posible al respecto. Y entonces... se le usará como un héroe de la humanidad.-terminó diciendo, de manera precisa, mientras que Eren le miraba.

-¡Eso no es necesario! ¡Es una plaga que invadió los muros sagrados de Dios!-mi expresión estaba seria, y más ante las blasfemias de aquel sacerdote, perteneciente a la iglesia de los muros, quien se dirigía a Eren, este quien yacía aún más abrumado ante vagas acusaciones.

-Ahora le daré la palabra al cuerpo de exploración.-Zackly no pareció darle importancia al sacerdote, quien demostró una expresión de ofensa ante la ausencia de palabras que la gente dio.

-Yo Erwin Smith, comandante del cuerpo de exploración, tomó la palabra.-en mi estrado, aquel algo hombre de rubio cabello se dirigía al juez con respeto, su mirada también era seria, pero se veía bastante neutral, como si nada le estuviese molestando a diferencia del policía militar anterior que se expresó.-Tenemos la intención de recibir a Eren como un miembro oficial de nuestra tropa y utilizar su poder para recuperar el muro María. Eso es todo.-fue lo único que dijo, de manera corta y precisa, creando algo de incomodidad ante su repentino silencio en la sala.

-¿Ya terminó?-le preguntó el juez, quien también quedó algo obsoleto ante la corta opinión de aquel comandante proveniente al cuerpo de exploración, quien simplemente mantenía su postura de manera seria.

-Si señor.-afirmó Erwin Smith, mirando fijamente al estrado en donde estaba sentado aquel superior.-Si usamos su poder para recuperar el muro María, creo que está más que claro que es lo más importante, no hay mucho que detallar acerca de eso.-explicó, creando así una más fija aclaración.

-Comprendo pero... ¿dónde planean llevar a cabo este plan?-el juez le miraba, pero cambió su mirada hacia otro horizonte, el cual no pude alcanzar debido a mi estatura.-Pixis... la puerta de Trost fue cerrada por completo, ¿no?-este ahora se dirigió al comandante de las tropas de guarnición, quien estaba en el mismo estrado que yo, con sus hombres, pero no podía verle del todo bien.

-Si, y nunca se volverá abrir.-afirmó Dot Pixis con su serena y firme voz, esto debido al éxito que fue la restauración de dicho distrito.

-Le pedimos permiso para salir por la puerta este. Estaríamos empezando la ruta a ShingaShina a partir de ahí.-Erwin se dirigió al juez, imponiendo un plan improvisado, y yo tan solo dirigí mi mirada a Eren, y como veía la situación como un simple espectador, mientras que testigos opinaban acerca de las altas bajas que dicha élite, ha tenido.

-Siempre hablan demás.-a mi lado, yacía una mujer rubia, de corto cabello y con espejuelos, estaba seria y miraba al estrado opuesto.

-Usted si que sabe hablar cerdo.-en la sala, de creo un silencio ante la voz proveniente de dicho capitán respetado por los distritos, Levi Ackerman.-¿Tienes la seguridad de que los titanes se quedarán tranquilos mientras reforzamos las puertas?-desde mi ángulo, le podía ver hablar, y como estaba incómodo, incluso molesto ante las opiniones referentes de las personas hacia su élite.-Y de ese "nosotros" del que hablas, son personas que mueren a diario, arriesgando su vida para mantener los muros a salvo.-provocó silencio, y creó una disputa entre los comerciantes, incluso los sacerdotes, nadie pareció cuestionarle; le respetaban, pero yo, simplemente dejé de mirarle sin importancia.

-Silencio. Dejen los insultos personales para otro momento.-el silencio abundó nuevamente ante el juez Zackly imponer el silencio por la disputa entre los comerciantes y sacerdotes.-Jeager, te tengo una pregunta. ¿Como soldado, puedes asegurar que controlarás y usarás tu poder de titán para ayudar a la humanidad?-las miradas se plasmaron en Eren, quien parecía ansioso, y se quedó sin respuestas al momento.

-¡Si señor, si puedo!-contestó con su alta voz, demostrando una firmeza que sin duda, admire.

-Pero en el informe del plan de restauración del muro Trost, está escrito lo siguiente... -me quede observando cómo el juez sacaba unos papeles rasgados, y como parecía leer.-Poco después de convertirte en titán, atacaste a Mikasa Ackerman.-expresó, no recordaba aquel suceso, pues me habían mandado a otra línea, pero observé cómo Mikasa de manera fulminante dirigió la mirada a la rubia aún lado de mi, perteneciente a las tropas de guarnición.

-¿Querías que lo ocultará en el informe? Ocultarlo no traería ningún beneficio.-le mire con una expresión seria a la rubia mujer, quien se detenía en Mikasa.-¿Qué?-se dirigió a mi, mientras que alce una ceja ante su actitud.

-¿Quien es Mikasa Ackerman?-la pregunta del juez se dirigió a la chica a mi lado, lo cual evadí a la incómoda rubia chica que me miraba de manera detenida; adelante, se veía a Eren confuso ante dicha narración.-¿Es cierto que Jeager te ataco en su forma titán?-Eren esperaba una respuesta diferente a lo que le habían preguntado a Mikasa, pero aquella chica cabizbaja y tensa, sabía que debía decir la verdad.

-Si, es cierto.-respondió ella, levantando su vista y dirigiéndose al juez, quien asintió.-Pero antes de eso, fui salvada en dos ocasiones por Eren transformado en titán. La primera vez, estaba apunto de caer en manos de un titán, pero se enfrentó a él para salvarme. La segunda vez, protegió a Armin Arlert y a Amaya Pieck del ataque de los cañones de las tropas de guarnición.-narró aquellos sucesos, los cuales recordé.-Me gustaría dejar esos hechos como evidencia.-indicó ella, defendiendo la postura de Eren, quien de seguro tampoco debía recordar esos sucesos.

-¡Objeción!-el grito del comandante de la policía militar, nos alertó, y rápidamente miró a nuestro estrado.-Creo que esas declaraciones fueron muy personales, ya que Mikasa Ackerman perdió a sus padres cuando era una niña, y fue adoptada por el Dr. Jeager.-en sus manos él sostenía unos papeles, dejando una información personal a la luz de todos, creando incomodidad en Mikasa, quien sólo deseaba defender la postura de Eren.-Además, descubrimos que en esa época cuando Eren y Mikasa tenían nueve años de edad, mataron a tres hombres adultos, acusados de ser ladrones y secuestradores. Incluso si fue en defensa propia, levanta dudas sobre su comportamiento personal.-mi ceño se frunció, y mi mirada yací en molestia ante esas narraciones tan intimas, las cuales crearon murmullos entre las personas que juzgarían las situaciones.-Debemos confiar nuestros destinos, recursos y fondos en alguien así?-pregunto, mientras que bufe y chasquee la lengua con incomodidad.

-¡Quizás ella también es un monstruo!-la gente se dirigía a Mikasa, creando una presión para Eren, quien la defendía a toda costa, elevando su voz, pero nadie parecía hacerle caso, y Mikasa tan solo demostraba lo avergonzada que estaba.

-El ganado siempre habla demás.-opine, justo en el momento en que se creó un silencio en la sala, donde la gente captó mi atención.-Me parece una falta de respeto que se hable de íntimas situaciones para atacar la postura de una persona, y más en dicha corte, haciéndole perder la ventaja, solo por no tener conocimiento de los sucesos que albergan en su poder.-me dirigía al comandante de la policía militar, pero todos me miraban, no solo él.-En su forma de titán, tuvo la conciencia de no atacarme, y más cuando tuvo oportunidad. Su objetivo siempre fueron los titanes, ¿como podrías culparlo? No tenía exactitud de lo que llevaba en su ser, no hay razón para que vagamente personas como usted, que se encargaban de lamberle las botas al rey, critique la postura de un soldado que arriesgó su vida para salvar un distrito.-dije, con una expresión seria, y Eren me miraba de una manera grata.-Amaya Pieck, cadete del escuadrón ciento cuatro.-me presenté de manera respetuosa.

-¿Insinúas que somos unos cobardes?-pregunto aquel comandante Niles, me miraba incómodo, y sin duda se sintió ofendido.

-¿No lo especifique bien?-le pregunté, y sus ojos se abrieron grandemente ante mi falta de respeto, pero nadie parecía juzgar mi postura.-Dije que son unos lambe botas del rey, por ende, no son quienes se arriesgan en el exterior para cazar a quienes los mantienen aquí encerrados. Eren, y muchos cadetes tuvieron la valentía de hacerlo, conjunto a eso, descubriendo su forma de titán, nos dio la ayuda que necesitábamos, porque si no, hubiésemos muerto junto a otros de nuestros compañeros.-le contaba, mirándole detenidamente.-Te preguntó. ¿Donde estaba la policía militar cuando eso sucedió?-sus ojos sobresalieron más, y una fina línea se creó en sus labios ante mi ofensiva pregunta.

-¡Todos son unos monstruos, ella también lo es, todos sus allegados lo son!-el silencio se opaco ante los vagos gritos de las personas en el estrado anterior, quienes se dirigían a todos nosotros, de seguro a mi, a Mikasa y Armin.

-¡No se atrevan a insinuar eso de ellos! ¡Déjenlos en paz! ¡Solo especulan!-la voz de Eren fue capaz de sobresalir entre los demás gritos, llenos de odio hacia él.-Especulan, viendo lo que es bueno para ustedes. En primer lugar, ustedes nunca han visto un titán, así que... ¿de que están asustados?-les preguntaba a las personas que lo juzgaba, y yo miraba su rostro, él deseaba salir de esta, y sabía que así seria.-¿Por qué las personas con poder no pelean? ¡Si tienen miedo de luchar por sus vidas, entonces préstenos sus fuerzas!-gritaba, él estaba furioso y había explotado su enojo ante el vago ataque de personas que no tenían conocimiento sobre lo que albergaba en los exteriores.-¡Ustedes cobardes! Si así lo desean, estense quietos... ¡y apuéstenlo todo por mi!-grito fuertemente, abrumando la situación, y dejando desconcertado a los de la policía militar, quienes se sintieron más ofendidos.

Eren lucia molesto, pero sus palabras demostraban sin dudas las ganas de aún vivir. Observé cómo aquel comandante miró a Eren de manera ofensiva, su semblante no cambiaba. Dirigió su dedo índice hacia él chico de verdosos azulados ojos, quien lo miró asustado en cuanto sintió su vida amenazada, pues el comandante de la policía militar había dado la orden de apuntarle, amenizándolo. La tensión creció, y por un momento si deseaba ser impulsiva, y brincar el estrado para defender la postura de Eren, pero alguien se había adelantado. Levi, uno de los capitanes del cuerpo de exploración, brincó el estrado con facilidad y todos dirigieron su mirada a él, pero quede aturdida en cuanto vi cómo su pierna se elevó, golpeando el rostro de Eren bruscamente. Mis ojos se abrieron como platos, y no pude negar que la sangre hirvió en mi en cuanto vi el rostro de Eren ensangrentado, pues aquel hombre de baja estatura empezó a golpearle fuertemente sin razón alguna. Un diente voló de su boca, un jodido diente. Así de intensa había sido esa patada. Mi sangre ni fue la única que hervía, Mikasa a mi lado se sintió abrumada ante no poder defenderle, y deseo también brincar el estrado, pero yo junto a Armin, le aguantamos, pues de seguro debía ser una brusca estrategia, la cual de seguro llevaría a salvarle la vida al joven frente a nosotras. Cerré los ojos, y esperé a dejar de escuchar los gemidos de Eren ante aquellos fuertes golpes, para así, abrirlos nuevamente y verle su rostro ensangrentado.

-Es una opinión personal, pero para mi, la mejor disciplina es el dolor.-Levi se dirigió a los estrados, su voz era gruesa, pero su mirada seria me irritaba, y más por lo que le había hecho a Eren.-Lo que más necesitas en estos momentos no son palabras de "aprendizaje". Se trata de una "lección", y la situación actual, la pone fácil.-deseaba detener su acción, pues nuevamente golpeaba a Eren, y yo tan solo observaba.

-Espera, Levi.-Levi soltó a Eren con brusquedad, pues anteriormente jalaba su cabello como si no valiera nada, no sabía con que rostro mirarle, pues desde aquí le estaba maldiciendo.-Es peligroso, ¿y si se convierte en titán?-se preguntaba el comandante de la policía militar, mostrando un semblante atemorizante, luego de haber intentado de intimidar a Eren.

-¿De qué estás hablando? ¿No querían disecarlo?-pregunto de manera sarcástica, creando incomodidad en la policía militar.-Al parecer cuando se convirtió en titán, mato a otros veinte titanes hasta que se quedó sin fuerza. Y ya que tiene lógica, puede ser peligroso como enemigo. Sin embargo, eso no coincide para mi.-comentó, aún lado de Eren, quien yacía cabizbajo, todo golpeado.

-Zackly tengo una sugerencia.-fue ahí que lo mire, pude ver a Erwin Smith alzar su mano, con la insistencia de hablar, y acatar su pensamiento.-El poder del titán de Eren sigue siendo un profundo misterio, todo aquel que siempre esté a su lado, estará en peligro. Así que, queremos otorgarle al capitán Levi la custodia, y responsabilidad, así podríamos llevarlo a la próxima misión de exploración.-explicaba detalladamente.-Si Eren puede dominar el poder de su titán, creemos que será una fuerza importante para la humanidad. Vamos a decidir esto con la próxima misión de exploración, y así, juzgarlo.-todos le miraban, incluso yo, su plan sonó algo arriesgado, pero era perfecto; aunque para mi, sería complicado, pues debía estar más al pendiente de Eren que cualquier otra persona.

-¿Puedes hacer esto capitán Levi?-Zacklys se dirigió hacia el capitán Levi, quien estaba frente a Eren, este estaba cruzado de brazos y asintió.

-Si está hablando de matar, no hay problema. Más bien, el problema es que si él no hace nada, es lo que se llevará a cabo.-respondió cortamente, con su mirada colocada en el juez.

-He llegado a una conclusión... -la tensión creció en el ambiente ante las palabras del juez, quien yacía recogiendo sus papeles.-El cuerpo de exploración quedará a cargo de la custodia de Eren, acatando todo responsabilidad sobre su poder. De no ser controlada, o manejada, llevando a varias bajas, o incluso a la falla de nuestra conclusión; su vida se llevará a la muerte.-indicó, mientras que Eren era levantado por varios policías militares.-Tienen hasta las próximas misiones para informar su progreso. El caso, ha sido concluido. Pueden retirarse.-expresó, para así, dar por finalizada la situación.

Algo en mi se sintió bien, deseaba poder expresar la calma que recorrió cada una de mis venas ante esta situación. Sabía que Eren debía sentirse bien, verlo como una oportunidad, y justamente era eso, pero él no sabía lo que todo esto significaba, y eso me abrumaba. Salí de aquel estrado, al igual que todos los presentes allí, y me objetivo, fue llegar hasta a él. Sabía que no debía, y que solo los altos mandos podrían, pero pase por un lado de Armin y Mikasa con prisa, notando como captó sus atenciones, aún así, seguí. Pase por el lado de policías militares, aquellos que aún lo estaban custodiando, y antes de que pudieran alejarlo, jale su camisa cuando mi mano la atrapó. Los policías me miraron, de una manera fría y incómoda por mi acción, pero la mirada de Eren cuando se giró, me calmo la tensión que creé con esos hombres. Él, pese a estar todo golpeado y ensangrentado, mostró una grata sonrisa ante mi presencia. Lo abracé fuertemente, y sonreí aliviada, sabiendo que aún era capaz de respirar, gracias a la decisión que se había tomado. Me distanciaron de él, pero le dejé ir calmada, sabiendo que todo estaría bien. Di pasos atrás, y como él antes de salir de la corte, me miró, para luego desaparecer en la salida. Mientras que yo, camine abrazada con Armin y Mikasa, sonriendo, después de todo.

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Próximo capítulo: Escuadrón cientocuatro.
Amaya se integra al cuerpo de exploración, con la única razón de permanecer aún lado de Eren, mientras que no sabe como manejar la mentira en la que vive, y entender su enamoramiento hacia Eren, sin que eso le afecte sus próximas decisiones.

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