Narra Alice:

- Disculpe Profesora, pero mi tardanza tiene su justificación -La miré.- Si me lo permite, se lo explicaré

- No es necesario, como Prefecta y Delegada debes dar el ejemplo Señorita Lougthy -Su tono de voz era molesto.

- Y lo estoy dando, si tan solo dejara que le explique -Me detuvo.

- Es suficiente, debes saber cuando guardar silencio ante tus mayores -Mi paciencia me estaba apunto de abandonar.

- Si, Profesora -Respondí a regañadientes.

- Puedes tomar asiento -De mala gana, me senté con Fred.- Bien, luego de la interrupción por culpa de su compañera, retomemos la clase

- Profesora mal p... -Fred me interrumpió.

- Cariño, tranquila... -Tomó mi mano, por debajo de la mesa.- No vale la pena enfurecerse por alguien así -Acaricio mi cabello.

- Señorita Lougthy y joven Weasley - Habló nuevamente, la Señora.- ¿Es tan importante su charla? Como para no prestar atención a clases -Se cruzó de brazos, mientras nos veía. A causa de ello, todos dirigieron su atención a nosotros.

- La verdad que si, Profesora -Respondió sonriendo, no pude evitar reír leve. Ello, provocó que la anciana se enfureciera más.

- Realmente es intolerable su comportamiento, sobre todo de usted Señorita Lougthy -Comenzó a sulfurarse.- Es una gran falta de respeto, para sus compañeros, para mí y para el Ministerio, que jóvenes como ustedes no sepan comportarse de manera acorde -No pude evitar poner los ojos en blanco, al escuchar su regañó. Acción que hizo empeorar más la situación.- ¡Es suficiente! Señorita Lougthy, salga del salón de clases, al finalizar la clase hablaré con usted -Suspire pesadamente.

Tomé los libros para guardarlos rápidamente en mi bolso, el cual Fred había sido encargado de traer. Una vez que tomé todas mis pertenencias, salí de aquel maldito lugar; tuve que abstenerme de azotar la puerta al salir, puesto que; me hundiría más en esto.

Como debía esperar a que la clase finalizará, tuve que estar en aquel pasillo. Luego de unas horas, finalmente el salón comenzó a ser desalojado, por lo que era momento de ingresar.

- Trata de mantener la cordura -Beth me tomó del brazo.

- Tranquila, no pienso atacar a un Profesor -Suspiré.

Al entrar al salón, vi a la Profesora frente al escritorio.

- Profesora, estoy aquí

- Bien Señorita Lougthy -Hizo que las puertas se cerrarán, lo cual me confundió.- Para más privacidad -Sonrió de una manera poco confiable.- Sígueme

Se encaminó al despacho, por lo que, caminé por detrás. Al poner un pie en dicho cuarto, quedé anonadada por tanto color rosa; toda la habitación era de dicho color.
Adornado con miles de fotografías de gatos, de todas las razas y colores.

《Esta Señora no esta en sus cabales...》

- Toma asiento -Me indicó el pequeño pupitre, a un lado de su escritorio.- La verdad me sorprendió mucho su actitud -Me limité a observarla, una vez que tomé asiento.- Había escuchado que el Señor Lougthy tenía una hija tan ejemplar y maravillosa en Hogwarts, tenía tantas expectativas por usted

《Respira hondo Alice, respira hondo...》

- Pero pensar que tendria esa actitud, sobretodo frente a los adultos -Se sirvió un taza de té.- Esa no es manera de actuar, Señorita Lougthy -Tomó un sorbo y me miró.- No debe defraudar la confianza de sus Profesores y Director por haberle otorgado dichas distinciones... sobre todo a su familia -Sonrió.- ¿No lo cree así? Señorita

En todo su descarado e insultante discurso, estuvo mordiendo mi lengua para evitar responder.

- Tiene razón Profesora, disculpe mi comportamiento -Puse la mejor de mis sonrisas... forzadas- Aprecio sus palabras

- Me alegra escuchar eso, me siento aliviada de que fuera sensata y sepa admitir su error -Sonrió y dio otro sorbo.- Pero déjeme advertirle que si su actitud vuelve a repetirse, deberé castigarla y eso puede afectarle su historial académico

- Entiendo, Profesora

- De acuerdo, puedes retirarte -Sin chistar me puse de pie, al querer tomar el pomo de la puerta, habló por última vez.

- Recuerde Señorita cuales son sus raíces, la importancia y peso de su apellido, no quiera avergonzar a su familia -La miré por el rabillo del ojo.- Piense bien en sus relaciones y reconsidere quienes le conviene tener cerca -Dio una pequeña risilla, irritable.

Me limite a no responder y salí de aquel infernal espacio, no suelo ser irrespetuosa con los adultos. Pero, esta Señora provoca que lo sea, por su actitud.

Al regresar al pasillo, vi a mis amigos, quienes me habían esperado todo este tiempo.

- ¿Cómo te fue? -Dijo curiosa Beth.

- Al parecer padeciste, por tu expresión -Comentó George, tenía razón puesto que mi ceño estaba fruncido y no me había percatado.

- Me dio una charla para "Reflexionar" -Hice comillas.- Se atrevió a hablar sobre mí familia y sobre como debo mantener su reputación -Bufe molesta.

-¡Que vieja bruja! -Expecto molesta Beth, a lo que reí.

- Beth, es una bruja pero también vieja, por lo que no sería un insulto, sino una realidad -Reímos, hasta que escuchamos una voz a mis espaldas.

- ¿Cómo dice? Señorita Lougthy -Asustada, me di la vuelta, encontrándome a un Mervyn sonriente.

- ¡Ay! Me haz asustado -Expecte algo molesta.- ¿Qué haces por aquí?

- Vine a buscarte, ya que, no te vi fuera de Transformaciones en espera de los más pequeños

En ese momento recordé mis responsabilidades, todo por culpa de Umbridge.

- Disculpa, lo he olvidado -Suspire.- Se dio una situación

- Comprendo -Asintió.

Nos quedamos viendo unos segundos, cuando Beth intervino.

- Alice... nos presentas -Sonrío un poco incómoda.

- Ah que distraída, Mervyn te presento a Beth, George y Fred -Apunté a los nombrados.- Chicos, les presento a Mervyn, Delegado y Prefecto de Slytherin

- Un gusto chicos, aunque ya los conocía -Sonrío leve y estos asintieron.

- Lo suponía, son bastantes conocidos en todo el castillo -Reí leve.

- Alice ¿Seguimos con el recorrido? ¿O estas ocupada?

- Para nada, debo cumplir con mis responsabilidades -Tomé mi bolso.- Nos vemos en Runas, Beth

- De acuerdo, ve tranquila

- Adiós, chicos -Me despedí de los gemelos.

Mervyn también se despidió de ellos, y nos encaminos en busca de los de Primer Año.

- ¿Sucedió algo malo? -Habló de repente.- Lo digo por tu expresión, se nota que algo te molesta

《Debo trabajar en mis expresiones...》

- Solo tuve un pequeño inconveniente con la Profesora.

- ¿La Señora de Rosa? -Asentí.- Me dio la impresión de que es un poco estricta y quejumbrosa

- ¿Un poco? -Suspire.- Me sacó de clase por haber llegado unos minutos tarde y querer explicar el motivo -Dirigió su mirada hacia mí.

- ¿En serio? -Asentí.- No lo puedo creer, tendré que tener cuidado

Llegamos finalmente al salón de Transformaciones, los niños estaban esperando en el pasillo.

- Disculpen chicos, por la demora -Habló Mervyn.

- Fue mi culpa, disculpen -Sonreí leve.- Bien, ahora tienen clase de Encantamientos, con el Profesor Flitwick -Los miré.- Acompañenme

Comenzamos a caminar en dirección al segundo piso, por suerte, dicho salón no estaba tan lejos a comparación de Runas Antiguas.

- Alice, discúlpame pero debo ir a un lugar -Miré a Mervyn.

- Claro, no hay problema -Sonreí.- Ve tranquilo

- Nos vemos luego -A todas prisas, se perdió por el pasillo.

- Muy bien, sigamos

Subimos las escaleras, y nos dirigimos al ala este. Aún estábamos a tiempo, por lo que podia llegar a mi clase a horario.

- Este es el salón de Encantamientos, dicha clase es dirigida por el Profesor Flitwick, quien también es el Jefe de Casa, de Ravenclaw -Me quedé un poco enternecida, por la atención entusiasta de los menores.

- Ese soy yo -El Profesor estaba llegando al salón.- Me alegra verte tan compenetrada y dispuesta con tus responsabilidades Lougthy, sobre todo ayudando a los ingresantes.... 20 Puntos para Ravenclaw

- Muchas gracias Profesor Flitwick -Sonreí.- Pero, no estoy haciendo este trabajo yo sola, el Delegado Mervyn también está ayudando, solo que tuvo que retirarse

- Comprendo, entonces 20 Puntos para Slytherin  y 5 más para Ravenclaw -Me sorprendieron los puntos extras para mi respectiva casa.- Por haber reconocido el trabajo de tu compañero, a pesar de no estar presente

- Gracias Profesor

- Muy bien Lougthy, yo me haré cargo -Sonrió.

- Esta bien, chicos los veré luego de clases -Estos asintieron.- Hasta luego Profesor

Comencé a caminar a un ritmo apresurado, puesto que debía llegar al salón de Runas Antiguas. Aún estaba a tiempo de llegar, pero había un pequeño inconveniente... dicho salón de clases se encontraba en el sexto piso, y yo apenas me encontraba en el segundo.

Al ver que los pasillos estaban prácticamente vacíos, comencé a correr. Sería un gran problema si alguien me viera, puesto que los profesores no lo permiten para evitar accidentes. Aunque, no tiene mucho sentido, puesto que hay actividades más peligrosas en Hogwarts, que un simple choque.

- ¿Con qué necesidad debía tener seis pisos el castillo? -Estaba agotada de subir corriendo las escaleras.- Carajo.... aún faltan dos más -A regañadientes seguí subiendo escalones.

Todo sería más sencillo, si dejasen utilizar la "Aparición" pero en el castillo está prohibido. Luego de unos varios escalones más, llegué al bendito último piso.

Estaba toda desarreglada por haber corrido, no iba a ingresar de tal manera a clases. Con un poco de magia, arregle mi vestimenta y finalmente me adentré al salón.

- Disculpe la tardanza Profesora Babbling

Claramente no era el mejor comienzo de clases, de todos estos años. Primera vez que llegaba tarde a dos clases seguidas y encima había sido regañada y humillada frente al alumnado.

- Adelante Lougthy, está justificada tu tardanza... toma asiento

Me senté junto a Beth, quien había apartado nuestros lugares al frente de la clase.

- Comenzaremos traduciendo el siguiente pentagrama...

La clase transcurrió con perfecta normalidad, eso implicada escuchar los quejidos de Beth, por no comprender algunos símbolos ni sus significados en nuestro idioma. A pesar de que me ofrecí a ayudarle, se negó, suele ser bastante orgullosa y terca; pero eso ya es otro tema.

- Eso es todo por el día de hoy, nos vemos en la siguiente clase

Los demás poco a poco desalojaron el lugar, por mi parte aproveché para hablar con la Profesora.

- Profesora, disculpe, quería notificar el motivo de la tardanza -Dije al estar frente a su escritorio.

- No es necesario Señorita Lougthy, ya me explicó la situación su compañero 

- ¿Compañero? -Estaba confundida.

- Si, el Delegado Wynch -Quedé atónita.-  Vino a notificar que estaban desempeñando sus roles como Delegados y que solo seria por dos semanas, así que no te preocupes por ello

- Comprendo Profesora, gracias

En silencio salí de aquel salón, Beth se encontraba esperándome en el pasillo.

- ¿Qué te dijo Babbling? -Se acercó con bastante curiosidad.

- Dijo que no me preocupara por mis tardanzas, puesto que están justificadas

- Genial, por suerte no te regañó como la otra bruja -Bufo molesta.-

- Si, aunque me sorprendió saber quien le notificó

- ¿McGonagall?.... ¡No! Snape

- No fue ningún Profesor, sino que Mervyn

- ¿Quién?

- El Delegado guapo -Finalmente ubicó de quien se trataba.

Beth no suele recordar los nombres de los demás, menos si no le interesan.

- Ah... es sospechoso

- ¿Sospechoso? ¿Por qué?

- Porque a penas te conoció en el despacho de Dumbledore, y ya te hace esos favores, lo notó extraño

- Admito que también me sorprendió, pero capaz solo quiso ayudar, parece ser bastante amable -Me encogí de hombros.- Eso no significa que confíe en él, puesto que, como dices apenas lo conocí el día de ayer, pero, tampoco quiero ser malagradecida por su ayuda

- De acuerdo, solo mantendré lo que dije

Beth me informó, que habían quedado con los gemelos en encontrarnos en el patio junto a la fuente. Por lo que, al llegar notamos un alboroto en el lugar, bastantes alumnos rodeaban a los gemelos. ¿Cómo lo sabía? Es imposible no notarlos, al ser estos bastante altos.

- Ya comenzaron, con su espectáculo -Dijo burlesca.

- No perdieron el tiempo -Sonreí, mientras me cruzaba de brazos.

- ¡Bienvenidas y bienvenidos! -Comenzó hablando Fred.

- El día de hoy verán y conocerán productos que los ayudarán en todo este año -Continuó George.

- Exacto George, productos que los salvarán de clases aburridas y exámenes tediosos

- Como las Pastillas Vomitivas

- Bombones desmayo

- Caramelos de la Fiebre

- Y muchos más, a tan solo un galeón por producto

De esa manera terminaron su pequeña presentación, provocando que el gran número de espectadores que los rodeaban se abalanzaran en querer comprar su mercancía.

- Es bastante irónico -Comentó riéndose Beth.

- ¿Qué cosa?

- Que siendo tan estricta y amante de las reglas, seas novia de alguien como Fred -Me miró.

- Y tú estas con George ¿Qué diferencia habría?

- Aún no estoy saliendo con George... aún -Dijo avergonzada, puesto que bajo el tono de voz al final de la oración.

- Aún, tu misma lo haz dicho

- Al punto al que iba, es que son polos opuestos... como el día y la noche en muchos aspectos

- Lo sé, pero eso lo hace más interesante ¿No lo crees? -La miré.- ¿Por qué querría alguien igual que yo? Si en ocasiones no me tolero -Reí.

- Soy testigo de ello -Hice una mueca por lo dicho.

-Con ello quiero decir, que no importa las diferencias que tengas con la otra persona, mientras ambos sientan lo mismo y se respeten, es más que suficiente -Me encogí de hombros.- Lo demás son accesorios 

- Muy sabio de tu parte, Delegada

- Gracias, gracias -Nos miramos, y no pudimos evitar reír.

- ¿Por qué tanta diversión sin nosotros?

Los gemelos habían regresado, luego de haber hechos sus ventas.

- ¿Qué tal las ventas? -Ignoró la pregunta Beth.

- De maravilla, vendimos prácticamente todo, aunque aún quedan un par de Pastillas Vomitivas, si les interesa bellas damas -Dijo George, entrando nuevamente a su rol de comerciante.

- Paso, estoy bien con ir a clases

- ¡Buuu! -Dijeron al unísono, por lo que reí.

- Quiero esas píldoras -Beth saco su dinero.- ¿Cuánto sería?

- Tres Galeones -Respondió Fred.

- ¡¿Tres?! Si hace un momento anunciaron que costaban un galeón

- ¿Para qué preguntas? Entonces -Dijo burlándose George

- Por las dudas tenga un descuento por ser su amiga, obviamente

- Tienes razón, eres nuestra amiga -Habló Fred.

- Muy especial -Continuó George, luego procedieron a mirarse.

- Por ello... ¿Son?

- Cinco galeones -Dijeron al unísono, y no pude evitar reír.

- Váyanse al diablo -Declaró molesta para luego marcharse, dejándonos a los tres.

- Iré por ella -George le entrego el maletín a Fred, salio corriendo tras Beth.

- ¿Cuándo saldrán oficialmente? -Cuestionó Fred.

- No lo sé, espero que pronto -Sonreí.- Por cierto, he escuchado mal o ¿En serio venden Amortentia? -Dije curiosa.

- Escuchaste bien, Cariño -Colocó el maletín en uno de sus brazos y precedió a abrirlo.- Un pequeña dosis de Amortentia -Me extendió una pequeña botella con un contenido color rosa.

- ¿Realmente funciona? -Lo indague.

Sabía perfectamente que los gemelos eran muy buenos estudiantes y magos, por lo que dicha poción podría ser muy peligrosa, por el terrible efecto que tiene en las personas.

- ¿Por qué? ¿Te interesa? No hace falta usar Amortentia en mi, causaste sus efectos en mí de manera natural -Sonrio ampliamente.

- No me refería a eso -Reí.- Temo por quienes se vean afectados por ella -Abrí el recipiente, y acerque el contenido a mi nariz.

- ¿A qué huele? -Su ilusión era bastante notable.

- Hmm... huele a pólvora de fuegos artificiales.... calabaza... y a pastillas vomitivas -Sonreí.- Eres tú

- Soy yo -Sonrió bastante complacido.- Mi turno -Le extendí el frasco.- Huele a... páginas de libros... tinta... y aroma a lluvia

- ¿Seré yo? -Fingí duda.

- ¿Quién más sería? La única belleza que conozco que coincide con esos aromas eres tú -Guardó el recipiente en su maletín, y procedió a abrazarme.

Era un lindo momento, por lo que no decidí apartarlo, a pesar de estar en público. Además, era tan cálido y agradable estar bajo sus brazos, no quería apartarme.

- ¿Sabes que podría hacer este momento aún más lindo?

- No ¿Qué sería?

- Un beso 

- ¿Aquí? ¿En público? -Me avergonzaba un poco la idea.

- Por lo menos en la mejilla ¿Si? -Hizo un tierno intento de puchero, por lo que, no pude negarme.

- Esta bien -Sonreí y acerque mi rostro al suyo.

- ¡¿QUÉ CLASE DE CONDUCTA INAPROPIADA ES ESTA?! -Escuchamos a nuestras espaldas.

Continuará...